El documento resume el final del curso escolar 2017-2018 y hace reflexiones sobre el futuro de la comunidad local. Comenta que el invierno y primavera han sido lluviosos, llenando el pantano y permitiendo una buena cosecha. Sin embargo, el autor se siente solo en su deseo de mejorar el futuro del pueblo, creyendo que la mayoría piensa que no hay posibilidades ("el pozo está seco"). Finalmente, felicita a una estudiante local por su excelente calificación en el examen de acceso a la universidad y espera que el próximo
PROPUESTAS Y RECOMENDACIONES PARA UN NUEVO TRATO ENTRE EL ESTADO, LOS PUEBLOS...
Reflexiones junto a la fuente taz, junio 2018
1. REFLEXIONES JUNTO A
LA FUENTE TAZA
…más seco que el “ojo
de Blas”
Otro curso que se acaba, el 2017-2018. Si nos detenemos a pensar un poco,
comprobaremos que la vida cotidiana y la política, sobre todo, se rigen por un
calendario muy parecido al escolar; arranca en septiembre y, prácticamente, se
paraliza con la llegada del verano. Por cierto, si hemos de hacer algún balance
tendremos que comenzar por algo tan positivo como el tiempo, al “tiempo
atmosférico”, me refiero; el año pasado, por estas fechas, nuestro pantano
estaba a un 30 % de su capacidad y ahora, a finales de junio de 2018,
embalsa más de un de 85 % y eso después de llevar ¡más de un mes
regando…! ¡qué invierno y que primavera! Bueno, lo de primavera es un
decir, pues hemos pasado del invierno al verano sin apenas darnos tiempo
para cambiar el brasero y la mesa de camilla por el ventilador. Sea como
fuere, este “tiempo”, que nos ha tenido un poco confundidos durante varios
meses, merece una Matrícula de Honor porque ha permitido que nuestro
pantano brille en todo su esplendor, al tiempo que el campo se ha recuperado
de forma espectacular y, a poco que el solano deje de jorobar, las perspectivas
de una buena cosecha son razonablemente buenas.
En cuanto a las “reflexiones” de este curso, pues ya se sabe… Un día sí y otro
también me he empeñado en no dejarme vencer por la apatía ni la resignación,
en recordar que no es bueno estar solo pendientes de lo que ocurre de
“trancos para adentro”, que debemos ser solidarios y mirar todo lo que afecta
a todos.. de “trancos para afuera”. Sigo pensando que el “Pozo”, tiene agua,
posibilidades, pero hay que lanzar el cubo y, sobre todo, hay que tirar de la
cuerda para sacarlo a flote, sin importar la profundidad; cuanto más hondo
serán necesarios más brazos, pero al final saldrá, al final tendremos agua,…
tendremos futuro…Pero, hasta ahora no hemos sido capaces, no digo de echar
el cubo, ni tan siquiera de acercarnos y tirar una simple piedra, a la espera de
escuchar ese chasquido tan agradable que se produce cuando choca con el
agua o, por el contrario, ese otro tan seco y áspero, cuando el choque tiene
lugar contra la dura roca del fondo. A pesar de mi enfermiza ingenuidad, he
llegado a la conclusión de que en esto de “el Pozo” estoy más solo que la una,
que la mayoría pensáis que está más seco que el “ojo de Blas” y que, por
tanto, no hay nada que sacar. Y seguramente tenéis razón; todos no podéis
estar equivocados frente a los cuatro o cinco que piensan como yo. En fin, el
tiempo dejará las cosas en su sitio que espero y deseo sea el mejor.
2. Y hablando de calificaciones, sería un mal detalle no acordarnos de Carmen
Gámez Salazar, que ha conseguido la segunda mejor nota de la provincia en
la prueba de Acceso a la Universidad, nada menos que 13,895. Gracias,
Carmen, por dejar a nuestro Instituto y a nuestro pueblo en tan buen lugar. El
“IES Guadalentín”, ese “pozo” del que venimos sacando alegrías y
satisfacciones desde el comienzo de los años ochenta, desde aquellos
humildes barracones…
Pero no nos confiemos
porque aquello que, en
su día, fue el resultado
del trabajo y la ilusión
de todo un pueblo puede
que, la falta de los
mismos, dé al traste con
una Institución que
tantos beneficios ha
cosechado para Pozo
Alcón y su comarca.
Ahora lo que toca es disfrutar de estas vacaciones, en nuestra fenomenal
piscina, y esperar que llegue el próximo curso cargado de esperanza y
renovadas ilusiones.
Pozo Alcón, Junio de 2018
Francisco Quiñones Martínez