2. +
Introducción
Aunque toda la teología cristiana habla
sobre Dios, existen doctrinas
específicas sobre la naturaleza y el
carácter divino.
En esta ocasión estudiaremos algunas
de esas doctrinas, recalcando el
impacto que tienen para nuestro
entendimiento de la fe.
4. +
El Dios que se revela
Comenzamos recalcando que el ser humano no
puede conocer a Dios por su propio esfuerzo.
La buena noticia es que Dios se ha revelado a
la humanidad, dando a conocer su carácter y su
poder.
Sobre todas las cosas, Dios revela su amor,
dado que el amor es la esencia de la naturaleza
divina (véase 1 Juan 4.8).
5. +
Cómo se revela Dios
Podemos hablar de dos grandes categorías de
revelación: la general y la especial.
La “revelación general” es aquella que toda persona
puede percibir, sin mayor esfuerzo. En particular, se
refiere a la forma como Dios se da a conocer a
todos los pueblos por medio de la naturaleza y de la
razón.
Esta revelación es la base de la “teología natural”,
que a su vez puede dar pie a una “religión natural”.
6. +
La revelación especial
La “revelación especial” incluye la forma
como Dios ha dado a conocer su carácter y
su poder por medio de la historia de Israel,
de su encarnación en Cristo Jesús y de la
historia de la Iglesia primitiva.
Esta revelación especial está contenida
principalmente en la Biblia, el documento
fundamental de nuestra fe.
7. +
El Dios liberador
Tanto el pueblo de Israel como la Iglesia conocieron
a Dios primeramente como Salvador y Liberador.
Israel ve la salvación primordialmente en el Éxodo,
la liberación del pueblo que estaba cautivo en
Egipto, el evento fundamental de la fe hebrea.
La iglesia ve la salvación primordialmente en la
pasión, muerte y resurrección de Jesús, quien libera
a la humanidad del pecado y de la muerte.
8. +
El Dios creador
Tanto la fe hebrea como la cristiana afirman que
ese Dios liberador es el creador de todo cuando
existe.
La doctrina de la creación marcó una ruptura
radical con el pensamiento religioso antiguo. Por
un lado, el paganismo veía al mundo y a la
naturaleza como divinidades. Por otro lado, el
pensamiento grecorromano veía lo material de
manera negativa, oponiéndolo a lo espiritual.
9. +
Un mundo bueno
La doctrina de la creación enseña que:
Dios creó al mundo. Por lo tanto, el mundo no
es un dios ni las fuerzas naturales son
divinidades.
Dios creó un mundo bueno, para el sostén y
disfrute de la humanidad. Lo material no es
maligno ni es el enemigo de lo espiritual.
El mundo tendrá un fin. Dado que sólo Dios es
eterno, algún día el mundo acabará.
10. +
El mismo Dios
Al afirmar que el Dios creador es el mismo Dios
liberador, la teología cristiana también afirma
que el Dios que se reveló al pueblo de Israel es
el mismo que se revela en la persona, las
enseñanzas y la obra de Jesucristo.
Queda claro que el Dios que encontramos en el
Antiguo Testamento no es una divinidad distinta
o inferior al Dios que se revela en el Nuevo
Testamento.
11. +
Los atributos bíblicos de Dios
La Biblia le otorga toda una serie de atributos a
Dios, entre los cuales se encuentran cualidades
tales como el poder, el amor, la misericordia, la
justicia y la bondad, entre otros.
Además, la Biblia narra los portentosos actos de
Dios, entre los cuales se encuentra su
disposición a salvar a la humanidad y su interés
en hacer pactos o alianzas con los seres
humanos.
12. +
Dios y Padre
En el Nuevo Testamento, Dios se revela
como el Padre de nuestro Señor Jesucristo.
Por lo tanto, revela al amoroso Dios personal
que desea relacionarse con el ser humano.
Por medio de la fe, la paternidad divina se
extiende a toda la humanidad. Todo ser
humano tiene la oportunidad de ser
“adoptado” como “hijo o hija” de Dios.
14. +
Introducción
El encuentro de la incipiente fe cristiana
con la filosofía griega marcó una nueva
etapa en la forma de comprender a Dios.
Aunque el pensamiento grecorromano era
politeísta, la filosofía griega ofrecía puntos
de contacto importantes para el diálogo
con la fe cristiana.
15. +
El logos
El primer punto de contacto era el concepto del
Logos.
Aunque la palabra “logos” quiere decir “palabra,
discurso o tratado”, en la filosofía griega se refiere a
la entidad espiritual cuya existencia precede a todo
lo que existe.
