La carta a los Gálatas fue una epístola circular, puesto que Galacia no era una ciudad sino una región a la que Pablo visitó en 4 oportunidades durante sus viajes misioneros, tal como se relata en el libro de los Hechos. Sus ciudades eran Listra, Derbe e Iconio. Timoteo era natural de la ciudad de Listra. La razón de esta carta era una llamada de atención de parte de Pablo, puesto que los judaizantes (cristianos de trasfondo judío que enseñaban a los gentiles que era importante circuncidarse y hacerse judíos para que su cristianismo sea valedero) intentaban confundir a los hermanos. Pablo explicó que cualquiera que predique un Evangelio diferente al que él les predicó sea maldito. Esta carta ha sido llamada “Mini-Romanos” pues enseña de manera concisa la “doctrina de la justificación por la fe”. El mensaje está vigente hoy debido a la cantidad de enseñanzas que dicen que hay que añadirle algo más a la salvación lograda por Jesucristo. En Jesús estamos completos y ya no hay nada mas que podamos hacer para lograr la salvación.
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Estudio Panorámico de la Biblia: Gálatas
1. ESTUDIO PANORÁMICO DE LA BIBLIA
Un estudio de los 39 libros del
Antiguo Testamento y 27 libros del
Nuevo Testamento en 66 semanas
2. LOS LIBROS DE LA BIBLIA: AT
GÉNESIS
ÉXODO
LEVÍTICO
NÚMEROS
DEUTERONOMIO
NEHEMÍAS
ESTER
JOB
SALMOS
PROVERBIOS
ECLESIASTÉS
CANTARES
ISAÍAS
JEREMÍAS
LAMENTACIONES
EZEQUIEL
DANIEL
OSEAS
JOEL
AMÓS
ABDIAS
JONÁS
MIQUEAS
NAHUM
HABACUC
SOFONÍAS
HAGEO
ZACARÍAS
MALAQUÍAS
JOSUÉ
JUECES
RUT
1 Y 2 SAMUEL
1 Y 2 REYES
1 CRÓNICAS
2 CRÓNICAS
ESDRAS
3. LOS LIBROS DE LA BIBLIA: NT
MATEO
MARCOS
LUCAS
JUAN
HECHOS
ROMANOS
1
CORINTIOS
2
CORINTIOSGÁLATAS
4. NOMBRE DEL LIBRO
En hebreo es: “Carta de Pablo a los
Gálatas” – מהגלטיים אל פאולוס של כתב
En griego: Segunda Carta de Pablo
a los Gálatas – Επιστολή του
Αποστόλου Παύλου προς τους
Γαλάτας.
En castellano: ‘La Epístola del
Apóstol Pablo a los Gálatas’.
5. LA EPÍSTOLA A LOS GÁLATAS
Si ves a alguien en peligro y sabes que
no lo ha notado ¿qué haces?
Haces lo que sea necesario para conse-
guir su atención, haces sonar la alarma,
levantas la voz, incluso lo empujas a un
lado para hacerle saber del peligro que
se le viene.
Si alguien está por tomar una decisión
que traerá caos a su vida, sabemos que
tenemos que hacer algo al respecto.
¡Callar no es una opción!
6. LA EPÍSTOLA A LOS GÁLATAS
Este fue el caso de Pablo con las igle-
sias de Galacia. Se dirigían al precipicio
teológico y Pablo tuvo que hacer sonar
la alarma.
El tema era muy importante: literalmente
era diferenciar entre el evangelio que
trae vida eterna, y un falso evangelio
que esclaviza y trae muerte. Era cam-
biar la verdad del evangelio por una imi-
tación barata y mentirosa originada en el
mismísimo infierno.
7. LA EPÍSTOLA A LOS GÁLATAS
Por esto escribió Pablo Gálatas. La han
llamado 'mini-romanos', y en cierto mo-
do lo es. La carta a los Gálatas contiene
el mensaje completo de Pablo sobre la
doctrina de la justificación por la fe. Los
Gálatas estaban a punto de abandonar
el Evangelio, y Pablo hizo lo que pudo
para hacer sonar la alarma.
No dejes el evangelio de la gracia por
una religión basada en obras o rituales.
8. LA EPÍSTOLA A LOS GÁLATAS
El autor indiscutiblemente fue Pablo. Ga-
lacia no era una ciudad sino una región,
ubicada en lo que hoy es Turquía.
