2. Es la capacidad de influir positivamente en el otro para el logro de un
fin valioso, común y humano.
Es el arte por el cuál puedes lograr que las personas hagan las cosas que
tu deseas de manera voluntaria sin ejecutar el poder y la autoridad.
Es la capacidad de todo ser humano de poder dirigir o guiar a su grupo
de iguales.
Es la actitud que asumen las personas que buscan algo distinto, algo
nuevo, novedoso o provechoso pero en compañía de demás individuos.
El líder es esa persona comprometida en asumir una posición de poder
debido a un compromiso y convicción dentro de un ambiente de
equipo. Lo que diferencia a un líder con los demás, es su carisma y
espíritu de lucha incesante con el fin de lograr un bien común o meta
en la vida
4. Es aquel en el que el líder no solicita la opinión de sus
subordinados y da instrucciones detalladas de
cómo, cuándo y dónde deben llevar a cabo una tarea
para luego examinar muy de cerca su ejecución. Es un
estilo adecuado cuando la escasez de tiempo impide
explicar con detalle los asuntos; si el líder ha generado
un clima de confianza, los subordinados asumirán que
el líder ha cambiado a este estilo de liderazgo porque
las circunstancias así lo requieren. Entre las falsas
creencias en torno al estilo directivo está la de que este
significa uso despectivo del lenguaje o incluye
amenazas e intimidación, lo cual no es cierto.
5. Es aquel en el que los líderes piden a los subordinados
su opinión, información y recomendaciones, pero son
ellos quienes toman la decisión final sobre lo que se
debe hacer. Este estilo es recomendable para líderes
que tienen tiempo para realizar tales consultas o que
tratan con subordinados experimentados. El deseo de
crear un espíritu de equipo alienta los planes, por lo
que sus componentes tienen una motivación
extraordinaria para ponerlo en marcha.
6. Conlleva ceder a los subordinados la autoridad
necesaria para resolver problemas y tomar decisiones
sin antes pedir permiso al líder. Los líderes cuyos
subordinados son maduros y tienen experiencia, o
aquellos otros que desean crear una experiencia de
aprendizaje para sus subordinados, no tienen más que
delegar su autoridad y dejar bien claro el propósito de
la misión. Sin embargo, el líder sigue siendo
responsable en último término.
7. Transforma a los subordinados retándolos a elevarse
por encima de sus necesidades e intereses
inmediatos, hace hincapié en el crecimiento individual
-tanto personal como profesional- y en el
potenciamiento de la organización. Este estilo permite
al líder beneficiarse de las aptitudes y conocimientos
de subordinados con experiencia que podrían tener
mejores ideas sobre cómo cumplir una misión.
También obtiene buenos resultados cuando las
organizaciones se enfrentan a una
crisis, inestabilidad, mediocridad o desencanto. No es
recomendable si los subordinados son inexpertos.
8. Utiliza técnicas como la de motivar a los subordinados a
trabajar ofreciendo recompensas o amenazando con
castigos, asignar las tareas por escrito, delinear todas las
condiciones para que una misión se dé por completada y
dirigir por excepción, es decir, dando a conocer solamente
lo que el subordinado ha hecho incorrectamente.
El líder que confía tan sólo en el estilo transaccional, sin
combinarlo con el transformacional, únicamente consigue
el compromiso a corto plazo de sus subordinados y hace
que la gente tema tomar riesgos e innovar, además de sentir
que sus esfuerzos podrían parecer egoístas. Por ello, lo más
eficaz es combinar las técnicas de ambos para ajustarse a la
situación.
9. Cuando los trabajadores no siguen al líder, no significa que ellos estén
actuando mal, sino que quizá es el líder quien no lo está haciendo bien.
El liderazgo se pierde por aislamiento, desilusión, arrogancia… pero sobre todo
porque los líderes se obsesionan con imponer su autoridad en lugar de ser
verdaderos líderes.
Antes de esperar nada de nadie, un líder necesita demostrar una visión y unas
cualidades que merezca la pena seguir.
El líder no debe decir a los empleados lo que tienen que hacer, sino que debe
ayudarles a hacerlo.
Si el líder está “en las nubes” y no ve la realidad de su alrededor, es imposible
que entienda y lidere adecuadamente a su equipo.
10. Los líderes deben actuar siguiendo principios honestos y éticos, si
quieren que los trabajadores también hagan suyos estos principios.
Los empleados tienen muchas más ganas de trabajar que lo que el líder
cree.
Un líder que se equivoca debe corregir y admitir sus errores. Los
trabajadores generalmente perdonan los errores, pero no toleran que se
les tome por tontos.
Un error es una oportunidad para mejorar y para mostrar que se ha
aprendido una lección.
Ser agresivo no es ser líder. Puede que esto fuese así hace siglos, pero no
ahora.
11. Lograr un trabajo bien hecho, sabiendo que has dado lo mejor de ti refuerza tu auto-estima y la
confianza de tu equipo. El hecho también de adquirir nuevas capacidades te da la oportunidad de
reencontrarte con tus mejores valores y sentimientos. El conocimiento adquirido te permite crecer y
desarrollarte dentro de la organización, como por ejemplo desarrollar la habilidad de saber gestionar
tu tiempo y planificar tus objetivos de trabajo para lograr las metas. Saber luchar con los problemas e
identificar quienes son las personas más capacitadas para ejercer una determinada función dentro de
tu equipo.
Sea cual sea la situación, una de tus responsabilidades como líder es motivar a tu equipo de trabajo
hacia el objetivo que tenéis en común. Esto puede ser un desafío de grandes proporciones. A menudo
el equipo está compuesto por diversos miembros, cada uno con diferentes fortalezas, debilidades y
estilos de trabajo.
Como líder puedes obtener grandes beneficios, al ser capaz de identificar los distintos tipos de
personalidades de los miembros de tu equipo. Mediante la identificación de la personalidad de cada
uno, puedes utilizar las fortalezas individuales de tus miembros para el beneficio del equipo y así
poder asignar las tareas que cada integrante del equipo desarrollara de acuerdo a sus cualidades
naturales.
Puedes aprender a comunicarte de una manera motivante, teniendo en cuenta las
necesidades, valores y preferencias de trabajo de cada integrante de tu equipo.
Obtendrás mejores resultados, si aprendes a utilizar las fortalezas y los diferentes estilos de trabajo de
los miembros destacando los puntos fuertes y compensando los puntos débiles, llevando al equipo a
un equilibrio productivo y armónico.
12. Un ejemplo de liderazgo lo vivo diariamente en mi trabajo, sitio donde
se manejan líneas de producción encabezadas por un supervisor o
“líder en este caso” noto que no todas las líneas de producción tienen el
mismo rendimiento pero si observo que en algunos casos hay lideres
que cuentas con todas la cualidades vistas en el tema y tienen muy
buenos resultados con su equipo de trabajo.
Un ejemplo mas notorio en mi vida son mis padres ellos son un
complemento perfecto de trabajo en equipo y liderazgo y en base a sus
experiencias y vivencias se que puedo ser un gran líder si tomo ejemplo
de ellos.
13. Concluyendo con el tema y reflexionando frente a este
determino que un buen líder no es aquel que
grita, impone, agrede, y genera buenos resultados a costa
de la indignación de sus subordinados en pocos términos
no es un capataz.
Pero si consideró que un gran líder es el que mueve masas
mantiene su equipo de trabajo unido, da buenos resultados
y obtiene el respeto de sus subordinados gracias a su
talento y su capacidad de poner autoridad con su
conocimiento.