1. Kia Naimo:
Kia está pasando por el mejor momento de su historia y eso se debe notar por
fuerza ahora que está teniendo lugar su salón local, el Seúl Motor Show. Allí, acaba
de presentar un nuevo concepto de SUV eléctrico llamado Naimo que combina las
últimas tendencias de diseño de la marca coreana con evocaciones de su arte más
tradicional. Así, en el exterior destacan las ópticas LED del redondeado frontal y,
en el interior, la forma envolvente de su salpicadero.
Los espejos retrovisores han sido sustituidos por cámaras de visión trasera
montadas sobre el pilar A. En el interior, completamente realizado a mano,
dominan los materiales naturales como la madera o el papel “Han-ji”, que es el
que se emplea en las lámparas tradicionales de esa parte de Asia. Aunque,
seguramente, lo más destacable sea el salpicadero transparente en el que unos
diodos LED guían al conductor por los diferentes menús y opciones.
El Naimo es el tercer concepto eléctrico revelado por Kia en un año, como os
contaba, en este caso se trata de una arquitectura similar a la de un SUV pequeño,
con 3.890 mm de largo, 2.647 mm de ancho y 1.844 de alto y una configuración
interior similar a la del Nissan Qashqai, que ofrece a los ocupantes un gran espacio
2. para las piernas. Otro aspecto a destacar –aunque habitual en los concept- es la
desaparición del pilar B, lo que facilita mucho el acceso al interior.
Además, los asientos son completamente abatible y pueden girarse y
escamotearse, lo que permite reconfigurar el interior en función de la cantidad de
equipaje que quiera transportarse. En el apartado mecánico, el Naimo está
impulsado por un motor eléctrico de imanes permanentes que entrega hasta 109
CV de potencia y ofrece un par máximo de 280 Nm. Esto permite al Naimo
alcanzar una velocidad máxima de 150 km/h.
El paquete de baterías de ión-litio tiene 27 kWh de capacidad y, teóricamente,
ofrecería al Naimo la nada despreciable autonomía eléctrica de 200 km. Esto se
consigue también en parte gracias a unos neumáticos de baja resistencia y a un
fondo plano que mejora la aerodinámica del vehículo. Si las pilas se descargan
antes de lo previsto, con una recarga rápida de 25 minutos, estas alcanzan un 80%
de su capacidad. En ciclo normal este proceso tarda cinco horas y media.
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