SlideShare une entreprise Scribd logo
1  sur  80
Télécharger pour lire hors ligne
VÍDEO DE HOY: 
Antonio Piñero 
La condena de nacer niña 
Ser mujer en algunos países significa estar destinada a la discriminación y la violencia 
Una de cada cuatro adolescentes en el mundo ha sufrido algún tipo de maltrato 
Alejandra Agudo Madrid 10 OCT 2014 - 19:57 CEST18
FOTORRELATO: Seis jóvenes comparten sus historias de discriminación y lucha. / claudio álvarez 
Cada tres segundos una niña en el mundo es obligada a casarse antes de haber cumplido los 18, la de edad en que se las considera adultas, según la Convención de los Derechos del Niño. Casi una de cada cuatro adolescentes de entre 15 y 19 años del planeta —70 millones— han sido víctimas de violencia física; cada diez minutos, muere una por ello. En los países en desarrollo, la principal causa de fallecimiento de chicas son las complicaciones derivadas del embarazo y el parto: 50.000 pierden la vida cada año. Unos 140 millones de pequeñas y mujeres han sufrido mutilación genital femenina, un número que aumenta en dos millones cada año... Todos estos datos son solo un puñado de los muchos recogidos en el informe Estado Mundial de las Niñas 2014 de Plan Internacional basado en información de la ONU, que describe la condena que representa nacer mujer aún hoy, en pleno siglo XXI. 
"Estas cifras indican que existe una mentalidad que tolera, perpetúa e incluso justifica la violencia. Y deben servir de alarma para todos en todas partes". Lo dice Geeta Rao Gupta, directora adjunta de Unicef al hilo de la celebración hoy, 11 de octubre, del Día Internacional de la Niña. Los datos del organismo sostienen esta afirmación: "En todo el mundo, cerca de la mitad de las niñas cree que está justificado que un hombre golpee a su mujer o compañera bajo determinadas circunstancias, como por ejemplo si rechaza tener relaciones sexuales, si abandona la casa sin permiso, si discute, si descuida a los niños o si quema la cena". La solución principal para evitar que ser niña sea sinónimo de víctima, coinciden las organizaciones especializadas en infancia y mujer, pasa por la educación, tanto en su entorno como, sobre todo, para ellas. La formación les dará el poder para decidir, decir no, conocer sus derechos y hacerlos valer. Aunque, en ocasiones, esto entrañe un importante riesgo. La recién premiada con el Nobel de la Paz, Malala Yousafzai, fue disparada en la cabeza por los talibanes en 2012 por defender la escolarización de las mujeres, Para Concha López, directora de Plan Internacional en España, el acceso a la educación "no es solo una cuestión de derechos", sino también económica. "Si ellas estudian, estarán más formadas y tendrán herramientas para acceder a un empleo digno; aumentarán el PIB de sus países", aseguró durante la presentación en España del informe. Pese a los avances en el Objetivo del Milenio de lograr la enseñanza primaria universal, no se logrará en 2015 como se había fijado. En gran parte por la elevada tasa de abandono, sobre todo entre las menores, como advierte el informe de seguimiento de 2014, principalmente porque se casan y son madres, pero también por la falta de recursos familiares. "En África subsahariana, solo el 23% de las pequeñas pobres de zonas rurales finalizaron la educación primaria", destaca el documento. 
