Los precios de los insumos agrícolas en Colombia son significativamente más altos que los precios internacionales y los precios en países competidores. Colombia gasta más en fertilizantes por hectárea que cualquier otro país de América Latina, y los precios mayoristas de fertilizantes son entre 25-35% más altos que los precios internacionales. Además, Colombia depende de proveedores externos para los fertilizantes y está sujeta a las fluctuaciones del mercado mundial. Los altos costos de los insumos agrícolas amenazan la viabilidad de
VOLUMEN 1 COLECCION PRODUCCION BOVINA . SERIE SANIDAD ANIMAL
Costos de insumos agrícolas en Colombia
1. Primer campeonato para Colombia : precios de los insumos para el agro 1
Primer campeonato para Colombia:
precios de los insumos para el agro
Emilio Garcia Gutiérrez
Lectura complementaria, ESAP, Gerencia social II
2. Primer campeonato para Colombia : precios de los insumos para el agro 2
Vale la pena recordar que la competitividad es la habilidad de un producto y
toda su cadena de suministro (desde los proveedores hasta que llega al cliente
final) de ser preferido por sus consumidores o clientes finales, por la
combinación entre la calidad, el precio, la disponibilidad, la confiabilidad, entre
otros, y en el caso de los productos del agro, características que hacen parte de
la calidad, como la frescura y la inocuidad (no presencia de venenos).
Para el siguiente análisis hay que suponer que sólo los costos son los que
marcan la capacidad de competencia entre los productos extranjeros que vienen
a competir aquí (desde pollo hasta arroz) como los productos locales que van a
competir allá, lo cual implica que hay que asumir que son de calidad similar.
Esto no es cierto, pero es un supuesto para poder comprender de qué se trata
cuando los agricultores se quejan de las amenazas de los TLCs.
Si los costos de los insumos para el productor extranjero son menores, por
diversos motivos como que la producción en masa es más cercana, o en su propio
país, o si hay subsidios que en algunos países se usan para ayudar a sus
agricultores nacionales, ahí empieza la cuenta en rojo ya que aquí no se tienen
las mismas condiciones; en Colombia, según lo publicado en los últimos días, los
insumos son mucho más costosos que en otros países por cuenta al parecer de
los mayores precios que los productores pueden establecer por condiciones de
mercado, muy libre tal vez, y porque en la cadena de distribución hay muchos
eslabones o muchas utilidades en el camino.
El costo de la tierra comparativo es el siguiente elemento a tener en cuenta;
seguramente la tierra en Colombia pudiera tener menor incidencia que en
países desarrollados, pero podría haber sorpresas dependiendo de las zonas
productoras a comparar en uno y otro país, y como asunto singular, del efecto de
la violencia, incluyendo los resultantes de la tenencia de la tierra y su uso no
eficiente que caracteriza el latifundio, y las nuevas formas de posesión por las
armas por parte de todos los múltiples grupos por fuera de la ley, desde la
guerrilla cincuentenaria hasta las nuevas formas de paramilitares y bandas
sofisticadas que azotan los campos; muy posiblemente se tenga una nueva cifra
en rojo para añadir al balance.
El peso de los agroquímicos en la canasta de producción
Desde 1950, con la Revolución Verde, Colombia se tornó en gran demandante de
insumos químicos a partir de los fertilizantes, teniendo en cuenta que el 80% de
nuestros suelos son ácidos. En 1984, 30 años después, el consumo de
fertilizantes pasó de 20.000 toneladas al año a 754.000, 37 veces más, y de ahí a
2010 se ha duplicado hasta llegar a un millón y medio. Para 1974 Colombia ya
3. Primer campeonato para Colombia : precios de los insumos para el agro 3
era el primer consumidor de agroquímicos de América Latina (Aurelio Suarez,
2013) .
Con los años no ha cambiado. Un informe del Departamento de Agricultura de
Estados Unidos, de 2012, afirma que Colombia aplica 521 kilos por hectárea,
mientras que en América Latina el promedio de aplicaciones de fertilizantes es
de 148; en Asia, 85; en el norte de África, 157, y en el África subsahariana, 10.
