El Legado de Walter Gropius y Frank Lloyd Wright en la Arquitectura Moderna_c...
The Beatles. 1990. Suplemento escolar
1. Heraldo de Aragón. Suplemento Heraldo Escolar, 5-XII-1990, miércoles.
POR SIEMPRE, BEATLES. 20 años sin el grupo de Liverpool.
Estamos en la semana en que hace diez años John Lennón cayó acribillado por las balas
asesinas de un demente. Estamos a diez de la desaparición de uno de los músicos populares
más importantes de este siglo. Pero justamente estamos también a veinte a ños de la
desaparición del grupo en el que Lennon incubó su fama: The Beatles. En estas dos páginas
tienes una aproximación a lo que significó este grupo durante la década de los sesenta y en el
mundo que le tocó vivir. Sus hallazgos y sus innovaciones mayores. También, además de otros
datos, una ligera orientación sobre su discografía y sobre los libros que puedes consultar en
caso de que estés interesado en profundizar en su historia o en complementar la escucha de sus
canciones. Nunca un grupo de pop logró transformar tan sensiblemente la piel del mundo como
lo hizo este inolvidable cuarteto de Liverpool. ¡Por siempre, Beatles!
LOS PRIMEROS EN TODO: ¡FABULOSOS!
No fue empresa fácil. Desde que Lennon invitó a McCartney a unirse a su grupo, The
Quarrymen, hasta que los Beatles alcanzaron su primer número 1 con "From Me To You", en
1963, hubieron de transcurrir ocho años. El mundillo del pop no es tan fácil comp aparenta.
Hasta llegar a la cumbre hay que pasar no pocas calamidades. Y hasta eso, malviviendo en un
cuchitril durante meses en Hamburgo, enfrentados a sus familias, tocando horas y horas en The
Cavern, pasando hambre, los Beatles se adelantaron a los demás.
Mas pioneros en el sufrimiento, también lo fueron en muchas otras cosas menos martirizates.
Cuando a principios de los sesenta el mundo muscial dormitaba y el eco del rock'n'roll, puesto de
moda unos años antes por Elvis Presley, estaba casi totalmente apagado, llegaron ellos con sus
flequillos, sus medias melenas y su cargamento de optimismo. Y revolucionaron la década. Al
principio los llamaron de todo, desde mariquitas hasta agentes del comunismo, pero luego el
mundo se rindió a sus canciones, los jóvenes desenterraron su conciencia de clase natural y
comenzaron a vestir y a dejarse el pelo largo como ellos. ¡Qué escándalo! ¡Si hubierais visto las
broncas entre padres e hijos por un centímetro más de pelo en el cogote! Pero la reina de
Inglaterrra los nombró cabelleros del imperio y el fuego del escándalo bajó de intensidad. El pop
alcanzó, gracias a ellos, crédito.
Ideológicamente también fueron por delante de los demás. Al rpincipio eran cuatro chicos de
estampa provinciana y algo golfa, cuyo único objetivo era pasárselo bien. Por eso, sus canciones
calban en los jónvenes de la época como misiles incrustados en un muro de goma: todos
querían divertirse, coger la mano de su chica y prolongar al máximo aquella nochde de auqel día
de diversión. Pero luego maduraron y se convirtieron en seres más trascendentales, y acabaron
enseñando al mundo el camino de Oriente y el misticismo.
Claro, que donde le sacaron muchas cabezas de distancia a los demás grupos fue en la música.
No han sido pocos los conjuntos que, descubierta una fórmula musical, se han dedicado disco
tras disco a repetirla sin contemplaciones. En su caso fue todo lo contrario. Reescuchando sus
discos se comprueba con asombro que ninguno de ellos se parece al otro casi anda, que hay
una diferencia abismal entre "With The Beatles", de sus comienzos, y "Revolver", de su etapa
intermedia, y no digamos con "Sgt. Pepper", consumación de su carrera. Siempre dirigidos por
George Martin, al que se le llamó el quinto Beatle, se mostraron coo células vitalísimas capaces
de regenerarse a sí mismas con una rapidez y una consistencia endiabladas.
Musicalmente, al principio se sustentaron en la herencia del rock'n'roll clásico americano y en los
sonidos de la Tamla Motown, pero luego fueron experimentando en el estudio y al final acbarían
hasta tocando junto a una orquesta sinfónica. Cada paso que daban, surgía algo nuevo. Así es
que cuando publicaron su histórico "Sgt. Pepper" no extrañó que algunos grupos se tuvieran que
volver de nuevo al estudio a rehacer sus discos y otros, como sus eternos rivales, los Rolling
Stones, se pegaran a su rueda lanzando "Their Satanic Majesties Request", sometido al espíritu
del Sargento Pimienta.
