El documento describe la celebración de la fiesta del Bautismo del Señor en una iglesia. Incluye lecturas bíblicas, oraciones y cánticos relacionados con el bautismo de Jesús en el río Jordán y el significado de este evento. El sacerdote da una homilía sobre cómo el bautismo de Jesús marcó el inicio de su ministerio público y cómo el bautismo de los creyentes los une a Cristo y a su Iglesia.
2. MONICIÓN DE ENTRADA
Hace muy pocos días celebrábamos
el nacimiento del Señor. Aquel niño
del portal de Belén significaba la
presencia salvadora de Dios en el
mundo.
Dios, en la debilidad de aquel niño, se
ofrecía a los pastores y a los magos
(a todos los hombres en ellos
representados) como Salvador y
Redentor. Jesús = Dios-salvador.
3. Hoy celebramos el bautismo del
Señor. Jesús se nos presenta como
persona adulta, dispuesto a comenzar
la misión iniciada en Belén. Si el
nacimiento de Jesús fue "una gran
noticia" para todo el pueblo, el
bautismo del Señor resulta una
"noticia admirable" para los
creyentes: el cielo se abre y el Espíritu
de Dios desciende sobre los hombres.
La voz de Dios-Padre nos invita a dar
acogida a Jesús y a escuchar su
4. mensaje.
Al recordar y celebrar el bautismo del
Señor, también recordamos el nuestro.
Un bautismo que, aunque lejano, sigue
hablándonos de alegrías y de
responsabilidades.
5. CANTO DE ENTRADA.
Juntos cantando la alegría,
de vernos unidos en la
fe y el amor.
Juntos sintiendo en
nuestras vidas,
la alegre presencia
del Señor.
6. ASPERSIÓN DEL AGUA
UN SOLO SEÑOR, UNA SOLA FE, UN SOLO
BAUTISMO, UN SOLO DIOS Y PADRE.
1. Llamados a guardar la unidad
del Espíritu por el vínculo de
la paz, cantamos y proclamamos.
2. Llamados a formar un solo
cuerpo en un mismo Espíritu,
cantamos y proclamamos.
3. Llamados a compartir una
misma esperanza en Cristo,
cantamos y proclamamos.
7. GLORIA.
Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra
paz a los hombres que ama el Señor.
Por tu inmensa gloria
te alabamos,
te bendecimos,
te adoramos,
te glorificamos,
te damos gracias.
Señor Dios, Rey celestial,
Dios Padre todopoderoso.
Señor Hijo único, Jesucristo,
Señor Dios, Cordero de Dios,
Hijo del Padre:
tú que quitas el pecado del
mundo,
ten piedad de nosotros;
tú que quitas el pecado
del mundo,
atiende nuestra súplica;
tú que estás sentado a la
derecha del Padre,
ten piedad de nosotros:
porque sólo tú eres Santo,
sólo tú Señor,
sólo tú Altísimo,
Jesucristo
con el Espíritu Santo
en la gloria de Dios Padre.
Amén.
8. Lectura del libro de Isaías 42, 1-4. 6-7.
Así dice el Señor: «Mirad a mi siervo, a
quien sostengo;
mi elegido, a quien prefiero.
Sobre él he puesto mi espíritu, para que
traiga el derecho a las naciones.
No gritará, no clamará, no voceará por
las calles.
La caña cascada no la quebrará, el
pábilo vacilante no lo apagará.
9. Promoverá fielmente el derecho, no
vacilará ni se quebrará, hasta implantar
el derecho en la tierra, y sus leyes que
esperan las islas.
Yo, el Señor, te he llamado con justicia,
te he cogido de la mano, te he formado,
y te he hecho alianza de un pueblo, luz
de las naciones. Para que abras los ojos
de los ciegos, saques a los cautivos de
la prisión, y de la mazmorra a los que
habitan las tinieblas.»
PALABRA DE DIOS
10. SALMO RESPONSORIAL. Salmo 28.
R/. El Señor bendice a su pueblo con la paz.
Hijos de Dios, aclamad al Señor, aclamad la gloria del nombre
del Señor, postraos ante el Señor en el atrio sagrado.
