5. LA PREGUNTA
Años atrás, una mujer que estaba pasando por una
crisis matrimonial describió una relación de
pareja enfermiza, donde continuamente se sentía
intimidada y amenazada por su esposo. Su temor
era tanto que temblaba mientras me describía la
dura experiencia de estar casada con un hombre
tan violento. Entonces le pregunté: «Si usted no
estuviera casada con él, ¿sería su amiga?».
6. ¿CÓMO RESPONDER?
«Si no fueras su pareja, ¿buscarías su
amistad?», es una pregunta que he hecho
docenas de veces.
Las parejas que contestan de manera
positiva tienen más posibilidades de triunfar
que quienes responden de manera negativa.
7. LA CLAVE
El Dr. John Gottman afirma conocer la clave para el
éxito de un matrimonio.
Afirma que los matrimonios felices comparten la
misma característica: UNA AMISTAD PROFUNDA.
Esa amistad inspira respeto mutuo y permite que el
esposo disfrute la compañía de la esposa, y
viceversa.
8. CONOCER & ADMIRAR
La amistad permite que se conozcan muy bien. En
una pareja feliz, cada persona conoce lo que le gusta
y lo que no le gusta a la otra persona. Conoce sus
virtudes y sus defectos; conoce sus esperanzas y
sueños.
En las parejas más sólidas, cada persona admira a la
otra, expresando dicha admiración tanto con grandes
gestos como con detalles pequeños.
9. AMIGOS O ENEMIGOS
¿Por qué puede la amistad avivar la flama
del amor? Porque protege a la pareja de
caer en la trampa que destruye la mayor
parte de los matrimonios: ver a la pareja
como si fuera un enemigo. Si se ven como
«adversarios», su unión está condenada al
fracaso.
10. UNA VISIÓN POSITIVA
Lo que es más, cuando una persona tiene una
visión positiva de su pareja, ve el futuro con
optimismo y esperanza. Por eso, imagina un
futuro agradable junto a su pareja y a su familia.
Esa visión positiva es el elemento que les permite
manejar efectivamente las tensiones causadas por
los conflictos que aquejan a todas las parejas.
11. ¿CÓMO SE CONOCIERON?
¿Cómo atajar este deterioro? Una de las
estrategias más efectivas es recordar el
comienzo: ¿Cómo se conocieron? ¿Qué les
atrajo de la otra persona? ¿Qué
cualidades encontraron atractivas en la
otra persona?
12. EXAMINE SU RELACIÓN
Conteste estas preguntas de manera individual. Después,
dialogue con su pareja sobre estos temas y compartan sus
respuestas.
No debe sorprenderle que su pareja responda algunas de
estas preguntas de manera inesperada y hasta chocante.
No juzgue sus respuestas ni las desmienta. Utilice este
ejercicio para conocer mejor a su pareja y para determinar
si sus respectivas visiones de su relación son compatibles.
14. MARCOS 10.5-9
Hablando sobre el divorcio, Jesús dijo: «Por la
dureza de vuestro corazón os escribió este
mandamiento; pero al principio de la creación,
varón y hembra los hizo Dios. Por esto dejará el
hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su
mujer, y los dos serán una sola carne; así que no
son ya más dos, sino uno. Por tanto, lo que Dios
juntó, no lo separe el hombre».
15. UN PACTO CON DIOS
Jesús cita Génesis 2.24, donde Dios establece el
pacto matrimonial. Nótese que este pacto tiene
tres partes: dejar, unirse y ser.
El pacto matrimonial requiere que la pareja se
separe de su familia de origen, se unen el uno con
el otro y se conviertan en una nueva familia.
16. UN TRIÁNGULO
Estos tres puntos forman un triángulo. Si falta alguno de los
puntos, no se puede formar el triángulo.
Si una de las personas sigue aferrada a su familia de origen,
NO hay un matrimonio sólido.
Si la pareja no tiene unidad de propósito y de visión, NO está
casada emocionalmente.
