2. El psicoanálisis es un método específico para
investigar los procesos mentales inconscientes
y a un enfoque de la psicoterapia. El término se
refiere también a la estructuración sistemática
de la teoría psicoanalítica, basada en la relación
entre los procesos mentales conscientes e
inconscientes.
3. El psicoanálisis fue creado en Viena por
Sigmund Freud (1856-1939), un médico
neurólogo interesado en encontrar un método
efectivo de tratamiento para pacientes que
sufrían histeria y otros tipos de neurosis.
4.
5. Estudiando numerosos casos clínicos junto con
Joseph Breuer (1842-1925), comenzaron a
desarrollarse las primitivas teorías que
evolucionaron hasta formar el cuerpo teórico del
psicoanálisis.
Sin embargo Freud comenzó a tener problemas con
el método de la hipnosis para tratar la histeria, por lo
que tuvo que buscar otras alternativas. Fue así como
creo el método de la Asociación libre, el método
básico del Psicoanálisis.
6. Freud planteó entonces la teoría de que sus
problemas tenían como causa los deseos y fantasías
reprimidas e inconscientes de naturaleza sexual,
socialmente inaceptables.
Tras publicar algunos textos sobre sus
investigaciones, Freud fue designado profesor en la
Universidad de Viena en 1900. Comenzó, desde ese
momento, a incorporar investigadores que se
sumaron al movimiento psicoanalítico, tales como:
Carl Jung, Wilhelm Reich, Melanie Klein, Wilfred
Bion o Jacques Lacan.
7. Sigmund Freud fue un médico y neurólogo
austriaco considerado "el padre del
psicoanálisis". Freud se interesó por una
patología muy frecuente en su tiempo: la
histeria.
Comenzó con técnicas hipnóticas para tratar de
aliviar los síntomas de las mujeres histéricas.
Con el tiempo fue desarrollando su método de
psicoterapia.
8. El psicoanálisis es inicialmente un instrumento
para tratar personas que padecen de esta
patología. Si bien en sus inicios se aboca
exclusivamente a la cura de las parálisis
histéricas (sufridas en una gran mayoría por el
sexo femenino), luego se generalizaría para
otros tipos de neurosis, como la paranoia, la
neurosis obsesiva o las fobias.
9. En el desarrollo del psicoanálisis,
Freud estudió la conducta, las
emociones, los pensamientos, las
motivaciones, los sueños y la
existencia del hombre. Lo que
inicialmente se perfila sólo como un
instrumento terapéutico, es ahora
considerado por algunos de sus
seguidores como todo un sistema de
pensamiento.
10.
11. La mente consciente es todo aquello de lo que nos
damos cuenta en un momento particular: las
percepciones presentes, memorias, pensamientos,
fantasías y sentimientos.
Cuando trabajamos muy centrados en estos
apartados es lo que Freud llamó preconsciente, algo
que hoy llamaríamos “memoria disponible”: se
refiere a todo aquello que somos capaces de recordar;
aquellos recuerdos que no están disponibles en el
momento, pero que somos capaces de traer a la
conciencia.
12. La parte más grande estaba formada
por el inconsciente e incluía todas
aquellas cosas que no son accesibles
a nuestra consciencia, incluyendo
muchas que se habían originado allí,
tales como nuestros impulsos o
instintos, así como otras que no
podíamos tolerar en nuestra mente
consciente, tales como las emociones
asociadas a los traumas.
13. Comprender cómo funcionan los procesos mentales
inconscientes hizo posible la comprensión de
fenómenos psíquicos previamente incomprensibles,
como los sueños. A través del análisis de los procesos
inconscientes, Freud vio que este estado servía para
proteger el sueño (el reposo) del individuo contra los
elementos perturbadores procedentes de deseos
reprimidos, relacionados con las primeras
experiencias del desarrollo que afloran en ese
momento a la conciencia.
14.
15. El esfuerzo por clarificar el
desconcertante número de
observaciones interrelacionadas
puestas a la luz por la exploración
psicoanalítica, condujo al desarrollo
de un modelo de estructura del
sistema psíquico. Tres sistemas
funcionales, o instancias, se
distinguen en este modelo: el ello, el
yo y el superyó.
16. Es la instancia más antigua y original de la
personalidad y la base de las otras dos.
Comprende todo lo que se hereda o está
presente al nacer, se presenta de forma pura en
nuestro inconsciente. Representa nuestros
impulsos más primitivos.
Constituye, según Freud, el motor del
pensamiento y el comportamiento humano.
