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Resumen charla colapso ambiental 2030
1. Resumen de la Charla: EL COLAPSO AMBIENTAL DEL AÑO 2030
Por: Carlos Eduardo de Jesús Sierra Cuartas
Profesor Asociado, Universidad Nacional de Colombia
Miembro: Sociedad Julio Garavito Armero
Fecha: Sábado 24 de Enero de 2015
En la noche del martes 5 de agosto de 2014, pudo seguirse en tiempo
real en el canal institucional el debate realizado en el Senado sobre las
consecuencias que está teniendo y tendrá para el país la fluctuación
climática mal denominada como cambio climático.
2. Por lo pronto, ésta ha significado una reducción del PIB de un 0,5%.
En sectores gubernamentales, empresariales y otros cunde el pánico,
sobre todo por el hecho que Colombia figura en el segundo lugar de
vulnerabilidad a nivel mundial frente al cambio climático. Empero, las
universidades, cual reflejo del síndrome del Titanic, persisten con
programas de estudios obsoletos nacidos en la segunda revolución
industrial, exangüe en la actualidad, y, por ende, enmarcados en mitos
ingenuos como el “desarrollo sostenible” y la “energía limpia”. Así las
cosas, las universidades no están formando personas preparadas para
capear el colapso civilizatorio.
James Ephraim Lovelock
Por su parte, James Ephraim Lovelock, uno de los artífices de la teoría
Gaia, considera que, en el año 2030, sucederá el colapso ambiental, lo
que significa que apenas el 20% de la población mundial logrará
sobrevivir al mismo, un pronóstico similar a lo planteado, entre otros,
por Leonardo Boff y Harald Welzer.
Leonardo Boff
3. En todo caso, esto no es ciencia ficción sin posibilidades de
realización o pesimismo apocalíptico. Sencillamente, está en proceso
de darse. Incluso, el Papa Francisco comparte por completo estos
temores.
Resulta oportuno reproducir aquí algo de un artículo de Leonardo Boff
del 1º de enero de este año, titulado ¿Fin de una era, una nueva
civilización o fin del mundo?: «A mí me convence más el análisis, diría
profético, pues, se está realizando como lo previó, de Jacques Attali
en su conocido libro Breve historia del futuro (Paidós, 1999). Fue
asesor de François Mitterand y actualmente preside la Comisión de los
«frenos al crecimiento». Trabaja con un equipo multidisciplinar
altamente cualificado. Él prevé tres escenarios: (1) el superimperio
compuesto por Estados Unidos y sus aliados. Su fuerza reside en
poder destruir toda la humanidad. Pero, está en decadencia debido a
la crisis sistémica del orden capitalista. Se rige por la ideología del
Pentágono del «full spectrum dominance» (dominación de espectro
completo) en todos los campos, militar, ideológico, político, económico
y cultural. Pero, ha sido superado económicamente por China y tiene
dificultades para someter a todos a la lógica imperial. (2) El
superconflicto: con la decadencia lenta del imperio, se da una
balcanización del mundo, como constatan actualmente los conflictos
regionales en el norte de África, en Oriente Medio, en África y en
Ucrania. Esos conflictos pueden conocer un crescendo con la
utilización de armas de destrucción masiva (véase Siria, Iraq),
después de pequeñas armas nucleares (existen hoy miles con el
formato de un maletín de ejecutivo) que destruyen poco pero dejan
regiones enteras inhabitables durante muchos años debido a la alta
radioactividad. Con el uso generalizado de armas nucleares, químicas
y biológicas, se puede llegar a un punto en el que la humanidad se da
cuenta de que puede autodestruirse.
Y entonces surge (3) el escenario final: la superdemocracia. Para no
destruirse a sí misma y a gran parte de la biosfera, la humanidad
elabora un contrato social mundial, con instancias plurales de
gobernabilidad planetaria. Con los bienes y servicios naturales
4. escasos debemos garantizar la supervivencia de la especie humana y
de toda la comunidad de vida que también está creada y mantenida
por la Tierra-Gaia. Si esa fase no llegara a surgir, podría ocurrir el fin
de la especie humana y de gran parte de la biosfera. Por culpa de
nuestro paradigma civilizatorio racionalista. Lo expresó bien el
economista y humanista Luiz Gonzaga Belluzzo, recientemente: «El
sueño occidental de construir el hábitat humano solamente a base de
la razón, repudiando la tradición y rechazando toda trascendencia, ha
llegado a un callejón sin salida. La razón occidental no consigue
realizar concomitantemente los valores de los derechos humanos
universales, las ambiciones del progreso de la técnica y las promesas
de bienestar para todos y para cada uno» (Carta Capital, 21/12/2014).
En su irracionalidad, este tipo de razón construye los medios de darse
fin a sí misma».
Hasta aquí el lúcido Boff, de quien merecería la pena reproducir
muchos otros pasajes altamente ilustrativos. En todo caso, este gran
problema existe y no se ven los compromisos políticos e
institucionales requeridos para capear semejante temporal civilizatorio,
de lo cual Latinoamérica no es la excepción al persistir en muchos
órdenes en el síndrome del Titanic.
En estas condiciones, se impone la necesidad del paso hacia un
paradigma civilizatorio alternativo, de índole biocéntrica y convivencial,
acorde con lo que Boff denomina la superdemocracia. Empero, para el
funcionamiento adecuado de ésta es menester contar con una
superciudadanía bien formada desde el punto de vista humanista, algo
que, por desgracia, falta en los currículos actuales en los diversos
niveles educativos. Para colmo, se conoce y comprende bastante mal
el valioso legado de Iván Illich: la convivencialidad, justo la mejor
propuesta emanada desde Latinoamérica durante el último medio siglo
en materia de paradigmas civilizatorios alternativos.
Entretanto, dispongámonos a asistir en el transcurso de este siglo XXI
a la disminución abrupta de la población mundial, a causa de este
colapso civilizatorio, en un 80% cuando menos. De facto, de acuerdo
5. con lo establecido por autores como Carl Edward Sagan y Morris
Berman, ya estamos en una nueva era oscurantista, un verdadero
crepúsculo de la civilización, que, por lo que se teme, durará un largo
tiempo. Y, recordemos, esto no es ciencia ficción con escasa
probabilidad de cumplirse, ni pesimismo apocalíptico. Sucede a ojos
vistas.