El documento presenta tres historias tradicionales mapuches. La primera habla sobre las gallinas silvestres que comían frutos venenosos hasta que un demonio las salvó y les dio huevos de cáscara verde. La segunda cuenta cómo un zorro engañó a una ballena para que lo llevara a la orilla y luego la comieron. La tercera narra cómo un hombre quedó encantado por un espíritu luego de elogiar su agua, quedando pegado a una roca.
1. Educadora Diferencial: Paulina Jara
(Aula recurso) 6°
Ficha de lectura comprensiva
Nombre:___________ Fecha:__________
Domo y Lituche
(Adaptación)
Hace muchos años e infinidad de lluvias, en el mundo no existía nadie más
que un gran espíritu; Ngechén, que vivía en el cielo y tenía el poder de crear
vida.
Aburrido de tanto silencio y quietud empezó a crear la vida, e hizo una
criatura muy inteligente y despierta, a la que llamó hijo. Decidió enviarlo a
la tierra, con una alegría tan grande, que al impulsarlo este se golpeó al
caer y su madre preocupada, abrió una ventana en el cielo para poder
observarlo convirtiéndose así en Kuyén, la luna que desde entonces
resguarda los sueños de los seres humanos.
El espíritu creador, quiso también saber de su hijo y abrió otro agujero en
el cielo, convirtiéndose en Antú, el sol o padre sol y desde entonces calienta
a los hombres y los alienta día a día a ser respetuosos.
En la tierra, mientras tanto, el hijo del gran espíritu empezó a sentirse solo
y triste. Entonces Ngechén decidió enviarle desde el cielo una compañera
muy graciosa y hermosa, que estaba desnuda y tenía mucho frío. Para no
morir de frío, se puso a caminar y caminar, y en cada paso que dio creció
la yerba, y cuando cantó salieron de su boca insectos y mariposas.
Cuando estuvieron el uno frente al otro se presentaron mutuamente. -Yo
soy Lituche el hombre del comienzo. -Y yo soy Domo, la mujer del
comienzo. Nos amaremos, estaremos siempre juntos y haremos que la vida
florezca.
Así decidieron construir su hogar, la ruka y mientras la hacían el cielo se
llenó de Cherruwes, espíritus muy temidos, pero por otro lado también
descubrieron los frutos de la naturaleza, Lituche, conoció el Piñón y supo
que era un buen alimento que lo ayudaría a esperar el invierno, Domo en
2. cambio cortó lana de una oveja. La frotó entre sus manos, hizo un hilo muy
grueso, usó cuatro palos, empezó a cruzar las hebras, las enrolló, tiñó con
raíces naturales y empezó a realizar tejidos. Desde ahí en adelante Domo
y Lituche tuvieron hijos que se multiplicaron ocupando todo el espacio de
mar a cordillera.
Tiempo después y de manera sorpresiva hubo un gran cataclismo, las
aguas del mar empezaron a subir a causa de Kai-Kai, la culebra de las
aguas. La cordillera se empezó a elevar, porque en ella habitaba Tren-Tren,
la culebra de la tierra, que de ese modo defendía al ser humano de Kai-Kai.
Cuando las aguas descendieron, los seres humanos bajaron a la tierra, y
desde entonces se llaman pueblo “mapuche”, o gente de la tierra.
Aún así, los mapuches son muy temerosos de que ocurran nuevos
desastres, por lo mismo respetan a Ngechen y tratan de no disgustarlo.
Hacen artesanías, tallan la madera, tiñes sus lanas y hacen hermosos
tejidos.
3. Los frutos rojos del mañio y los huevos verdes de las
gallinas mapuches
(Adaptación)
Entre las diferentes especies del mañío, un árbol de hojas largas y
tronco fibroso, existía una poblada de pequeños frutos rojos que era
maldita y por lo mismo sus frutos y puntas de las ramas eran
venenosas.
A pesar de eso, los animales, especialmente las gallinas silvestres se
las comían aunque fueran venenosas, ya que tenían un color muy
bonito y eran dulces y carnosas. Por esta razón era muy común que
murieran muchas gallinas y vacunos del bosque, que comían los frutos
del mañío.
Una de esas veces pasó corriendo por el bosque el frenético y
maldadoso demonio Chahuilli , que buscaba hambriento algo para
comer y no encontraba nada.
