DESCRIBE LAS CARACTERÍSTICAS DEL MOSAICO BIZANTINO Y DE LOS TEMAS ICONOGRÁFICOS DEL PANTOCRÁTOR, LA VIRGEN Y LA DEÉSIS, ASÍ COMO SU INFLUENCIA EN EL ARTE OCCIDENTAL
DESCRIBE LAS CARACTERÍSTICAS DEL MOSAICO BIZANTINO Y DE LOS TEMAS ICONOGRÁFICOS DEL PANTOCRÁTOR, LA VIRGEN Y LA DEÉSIS, ASÍ COMO SU INFLUENCIA EN EL ARTE OCCIDENTAL
DESCRIBE LAS CARACTERÍSTICAS DEL MOSAICO BIZANTINO Y DE LOS TEMAS ICONOGRÁFICOS DEL PANTOCRÁTOR, LA VIRGEN Y LA DEÉSIS, ASÍ COMO SU INFLUENCIA EN EL ARTE OCCIDENTAL. Historia del Arte. 2º de Bachillerato LOMCE
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DESCRIBE LAS CARACTERÍSTICAS DEL MOSAICO BIZANTINO Y DE LOS TEMAS ICONOGRÁFICOS DEL PANTOCRÁTOR, LA VIRGEN Y LA DEÉSIS, ASÍ COMO SU INFLUENCIA EN EL ARTE OCCIDENTAL
1. DESCRIBE LAS CARACTERÍSTICAS DEL MOSAICO BIZANTINO
Y DE LOS TEMAS ICONOGRÁFICOS DEL PANTOCRÁTOR, LA
VIRGEN Y LA DEÉSIS, ASÍ COMO SU INFLUENCIA EN EL ARTE
OCCIDENTAL
2. El mosaico fue
enormemente
empleado en el arte
bizantino.
Tiene su origen en
el mosaico
paleocristiano del
Bajo Imperio
Romano y, este, a
su vez, en el
mosaico romano.
Como el mosaico
paleocristiano, será
el revestimiento
ideal para la
decoración de los
muros, bóvedas,
cúpulas de palacios
e iglesias y no en los
suelos.
San Apolinar in
Classe.
Rávena.
Siglo VI
3. Su empleo será muy
frecuente por:
• El empleo de
materiales pobres en
los muros.
• La valoración del
espacio interior y el
interés por recubrir
los espacios interiores
con materiales ricos
que den aspecto de
suntuosidad, como es
el caso del mosaico.
• La necesidad de
transmitir mensajes
simbólicos asociados
al poder del Estado y
de la Iglesia.
Mosaicos Santa Sofía
4. Se crearán grandes composiciones de fondos planos e irreales, enormemente
coloristas y efectistas, cuyo aspecto variará en función de la incidencia de la luz.
San Vital
Rávena.
Siglo VI
5. Será frecuente:
• El empleo del opus
tesselatum, de
aproximadamente
1 cm2 de tamaño.
• El empleo del opus
vermiculatum, con
teselas de menor
tamaño que se
adaptan a la forma
del contorno.
• El empleo de
técnicas mixtas:
Vermiculatum
para los
contornos.
Tesselattum
para el relleno
San Vital
Rávena.
Siglo VI
6. Se emplearán:
• Teselas de
mármol y
piedras de
distintos
colores.
• Teselas de
cerámica
vidriada de
ricos
colores.
• Teselas con
láminas de
oro y plata,
destacando
el uso del
dorado, para
dar
sensación de
riqueza.
San Vital
Rávena.
Siglo VI
San Apolinar Nuevo
Rávena.
Siglo VI
7. El uso del mosaico bizantino
servirá a los mismos fines
simbólicos que su arte:
función propagandística de la fe
y del Estado, que son una
misma cosa:
• Mostrar la grandeza y
suntuosidad del Emperador
y la Iglesia bizantina.
• Crear –junto con el uso de la
luz- ambientes místicos
irreales, que sugiriesen la
omnipotencia divina y del
Emperador.
• Transmitir mensajes
religiosos y políticos simples
e indubitables, dentro de la
ortodoxia característica del
mundo bizantino.
