La educación a distancia ha evolucionado a través de cinco generaciones tecnológicas, comenzando con materiales impresos y progresando hacia el uso de computadoras e Internet. El papel del profesor ha cambiado de ser un transmisor de información a ser un facilitador y motivador, mientras que el estudiante se ha vuelto más activo y colaborativo en entornos virtuales. La educación a distancia actual ofrece una variedad de formas de comunicación síncrona y asíncrona entre estudiantes, profesores y la institución

1. Evolución de la educación a distancia Alumno : Bentui, Héctor Raúl Ciclo Lectivo : 2009 Experto en Herramientas Tecnológicas para la EAD

2. Haciendo un poco de historia

15. ¿En QUé CONSISTE LA EDUCACIÓN A DISTANCIA?

18. Formas de Comunicación en la Educación a Distancia

19. Correo postal Teléfono Material impreso Radio Televisión Comunicación unidireccional persona-grupo Comunicación bidireccional persona-persona

20. Formas de Comunicación en la Educación a Distancia con nuevas tecnologías

21. Correo postal Teléfono Correo - electrónico Material impreso Radio Televisión Web Comunicación bidireccional persona-persona Comunicación bidireccional persona-grupo-grupo Foros, chats .

23. En el diseño del aprendizaje pueden combinarse diferentes corrientes pedagógicas

24. EVOLUCIÓN DE LA DIDÁCTICA

25. Rol del Profesor Motivador Gestor de la Información Dominio de las NTIC.

26. Rol del Alumno Ente activo Interactúa en espacios virtuales Construcción de conocimiento Aprendizaje colaborativo

27. EVOLUCIÓN DE LOS MATERIALES

28. Los materiales Materiales impresos Libros electrónicos Aplicaciones multimedia

29. Conclusión La educación a distancia es un modelo que esta centrado en el estudiante y por lo tanto el trabajo del docente se amplia en el sentido de ser guía ,motivador y facilitador. El docente se limita en el sentido de protagonizar el proceso y considerar al estudiante como un receptor de aquello que se pueda únicamente transmitir. El ser uno de los elementos de un modelo educativo a distancia implica una predisposición del profesor a coordinar que fluya el aprendizaje y los recursos y considerar al estudiante, ya no como un elemento aislado sino como una parte activa de la comunidad educativa “conectado” gracias a las tecnologías.