Fueron también pioneros en arruinarse en los negocios, en el fenómeno de las fans y en
implantar nuevos comportamientos a la industria del disco. También en llevar el pop al cine y en
ponerle color a una década. Por no quedarles nada, también fueron pioneros en las rupturas. Y
es que lo suyo fue siempre ir por delante de los demás.
PARA SABER MÁS DE ELLOS. De Los Beatles haun una gran cantidad de libros publicados. El
2. mejor de todos y más recmendable, por su amenidad, por la fiabilidad de los datos y por la
reconstrucción tan espléndida que hace de la época y del entorno del grupo, es el de Philip
Norman, titulado "¡Gritad!" (Ultramar, 1982), y que curiosamente, ninguno de los Beatles
supervivientes quiso autorizar, vaya usted a saber por qué, cuando diez años antes autorizaron
el de Hunter Davis, casi una recensión del de Norman.
En la colección "Los juglares", de Júcar, tienes también un par de textos muy ilustrativos e
interesantes. Uno de ellos, bajo el seudónimo de Antonio Cillero, está escrito por Agustín
Sánchez Vidal, profesor de la Universidad de Zaragoza. Los de Jordi i Sierra hay que tomarlos
con precaución.
QUIÉNES ERAN: UNO A UNO.
Paul McCartney. Parecía el más modosito, el más simpático y el más guapo. Y así era. En el cole
ya leía -¡aprende, calavera!- a Tennesse Williams y su cartilla de notas era ejemplar. Quiso tocar
la trompeta, poero como vio que eso era incompatible con la voz, se cogió un bajo y los adaptó a
su mano zurda. Con él, con la guitarra y con sus dotes de compositor fabricó buena parte de las
mejores canciones de los Beatles y de la historia.
John Lennon. La estampa golfera del grupo. Como ese clásico compañero de pupitre que
siempre te está haciendo la pascua y se ríe de todo, Lennon tenía más de indeseable que de
buen chico. Pero era listo como él solo y superdotado para la música, por lo que los Beatles sin
él no hubieran sido posibles. Era además el que tenía opiniones más profundas y cuando cdijo
que eran más famosos que Jesucristo, armó un lío de mil pares de narices.
George Harrison. Seguro que a tu lado hay alguien así. Un tipo introvertido, cerrado como una
ostra, pero ¡caray! cuando explota. No le dejaron meter mano en las canciones, pero al darle
permiso sacó a relucir su genio redondeó piezas magistrales.
Fue el primero en dejarse el famoso flequillo y el que tiró de sus compañeros hacia Oriente y la
música hindú. Sigue sin reír para no enseñar el diente montado que tiene.
Ringo Starr. ¡Vaya tipo! Siempre sonriendo, siempre simpático. Entró con el pie izquierdo en el
grupo sustituyendo al guapo Pete Best, algo que no le perdonarían sus fans a George Martin,
que lo echó. Además no le dejaron tocar en el primer disco y era el más feo, pero luego, con su
afición a los anillos, su sonrisa, su aspecto bonachón y su papel de padre del grupo (era el
mayor), se ganó el afecto de todos y triunfó.
UN MAGICO TOUR POR SU DISCOGRAFIA. Caso hipotético de que no hayas oído hablar de
ellos (¿no serás un extraño zombie?), y como de los Beatles no hay ni mejor ni peor disco, lo
más apropiado para iniciarte en su música es que te pilles un disco recopilatorio. El comúnmente
llamado "rojo" recopila éxitos del primer tramo de su carrera, en tanto que el "azul" lo hace de la
última. Ya quedarás atrapado. Pero si lo que quieres es hacer el "tour" mágico desde el principio,
prepárate a cambiar de paisaje continaumente. Los cinco primeros LP's muestran a los Beatles
simpáticos, optimistas y rabiosamente aolocados que todavía alternan canciones propias con
otras ajenas. En el último de este tramo, en "Help", está "Yesterday", que anuncia el cambio de
rumbo en los discos siguientes. Precisamente, "Rubber Soul" y "Revolver", en los que el cuarteto
juega con las cintas, experimenta nuevos sonidos, introduce el sitar, se deja influir por Bob Dylan
y la droga, son los elepés de tránsito que conducirán a "Sgt. Pepper", la obra cumbre del
cuarteto y un terremoto para la época.
