2. Introducción
No hay escasez de energía. Solo hay que utilizar las
tecnologías existentes para aprovechar la energía
de forma eficiente y eficaz. La energía renovable y
la eficiencia energética son económicamente
viables y cada vez más competitivas, y son el único
modo de mitigar el cambio climático.
La energía eólica, solar y otras tecnologías
energéticas limpias han experimentado un elevado
crecimiento durante la última década.
3. Energías limpias
Las energías limpias crean más puestos de
trabajo, dan poder a las comunidades locales y
pueden utilizarse a gran escala. Décadas de
progresos tecnológicos han contemplado cómo
los molinos eólicos (aerogeneradores), los paneles
solares, las centrales de biomasa y los colectores
térmicos solares, adquirirán cada vez mayor
protagonismo. El mercado global de las energías
renovables está experimentando un gran
crecimiento.
4. ¿Por qué las necesitamos?
La
necesidad de pasar del uso de
combustibles fósiles a energías renovables
es inmediata y urgente. Construir hoy día
una central termoeléctrica a
carbón produciría emisiones de CO2 que
durarían hasta 2050. Por ello, cualquier
plan elaborado por las compañías
energéticas durante los próximos años
será decisivo para el clima del planeta
5. Solución
Ya
estamos viviendo las catastróficas
consecuencias del cambio climático, el
único modo de mitigar estos cambios es
empezar a utilizar energías limpias y
renovables.
6. Energía eólica
La
energía eólica es hoy una industria
exitosa que suministra electricidad a
millones de personas, crea decenas de
miles de puestos de trabajo y genera
miles de millones de ingresos. El ritmo de
cambio y avance ha sido vertiginoso en
esta nueva industria.
7. Energía solar
La
energía solar es una opción esencial
que posibilitará un desarrollo energético
más limpio, en base a actividades
económicamente sólidas y
ambientalmente limpias, que permitirá
contribuir a enfrentar el cambio climático
y los impactos que generan las fuentes
convencionales de energía.
8. Biocombustibles
Los posibles cambios en el uso del suelo y la
tecnología de conversión utilizada son
factores determinantes relacionados al uso
de biocombustibles que aumentan el nivel de
emisiones.
Los biocombustibles obtenidos de cultivos
deben demostrar fehacientemente que
poseen un balance energético positivo para
convertirse en una genuina alternativa
energética.