El Descanso para el pueblo de Dios y como guardarlo
1.
2. EL SÁBADO FUE INSTITUIDO
POR DIOS
“Fueron, pues, acabados los cielos y la tierra, y
todo el ejército de ellos. Y acabó Dios en el día
séptimo la obra que hizo; y reposó el día séptimo
de toda la obra que hizo. Y bendijo Dios al día
séptimo, y lo santificó, porque en él reposó de
toda la obra que había hecho en la creación”.
Gén. 2: 1-3
3. FUE REGISTRADO POR DIOS MISMO
EN SU LEY
Y dio a Moisés, cuando acabó de hablar con él en el monte de Sinaí,
dos tablas del testimonio, tablas de piedra escritas con el dedo de
Dios. Ex. 31: 18
Acuérdate del día de reposo para santificarlo. Seis días
trabajarás, y harás toda tu obra; mas el séptimo día es
reposo para Jehová tu Dios; no hagas en él obra alguna, tú,
ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu criada, ni tu bestia, ni tu
extranjero que está dentro de tus puertas. Porque en seis
días hizo Jehová los cielos y la tierra, el mar, y todas las
cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día; por tanto,
Jehová bendijo el día de reposo y lo santificó. Ex. 20: 8-11
4. FUE GUARDADO POR JESUS Y SUS SEGUIDORES
“Fue a Nazaret, donde se había criado, y conforme a su
costumbre, el día sábado entró en la sinagoga, y se levantó para
leer” Lucas 4:16
“Entonces regresaron y prepararon especias aromáticas y
perfumes, y reposaron el sábado, conforme al mandamiento”
Lucas 23:56
Era costumbre de Jesús
Sus seguidores lo respetaron como santo
5. PABLO Y LOS GENTILES
1. Ellos, pasando de Perge, llegaron a Antioquía de Pisidia; y entraron
en la sinagoga un día de reposo y se sentaron. Cuando salieron
ellos de la sinagoga de los judíos, los gentiles les rogaron que el
siguiente día de reposo les hablasen de estas cosas. El siguiente
día de reposo se juntó casi toda la ciudad para oír la palabra de
Dios Hech. 13: 14, 41, 44.
2. Pasando por Anfípolis y Apolonia, llegaron a Tesalónica, donde
había una sinagoga de los judíos. Y Pablo, como acostumbraba,
fue a ellos, y por tres días de reposo discutió con ellos Hech. 17:
1,2.
3. Y discutía en la sinagoga todos los días de reposo, y persuadía a
judíos y a griegos… Y se detuvo allí un año y seis meses,
enseñándoles la palabra de Dios. Hech. 18: 4, 11
3 sábados
78 sábados
6. JUAN SE ENCONTRO CON CRISTO
EN EL SABADO
Yo estaba en el Espíritu en el día del Señor, y oí detrás de mí
una gran voz como de trompeta- Apoc. 1: 10
El día del señor el sábado
Si retrajeres del día de reposo tu pie, de hacer tu voluntad en
mi día santo, y lo llamares delicia, santo, glorioso de Jehová; y
lo venerares, no andando en tus propios caminos, ni buscando
tu voluntad, ni hablando tus propias palabras. Is. 58: 13.
Por tanto, el Hijo del Hombre es Señor aun del día de reposo.
Mar. 2: 28
7. EL SÁBADO A TRAVÉS DE
LOS SIGLOS
Siglo 2
“Los cristianos primitivos
tenían una gran veneración
por el sábado, y solían
pasar el día en devoción”
Dr. T. H. Morer, (Dialogues
on the Lord’s Day Diálogos
sobre el día del Señor]
(Londres: 1701), pág. 189 -
[Historia de la iglesia], tomo
1, cap. 2, sec. 30
Siglo 4
El 7 de Marzo del año 321,
Constantino decretó que se
guarde el venerable día del
Sol.
El concilio Laodicea, (364 de
dC.) la iglesia acepta al
domingo en lugar del sábado
bíblico. Hefele, Councils
[Concilios], tomo 2, lib. 6,
págs. 310, 316.
Siglo 5
“La gente de Constantinopla, y
en casi todos los demás
lugares, se reúnen el sábado,
como también el primer día de
la semana, costumbre que
jamás se practica en Roma o
Alejandría.”–Sócrates,
Ecclesiastical History [Historia
eclesiástica], libro 7, cap. 19
Siglo 8
Concilio de Liftinae—745 D.C
“La tercera alocución de este
concilio advierte contra la
observancia del sábado,
refiriéndose al decreto del concilio
de Laodicea.” –Dr. Hefele,
Conciliengeschichte (Historia de
los concilios), tomo 3, pág. 512,
sec.362].
8. Siglo 12
Los Valdenses
observaron el Sábado
“Entre los documentos,
originados por las
mismas personas,
tenemos una explicación
de los diez
mandamientos, fechada
en 1120 por Boyer. … Se
goza de la observancia
del sábado por el cese de
todas las labores
mundanales.” –Blair,
History of the Waldenses
[Historia de los
valdenses], tomo 1, pág.
220.
“Erasmo testifica que aun
hasta el año 1500 estos
bohemios no solamente
guardaban el séptimo día
en una forma escrupulosa,
sino que también se les
llamaba sabatistas. [ref.
Cox, The Literature of the
Sabbath Question (La
literatura sobre la cuestión
del Sábado),tomo 2, págs.
201, 202]” –Wilkinson,
pág. 264.
Siglo 15 Siglo 16
Concilio de Moscú—1503.