El logos era una mónada de espiritualidad, de pura
luz, de la cual se derivan todas las realidades
espirituales.
16. +
Del Logos al monoteísmo
Como demuestra Juan 1.1, la Iglesia no tardó
en identificar al Logos con el Dios de Jesucristo.
La doctrina del logos facilitó la penetración del
Evangelio en el mundo grecorromano, pues
establecía puentes entre la filosofía y la fe.
También facilitó el movimiento al monoteísmo,
basado en las enseñanzas de los filósofos
griegos.
17. +
Atributos filosóficos de Dios
Este diálogo con la filosofía también motivó
el desarrollo de una nueva forma de pensar
sobre los atributos de Dios.
Dado que los griegos entendían que Dios no
está sujeto a las limitaciones humanas, la
Iglesia le adjudicó cuatro nuevos atributos a
Dios: omnipotencia, omnipresencia,
omnisciencia, e impasividad.
18. +
La primera “herejía”
El contacto con la filosofía, particularmente con el
concepto del Logos, motivó el surgimiento de la
primera herejía que enfrentó la Iglesia: el
“marcionismo”.
Marción entendía que lo material se oponía a lo
espiritual, que era inherentemente bueno. Por eso
argumentó que el Dios revelado en Cristo no era el
mismo revelado en el Antiguo Testamento. Esto
también le llevó a hacer la primera lista de libros
sagrados, que sólo contenía selecciones del Evangelio
de Lucas y las Epistolas Paulinas.
19. +
El gnosticismo
Aunque la Iglesia superó el desafío que presentaban las
ideas de Marción, surgió un movimiento que reclamaba
tener un conocimiento (gr. “gnosis”) secreto sobre la
salvación.
En sus varias versiones, el gnosticismo rechazó el
mundo material, afirmando la existencia de toda una
serie de esferas espirituales dominadas por seres de
“luz”. En este esquema, Jesús se veía como una
emanación espiritual de alto nivel, superior a las demás.
Empero, era sólo uno entre varios seres espirituales de
gran poder.
20. +
Los problemas filosóficos
Del mismo modo que la doctrina del logos
presentó problemas, los atributos filosóficos de
Dios levantaron serios desafíos a la fe.
Estos atributos suponían un Dios estático, que
no podía cambiar, que ya conocía todo, que
tenía todo poder, etc.
Sin embargo, la Biblia presenta a un Dios
dinámico en su relación con la humanidad.
21. +
La teodisea
El problema teológico más grave es la
“teodisea”, es decir, el origen del mal: Si Dios en
verdad sabe todo lo que ha de pasar y tiene
todo poder, ¿por qué no impide que ocurran
cosas malas, particularmente a la gente buena?
¿Por qué no evita los sufrimientos de las
personas justas?
Esta es la pregunta teológica que no tiene una
respuesta satisfactoria, como veremos más
adelante.
22. +
Las pruebas de la existencia de
Dios
No podemos obviar que la filosofía podía requerir
“pruebas” de la existencia de Dios.
Aunque varios teólogos elaboraron distintos
métodos, en general, las “pruebas” siguen dos
caminos:
El mundo creado prueba la existencia de Dios. Este es el
método que emplea Tomás de Aquino en sus “cinco vías”.
La razón misma nos lleva a concluir que existe Dios. Ejemplo
de esta modalidad es el “argumento ontológico” de San
Anselmo.
23. +
Las “cinco vías” de Tomás de
Aquino
Estas son:
A partir del movimiento: Dios es el “primer motor
inmovil”.
El orden de las causas: Dios es la primera causa de
todo lo que existe.
Por la contingencia de los seres: Todos los otros seres
cambian, pero Dios no.
A partir de los grados de la perfección: Dios es el grado
del sumo bien.
Por el fin de las cosas: Dios es el propósito o “fin
último” hacia el cual se mueve el orden del universo.
24. +
El argumento ontológico
San Anselmo de Canterbury afirmaba que el
hecho de que uno pudiera pensar en “el ser
más perfecto que pueda pensarse” (en sus
propias palabras “un ser tal, que sea
imposible concebir otro mayor que él”)
requiere sus existencia.
La idea es que la idea de la perfección
requiere la existencia de dicha perfección.
25. +
¿Probar a Dios?
Los métodos de Tomás de Aquino y de San Anselmo
son refutables, en términos filosóficos. Aunque nos
llevan a la conclusión de que existe un Dios, no prueba
que es el Dios revelado en Jesucristo.
Por lo tanto, debe quedar claro que es imposible
probar la existencia de Dios usando métodos
filosóficos. La persona que tiene un encuentro con
Dios no necesita prueba alguna de su existencia. Por
eso, la Biblia no trata de probar la existencia de Dios,
sino que la da por hecho.