Era una carta circular para ser leída en
todas las iglesias de la región: Derbe, Lis-
tra, Iconio. Escrita alrededor del 53 d.C.
Los judaizantes se habían introducido a
las iglesias gentiles de Galacia y les ha-
bían dicho que para ser verdaderos cris-
tianos, primero debían hacerse judíos.
9. LA EPÍSTOLA A LOS GÁLATAS
Los gálatas estaban siendo arrastrados a
la circuncisión y al legalismo y Pablo los
refutó al decir que sólo somos justificados
por la fe en Jesucristo y punto.
El legalismo existe en la iglesia hoy, se
nos dice que no podemos ser cristianos si
es que no hacemos esto o aquello…
Gálatas nos recalca la verdad esencial
del NT: el hombre sólo es justificado por
la fe en Jesucristo y nada mas.
12. (1:1-5) Pablo se dirige a los Gálatas con
autoridad, y afirma tener el derecho de
hacerlo. Su apostolado es único, pues
fue llamado personalmente por el Señor
Jesús. La autoridad de Pablo no venía de
hombre alguno; sino que provenía de
Jesucristo resucitado.
Los judaizantes tuvieron que desacreditar
a Pablo para enseñar su doctrina. Decían
que no había sido discípulo de Jesús ni
había sido enseñado por los apóstoles.
(1-2) AUTORIDAD DE PABLO
13. “Me asombra que tan pronto se hayan
alejado ustedes del que los llamó por la
gracia de Cristo, para seguir un evangelio
diferente. No que haya otro evangelio,
sino que hay algunos que los perturban y
quieren pervertir el evangelio de Cristo…”
(1:6-10) Pablo les había proclamado cla-
ramente el evangelio, y los Gálatas pare-
cían haber dado oído a otros maestros.
No eran conscientes del valor de lo que
Pablo les había dado.
(1-2) AUTORIDAD DE PABLO
14. (1:11-24) Pablo recibió su instrucción por
revelación de Jesucristo. Pasó 3 años en
el desierto de Arabia aprendiendo de Je-
sús. Antes fue perseguidor de la iglesia.
“Pero si aun nosotros, o un ángel del cie-
lo, les anuncia otro evangelio diferente
del que les hemos anunciado, quede bajo
maldición. Como antes lo hemos dicho,
también ahora lo repito: Si alguno les pre-
dica un evangelio diferente del que han
recibido, quede bajo maldición” (1:6-9).
(1-2) AUTORIDAD DE PABLO
15. Pablo defendió el derecho de Tito como
gentil a no circuncidarse, no debía de ser
un judío en la carne para ser cristiano.
(2:1-10) Pablo había tenido varios encon-
trones con los judaizantes y pasados 14
años de su conversión volvió a Jerusalén
con Tito y Bernabé.
(1-2) AUTORIDAD DE PABLO
Pablo luchó por la libertad de Tito de per-
manecer como estaba; algo que fue con-
firmado por Santiago, Pedro y Juan (2:9).
16. “Sabemos que el hombre no
es justificado por las obras de la ley sino
por la fe de Jesucristo… ya que por las o-
bras de la ley nadie será justificado” (2:16)
(2:11-21) Pablo enfrentó a Pedro, cuando
mostró un comportamiento distinto al es-
tar con los gentiles a solas y otra actitud
al estar acompañado de otros judíos. Pa-
blo condenó su actitud.
(1-2) AUTORIDAD DE PABLO
El argumento de Pablo contra Pedro es el
mismo que estaba tratando de enseñar a
los Gálatas:
17. “Con Cristo estoy juntamente crucificado,
y ya no vivo yo, sino que Cristo vive en
mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo
en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y
se entregó a sí mismo por mí” (2:20; RVC).
Nadie se justifica por la ley; pues la ley
identifica nuestro pecado y nos condena.
La única manera de salvarnos es por la fe
en Jesucristo. Es su obra la que nos salva
es en Él en quien debemos creer.
(1-2) AUTORIDAD DE PABLO
18.
19. “¡Oh, gálatas insensatos! ¿Quién los
fascinó para no obedecer a la verdad, si
ante sus ojos Jesucristo ya fue presenta-
do claramente como crucificado?” (3:1).
(3:1-5) Pablo les había dado el evangelio
y ellos se apartaron de él. Para Pablo,
era como si estuvieran hipnotizados o
hechizados, eran otras personas.
(3-4) SOLA FE
Recibieron el ES por gracia y no por obras y
ahora intentaban perfeccionarse con obras.