R/. El Señor bendice a su pueblo con la paz.
La voz del Señor sobre las aguas, el Señor sobre las aguas
torrenciales.
La voz del Señor es potente, la voz del Señor es magnífica.
R/. El Señor bendice a su pueblo con la paz.
El Dios de la gloria ha tronado.
En su templo un grito unánime: “¡Gloria!”
El Señor se sienta por encima del aguacero, el Señor se
sienta como rey eterno.
R/. El Señor bendice a su pueblo con la paz.
11. Lectura del libro de los Hechos de los
apóstoles 10, 34-38.
En aquellos días, Pedro tomó la palabra
y dijo: «Está claro que Dios no hace
distinciones; acepta al que lo teme y
practica la justicia, sea de la nación que
sea. Envió su palabra a los israelitas,
anunciando la paz que traería Jesucristo,
el Señor de todos.
12. Conocéis lo que sucedió en el país de
los judíos, cuando Juan predicaba el
bautismo, aunque la cosa empezó en
Galilea. Me refiero a Jesús de Nazaret,
ungido por Dios con la fuerza del
Espíritu Santo, que pasó haciendo el
bien y curando a los oprimidos por el
diablo, porque Dios esta con él.
PALABRA DE DIOS
14. Lectura del santo Evangelio según
San Mateo 3, 13-17
En aquel tiempo, fue Jesús desde
Galilea al Jordán y se presentó a Juan
para que lo bautizara.
Pero Juan intentaba disuadirlo,
diciéndole: «Soy yo el que necesito que
tú me bautices, ¿y tú acudes a mí?»
Jesús le contestó: «Déjalo ahora.
Está bien que cumplamos así todo lo
que Dios quiere.»
15. Entonces Juan se lo
permitió.
Apenas se bautizó
Jesús, salió del agua;
se abrió el cielo y vio
que el Espíritu de Dios
bajaba como una
paloma y se posaba
sobre él.
Y vino una voz del cielo que decía:
«Éste es mi Hijo, el amado,
mi predilecto.»
PALABRA DEL SEÑOR
PALABRA DEL SEÑOR
17. CANTO DE OFERTORIO
SEÑOR, TE OFRECEMOS
EL VINO Y EL PAN.
ASI RECORDAMOS
LA CENA PASCUAL.
Porque tú sólo eres
bueno, Señor;
queremos cantar:
tus misericordias
¿Quién podrá cantar?
19. CANTO DE COMUNION
Todos unidos, formando un solo cuerpo,
un pueblo que en la Pascua nació.
Miembros de Cristo en sangre redimidos,
Iglesia peregrina de Dios.
Vive en nosotros la fuerza del Espíritu
que el Hijo desde el Padre envió.
Él nos empuja, nos guía y alimenta,
Iglesia peregrina de Dios.
Somos en la tierra semilla de otro reino,
somos testimonio de amor.
Paz para las guerras y luz para las sombras,
Iglesia peregrina de Dios.
20. Rugen tormentas,
y a veces nuestra barca
parece que ha perdido el timón.
Miras con miedo, no tienes confianza,
Iglesia peregrina de Dios.
Todos unidos, formando un solo cuerpo,
un pueblo que en la Pascua nació.
Miembros de Cristo en sangre redimidos,
Iglesia peregrina de Dios.
Vive en nosotros la fuerza del Espíritu
que el Hijo desde el Padre envió.
Él nos empuja, nos guía y alimenta,
Iglesia peregrina de Dios.
21. ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Gracias, Señor, por hacerte hombre y
quedarte junto a nosotros hecho
alimento.
Gracias por nuestro bautismo, que
nos hizo Hijos de Dios y hermanos
entre todos los hombres.
Ayúdanos con tu Espíritu a ser
conscientes de nuestra misión de
bautizados y a vivirla cada día con
responsabilidad.
.
22. Haznos en medio del mundo:
levadura que lo transforma,
sal que le da sabor,
que cura heridas y sana corazones
y luz que ilumina y acompaña.
Gracias por enseñarnos a gastar
nuestra vida con suavidad y firmeza
a favor de los pobres, los sencillos,
los enfermos, los oprimidos,
los vacilantes