Quejarse de estar aburrido de vez en cuando es parte de ser un niño. Pero para los niñ@s con TDAH, el aburrimiento puede ser un problema frecuente. Y puede manifestarse en formas que tengan consecuencias negativas.
2. "Papá, mamá: Me aburro ¿Qué hago?". Seguro
que esta frase todos la han escuchado más de
una y dos veces en boca de sus hijos. Hay
muchos padres que se sienten culpables
cuando los niños se quejan de aburrimiento,
pero lo que no saben es que no deben sentirse
mal porque el aburrimiento puede ser una
buena estrategia para que los niños potencien
su imaginación, su creatividad y también, su
flexibilidad y control del tiempo. La realidad es
que el aburrimiento es más constructivo de lo
que te imaginas. El aburrimiento es más una
oportunidad que un déficit.
3. Quejarse de estar aburrido de vez en cuando es parte de ser un niño.
Pero para los niñ@s con TDAH, el aburrimiento puede ser un problema
frecuente. Y puede manifestarse en formas que tengan consecuencias
negativas.
Los niñ@s con TDAH están listos para la emoción y la novedad. Puede
que busquen estimulación continuamente. No se trata de un rasgo de
personalidad. Un número creciente de estudios de investigación sugiere
que puede ser debido a la estructura y composición química de sus
cerebros.
Imaginemos una clase típica de Lengua en la que se está aprendiendo
sobre Literatura. Muchos niños puede que consideren la lección un poco
aburrida, pero saben que necesitan aprenderla y pueden
conscientemente tomar la decisión de permanecer sentados y poner
atención.
Los niñ@s con TDAH no tienen ese tipo de control. Esto puede deberse a
que las partes de sus cerebros que los ayudan a prestar atención,
concentrarse y a no aburrirse están `por debajo del nivel de
excitabilidad` necesario para que se activen. Esas partes del cerebro no
funcionan tan eficientemente como las de sus compañeros.
4. Puede que tampoco el cerebro active adecuadamente ciertos químicos que hacen
que las actividades sean satisfactorias y que en consecuencia se sientan motivados
a concentrarse en ellas. También esto puede interpretarse como `aburrimiento`
en los chicos con TDAH.
Existe otro factor importante que juega un papel en el aburrimiento y el cerebro
de una persona con TDAH. Los niñ@s con TDAH generalmente tienen problemas
con el funcionamiento ejecutivo, o el sistema de control del cerebro.
También con frecuencia están repletos de buenas ideas sobre cosas emocionantes
que quieren hacer. Pero carecen de las habilidades para planificar, organizar y
resolver problemas que les permitan llevarlas a cabo.
Los padres tienen su papel en conseguir beneficios en el aburrimiento, deben
tener en cuenta que es más constructivo de lo que se piensan pero que salir
corriendo a encontrar soluciones al aburrimiento de sus hijos, no es algo útil. Los
niños necesitan a los adultos a su alrededor para comprender que la creación de
sus propios pasatiempos requiere espacio, tiempo y la posibilidad de que las
cosas salgan mal -dentro de unos límites, por supuesto-.
Pensemos por un momento cómo han surgido en nosotros los mejores proyectos.
Probablemente, fue cuando no estábamos ocupando nuestro tiempo en nada. Y
esto es porque "la creatividad necesita tiempo, y muchas de las grandes ideas han
surgido en momentos de relax, como en unas vacaciones, en la bañera...",
aseguran Mª Teresa Rodríguez de Castro y Mariola Lorente Arroyo, investigadoras
de la Fundación Universidad de Padres.
5. Entonces: ¿cómo podemos ayudarles? Los padres deben dejar a los niños
tiempo para crear e inventar, por ello según Leire Iriarte Elejalde,
psicóloga y vocal de la Sociedad Española de Psiquiatría y Psicoterapia
del Niño y del Adolescente (SEPYPNA), "es muy positivo que los
pequeños tengan a su alcance medios y posibilidades de hacer cosas".
Es decir, material de manualidades, juegos de construcción o cosas que
puedan potenciar esa libertad y creatividad, para que no recurran
siempre a la tele o a los videojuegos. "No es negativo que los niños
jueguen con dispositivos móviles, pero sí cuando les quita tiempo para
otras cosas, y por supuesto cuando juegan en exceso", aclara Iriarte.
Es fundamental que durante su crecimiento los padres les enseñen de
forma progresiva y natural cosas para fomentar su creatividad y
capacidad de juego. Un ejemplo de Crespo: Se le da un palo al niño y se
le pregunta: "¿Qué podemos hacer con él?". Y que el niño diga mil cosas,
no sólo una. Hay que hacer que los pequeños disfruten aparte de los
juguetes, los juegos de mesa o los dispositivos electrónicos. Hay que
darles las herramientas para que aprendan, en relación con su edad y
capacidad.
Es clave que los padres "les acompañemos a realizar actividades solos,
buscando en su mundo interior aspectos que les serán beneficiosos en
su futuro, fomentando la creatividad, la sorpresa, la autonomía", asiente
Crespo. Si cuando sueltan `Me aburro` les damos opciones rápidas (el
móvil) o les indicamos qué hacer, se lo estamos dando todo hecho y no
aprenderán.
6. Padres e hijos deben pasar tiempo juntos,
aunque el ritmo de vida actual lo haga difícil. Y
que el tiempo que se comparta sea de calidad.
"Los padres debemos conectar con el aquí y el
ahora de estar con ellos, no mirar continuamente
el móvil, no tener de fondo la televisión y
ayudarles a que creen actividades en las que
podamos participar", sostiene Crespo.
Es fundamental "generar espacios estimulantes
para la creación y el juego en familia, y
oportunidades para poder practicarlos. El juego
libre, imaginativo y no estructurado es esencial
para el desarrollo infantil", concluyen Rodríguez
de Castro y Lorente.
7. Rosen, P. `TDAH y aburrimiento: Lo que
necesita saber` www.understood.org
Portalatín, B.G.`¿Por qué es bueno que los
niños se aburran?` www.elmundo.es
Roldan, M.J. `Beneficios del aburrimiento en
los niños` www.etapainfantil.com