El documento discute la propuesta de incrementar el salario mínimo en la Ciudad de México. Si bien esto aumentaría los ingresos de los trabajadores y podría beneficiar la economía formal, también podría causar problemas a las empresas al elevar sus costos de nómina, lo que las obligaría a recortar personal, reducir salarios u aumentar los precios de sus productos y servicios. Aunque no resolverá todos los problemas, el incremento al salario mínimo es un paso positivo.