1. LA ESCUELA NUEVA
La Escuela Nueva, también llamada escuela activa, es un movimiento pedagógico surgido a finales
del siglo XIX con la finalidad de abordar una renovación de los principios de la Escuela tradicional
y como contraposición de la escuela tradicional.
La Escuela Nueva, frente a la rigidez de la Escuela tradicional, plantea una alternativa de
enseñanza en la que los pequeños aprendan por observación, por contacto con la naturaleza, por
experimentación, por imitación de las personas adultas, y por tanto debería articularse el
aprendizaje en función de estos principios.
PRINCIPIOS DE LA ESCUELA NUEVA
La Escuela Nueva introduce propuestas como:
• El niño como sujeto activo del aprendizaje, en torno al cual se deben organizar los
contenidos y las actividades. Así, las propuestas de trabajo deben dirigirse al desarrollo de sus
potencialidades físicas, intelectuales y creativas.
• Una modificación en el papel del profesorado, que adquiere una función como observador,
como animador de la actividad del pequeño y como promotor de conductas orientadas hacia la
creación de la autodisciplina y la autonomía.
• En este contexto la escuela debe abrirse al exterior y situarse como antesala de la inserción
del sujeto en la vida social. La escuela ha de proporcionar las condiciones para que los niños vivan
de manera espontánea y donde prevalezca el compañerismo y valores como la solidaridad.
• El sistema debe ser flexible y adaptarse a la especificidad de cada niño. De esta manera, la
intervención debe ser individualizada y socializada.
• Los métodos educativos priorizan la imaginación, el pensamiento y favorecen la actitud
crítica. Los conocimientos ya no se admiten de manera pasiva, sino que se aprenden a través de la
deducción, la demostración, la experimentación o la lógica.

2. CONTEXTO EN EL QUE SE DESARROLLA
El movimiento de la Escuela Nueva es producto de una confluencia de diferentes circunstancias
históricas y transformaciones políticas, sociales y económicas que se dieron en el ámbito mundial
entre finales del siglo XIX y el primer tercio del siglo XX. Este movimiento surge paralelo a la
consolidación del liberalismo como sistema político y el capitalismo como sistema económico, que
convergen a finales del siglo XIX.
El máximo auge de la Escuela Nueva se dio en el periodo de entreguerras, con la consolidación, en
muchos países de regímenes progresistas, como la Segunda República Española o la República de
Weimar en Alemania, en los que se dio un gran impulso de al desarrollo de los sistemas públicos de
educación, basados en los principios pedagógicos renovados.
ESCUELA NUEVA EN ESPAÑA
Hasta prácticamente 1931, año en que se implanta la Segunda República, la enseñanza en España
es predominantemente religiosa. Sin embargo, los principios de la Escuela Nueva van integrándose
en amplias capas de profesorado y van surgiendo diferentes métodos por todo el país.
Cataluña es una de las zonas más sensibles a los principios de la Escuela Nueva, y ya a principios
de siglo surge un movimiento de renovación pedagógica con el apoyo del Ayuntamiento de
Barcelona y la Mancomunidad de Cataluña. Se crean así las primeras escuelas al aire libre
inspiradas en estos principios renovadores, como es la Escola del Bosc, dirigida por Rosa Sensat.
PRECURSORES DE LA ESCUELA NUEVA
El movimiento de la Escuela Nueva se asentó sobre un bagaje ideológico que se había ido
gestando especialmente desde la ideología ilustrada a finales del siglo XVIII.
Algunos de sus precursores son Rousseau, W. Pestalozzi y Fröbel, quienes ayudaron a potenciar el
sistema escolar y el aprendizaje de las primeras edades revolucionando el sistema educativo, en
unos momentos en los que los principios de la Escuela Tradicional continuaban vigentes.

3. FIGURAS MÁS IMPORTANTES
En el momento de más esplendor de la Escuela Nueva surgen figuras que pueden considerarse
esenciales en cuanto a la educación infantil, no solamente por la importancia que tuvieron en su
momento, sino por su importante legado, pues sus principios han impregnado las corrientes
pedagógicas posteriores y suponen la base de la práctica educativa actual en la etapa infantil.
Podemos destacar a las hermanas Rosa (1866-1951) y Carolina (1870-1945) Agazzi, a María
Montessori (1870-1952), a Ovide Decroly (1871-1932) y a Célestin Freinet (1896-1966).
JOHN DEWEY (1859-1952)
Nació en Burlington en 1859 y murió en Nueva York en 1952. Fue un filósofo, pedagogo y
psicólogo estadounidense.
Junto con los filósofos Charles Sanders Pierce y William James, fue uno de los fundadores de la
filosofía del pragmatismo. Fue durante el siglo XX la figura más representativa de la pedagogía
progresista en EE.UU.
Hoy en día la influencia de Dewey sigue siendo discutida respecto a los fallos del sistema escolar
estadounidense; por un lado, es criticado por los condensadores fundamentalistas, y por otra parte es
considerado «el precursor inspirador de los reformadores partidarios de una enseñanza “centrada en
el niño”».
Pablo Gómez Albaladejo
Lucía Escobar Picazo
Laura Iniesta Egido
Amanda Núñez