El documento discute la "lógica de la sopa" en los restaurantes, donde los precios de los elementos de una comida como la sopa y la bandeja varían dependiendo de si se piden por separado o juntos. Una niña explica que aunque una sopa y una bandeja deben costar cada una la mitad de un almuerzo completo, en realidad sus precios cambian arbitrariamente dependiendo de la combinación escogida, mostrando que en los restaurantes se usa una "matemática" diferente a la enseñada en la escuela.
1. La Lógica de la sopa
El oficio de ser maestro (cuentos)
Enrique Araújoviedo, Junio 2012
“Una cosa es una cosa y otra cosa, es otra cosa”, me dijeron mis maestros una y otra vez y la
repitieron hasta el cansancio. Jamás estuve de acuerdo y así lo manifesté una y otra vez hasta
el cansancio: “una mitad es una mitad, aquí y en caparnabú”, les dije. Que una mitad se
diferencie de la otra mitad, es obvio. Pero sigue siendo mitad y eso es lo que importa. Y no les
importó. Como tampoco le importó a doña Bertha, la del restaurante de la esquina ni a
ninguna Bertha de cualquier restaurante de la ciudad y a nadie que atienda un restaurante.
Realmente no les importa porque ellos usan sus propias matemáticas: un huevo vale
doscientos ($200) pesos en cualquier charcutería; dos huevos cuestan cuatrocientos ($400)
pero en el restaurante fritos cuestan mil quinientos. Ni porque los fritaran en aceite de oliva…
Ni qué decir si son revueltos: revueltos cuestan dos mil, solos. Si son revueltos con cebolla y
tomate (huevos pericos), dos mil quinientos. Y si son rancheros, pueden costar hasta cuatro
mil pesos. Los restaurantes son peores que los bancos.
Molina, jamás escucha. Si dos huevos fritos valen dos mil pesos, cada uno vale mil; pero no
fritos o sea cocidos valen cada uno cuatrocientos. El doble del costo sin freir ni cocinar, o sea
crudo. Eso es más justo, aunque de todas maneras no.
- ¿Y escaldado? ¿Cuánto cuesta escaldado? Rió Molina.
¿Escaldado? ¿Qué es eso?
- En mi pueblo hacen huevos abotonados! Grita por allá atrás Sergio. Sergio era un experto en
huevos. Su mamá cada cumpleaños le daba un huevo, de cumpleaños! A quién carajos se le
ocurre pegarle un botón a un huevo? ¿Y cuánto cuesta un huevo abotonado? Preguntó la
vocecita chillona de Marcela. Tenía que ser Marcela! Siempre ha preguntado por hacerse
notar. Repite las ultimas palabras de la profesora: “o sea que Ud. dice que ….” Y suelta la
perorata igualita a como la dijo la profe. Es una cuatrolámparas que… “¿Pero qué pasó con el
huevo escaldado que estaba abotonado….? Pregunta en voz baja Carlitos Valencia. Ni qué
abotonado ni qué escaldado ni qué ocho cuartos!!! Grito bien fuerte por encima de todos para
hacerme escuchar. El problema que estamos discutiendo es lo que valen los huevos…! Un
huevo en la carnicería de ña`Lola vale doscientos, ese mismo huevo en la tienda de don Luis,
cocinado, vale cuatrocientos y ese mismito huevo frito vale mil, revuelto vale milquinientos,
periquiado vale dosmil y rancheriado vale cuatro mil!!!!
Aaaah! Eso es fácil. Es que sufre del síndrome de la sopa. O mejor le aplican la lógica de la
sopa, para que me entiendan.
¿Y esa vocecita de dónde vino? Natica, mi amor; tan divina la pendejita ésta. Calladita se vé
tan bonita….
- No, nó. Déjenla hablar!!! Ella tiene derecho a expresarse como todos nosotros.
2. ¡Ay, Andrecito! Qué vamos a hacer con esa traga. Si la Natica ésta se resbala, ahí está el héroe
éste recogiéndola del piso; si tiene que subir el andén y hay un charco le pone la chaqueta en
lugar de subir por otro lado. El adoptado y la rara, tal para cual!
- Haber señorita, cuál es ese cuento del síndrome de la sopa ese que cuenta. Me ha causado
curiosidad. Dice Molina y nos manda a callar.
Pues vean ustedes –comienza la rara ésta- una sopa es la mitad de un almuerzo. Muchas
personas si no toman la sopa no quedan almorzados porque dicen que les faltó la mitad.