27. +
Un solo Dios
Tanto la fe de Israel como la fe cristiana afirman que
existe un sólo Dios.
Ahora bien, el cristianismo entiende que ese único
Dios se encarnó en la persona histórica de Jesús de
Nazaret, a quien la Iglesia confiesa como Señor y
Cristo.
Del mismo modo, el cristianismo entiende que Dios
ha enviado el Espíritu Santo para ejercer una labor
pastoral en medio de la comunidad de fe.
28. +
El problema de la “pericoresis”
El problema es, pues, cómo definir esa
relación entre el Dios Padre, el Dios Hijo y el
Dios Espíritu Santo. ¿Son tres dioses
distintos? ¿Son tres modos como se
manifiesta un solo Dios?
La “pericoresis” o la “circuminsesión” es la
doctrina que explora la relación entre las tres
divinas personas.
29. +
Unidad en comunidad
La respuesta principal de la Iglesia primitiva fue afirmar
que siguiente paradoja: Creemos en un solo Dios, donde
habitan en comunidad el Padre, el Hijo y el Espíritu
Santo.
Este concepto, conocido como la doctrina de la Trinidad,
resolvió uno de los más grandes problemas filosóficos
del mundo antiguo: la unidad y la multiplicidad.
La Trinidad afirma que Dios, el origen de todo, es la
perfecta unión de la unidad y de la multiplicidad; es la
unidad en comunidad.
31. +
Inaceptable
Como indicamos anteriormente, la
teología marca las líneas que separan
las ideas aceptables de las que la
Iglesia considera equivocadas.
A continuación veremos algunas de las
ideas sobre Dios que la Iglesia ha
señalado como erróneas a lo largo de
la historia.
32. +
El politeismo
La Iglesia rechaza la idea de que existen varios
dioses. Del mismo modo, rechaza la idea de que el
Dios revelado en Jesucristo es un dios más entre
muchos otros.
También rechaza la idea de que las divinas
personas sean dioses distintos. Es decir, rechaza el
“biteismo” (la idea de que el Padre y el Hijo son
dioses distintos) y el “triteismo” (la idea de que el
Padre, el Hijo y el Espíritu Santo son dioses
distintos).
33. +
El panteísmo
El panteísmo es la idea de que el universo en su
totalidad es dios. Es decir, es la idea de que Dios
está en todo y de que todo es Dios; de que todo
cuando existe es divino.
Piensa que el universo “agota” la idea de Dios, lo
que implica que no hay una dimensión espiritual
dado que Dios no se manifiesta fuera del mundo
natural.
Implica, además, que no existe un dios personal.
34. +
El unitarismo
Afirma sólo la divinidad del Dios Padre,
negando la Trinidad. Por lo tanto, niega
la divinidad de Jesús y la acción del
Espíritu Santo.
Es un movimiento de tendencias
racionalistas, que puede tener varios
puntos de contacto con el panteísmo.
35. +
El dualismo
La noción de que existen dos fuentes del ser, una buena
y otra mala. Esta visión afirma que el Dios de Jesucristo
es el origen del bien y plantea la existencia de una fuerza
maligna que explica el origen de la iniquidad.
El gnosticismo era dualista, afirmando que lo espiritual
era bueno y que lo material era inherentemente malo.
El maniqueísmo—enseñado por Mani y sus seguidores a
mediados del tercer siglo, afirmaba la eternidad del bien
y el mal.
36. +
El modalismo
Esta doctrina afirma que el Padre, el Hijo y el
Espíritu Santo no son personas, como tales,
sino modos como Dios se manifiesta o como
el ser humano interpreta las manifestaciones
divinas. Aunque afirma la existencia de un
solo Dios, menosprecia la obra de Cristo y
del Espíritu Santo.
También se conoce como “Sabelianismo” y
como “Monarquianismo”.
37. +
Subordinacionismo
Describe cualquier doctrina que afirme o declare
que el Dios Hijo está subordinado o es secundario al
Dios Padre.
También describe las doctrinas que relegan al
segundo plano tanto al Dios Hijo como al Espíritu
Santo.
El “arrianismo” es la forma de subordinacionismo
que presentó el desafío más grande para la Iglesia
Antigua.
39. +
Al único Dios
La Iglesia cristiana afirma, pues, la
existencia de un sólo Dios, creador del
mundo, quien desea relacionarse con la
humanidad para salvarla del pecado y de
sus consecuencias.
Ese único Dios se ha revelado a la
humanidad como Dios Padre, como Dios
Hijo y como Dios Espíritu Santo.