San Vital. Rávena. Siglo VI
Déesis. Santa Sofía. S. XIII
8. Dos de los mosaicos que mejor
expresan ese ensalzamiento del
poder cesaropapista del Emperador,
buscando mostrar la supremacía,
pompa y alejamiento del poder
imperial, son los que se encuentran
en las paredes del ábside de San Vital
en Rávena.
Bajo el Pantocrátor, en el espacio más
sagrado, se representan los cortejos
del Emperador Justiniano y de su
esposa Teodora ofrendando una
patena y un cáliz al templo (oblatio
imperial).
Están tratados como personajes
majestuosos, casi semidivinos, de un
tamaño mayor que los demás y en el
centro, revestidos de lujo y dignidad.
Vestidos de púrpura, coronados y
enjoyados, incluso sus cabezas están
rodeadas por un nimbo, como Dios o
los santos. San Vital. Rávena. Siglo VI
Cristo
Cosmocrátor
12. La ubicación del mosaico
bizantino en el edificio
responde a unos principios
preestablecidos fijos, propios
de una sociedad muy estable y
claramente jerarquizada.
Dado que su finalidad es
especialmente mostrar la
grandeza y el poder del Imperio
y la Iglesia bizantina, unidas en
la persona del Emperador,
existirá una clara
jerarquización en la
disposición espacial de las
figuras en las diferentes partes
del edificio.
Se trata de reflejar el orden
divino de las cosas, que se
corresponde con el propio
orden imperial.
San Vital
Rávena.
Siglo VI
13. Toda la decoración mural de la iglesia bizantina se ajusta a un esquema teológico
que sitúa a las figuras en uno u otro lugar según su mayor o menor importancia.
Esta jerarquización espacial en la ubicación de las figuras en los muros, se
producirá tanto en sentido vertical como longitudinal.
San Apolinar in Classe.
Rávena.
Siglo VI
14. En sentido longitudinal, las diferentes decoraciones de la basílica tenderán a
remarcar el propio eje espiritual de la planta basilical, desde su entrada hacia el
presbiterio, un camino que conduce hacia el espacio más sagrado, destinado al
misterio de la Eucaristía y a la divinidad.
San Apolinar nuevo
Rávena.
Siglo VI
15. Por ejemplo:
• En la entrada se representa
el juicio final.
• En las naves, son
frecuentes procesiones de
santos, mártires…
• Entre la nave y el
presbiterio, en un arco
triunfal pueden aparecer
distintas escenas que
introducen el espacio
divino, a veces con el santo
al que se dedica la Iglesia.
• En la cúpula se representa
al Pantocrátor y en sus
pechinas al Tetramorfos.
• En la bóveda del ábside la
Virgen.
San Apolinar Nuevo.
Rávena.
Siglo VI
16. Verticalmente también se suele
producir esa diferenciación, en
un camino vertical de
espiritualidad hacia la salvación:
• En la parte más alta, el
mundo celestial, presidido
por Dios Padre, por símbolos
divinos o por el Pantócrator,
tetramorfos y coros angélicos.
• En un plano inferior, la
virgen, los santos, como
intercesores e intermediarios,
escenas bíblicas…
• En otro plano pueden
aparecer diferentes
personajes de la Iglesia.
• Por debajo aparece el mundo
material, terrenal.
San Vital
Rávena.
Siglo VI
17. Arco de triunfo
separando a los fieles
del presbiterio
12 apóstoles
Cristo en
Majestad y
Tetramorfos
Exaltación de la cruz.
Transfiguración
Mano Dios Padre
Pedro, Santiago y Juan
San Apolinar, eleva sus
plegarias a Dios por sus
fieles, como Cristo y los
Apóstoles
ÁMBITOTERRENAL
Obispos de Rávena
San Apolinar in Classe.
Rávena.
Siglo VI
ÁMBITODELOSSANTOSÁMBITODIVINO
Mundo material:
mármoles
18. El emperador llega a ser tan reverenciado dentro del templo que a veces casi se
confunde con la figura de Cristo, llegando a representar al Emperador y su familia
en el mismo lugar reservado a la divinidad, pero en diferente plano.
