Este documento describe cómo las bibliotecas públicas pueden aplicar los principios de la Web 2.0 para ser más participativas y centrarse en el usuario. Propone que las bibliotecas usen blogs, sindicación, agregación y etiquetado para distribuir información de manera cooperativa y permitir que los usuarios creen y compartan contenido. Finalmente, argumenta que trabajando juntos mediante estas herramientas, las bibliotecas pueden ofrecer una gama más amplia de recursos de información a la comunidad.