De pronto, debajo de un mañío, observó que habían muchas gallinas
silvestres muertas que habían comido de los frutos rojos malditas.
También observó que junto a las gallinas muertas estaban sus huevos.
Hambriento, el malo de Chahuilli, padre del sur y caminante del
bosque, sació su hambre comiéndose las gallinas y los huevos.
Cuando finalmente estuvo satisfecho, por tener su barriga llena de
gallinas y huevos, dijo:- Gallinas del bosque, de ahora en adelante
podrán alimentarse de las semillas venenosas del mañío, ya que no
serán más venenosas para ustedes, y además la cáscara de sus
huevos será verde, verde claro y verde oscuro y de cáscara dura, para
distinguirlas de las demás gallinas, porque al alimentarme de ustedes
me han dado de nuevo vida.
Luego de que el Chahuilli pronunciara estas palabras, las gallinas del
bosque que estaban muertas despertaron. Desde entonces que las
gallinas que descienden de las gallinas del bosque, ponen huevos
verdes. Verde claro los huevos frescos y verde oscuro los más viejos
y empollados, porque así lo dijo el Chahuille.
Del mismo modo, los hombres al observar el mañío se acuerdan que
tienen bondades y maldades, ya que ante todo tienen una madera muy
5. (Adaptac
ión)
El zorro y la ballena
Había una vez un zorro que queriendo ver como la marea subía, fue a
caminar a la playa. Desde ahí pudo advertir como la marea subía y
subía, y como no se detenía, se asustó y se subió a una roca a esperar
a que bajara, pero como eso tardó mucho decidió pedir ayuda.
Primero le pidió a una nutria que pasó nadando que lo llevara rápido
a la orilla, ya que su mujer estaba a punto de parir. La nutria respondió
que no lo haría, ya que era imposible que hubiese salido a pasear si
la zorra estaba pariendo. El zorro insistente, le aseguró que si lo hacía
le daría a cambio una gallina, pero ésta se negó y nadó rápidamente
de regreso.
En eso, el zorro vio aparecer una ballena y poniendo la cabeza gacha,
se hizo el moribundo y le imploró que lo llevara de vuelta a la orilla y a
cambio le daría tres gallinas gordas.
La ballena que lo conocía bien, se negó, ya que sabía que podía ser
una de las mentiras del zorro, y aunque lo llevara a la orilla, él no le
daría las gallinas, pero a pesar de eso y luego de las imploraciones
del zorro, la ballena se conmovió y decidió llevarlo con la condición de
dejarlo a 25 brazadas dobles de la orilla, para así poder regresar
nadando sin quedar varada en la orilla.
Cuando finalmente llegaron cerca de la orilla, la ballena se detuvo para
dejar al zorro como habían acordado, pero éste le pidió que lo fuera a
dejar hasta el final, ya que él no sabía nadar y se ahogaría. A cambio
le pediría a sus amigos y familiares que lo ayudaran para que la
ballena pudiera volver a la parte profunda del mar.
La ballena entonces, indecisa, pero crédula, terminó por aceptar y lo
llevó hasta la orilla y cuando estuvo cerca de la arena y ya no pudo
moverse, evidenció lo que había intuido, que eso era una trampa y que
el zorro no llamaría a su familia y parientas para ayudarla, sino para
atacarla y comérsela.
6. Fue así, como se comieron a la ballena, quién lloraba por sentirse
embaucada, y por haber creído en alguien que no era de fiar.
7. Historia de un encantamiento
(Adaptación)
Cuentan que una vez un hombre fue al mar a buscar medicina para
sus males. Cuando estaba junto a la orilla, sintió repentinamente sed
y se dirigió al interior en busca de agua. Al encontrar una vertiente y
tomar agua, dijo que sabía muy bien y que su agua era hermosa como
una mujer.
Lo que no sabía era que ahí había un espíritu atrapado, que se enojó
y como castigo hizo que se le pegara un pie a la piedra y luego el otro,
hasta quedar completamente adherido. Intentó despegarse, pero por
muchos esfuerzos que hiciera no pudo hacerlo. Vinieron a hacer
rogativas y trajeron ofrendas para que la roca lo liberara, pero fue
imposible. Dicen que ahora tiene muchas riquezas y animales, pero
aún así no puede despegarse, que incluso se casó con el espíritu de
la vertiente y que ambos tienen un hijo, una pequeña piedra que yace
junto a él.