¿Lo que Pablo les enseñó fue en vano?
20. (3:10-14) Pablo aclara que la ley no justi-
fica a nadie, solo condena, nos muestra
la realidad de nuestro pecado y merece-
mos la justa ira de Dios.
(3-4) SOLA FE
“De modo que los de la fe son bendeci-
dos con el creyente Abraham” (3:9, RVC).
(3:6-9) Los judaizantes citaban a Moisés,
y Pablo va más atrás y usa a Abraham
como ejemplo, pues mucho antes que
Moisés, fue salvado por fe y no por guar-
dar una ley que aun no existía.
21. (3:15-18) El pacto de Abraham sigue
vigente, y señaló a Jesucristo como la
‘simiente’ prometida de Abraham.
Fue en la cruz que Jesús se convirtió en
maldición de la ley, recibiendo el castigo
que merecíamos, para que así nosotros
podamos ser salvos.
(3-4) SOLA FE
La ley no reemplaza a la promesa que
Dios le hizo a Abraham y esta sigue
valedera: es la justificación por la fe en
Cristo.
22. “De manera que la ley ha sido nuestro
tutor, para llevarnos a Cristo, a fin de que
fuéramos justificados por la fe. Pero al
venir la fe, no estamos ya al cuidado de
un tutor, pues todos somos hijos de Dios
por la fe en Cristo Jesús” (3:24-26; RVC).
(3:19-26) ¿Por qué entonces Moisés dio la
ley? ¿Era contraria a la promesa de Dios?
No, la ley es buena y santa, no se dio para
salvar, sino para mostrarnos la necesidad
de la salvación.
(3-4) SOLA FE
23. (3:27-4:7) ¿Cuál es el resultado de ser
justificados por la fe? Convertirnos en
hijos de Dios, y herederos de Abraham
según la promesa.
(3-4) SOLA FE
Antes de la fe en Jesús, estábamos es-
clavizados al mundo, pero Dios intervino,
envió a Jesús: quien era la persona
correcta, vino de la manera correcta, en
el momento correcto, y por las razones
correctas.
24. “Pero cuando se cumplió el tiempo seña-
lado, Dios envió a su Hijo, que nació de
una mujer y sujeto a la ley, para que redi-
miera a los que estaban sujetos a la ley, a
fin de que recibiéramos la adopción de
hijos” (4:4-5; RVC).
(4:8-20) Pablo tenía muchas dudas acer-
ca de los cristianos de Galacia. Venían
de rendir culto a dioses y religiones falsas
pero parecían volverse a las cosas falsas
otra vez.
(3-4) SOLA FE
25. Ellos no tenían necesidad de llegar a ser
como judíos. ¿Que les pasó? Habían si-
do engañados, y no sabían lo que esta-
ban haciendo.
Se esclavizaron a las fiestas y tradiciones
judías, y esto era innecesario. Pablo se
hizo gentil para predicar a los gentiles.
(3-4) SOLA FE
(4:21-31) Pablo da una alegoría, Abra-
ham tuvo un hijo en Agar y Sara, sin em-
bargo, sólo uno era el hijo de la promesa.
Agar era la esclava y Sara la libre. .
26. Pablo relaciona a Agar con el monte
Sinaí y la esclavitud de la ley, mientras
que Sara está asociada con el monte
Sion en Jerusalén y la libertad de la
promesa.
(3-4) SOLA FE
¿Qué tenían que hacer los Gálatas? ¡Ser
libres! No hay libertad en la sujeción a la
ley, y a esto no habían sido llamados los
gálatas.
27.
28. “Manténganse, firmes en la libertad con
que Cristo nos hizo libres, y no se
sometan otra vez al yugo de la esclavitud”
(5:1).
(5:1-6) Pablo va al grano: ¿Cómo podían
ellos poner esto en práctica? A través de
la fe en Cristo fueron hechos libres; ahora
tendrían que permanecer libres.
(5-6) FE PRACTICADA
¡Se libre, estate libre y permanece así! Es
tan fácil volverse legalista, ya sea circun-
cisión o cualquier otra cosa. No lo hagas.
Cristo nos hizo libres, ¡mantente libre!
29. ¿Necesito Jesús de nuestra ayuda en la
cruz, o para levantarse de la tumba? Y si
no es así, ¿por qué creemos que de algu-
na manera podemos añadirle a la gracia
que Dios nos ha dado?