San Vital
Rávena.
Siglo VI
19. Las principales
representaciones serán:
• De carácter
religioso: Cristo, la
Virgen, cortejos de
santas y santos,
mártires, escenas
bíblicas…
• De carácter áulico:
Representaciones
de la familia
imperial y altos
dignatarios.
• Mixtas:
Representaciones
de la divinidad junto
al emperador.
• Símbolos cristianos:
el crismón, la cruz…
20. Para transmitir estos mensajes, no era
preciso un realismo naturalista al modo
romano.
Derivado del mosaico paleocristiano
oficial, se prefirió emplear sistemas
representativos idealizantes,
anticlásicos que subrayasen ideas
vinculadas a la divinidad y al poder,
basadas en:
• Simplicidad y claridad representativa,
primando el mensaje sobre la forma.
• Mayor interés en los aspectos
simbólico-expresivos que en el
realismo.
• Idealización.
• Espiritualismo.
• Simbolismo, incluso del color, para dar
aspecto de suntuosidad y resaltar el
simbolismo.
Características formales
San Apolinar Nuevo. Rávena. Siglo VI
21. • Sencillez y claridad
compositiva.
• Composiciones
frontales y
sencillas.
• Gusto por la
simetría.
• Aspecto estático,
congelado;
carencia de
movimiento.
• Figuras aisladas y
sin relación entre
ellas.
• Suelen alinearse a
modo de frisos
corridos.
Características formales
San Apolinar Nuevo. Rávena. Siglo VI
22. • Escaso realismo y
naturalidad
interesa más el
simbolismo.
• Mayor interés por
expresar un mensaje
que por el realismo.
• Antinaturalismo.
• Esquematismo y
estilización.
• Rigidez, hieratismo.
• Es habitual la
seriación y
repetición de figuras
o actitudes.
• Isocefalia.
Características formales
San Vital. Rávena. Siglo VI
23. • Fondos planos o irreales,
que sugieren atmósferas
místicas o sobrenaturales,
simbólicos.
• Figuras planas y frontales.
• Frontalidad, aspecto
presentativo.
• Carencia de volumen:
solo en el tratamiento de
los pliegues o en algunos
elementos de
arquitectura se adivina
una cierta voluntad de
crear distintos planos de
profundidad.
• Simbolismo, incluso del
color.
Características formales
24. • Carencia de perspectiva.
• Empleo de sistemas de
jerarquización de figuras
por tamaños (perspectiva
jerárquica),
desproporción y de
perspectivas forzadas
(torcidas o invertidas).
Características formales
26. • Estereotipación y empleo
de convencionalismos
representativos poco
realistas, como repetición
de gestos, los pies en V,
que parecen elevarse
sobre el fondo…
• Estilización y
esquematización
representativa en las
figuras.
• Empleo habitual de un
canon muy alargado (hasta
9 cabezas), que sugiere la
idea de espiritualidad y de
división tripartita del
rostro (en alusión a la
Trinidad).
Características formales
27. • Los seres humanos de los
mosaicos bizantinos son
arquetipos, figuras alejadas
de la realidad visual, cuya
definición formal y
proporciones están
previamente establecidas
mediante estrictas reglas.
• Carencia de rasgos
individualizados en las figuras,
salvo en algunos casos de
personajes imperiales,
aunque están claramente
idealizados.
• Carencia de expresión,
reducida tan solo a ojos
globulares muy destacados.
• Rostros inexpresivos,
acentuando tan solo la
expresión de los ojos.
Características formales
28. • Uso simbólico del color, muchas veces muy rico.
• Carencia de movimiento y relación entre los personajes.
• Seriación: repetición de gestos y actitudes Sentido del ritmo.
Características formales
30. Algunos de los principales mosaicos bizantinos podemos encontrarlos en iglesias
mandadas construir por Justiniano en la 1ª mitad del siglo VI.
San Vital, de Rávena
31. Algunos de los principales mosaicos bizantinos podemos encontrarlos en iglesias
mandadas construir por Justiniano en la 1ª mitad del siglo VI.
