1. http://escuelasinexclusiones.blogspot.com.es/2012/07/algunas-reflexiones-sobre-
el.html
Algunas reflexiones sobre el Anteproyecto
de Ley Orgánica para la mejora de la
calidad educativa
[Texto enviado al Ministerio de Educación,
-calidadeducacion@mecd.es-, por Luis Fernández, integrante del
Movimiento Social por la Escuela Pública y profesor en el CIFP La Laboral
de Gijón: una primera aproximación al Anteproyecto de Ley Orgánica
para la mejora de la calidad educativa presentado por el Ministerio de
Educación]
Descubro en la web del Ministerio una invitación. Embarcados en una
(nueva) reforma del Sistema Educativo cuelgan en ella un documento al
que acompañan con la siguiente nota:
“La reforma que se plantea pretende ser gradualista y prudente, basada
en el sentido común. Su puesta en marcha requiere de un diálogo
abierto y sincero para conseguir que, con las aportaciones de todos,
seamos capaces de alcanzar un acuerdo que consiga el compromiso de
toda la comunidad educativa. Es fundamental que la reforma educativa
sea sostenible en el tiempo, pues su éxito se medirá en función de la
mejora objetiva de los resultados de los alumnos”.
Animado por la propuesta me dispongo a leer con detalle el documento y
a aportar lo que mis 35 años de experiencia como profesor (más 19 de
alumno) me permitan.
No encuentro ningún documento que merezca el nombre de tal. Sólo
una presentación en diapositivas. Consecuentemente no hay ningún
discurso estructurado que se pueda intentar entender. Tan sólo un
conjunto de instantáneas cuyo sentido queda muchas veces confuso.
La lectura repetida y detenida del conjunto de destellos
informativos sólo logra indignarme.
Me formé en la ley del 55. Vi llegar la propuesta ilustrada (en las
postrimerías de la dictadura de Franco) de la ley del 70 (la LGE). Asistí a
su choque con las estructuras educativas y a su tránsito desde el
régimen general de la FP al régimen especializado. Ya era profesor
veterano (desde el 77) cuando se discutió, experimentó y elaboró la ley
del 90 (la LOGSE). He asistido a su degradación desde el mismo día que
se aprobó hasta la actualmente congelada LOE. Creía estar preparado
para todo (la edad propicia un cierto distanciamiento).
2. Pero este documento supera lo esperable. Y logra indignarme. Con todo
prometo ser“abierto y sincero”.
Dos constantes se derivan de su estudio: 1º el escandaloso
substrato ideológico que dejan transparentar los que lo redactan
(quiero entender que lo dejan transparentar sin querer, no que lo
muestran obscenamente) y 2º la tosquedad conceptual de que se
hace gala en su redacción (y demuestra, por tanto, quien lo
firma)
Ya llama la atención que cuando se está hablando del Sistema Educativo
(de aquel que va a ser determinante en la educación integral de
todas las personas de este país) aparezcan como 1ª debilidad del
mismo: “Resultados internacionales desfavorables (PISA); y que el
primer punto de partida que se plantee sea: “Mejora del nivel educativo
de los ciudadanos como apuesta por el crecimiento económico y la
competitividad” (aquí las negritas son suyas). ¿Es eso todo lo que le
preocupa al Ministro de Educación? ¿Y todo aquello de la formación
integral de la persona, de la autonomía, del sentido crítico, de los
valores, del sentido democrático, del engarce en la cultura a la que
pertenecemos, del conocimiento del pensamiento de la humanidad, de
sus desarrollos conceptuales, de sus formas de explicar el mundo en que
vivimos,…? ¿Le corresponderá al Ministro de Economía o al de Industria?
La cuestión empieza a ser insoportable cuando en la diapositiva 4 de las
50 se puede leer:
Es decir el primer principio es que el sistema va a garantizar la igualdad
de oportunidades“hasta el final de la etapa obligatoria”. Lo que ocurra a
partir de ahí no parece de su incumbencia. Bien porque se considera
incompetente para ello o porque quiere ser cómplice de esa desigualdad
de oportunidades (de los privilegios de clase). Ambas posiciones son
inadmisibles.
Puede que sea una interpretación demasiado severa. Pero es lo que dice.
Y si el que lo escribió no quería decir lo que dice, entonces es que no
3. está capacitado para escribirlo. ¡Y lo firma el Ministro de Educación! Y si
no está capacitado ya sabe lo que tiene que hacer y si está capacitado y
quería decir eso ¿hacia dónde vamos?
Con todo es más grave el segundo principio: los estudiantes “poseen
talento”. Es decir nacen con unas capacidades (hasta aquí podemos
pensar que se refiere a capacidades intelectuales). Y el Sistema
Educativo le “ofrece las trayectorias” para que pueda hacerlas realidad.
O lo que es lo mismo el innatismo más reaccionario. Cada uno tiene lo
que tiene y el sistema educativo es un sistema clasificatorio que coloca a
cada uno donde le corresponde. No tiene la responsabilidad de ayudar a
progresar. Sólo tiene que examinar y clasificar. ¿Es eso lo que dice la
Pedagogía oficial de este país?