17. es la parte que contrarresta al ello,
representa los pensamientos morales y
éticos recibidos de la cultura. Consta de
dos subsistemas: la "conciencia moral" y el
ideal del yo. La "conciencia moral" se
refiere a la capacidad para la
autoevaluación, la crítica y el reproche. El
ideal del yo es una autoimagen ideal que
consta de conductas a probadas y
18. es una parte del ello modificada por su proximidad
con la realidad y surge a fin de cumplir de manera
realista los deseos y demandas del ello de acuerdo
con el mundo exterior, a la vez que trata de
conciliarse con las exigencias del superyó. El yo
evoluciona a partir del ello y actúa como un
intermediario entre éste y el mundo externo. El yo
sigue al principio de realidad, satisfaciendo los
impulsos del ello de una manera apropiada en el
mundo externo. Utiliza el pensamiento realista
característico de los procesos secundarios. Como
ejecutor de la personalidad, el yo tiene que medir
entre las tres fuerzas que le exigen: las del mundo de
la realidad, las del ello y las del superyó, el yo tiene
que conservar su propia autonomía por el
mantenimiento de su organización integrada.
19.
20.
21. Los mecanismos de defensa son modos
incorrectos de resolver un conflicto
psicológico y pueden dar lugar a
trastornos en la mente, la conducta, y en
los casos más extremos a la somatización
del conflicto psicológico y las disfunciones
físicas que lo expresan.
22. La represión es el mecanismo de defensa más
importante; por él experiencias y apetitos que el
sujeto considera inaceptables y que no consigue
integrar adecuadamente en su personalidad se
proyectan o empujan hacia las zonas inconscientes de
la mente.
La eficacia de la represión puede ser tal que el sujeto
ignore lo que ha reprimido .
De ahí que el terapeuta deba luchar para que el
paciente sea consciente también de su
responsabilidad en la represión. La represión no
anula la energía psíquica reprimida; ésta pugnará
por manifestarse en la vida del sujeto.
23. Este concepto de mecanismo de
defensa en psicoanálisis consiste en
enmascarar un motivo o emoción
transformándolo en su contrario.
24. es un mecanismo de defensa por el
medio del cual el sujeto atribuye a
otras personas los propios motivos,
deseos o emociones. Es una forma
de ocultación involuntaria e
inconsciente de su vida psíquica,
consecuencia de la presión del
superyó que sanciona como
incorrecto el contenido psíquico.
25.
26. La teoría plantea que conforme
crecen los niños su deseo se enfoca
en diferentes áreas del cuerpo.
Siguiendo una secuencia de etapas
psicosexuales en las que son
importantes diferentes zonas
erógenas, los niños pasan del
autoerotismo a la sexualidad
reproductora y desarrollan sus
personalidades adultas.
27. El ser humano llega a este mundo
trayendo consigo simplemente instintos,
secuencias de comportamiento genéticos
que le permiten sobrevivir. El bebé
satisface su primera necesidad, de
alimentación, a través de la boca y el
contacto con el pecho materno.
28. La limpieza, el orden y la belleza, claros
productos culturales aunque aún no
comprendidos del todo, incidirán en la vida
del sujeto de aquí en adelante; sobre todo la
limpieza en esta fase. Es en este sentido que
la madre en el acto de limpiar al niño de las
respectivas necesidades que produce,
erogenizará la zona anal; con la que el sujeto
buscará satisfacción autoerótica mediante la
expulsión y retención de heces.
29. El órgano sexual masculino desempeña
un papel dominante. En esta fase las
caricias masturbadoras y los
tocamientos ritmados de las partes
genitales proveen al niño un placer
autoerótico. Freud considera que el
clítoris es considerado por la niña como
una forma de falo inferior.
30. Se conoce este período por ser de "relativa"
suspensión en la investigación sexual infantil.
La represión, diques anímicos, etc. obligados
por la cultura ya están arraigados, en la
mayoría de los casos, en la vida anímica del
niño. Sucede, así, un período de amnesia
infantil. La sublimación (modificación de la
meta pulsional original por otra) es el destino
más importante en esta fase.
31. En esta, se producen crecimiento de los
genitales externos y desarrollo de los
genitales internos (como productores y
receptores de sustancias genésicas). Las
zonas erógenas predominantes en las
anteriores fases producen ahora un placer
previo que conlleva a una acumulación de
placer e incremento de la tensión suficiente
para llevar a cabo el acto sexual,
obteniéndose así un placer final con la
descarga de los productos genésicos, mucho
mayor en satisfacción al placer previo.
32. El concepto de «psicoanálisis» designa, por una parte,
aquel modelo teórico descriptivo y explicativo de los
mecanismos, procesos y fenómenos implicados en la vida
anímica humana.
El psicoanálisis ha sido creada por Sigmung Freud, el
cual fue un médico neurólogo interesado en encontrar un
método efectivo de tratamiento para pacientes que
sufrían histeria y otros tipos de neurosis.
A lo largo de su vida, Freud definió el aparato psíquico
de diversas maneras. La primera de ellas fue el modelo
topográfico, que lo dividía en consciente, subconsciente e
inconsciente. Posteriormente, este modelo fue sustituido
por el modelo estructural, que distinguía entre YO, ELLO
y SUPERYO.