San Apolinar Nuevo, de Rávena
32. Algunos de los principales mosaicos bizantinos podemos encontrarlos en iglesias
mandadas construir por Justiniano en la 1ª mitad del siglo VI.
San Apolinar in Classe, de Rávena
33. También podemos encontrar otros en Santa Sofía, aunque son posteriores a su
construcción, correspondiendo a la 2ª y 3ª Edades de Oro Bizantinas (siglos IX y XII).
Santa Sofía, de Constantinopla
34. • En los mosaicos
bizantinos serán muy
habituales las
representaciones de
carácter religioso.
• Entre estas destacarán
nuevos modelos
iconográficos que tendrán
una enorme
trascendencia en el arte
posterior:
Cristo Pantocrátor.
Diferentes
representaciones de
la Virgen, como
Madre de Dios.
La Déesis o Súplica.
Iconografía
35. • El arte bizantino, partiendo de los modelos
iconográficos paleocristianos, impondrá
nuevos tipos iconográficos fijos que faciliten
la comprensión de los dogmas de fe y
queden fijados de forma permanente para
evitar desviaciones.
• Su principal aportación será la elaboración
de un corpus iconográfico unitario y
“normalizado”, que será recopilado en la
Hermeneia, que ejercerá gran influencia en
el arte occidental.
Iconografía
36. PantocrátorUna de las representaciones que
más se difundirá será de del llamado
Pantocrátor (el que tiene toda el
poder).
Es Cristo en majestad,
todopoderoso, sentado en su trono,
con su nimbo, con la mano derecha
en actitud de bendecir y
sosteniendo en la mano izquierda el
libro de las Sagradas Escrituras.
Su actitud suele ser mayestática,
lejana, inexpresiva y distante.
Normalmente se representaba en
las cúpulas de las iglesias o en las
bóvedas de los ábsides principales.
Es habitual que posea una
significación apocalíptica: Cristo
regresa todopoderoso al final de los
tiempos para el Juicio Final.
37. PantocrátorEste tipo de representación ya se había
iniciado en el arte paleocristiano (Basílica
de Santa Pudenciana), representado con
los atributos de poder, como un emperador
romano y rodeado del Tetramorfos.
Tendrá enorme trascendencia en el arte del
occidente medieval, dando lugar a los
habituales Pantocrátor de los ábsides y de
las portadas románicas en las que se
represente el Juicio Final, presidido por el
Pantocrátor, rodeado por el Tetramorfos y,
a veces, las letras Alfa y Omega.
de TahullSan Vicente
Tímpano San Trófino. Arlés
38. Iconografía
Una variante del Pantocrátor es el Cosmocrátor ( Cristo apolíneo
en majestad, sentado sobre el globo terrestre, como señor de todo
el universo), como en San Vital de Rávena.
Tendrá menos éxito que la anterior tipología, si bien también
aparecerá en el arte medieval, como en el Tapiz de la Catedral de
Gerona.
Pantocrátor
39. Vírgenes Theotocos (Madre de Dios-
La que dio a luz a Dios), en diversas
variantes.
Es el título que la Iglesia cristiana le dio
a María en el Concilio de Éfeso de 431
en referencia a su maternidad divina.
Esta representación trata de subrayar
(frente a las diferentes herejías) que el
hijo de María, Jesús, era
completamente Dios, y también
completamente humano, tal y como
había sido afirmado en el Concilio I de
Nicea (325), y que sus dos naturalezas
(humana y divina) estaban unidas y
eran inseparables en una sola persona
de la Santísima Trinidad.
Habrá diferentes tipos de
representaciones en las que María
sostiene al niño Dios en su regazo.
La Virgen
40. La versión más característica de Virgen con el Niño es la llamada Kyriotissa (Trono del
Señor). Normalmente está sentada y se comporta como Trono del Niño, con gesto de
Pantocrátor. Suelen ser representaciones muy hieráticas y frontales en las que no suele
existir relación entre Madre e Hijo.
Muchas veces se emplea para estas representaciones el nombre genérico de Theotocos.