Después, descuartizado ya el grupo internamente, llegarían el doble blanco, "Abbey Road" y "Let
It Be", tres obras de madurez y muy brillantes. Y tan heterogéneas como sus artífices. Signo de
la descomposición que estaba al venir.
VOCABULARIO DE LA ÉPOCA
Ye-Ye. sobre todo en España, fue el término adoptado para referirse a los hcios que se dejaban
el cabello largo y a las chicas que se pinían minifalda. Era sinónimo de modernidad y su uso se
extrajo de la canción "She Loves You", en la que los Beatles repetían 29 veces yeah-yeah al final
del estribillo.
Beatlemanía: un fenómeno que aglutinaba a fans histéricas, chillidos, venta de objetos referentes
3. al grupo, carreras, policía... En definitiva, culto a los ídolos.
Beat: el estilo musical impuesto los Beatles y al que se sumaron docenas de grupos de
Liverpool, primero, y después de todo el mundo.
Ninifalda: invento revolucionario de Mary Quant en los sesenta que lveantó más potestas que el
"Póntelo, pónselo". Y todo por varios centímetros menos de trapo.
COLECCIONISMO MILLONARIO. El paso de los Beatles por la historia de la música popular ha
dejado una estela inapagable. No sólo sus discos se siguen vendiendo a nmansalva sino que en
torno a todo lo que huela al famoso cuarteto de Liverpool ha nacido y crecido un mercado
millonario en el qu e el fetichimso está a la orden del día. Para que te hagas una idea: el disco
más caro que hoy existe en el mundo es un single de los Beatles que nunca se llegó a publicar, y
por el que propio Paul McCartney llegó a ofrecer a su dueño, un coleccionista americano, diez
millones de pesetas.
Más modesto, en Zaragoza vive el coleccionista que más y mejores objetos de los Beatles posee
en España, Se llama Juan Agüeras, de 28 años, es joyero y en su casa tiene alrededor de cinco
mil piezas de los Beatles entre discos raros, cintas, videos, posters, artículos de prensa y fotos.
Por una postal firmada por el grupo en Alemania pagó cien mil pesetas. Y creételo: está más
cuerdo que un juez. Es la pasión lo que manda.
UN MUNDO SUMERGIDO EN LA DÉCADA PRODIGIOSA. No es que el mundo no tuviera
problemas, que allí estaban Vietnam, la guerra fría, el muro de Berlín, la crisis de los misiles, el
asesinato de Kennedy, la guerra de los Seis Días en Oriente Medio, el mayo francés, la
primavera de Praga y hasta los casi 500 presos políticos que Franco aún tenía en la cárcel como
granos externos y purulentos de la mala salud interior que entonces padecía el globo terráqueo.
Sin embargo, a este globo le había salido también como una gran boca sonriente deswde un
extremo a otro y el mundo parecía más feliz, rezumaba opotimismo por doquier. ¿Cuáles podrían
ser las causas? ¿Acaso la llegada del hombre a la Luna? ¿El Concilio Vaticano II? ¿La invasión
de los electrodomésticos? ¿El desarrollismo económico?... ¿O eran los Beatles?
Sí, algo tuvieron que ver en el dibujo de aquel rostro risueño del mundo de los sesenta aquellos
cuatro chicos melenudos que, como todavía hoy reza sobre la puerta de The Cavern,
"revolucionaron el mundo".
Hasta entonces, hasta que llegaron ellos, los jóvenes no existían. Eran simples proyectos de
adultos. Las vidas y las preocupaciones de los quinceañeros eran meras pasarelas para saltar al
mundo de sus padres y convertirse en seres igualitos que ellos: ya sabes, un trabajo fijo, una
novia, un matrimonio, los hijos... Hasta entonces así venía siendo. Pero cuando llegaron los
Beatles fue como una milagrosa apertura de las aguas bíblicas: a un lado, ellos, los jóvenes; al
otro, loa adultos. Y así continúa.
Aquellos ruidosos chicos de Liverpool, trajeron al mundo la revolución social más fuerte e intensa
que se haya conocido en este siglo. Los Beatles le cambiaron el rostro a la historia y de su
bocanada de aire fresco y liberador todavía seguimos alimentándonos. Con no poco acierto,
alguien iventó para aquellos años el término de Década Prodigiosa.