El documento describe cómo los hijos de Israel clamaron a Dios después de la muerte del rey de Egipto, cuando gemían bajo la servidumbre. Dios escuchó su clamor y recordó su pacto con Abraham, Isaac y Jacob, mirando con compasión a los hijos de Israel. El documento también enseña que siempre podemos clamar a Dios ante cualquier aflicción o injusticia, y que Dios está dispuesto a atender el clamor de su pueblo.
2. DOS HECHOS IMPORTANTES
EL CLAMOR DE LOS HIJOS DE ISRAEL
«Aconteció que después de muchos días murió el rey de
Egipto, y los hijos de Israel gemían a causa de la
servidumbre, y clamaron…»
Éxodo. 2:23a
LA ACTITUD DE DIOS POR LOS HIJOS DE ISRAEL
«…y subió a Dios el clamor de ellos con motivo de su
servidumbre. oyó Dios el gemido de ellos, y se
Y
acordó su pacto con Abraham, Isaac y Jacob.
de
Y
miró Dios a los hijos de Israel, y los reconoció Dios»
Éxodo 2:23b, 24,25
3. DOS ENSEÑANZAS PERTINENTES
PODEMOS CLAMAR A DIOS ANTE CUALQUIER
AFLICCIÓN O INJUSTICIA
“Este pobre clamó, y le oyó Jehová, y lo libró de
todas sus angustias”
Salmo 34:6
DIOS ESTÁ DISPUESTO A ATENDER EL CLAMOR DE SU
PUEBLO
«Mas ciertamente me escuchó Dios; Atendió a la voz
de mi súplica»
Salmo 66:19
4. En medio de cualquier
aflicción o injusticia,
podemos clamar a Dios
confiando en que actuará
haciendo lo mejor para
nosotros en su debido
tiempo