Y si la pareja no desarrolla una vida íntima satisfactoria,
NO hay matrimonio.
17. CUANDO FALTA UN PUNTO
Cuando faltan algunos de estos puntos--dejar, unir y ser--
la pareja nunca llega a formar un verdadero matrimonio.
Muchas parejas que están casadas legalmente, pero no
están casadas emocionalmente. Dos personas pueden
vivir bajo el mismo techo, pero si siguen atadas a sus
familias de origen, si no ven la vida de manera similar y
si no desarrollan una intimidad mutuamente
satisfactoria, no están casadas emocionalmente.
18. EN LUGAR DE...
En lugar de ser esposos, son compañeros de cuarto.
En lugar de ser pareja, son condueños de varias
propiedades.
En lugar de ser «una sola carne», son individuos
que se sienten solos, aislados de su pareja.
19. ¿QUIÉN MANEJA EL AUTO?
¿Cómo es su relación con su familia de origen? ¿Se ha
separado de ellos para establecer su propia familia? O, por
el contrario, ¿depende usted de su familia de origen en
alguna manera?
Compare usted su relación con un auto en marcha. ¿Quién
maneja el auto? ¿Quién ocupa el lugar del pasajero? ¿Hacia
dónde se dirigen? ¿Viajan hacia un destino común? ¿Pueden
ambos opinar sobre el destino final que desean alcanzar?
21. ¿QUÉ PASA?
La mayor parte de las parejas en crisis no comprenden
por qué su matrimonio está zozobrando.
La mayor parte de ellas no pueden identificar sus
problemas con claridad ni articular por qué se han
distanciado física y emocionalmente.
Y aclaro que esto no depende del nivel intelectual ni de
la escolaridad de la pareja.
22. TRES ELEMENTOS NEGATIVOS
Ahora bien, hay tres elementos que impiden que el
matrimonio se configure.
Es decir, impiden que la pareja abandone sus
compromisos anteriores, se una a su actual pareja y
llegue a ser una con ella.
Me refiero a la violencia, la infidelidad y la adicción.
23. LA VIOLENCIA
La violencia puede manifestarse en distintas modalidades,
entre las cuales destacamos la física y la emocional. La
violencia física es relativamente fácil de identificar, pues
incluye los golpes, los empujones, la restricción de la
libertad, la intimidación y los gritos. También incluye
otros actos de violencia, tales como el tirar puertas, romper
cosas yo echar a la basura efectos personales de otras la
pareja. Por su parte, la violencia emocional incluye los
insultos, las humillaciones y las amenazas hacia la pareja.
24. INFIDELIDAD
La infidelidad es, primero, la violación del compromiso y
las promesas establecidas entre una pareja. Segundo,
incluye la planificación de un acto premeditado, que se
oculta de la pareja. Tercero, también incluye contacto físico,
que puede ir desde los besos y las acaricias hasta las
relaciones sexuales.
Descubrir un acto de infidelidad puede ser devastador para
una persona, que al saberse engañada no solo pierde la fe en
su pareja, sino que también pierde la confianza en sí misma.
25. LA ADICCIÓN
La adicción puede destruir cualquier matrimonio. Tanto en
la adicción como en la infidelidad hay una relación secreta,
oculta de la pareja.
La diferencia es que el engaño no incluye a otra persona,
sino a un patrón de conducta, a una substancia o a un
objeto. Una persona puede desarrollar una adicción al
tabaco, al alcohol, a medicamentos legales, a sustancias
controladas, a drogas ilegales o a juegos de azar, entre
otros.
26. EL UNO VS. EL OTRO
Estas tres violaciones al pacto matrimonial cambian la
relación. Sustituyen el amor y el respeto por el engaño y la
humillación. En realidad, todas son formas de violencia.
Lo que es más, la violencia, la infidelidad y la adicción
convierten a una persona en víctima y a la otra en
verdugo. También convierten el hogar en un campo de
batalla, donde la persona engañada se siente en peligro
constante.