El Banco Mundial ubica a Colombia, luego de China y Malasia y de algunos
países con superficies desérticas o insulares, como uno de los primeros en la
aplicación de fertilizantes, con 499 kilos por hectárea de tierra cultivable en
promedio entre 2008 y 2012.
El elevado costo de los agroquímicos
Este récord va con otro: el de los altos precios. Los precios mayoristas de
insumos como urea, fosfato diamónico (DAP) y el cloruro de potasio (KCl)
oscilan, aproximadamente, entre 25% y 35% por encima del precio
internacional, y los minoristas, en el mejor de los casos, se ubican en un 15%
más del mayorista, cerca de 45% sobre el precio internacional.
Hay incluso sitios donde el recargo es del 50% o más con respecto al precio al por
mayor, acercándose a 80% sobre el precio internacional, agrega Aurelio Suarez
(2013). Estos datos revelan que tanto el eslabón importador-comercializador
como el comercializador-consumidor escapan a una estricta vigilancia.
En 2010, cuatro empresas, varias de ellas encadenadas en torno a Monómeros
Colombo-Venezolanos, produjeron y vendieron al por mayor más del 80% de
cerca de 1’600.000 toneladas de fertilizantes, y tres fueron responsables del 90%
de un total de 822.000 toneladas importadas, principalmente fuentes de
nitrógeno, potasio y fósforo para elaborar mezclas físicas o complejos químicos
con otros elementos.
Somos dependientes de proveedores internacionales como Rusia, Venezuela,
Holanda, Noruega, Estados Unidos, Canadá y Alemania.
Los fertilizantes en el mundo se han encarecido. Su comportamiento como
commodities, la concentración geográfica de sus orígenes como oligopolios, su
ligazón con el precio de los alimentos y el reflejo del aumento de la cotización del
petróleo y el gas han llevado el índice mundial de precios de 100 en 2005 a
217,53 en julio de 2013, y todo indica que no volverá a valores de antes de 2008.
4. Primer campeonato para Colombia : precios de los insumos para el agro 4
Un cuento chino a lo Ministro: la competitividad
¿Es posible tener competitividad así? En cultivos transitorios, como arroz,
algodón, sorgo, papa y maíz blanco, los fertilizantes participan con un porcentaje
que abarca entre el 20% y el 30% de los costos de producción, acorde con el tipo
de tecnología, y en los permanentes, como café, cacao, palma y caña panelera,
van desde el 15% hasta el 30% (Documento Conpes 3577).
Comparado con los principales competidores, como la papa en Perú, entre un 4%
y 7% más; entre el 5% y 10% por encima del café en Brasil, y el 10% o un
porcentaje mayor respecto al arroz de Estados Unidos.
Cuando se mira la proporción, de 2006 a junio de 2013, entre el Índice de
Precios al Productor y el Índice del Consumidor, puede verse un traslado de
valor del primero al segundo o a eslabones de la cadena de distribución. Es
decir, los agricultores, cuando venden sus productos, no recuperan totalmente
los gastos de su canasta de insumos, incluidos combustibles y mano de obra.
Colombia, como importador neto, está en el peor de los mundos. Además de los
impactos mencionados del mercado global y de la estructura oligopólica, hay, por
exceso en la aplicación, uso ineficiente e insostenible de los fertilizantes, a tal
extremo que “el 70% de las aplicaciones de nitrógeno y el 75% del fósforo se
pierdan al fijarse en el suelo” (Conpes 3577).
5. Primer campeonato para Colombia : precios de los insumos para el agro 5
Si se agregan los elevados costos de distribución interna, se devela, al final, el
fracaso de la política de precios de “libertad vigilada”, fijada por el Gobierno
mediante la resolución 387 de diciembre de 2011.
En la encrucijada en que está, la agricultura colombiana corre el riesgo de ser
inviable y el costo de los insumos es factor agravante. De no corregirse a fondo
la política pública correspondiente, con intervención efectiva en el mercado e
incentivos adecuados, seremos “campeones mundiales” en precios y costos, tal
como pasa con los medicamentos.