(5-6) FE PRACTICADA
Nada nos puede salvar más de lo que ya
ha sido hecho.
Ponernos otra vez debajo del legalismo es
negar la cruz. Pensar que cualquier cosa
te hace "más" salvo es perder el hecho de
que la salvación es solamente por la fe.
30. Un poco de doctrina falsa y acusaciones
contra Pablo hizo a los gálatas tropezar.
(5-6) FE PRACTICADA
(5:7-12) “Ustedes corrían bien; ¿quién les
impidió el no obedecer a la verdad?” (5:7).
Todo lo que tenemos de Dios depende
solo de Jesús. ¡Este es el Evangelio!
(5:13-26) Libertad versus libertinaje. La
objeción contra de la justificación por la fe
es la siguiente: ¿Si mis actos no importan
en la salvación, entonces puedo vivir de
la manera que me de la gana?
31. (5-6) FE PRACTICADA
Al contrario, ni bien se establece que sólo
la fe nos salva, Pablo nos lleva inmedia-
tamente a la aplicación en una vida recta.
Error, la justificación por la fe nunca sirve
como excusa para el pecado, y una
gracia gratuita no es una gracia barata.
Si alguien quiere librarse de la carne, no
es a través de la religión legalista, sino
siendo enraizados en la libertad que te-
nemos en Cristo.
32. (5-6) FE PRACTICADA
Uno se opone al otro, la respuesta al li-
bertinaje no es legalismo; es fe en Cristo.
“Digo, pues: Vivan según el Espíritu, y no
satisfagan los deseos de la carne” (5:16).
Mientras más nos apoyemos en el ES,
menos vamos a caminar de acuerdo a los
deseos lujuriosos de nuestra carne.
El fruto del Espíritu es amor, y el resulta-
do de una vida llena de gracia, se expre-
sa con amor.
33. Nosotros hacemos el bien no con el fin
de ser salvos; sino porque somos salvos.
Esto hace toda la diferencia del mundo.
(5-6) FE PRACTICADA
Son personas que se aman aun cuando
fallan, que llevan las cargas de otros
cuando estos lo necesitan, son responsa-
bles de sus actos y generosos con los
que están en necesidad y buscan siem-
pre hacer el bien y lo correcto.
(6:1-10) ¿Cómo es la experiencia de cre-
yentes llenos del ES en la iglesia?
34. (5-6) FE PRACTICADA
“No nos cansemos, de hacer el bien; porque
a su tiempo cosecharemos, si no nos desa-
nimamos. Así que, según tengamos oportu-
nidad, hagamos bien a todos, y mayormen-
te a los de la familia de la fe” (6:9-19; RVC).
“No se engañen. Dios no puede ser burlado.
Todo lo que el hombre siembre, eso tam-
bién cosechará. El que siembra para sí mis-
mo, de sí mismo cosechará corrupción; pe-
ro el que siembra para el Espíritu, del Espí-
ritu cosechará vida eterna” (6:7-8; RVC).
35. (5-6) FE PRACTICADA
¿Qué quería que supieran? Que no tene-
mos nade de que gloriarnos sino sólo de
Jesús. No hay gloria en la ley, ni en la
circuncisión. ¡Lo único que tenemos para
jactarnos es Cristo!
(6:11-18) Pablo muestra su cariño por
ellos al terminar la carta con su puño y
letra, mostrando que no quería que la
tomasen a la ligera.
36. Que importante es estar firmes en la li-
bertad que se nos ha dado en Cristo. No
podemos hacernos ni más salvos ni más
perfectos en Cristo. Se nos ha dado todo
lo que necesitamos cuando ponemos
nuestra fe en él
CONCLUSIÓN
La religión es siempre un "haz"; el evan-
gelio de Jesús es un "hecho está". Jesús
ya hizo la obra. Todo lo demás fluye de
este hecho en nuestras vidas.
¡Estate firme en la libertad de Jesús!
37. Algunos pueden desear legalismo en sus
vidas, pero esto no es a lo que Dios nos
ha llamado. Has sido salvado por gracia,
¡mantente firme en su gracia!
CONCLUSIÓN
Nos hemos hecho los dioses de nuestra
propia vida, de nuestros malos
pensamien-tos y mucho más. La ley nos
condena y ninguna cantidad de oraciones,
actos de contrición, o sacrificios pueden
expiar por lo que hemos hecho. La única
esperanza que tenemos está en Jesús.