27. ¿SON PECADOS?
La Biblia, como palabra de Dios, condena la violencia,
el adulterio, el engaño, la mentira y el abuso. Considera
todos estos elementos como «pecados» que no sólo
ofenden a la pareja, sino que también ofenden a Dios.
¿Cree usted que la violencia, la infidelidad y la adicción
son conductas pecaminosas? ¿Por qué? Explique su
respuesta.
29. 1. LA CRÍTICA
Existe una gran diferencia entre la queja y
la crítica.
La crítica es negativa y hasta dolorosa,
pero por sí sola no es peligrosa. El peligro
surge cuando le abre la puerta a los otros
tres «jinetes».
30. 2. DESPRECIO
Se puede manifestar desprecio por su pareja de diversas
maneras. El sarcasmo y el escepticismo son formas
sutiles de manifestar desprecio. Otras formas más
claras con los insultos, las amenazas, las palabras
soeces, la burla y el humor hostil. En términos físicos, el
desprecio puede manifestarse por medio de gestos de
disgusto. También se manifiesta por medio del
alejamiento físico, la ausencia de gestos de cariño y la
negación de favores sexuales.
31. 3. LA ACTITUD DEFENSIVA
El desprecio constante lleva a los cónyuges a tomar
actitudes defensivas. Y esa actitud defensiva se puede
manifestar de dos maneras distintas. Si en la pareja hay
una persona violenta que siempre ataca a la otra, llegará el
momento en que la víctima tendrá que defenderse de dichos
ataques. Empero, si ambas personas actúan de manera
violenta, entonces ambas tomarán actitudes defensivas en
algún momento. De todos modos, la actitud defensiva
agrava el conflicto, dado que la pareja pelea
constantemente.
32. 4. LA ACTITUD EVASIVA
El cuarto jinete augura el fin de la relación matrimonial.
Quien adopta una actitud evasiva ya no le presta atención
a los reclamos de su pareja. Por eso, presta oídos sordos a
lo que le puedan decir. Su pareja puede estar gritando por
largo rato, pero quien adopta la actitud evasiva ni siquiera
escucha sus argumentos. La ruptura de la comunicación
también puede llevar a la pareja a vivir de manera
independiente, pasando el día sin saber dónde está el
cónyuge, sin hablar por teléfono o a no avisar que uno va a
llegar tarde.
34. EFECTOS FÍSICOS
Las peleas y discusiones violentas no sólo afectan
el ánimo de la persona, sino que también tienen
reacciones fisiológicas para el individuo.
En términos generales, los hombres reaccionamos
mal a la tensión que produce una pelea
matrimonial.
35. HABLAR O NO HABLAR
Los hombres reaccionamos a la tensión de manera distinta
a las mujeres.
En términos generales, las mujeres prefieren hablar de de
sus problemas. El diálogo les da paz, dado que les ayuda a
comprender mejor la situación.
Sin embargo, los hombres preferimos no hablar de los
problemas, pues la confrontación aumenta nuestra tensión
nerviosa.
36. ABRUMADO
El aumento en la tensión nerviosa puede provocar que un
hombre se sienta abrumado por la situación. El corazón
sobrepasa los 100 latidos por segundo, a pesar de que el ritmo
normal es de 76 para los hombres y 82 para las mujeres. El
cuerpo secreta adrenalina, una reacción normal ante
situaciones de peligro que prepara al ser humano para luchar o
para huir. Por lo tanto, la presión arterial también sube y la
persona siente que se como si se estuviera ahogando. En gran
parte, esto explica por qué un hombre puede reaccionar
violentamente a cualquier intento de diálogo matrimonial.
38. TOME LA INICIATIVA
Para superar el estancamiento, es necesario
dialogar con amor y respeto.
Lo que es más, es necesario tomar la iniciativa,
pidiéndole a nuestra pareja que comparta con
nosotros los sueños que desean alcanzar.