“Los acusados [guardadores del
sábado] han sido emplazados; ellos
reconocen su nueva fe
abiertamente, y la defienden. Los
más destacados de entre ellos, el
secretario de estado, Kuritzyn, …
Ivan Maximow, Kassian,
archimandrita del Jurado del
Monasterio de Novgorod, fueron
condenado a muerte, y quemado
públicamente dentro de jaulas, en
Moscú, el 27 de diciembre de
1503.” –H. Sternberg, Geschichte
der Juden [La historia de los judíos]
(Leipzig: 1878), pág. 117-122
Carlos I Rey de Inglaterra—
1647 (mientras interrogaba
a los miembros del
Parlamento). “Porque no se
halla en la Escritura ningún
lugar que diga que el
Sábado no se debe guardar
más, o que ha sido
reemplazado por el
domingo, por lo tanto debe
ser la autoridad de la
iglesia la que cambió el uno
e instituyó el otro.” –Cox,
Sabbath Laws [Leyes sobre
el Sábado], pág. 333.
Siglo 17
9. Siglo 19
A fin de estudiar cómo principió entre los primeros adventistas la observancia del
sábado, lleguémonos a una pequeña iglesia situada en la localidad de Wáshington, en el
centro del estado de New Hampshire, entre el de Nueva York por un lado y el de Maine
por el otro. Allí los miembros de una agrupación cristiana independiente oyeron, en 1843,
el mensaje del advenimiento, y lo aceptaron. Era un grupo fervoroso, y a su seno llegó
una hermana bautista del séptimo día, Raquel Oaks (más tarde Sra. de Preston), quien
les dio folletos que recalcaban la vigencia del cuarto mandamiento. Algunos miembros
comprendieron esa verdad, y uno de ellos, Guillermo Farnsworth, decidió guardar el
sábado. En esto le acompañaron otras doce personas, que fueron los primeros
adventistas del séptimo día. Federico Wheeler, el pastor de esa iglesia, tomó la misma
decisión y fue el primer pastor adventista que guardara el sábado. Otro pastor de New
Hampshire, T. M. Preble, aceptó también la verdad del sábado, y en febrero de 1845
publicó un artículo acerca de esa verdad en un periódico adventista, The Hope of Israel
(La esperanza de Israel). José Bates… leyó el artículo de Preble y aceptó la vigencia del
sábado. Poco después presentó el asunto, en un folleto de 64 páginas, que salió de
prensas en agosto de 1846. Un ejemplar llegó a las manos de Jaime White y su esposa
Elena.. Ellos también fueron convencidos por las pruebas bíblicas, y la señora escribió
más tarde: "En el otoño de 1846 comenzamos a observar el día de reposo bíblico, y
también a enseñarlo y defenderlo."-Testimonies 1:75. PP. 19
En 1848 se comprendió la observancia del sábado de pueta a puesta del sol.
10. EL SÁBADO EN
LA PROFECÍA
Orad, pues, que vuestra huida
no sea en invierno ni en día
de reposo; porque habrá
entonces gran tribulación, cual
no la ha habido desde el
principio del mundo hasta
ahora, ni la habrá. Mat. 24: 20.
Respondiendo él, les dijo: ¿Veis todo esto?
De cierto os digo, que no quedará aquí
piedra sobre piedra, que no sea derribada.
Y estando él sentado en el monte de los
Olivos, los discípulos se le acercaron
aparte, diciendo: Dinos, ¿cuándo serán
estas cosas, y qué señal habrá de tu
venida, y del fin del siglo? Mat. 24: 2, 3
PROFECIA ADVERTENCIA
En su contestación a los discípulos, Jesús
no consideró por separado la destrucción
de Jerusalén y el gran día de su venida.
Mezcló la descripción de estos dos
acontecimientos DTG. 582
11. SEÑAL PARA LA HUIDA
LOS CRISTIANOS DEL PRIMER SIGLO
"Por tanto, cuando veáis en el lugar santo la abominación desoladora de que
habló el profeta Daniel (el que lee, entienda)" Mat. 24: 15
Tan pronto como los estandartes del ejército romano idólatra fuesen clavados en
el suelo sagrado, que se extendía varios estadios más allá de los muros, los
creyentes en Cristo debían huir a un lugar seguro. Al ver la señal preventiva,
todos los que quisieran escapar debían hacerlo sin tardar. Tanto en tierra de
Judea como en la propia ciudad de Jerusalén el aviso de la fuga debía ser
aprovechado en el acto. CS 29
12. No está lejano el tiempo en que, como los primeros discípulos,
seremos obligados a buscar refugio en lugares desolados y
solitarios. Así como el sitio de Jerusalén por los ejércitos romanos
fue la señal para que huyesen los cristianos de Judea, así la
asunción de poder por parte de nuestra nación [los Estados Unidos],
con el decreto que imponga el día de descanso papal, será para
nosotros una amonestación. Entonces será tiempo de abandonar las
grandes ciudades, y prepararnos para abandonar las menores en
busca de hogares retraídos en lugares apartados entre las
montañas.—Joyas de los Testimonios 2:165-166
LA SEÑAL PARA EL TIEMPO DEL FIN
13. LA IMAGEN DE LA BESTIA IMPONDRÁ LA
LEY DOMINICAL
Y se le permitió infundir aliento a la imagen de la bestia, para que la
imagen hablase e hiciese matar a todo el que no la adorase. Y
hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y
esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha, o en la
frente; y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que
tuviese la marca o el nombre de la bestia, o el número de su
nombre. Apoc. 13: 15-17
Cuando las iglesias principales de los Estados Unidos, uniéndose
en puntos comunes de doctrina, influyan sobre el estado para que
imponga los decretos y las instituciones de ellas, entonces la
América protestante habrá formado una imagen de la jerarquía
romana, y la inflicción de pena civiles contra los disidentes será el
resultado inevitable. CS, 498.)