Pero esta afirmación, ya inaceptable, adquiere su verdadera dimensión
cuando en la diapositiva 14, al hablar de medidas de atención
individualizada dedicadas a “reducir la tasa de abandono educativo
temprano y mejorar la tasa de población que alcanza la ESO”, se puede
leer:
Es decir, a aquel alumnado que tenga situación socio-económica
desfavorable, para ese tipo de “talento”, el Sistema le va a ofrecer
programas de cualificación profesional para que“pueda hacer realidad
sus aspiraciones e ingresar con éxito en el mercado del trabajo”.
Retrocediendo más allá de la Ley del 70 (aquella que decidió que a FP no
debería ser para los hijos e hijas de los trabajadores sino para aquellos
que –con independencia de su clase social- tuvieran dificultades en la
Básica) nos situamos en los entornos de la Ley el 55 (en plena
Dictadura). ¡Esto no se atrevería a decirlo el mismísimo José Antonio
Girón de Velasco!
Porque además, el que esto dice es consciente de que esos programas
no sirven para ingresar con éxito en el mercado del trabajo pues como
ya explica en su diapositiva 10:
4. Y como se encarga de dejar bien claro en la diapositiva 22:
De lo que concluimos que este sistema está diseñado para “dar una
mínima cualificación profesional” a aquellos “alumnos con dificultades de
adaptación o situación socio-económica desfavorable” que les harán
enfrentarse a “graves dificultades para incorporarse y mantenerse en
el mercado de trabajo” y los dejará marcados con “limitaciones para
desarrollarse en la sociedad con plenas posibilidades”
¿Sobre que sustrato ideológico está construida semejante propuesta?
¿Qué anida en las esquinas del cerebro del que realiza semejantes
desarrollos programáticos?
Después de todo esto ya no puede extrañar su sentido de la
participación y la democracia que, cuando tiene que proponer medidas
para aplicar lo que entiende por autonomía de los centros, le lleva a
plantear (diapositiva 39):
En la lectura hasta aquí ya se habrán podido notar frecuentes
inconsistencias gramaticales e incorrecciones formales que quizás se
pudieran atribuir al “género” elegido para redactar la propuesta. Sin
embargo existen pruebas más rotundas de la endeblez epistemológica
de los redactores.
5. En la diapositiva 25 se puede leer:
Lo que parece dar a entender que los alumnos españoles tienen “clase
de lectura” al mismo nivel que la tienen de “matemáticas”. Por si nos
cabe alguna duda, el redactor cuantifica de modo preciso:
Para que quede bien claro que en la ESO los alumnos españoles de 1050
horas lectivas dedican 96 a “matemáticas”, 119 a “lectura” y 835 al
“resto de las asignaturas”.
¿Alguien le puede explicar a este sujeto que la “lectura” no es una
asignatura independiente de las “matemáticas” y mucho menos del
“resto de las asignaturas”? ¿Alguien le puede explicar que la capacidad
lectora que tanto le preocupa porque “se lo miran en PISA” no es una
asignatura que se aprenda en una clase independiente de las demás
asignaturas? ¿Alguien le puede explicar a este descriteriado
epistemológico cómo se organizan las capacidades, los saberes y las
estrategias metodológicas para adquirirlos?
Desde luego si cree que “lectura” es una asignatura identificable como
tal mucho más fácil es que crea que se puede decir, cuando está
proponiendo medidas para reducir la tasa de abandono (diapositiva 13):
¿Alguien le puede explicar a este ignorante que no existen unas
matemáticas universales para TODAS las ramas de FP que son
marcadamente diferentes de otras que sirven para TODOS los
bachilleratos? ¿Alguien le puede explicar que hacer FP no es hacer un
oficio? ¿Alguien le puede explicar que las diferentes ramas de la FP
tienen exigencias muy diferentes de conocimientos matemáticos? ¿Y que
las diferentes ramas de bachillerato también? Que el problema es
técnicamente mucho mas complejo que creer que existen unas
6. matemáticas “académicas” y otras matemáticas “aplicadas” como
eufemismo para referirse a “matemáticas para listos” y “matemáticas
para torpes”. ¿Alguien le puede explicar que para“mejorar la
empleabilidad” –segundo de los objetivos que se plantea la propuesta-
de los formados éstos tienen que dar respuesta a las exigencias de los
actuales puestos de trabajo? ¿Alguien le puede explicar lo que significó
la automatización en la posición del trabajador/ra frente a su puesto de
trabajo?... ¿Es posible que haya que explicarle tantas cosas? ¿Es
admisible?
Habría mucho más que decir del anteproyecto. Y cuando descienda mi
indignación seguiré con ello. Pero no modificaría sustancialmente la
propuesta que motivó este estudio. La tengo ya clara: Retiren el
documento en su globalidad. Miren hacia el siglo XXI. Aclaren sus ideas
sobre cómo quieren que sea la sociedad que viene. Infórmense sobre las
ciencias y las técnicas del aprendizaje y escriban con cuidado y
corrección algo que se pueda leer sin indignarse.
Gijón, 16 de julio de 2012
Luis Fernández González