Ahora bien, ¿cuánto cuesta un corrientazo en el barrio? Cuatro mil pesos. Pero si no quiere
bandeja y pide una sopa, la sopa le vale mil quinientos. Menos de la mitad. Pero pida usted,
una bandeja sin la sopa, le vale tres mil quinientos. Entonces si un almuerzo vale cuatro mil,
¿por qué un almuerzo sin sopa vale tres mil quinientos y un almuerzo sin bandeja, vale mil
quinientos? ¿Cuánto realmente cuesta la sopa? Esa es la lógica de la sopa. En todos los
restaurantes si la pide sola vale más que si la pide con la bandeja y si pide la bandeja sin la
sopa cuesta menos.
No hé entendido niña genio –le digo con rabia.
Voy a ponerles un ejemplo: cuando mi papá, mi hermano y yo vamos a almorzar los fines de
semana al restaurante pedimos siempre dos almuerzos y nos cobran ocho mil pesos. El sábado
pasado, mi papá no pudo ir a acompañarnos. Como dos almuerzos completos son mucho para
nosotros dos, mi hermano decidió pedir un almuerzo sin bandeja y yo opté por pedir un
almuerzo sin sopa. La mesera nos trajo la cuenta y le reclamé: cómo así que cinco mil pesos si
el almuerzo vale cuatro mil? La mesera me contestó con mirada de sorpresa: una sopa del
almuerzo de su hermano, mil quinientos; una bandeja de su almuerzo, tres mil quinientos.
Sume. No, pero si entre los dos hacemos un almuerzo. A mí, me pidieron dos almuerzos: uno
sin sopa y el otro sin bandeja. Por eso, si mi almuerzo sin sopa vale tres mil quinientos, eso
significa que la bandeja vale tres mil quinientos y la sopa quinientos. Entonces por qué el
almuerzo de mi hermano que es sin bandeja cuesta mil quinientos; debería costar quinientos,
lo de la sopa. No, no señorita, está mal. Entonces, ¿cuánto cuesta la sopa? Eso depende. La
sopa sola vale mil quinientos. La sopa acompañada de la bandeja, quinientos. ¿cómo así? Dijo
Natalí que le había dicho a la mesera. Y esta respondió: si en algunas ocasiones se suma y en
otras se resta. Cuando va acompañada se resta y cuando va sola se suma. Es un asunto de
sumas y restas. ¿En su colegio no le enseñan a sumar? Sí, pero no de esa manera. Pues mijita
vaya a que le enseñen bien o cámbiese de Escuela, fue el consejo de la mesera.
Todos quedamos atónitos y callados. ¿qué tiene que ver el huevo con la sopa?
Pues que en los restaurantes se usa otra matemática que no enseñan en las escuelas.
Almuerzo = Bandeja + sopa = $4000, Bandeja – sopa = almuerzo sin sopa = $3500, por lo tanto
sopa = $500. Pero , Bandeja – sopa = almuerzo sin sopa = $3500 (es diferente a) $1500= sopa
– bandeja = almuerzo sin bandeja. Y puesto que almuerzo sin sopa (es diferente a) almuerzo
sin bandeja, se sigue sopa = $1500 (es diferente a) $500 = sopa. Por lo tanto, en los
restaurantes se cumple que una sopa no es una sopa. Eso mismo le pasa a los huevos. Ya no
son huevos, son huevos fritos, huevos cocinados, huevos pericos, huevos rancheros; pero
jamás serán simplemente huevos; allí pasan a ser crudos. Y se les llama así: huevos crudos, lo
3. que aumenta su valor. Es un problema de economía de alto turmequé ya que hace referencia
a la composición orgánica del capital. Hay un fenómeno de capital variable y capital constante:
Molina no paraba de echar babas, ¿cómo una pendejita de cuarto de primaria podía entender
esas cosas que él ni se explicaba? Fácil: los tiempos cambian ya no son ratones de biblioteca
sino hackeros anonymus,… anarquitectos!
Quién lo diría, que viniera a ser la tontica de la Natica esa la que me viniera a dar la razón: una
cosa no es la misma cosa si es misma cosa. Y también quedó claro que en esas matemáticas
una mitad no es una mitad ya que es otra mitad según se le mire y que una sopa con bandeja
no es lo mismo que una bandeja con sopa y por lo tanto un almuerzo no es lo mismo que un
almuerzo si se tiene en cuenta que el primero es almuerzo compuesto de sopa más bandeja y
el segundo una bandeja más sopa; puesto que una sopa no es una sopa ya que no cuestan lo
mismo en cada caso así las llamemos sopas a ambas sopas.
Lo que queda claro, es que en un restaurante lo mismo debe interpretarse como distinto a lo
mismo si se le aplica la lógica de la sopa.