1. Capacidades coordinativas:
facultad de adaptación
Miguel Ángel de la Cámara Serrano
Entrenamiento Deportivo
Ángel García-Morato Castillo Curso 2011-2012
Augusto Jiménez de la Fuente CAFyD
Luis Adrián Pérez Domínguez UAM
2. 1. Capacidades coordinativas
De forma genérica, la coordinación motriz se
puede definir como la “organización de acciones
motoras ordenadas hacia un objetivo
determinado” (García, J.M; Navarro, M; Ruiz, J.A.
1996:454).
La participación de las capacidades coordinativas
permiten al deportista realizar los movimientos
con precisión, economía y eficacia.
3. 1.1. Importancia de las capacidades
coordinativas
Jacob (1990, en García, J.M; Navarro, M; Ruiz,
J.A. 1996:446) asume tres funciones básicas de
las capacidades coordinativas:
Las capacidades coordinativas como elemento que
condiciona la vida en general.
Las capacidades coordinativas como elemento que
condiciona el aprendizaje motor.
Las capacidades coordinativas como elemento que
condiciona el Alto Rendimiento Deportivo.
4. 1.2. Metodología para desarrollar las
capacidades coordinativas
Harre, D. (1987:185) aporta una especie de guía
de orientación para la selección y el uso de los
medios de entrenamiento para el desarrollo
orientado a un objetivo de las capacidades
coordinativas:
1. El método principal es la práctica y el medio
principal son los ejercicios corporales.
2. Los ejercicios corporales a emplear como
medio de entrenamiento deben ser
aprendidos con la técnica adecuada y
siempre serán realizados con correcta
técnica bajo constante y consciente
5. 3. El empleo de medios de entrenamiento
adicionales influirá para mejorar las funciones de
los analizadores, mientras que al mismo tiempo el
deportista podrá permanecer relativamente
pasivo.
4. Los medios de entrenamiento a emplear deben
elegirse de modo tal que se dirijan principalmente
hacia la capacidad a desarrollar.
5. Las exigencias coordinativas en los ejercicios
corporales se elevan mediante el empleo de
medidas metodológicas especificas, logrando así
un mayor afecto de entrenamiento.
6. 1.3. Clasificación de las capacidades
coordinativas
Varias son las clasificaciones que se emplean para
diferenciar las capacidades coordinativas.
Harre, D. (1987:182) señala como pueden distinguirse
siete capacidades coordinativas a partir de las
características de cada deporte. Son fundamentales para
todos los tipos de deporte. Sin embargo cada una de estas
capacidades posee aspectos específicos para cada
disciplina o deporte:
1.3.1. Capacidad de adaptación
1.3.2. Capacidad de orientación
1.3.3. Capacidad de diferenciación
1.3.4. Capacidad de equilibrio
1.3.5. Capacidad de reacción
1.3.6. Capacidad de acoplamiento
1.3.7. Capacidad rítmica
7. 1.3.1. Capacidad de adaptación
También definida como “capacidad de
readaptación” (Harre, D. 1987) o “capacidad de
cambio” (García Manso, J.M; Navarro Valdivielso,
M; Ruiz Caballero, J.A. 1996).
Según García Manso, J.M; Navarro Valdivielso,
M; Ruiz Caballero, J.A. (1996:454) consiste en “la
capacidad de adaptación de un individuo a las
nuevas situaciones de movimiento que se
presentan durante la ejecución de una actividad
física que presenta numerosas interferencias del
entorno, los contrarios o los compañeros”.
Por su parte, Harre, D. (1987:184) la define como
“la capacidad de adaptarse a cambios de
situación en el programa de acciones para
8. En ocasiones, los cambios que se precisan son
de escasa magnitud, solucionándose con
modificaciones ligeras de los parámetros
espaciales, temporales y dinámicos de la acción.
Otras veces los cambios son mucho mas
drásticos, necesitando adaptaciones más
voluminosas que precisan de una elevada
capacidad motriz.
Los cambios en la ejecución de las acciones se
pueden producir debido a forzados, repentinos e
inesperados cambios de situación.
9. Cambios menores de situaciones conducen, en
su mayoría, a modificaciones en la ejecución de
las acciones de movimiento, o sea, hacia una
adaptación de la acción de movimiento, mediante
cambios individuales de los parámetros de
movimiento, mientras se mantiene la tarea de
movimiento original.
10. Mayores cambios de situación exigen a menudo
una readaptación rápida y posiblemente suave
de la ejecución del movimiento en otra tarea, y de
esta manera, en un nuevo programa de acciones.
La percepción exacta de los cambios de situación y la
anticipación correcta del adecuado tipo de
readaptación o adaptación son aspectos esenciales
de esta capacidad.
11. Dentro de esta cualidad entraría lo que se reconoce como
tiempo de corrección de error (TCE).
Definido como el “tiempo que transcurre entre el momento
en que el error es objetivamente iniciado (por ejemplo el
momento de una mala trayectoria) y el momento en que
comienza la corrección (por ejemplo en la detección de
una mala trayectoria)” (García Manso, J.M; Navarro
Valdivielso, M; Ruiz Caballero, J.A. 1996:454).
Es conveniente diferenciar esta cualidad (capacidad de
adaptación) del tiempo de reacción, incluso cuando
hacemos referencia a modificaciones que implican gran
rapidez de ejecución.
El tiempo de corrección de un error (TCE) se ha
constatado que es mas corto que el tiempo de reacción
simple. La justificación de este fenómeno parece
encontrarse en que el sistema nervioso central (SNC)
percibe el error en el momento de preparación,
comenzando a organizar la corrección incluso antes de
llegar a ejecutar el movimiento. Sin embargo, otros
autores como Scmidt y Gordon, piensan que se trata de
12. Esta cualidad se encuentra estrechamente
relacionada con las capacidades de orientación y de
reacción.
Precisa, también, de una gran experiencia motriz
para poder lograr una gran precisión a la hora de
resolver situaciones motoras imprevistas, tal y como
ocurre en los deportes de cooperación-oposición.
Un tratamiento especial se le podría dar a la
adaptación a trayectorias de móviles utilizados
durante la práctica deportiva. Las manifestaciones
deportivas ligadas a la utilización y control de
implementos, determinan acciones rápidas de
anticipación ante los contrarios o ante los
movimientos del propio móvil. Esta acción de
anticipación dependerá de los siguientes aspectos:
De la cercanía o lejanía en que se encuentren el móvil
respecto a la posición del deportista.
Del tiempo de exposición a la vista del deportista.
13. Respecto a su utilización en las modalidades
deportivas, Harre, D. (1987:184) señala como es
particularmente adecuada para los deportes de
combate y de juego.
Con mucha frecuencia el deportista es forzado,
particularmente bajo la influencia de los
contrincantes, a cambiar, por ejemplo, la
orientación de su movimiento de lanzamiento o
ataque.
Los cambios meteorológicos repentinos, o los
cambios del terreno en algunos deportes de
resistencia, hacen necesarias rápidas
readaptaciones de la secuencia de movimientos.
14. 2. Bibliografía utilizada
Harre, D. (1987). Teoría del entrenamiento
deportivo. Buenos Aires: Stadium.
García Manso, J.M; Navarro Valdivielso, M; Ruiz
Caballero, J.A. (1996). Bases teóricas del
entrenamiento deportivo. Madrid: Gymnos.