El documento resume las múltiples críticas y juicios negativos que enfrentan los profesores independientemente de sus acciones. No importa si son jóvenes o viejos, estrictos o permisivos, activos o pasivos, siempre serán criticados. La única forma de ser un buen profesor es tener las cualidades de sabiduría, paciencia, serenidad, alegría y valor, como las demostradas por figuras históricas.