El documento describe cómo cambia el suministro de oxígeno (O2) a los músculos antes y después de un esfuerzo intenso. En reposo, el débito ventilatorio es de 8 L/min y los músculos usan un 4% del O2. Después de ejercicio intenso, el débito ventilatorio aumenta a 75 L/min para satisfacer la mayor demanda de O2 de los músculos, que ahora usan un 16% del O2.