Dará lugar a las representaciones románicas y góticas denominadas Maestá (o Maiestas
Mariae), como reina de los cielos. Gótico Italiano: Maestá. Giotto
Románico. Virgen en Majestad. S. Vicente
Tahull
41. Otro tipo de
representación será la
llamada Virgen Eleusa o
Glycophillusa (la que
expresa ternura).
Es muy frecuente en los
iconos y en ella aparece la
Virgen mostrando afecto al
niño, con sus caras
normalmente tocándose,
relacionándose entre ellos.
Se enfatiza el papel de la
Virgen como madre de
Cristo y como intercesora
entre Dios y los hombres,
como si fuera la propia
Iglesia.
Esta variante tendrá gran
acogida en el arte gótico
(como las Vírgenes
Blancas) y en el
Renacimiento.
La VirgenRafael Sanzio.
Renacimiento
Arte Gótico
Virgen
Blanca.
Toledo
Mariotto
Albertinelli
Renacimiento
42. La Virgen
Una variante es la llamada Galactotrophusa, en la que la Virgen está
amamantando al niño. Esta versión dará lugar a las llamadas Vírgenes de la leche
posteriores.
Jan Van Eyck.
Pintura gótico-flamenca
Leonardo da Vinci
Renacimiento
43. La Virgen
Odighitria (La que muestra el camino). La Virgen señala al niño (a veces tiene una
mirada triste), indicando que él es el camino, a la vez que indicando que su propio
camino será el sacrificio en la cruz. Normalmente, el niño sostiene en su mano un
pergamino que indica las Sagradas Escrituras, específicamente, el evangelio de Juan,
donde se menciona la frase "Yo soy el camino, la verdad y la vida."
Rafael Sanzio.
Renacimiento
44. Blanchernitissa o Platytera (La señal, más
allá del cielo). En actitud orante. Modelo
heredado de la orante paleocristiana,
habitualmente con un clípeo con el niño.
Panajranta (Sin mancha), que dará
lugar a la tradición posterior de las
Inmaculadas.
La VirgenOtras representaciones de la Virgen en el arte bizantino:
45. DéesisDéesis (Plegaria, súplica).
Consiste en la representación,
normalmente de la Virgen y San
Juan Bautista, orando por los
hombres como intercesores ante
Cristo Pantocrátor.
Este tema aparecerá habitualmente
en el arte románico y gótico, e
incluso en el arte posterior.
Arte gótico. San Esteban. Burgos. S. XIII. Arte gótico. Puerta de la Coronería.
Catedral de Burgos. S. XIII.
46. Déesis
Jan Van Eyck. Políptico de Gante. Siglo XV
El Greco. El entierro del conde de Orgaz. Siglo XVI.
Representación de la Déesis en la parte celeste del
cuadro.
47. Otros temasKoímesis (Dormición de la
Virgen).
Dará lugar a las
tradicionales
representaciones de la
Muerte de la Virgen.
Andrea Mantegna.
Renacimiento
Caravaggio.
Barroco
48. Otros temas
Anástasis: Tema apocalíptico, que narra el
descenso de Cristo a los infiernos para
resucitar a los muertos, para liberar a los
justos que habían muerto con el pecado
original, aludiendo a su victoria sobre la
muerte (devolviendo la vida a Adán y Eva o
patriarcas del Antiguo Testamento).
Fra Angelico
Relieve románico. Armentia (Álava)
49. Otros temasThrenos: Llanto de la Virgen sobre el cuerpo muerto de Jesús.
Sandro Botticelli.
Bartolomé
Bermejo
Gregorio
Fernández
Miguel
Ángel
Dará lugar a las representaciones habitualmente conocidas como Piedades.
50. Otros temasLa Santísima Trinidad:
De la representación paleocristiana de los Tres huéspedes de Abraham, se pasará a
la tradicional representación de tres personajes, uno anciano (Dios Padre), otro más
joven (Cristo) y el Espíritu Santo en forma de Paloma (o sus símbolos), frecuente en
el arte cristiano posterior.
Saint Denis. Paris. Arte Gótico.
José Ribera
Barroco
S. XVIII