140 millones de pequeñas y mujeres han sufrido mutilación genital femenina 
Ellas son víctimas de una espiral de discriminación tan difícil de romper como lo es intentar cambiar la mentalidad, las tradiciones o las costumbres. Ni siquiera la aprobación de leyes para su protección consiguen, por sí solas, este objetivo. "Sucede con la mutilación genital en muchos países. Hay que trabajar comunidad por comunidad, con los líderes y los ancianos para erradicar esta práctica. Solo con legislación que la prohíba no vale, porque luego se hace a escondidas", explica Marta Arias, responsable de sensibilización de Unicef España. Con todo, el reto, opina, no es imposible. "Son procesos muy lentos. Se trata de crear entornos protectores y para ello hace falta que estén implicados los políticos, los sistemas judiciales, la policía, las comunidades de cada país", detalla. Ramatou Kane, trabajadora de Plan Internacional en Níger conoce bien el círculo de pobreza, discriminación, violencia y falta de oportunidades. Males que se retroalimentan menoscabando los derechos de las menores, aunque estos estén protegidos por ley. "En el país tenemos el porcentaje más alto de matrimonios infantiles. El 75% de las chicas se casan antes de cumplir los 18. La primera razón es que dejan la escuela. Vuelven a casa de sus padres y como no saben qué hacer con ellas o cómo protegerlas de que se queden embarazas para deshonor de la familia, las casan. El segundo motivo es económico en tanto que enlazarlas con alguien bien posicionado supone una ayuda para la familia", explica la experta nigeriana durante una visita en España. La realidad que expone Kane no es exclusiva de Níger. En todo el mundo, 700 millones de mujeres se casaron antes de alcanzar la mayoría de edad. De ellas, 250 millones tenían menos de 15 incluso. La mayoría, matrimonios forzados. Según denuncia Plan, 14 millones de menores son obligadas a casarse al año, 39.000 cada día. La tradición explica, en parte, esta práctica. En India, Bangladesh o Nepal, es
común que los progenitores elijan un varón para que sus hijas se desposen durante la adolescencia. Sherin A. nació hace 16 años en Bangladesh. Cuando tenía 12 sus padres acordaron su matrimonio con un primo nueve años mayor que ella. "Mi historia es representativa de la de las demás niñas de mi país", dice. Ella, sin embargo, esquivó la estadística. "Les dije que no me quería casar, que quería estudiar", recuerda. Su madre fue difícil de convencer. De hecho, la pequeña tuvo que acudir a Plan Internacional para que fueran ellos quienes persuadieran a su madre de romper el compromiso. Sherin sigue en la escuela y quiere llegar a la universidad para ser arquitecta como su tío. "Quiero ser como él", dice. Con todo, la joven no tiene inconveniente en casarse en el futuro con quien sus padres elijan. "Yo me podría equivocar. Ellos harán una mejor elección que yo", razona. Pero eso será cuando finalice su formación y tenga un trabajo, zanja. 
14 millones de menores son obligadas a casarse cada año 
Una de las consecuencias de los casamientos tempranos son los embarazos adolescentes, que suponen un alto riesgo para la vida de las chicas. Aunque detrás de estos hay múltiples causas como las violaciones, la falta de formación en salud sexual y reproductiva así como la imposibilidad de acceder a métodos anticonceptivos. Unicef estima que 120 millones de jóvenes de menos de 20 años en el mundo han sido víctimas de abusos sexuales. El 50% de las agresiones, añade Plan, las sufren menores de 16. Jenniffer Rossana C. ha vivido a sus 17 años una historia que engrosa varias de estas estadísticas. Sin titubear relata cómo ha sido víctima de la violencia doméstica de niña, sufrió un intento de violación de su padrastro y se marchó del hogar materno, se casó con 14 años con un chico de 18 que la pegaba hasta que su suegro, voluntario de Plan, medió y amenazó con denunciar a su propio hijo. Con 15 tuvo una hija. Desde entonces, su afán es estudiar. "Hago Derecho porque quiero ser abogada para defender a las mujeres, no a una, a todas", dice. En Ecuador, su país, un 30% de las adolescentes están o han estado embarazadas. "En dos décadas ha aumentado un 80% el porcentaje", denuncia María Antonia López, especialista de la organización en derechos de la mujer. Entre las amenazas que enfrentan muchas niñas por ciertas tradiciones arraigadas en el lugar donde nacen o la situación de pobreza, la mutilación genital femenina es, sin duda, una de las prácticas considerada más agresiva contra la mujer. Cada año aumenta en dos millones el número de las que se les practica la extirpación del clítoris. La ONU estima que entre 130 y 140 millones en el mundo han pasado por la operación en los 29 países de África y Oriente Medio donde está arraigada. Halaa El Din M., egipcia de 14 años, se libró del bisturí gracias a su determinación para convencer a sus padres de que no le practicaran a ella y sus hermanas la ablación. Por su cuenta, se fue a pedir consejo en su comunidad para que le dieran argumentos que persuadieran a sus progenitores. Lo consiguió. 
Pude decir no a una tradición que menoscababa mis derechos", Halaa, 14 años. Egipto 
"Pude decir no a una tradición que menoscababa mis derechos", dice orgullosa Halaa, quien ha estado en Madrid en compañía de otras seis chicas de otros países en el marco de la campaña Por ser Niña, de Plan España, que reclama educación gratuita para todas ellas en todo el mundo, al menos durante nueve años (6 de primaria y 3 de secundaria). Como Halaa, son cada vez más las que rechazan esta práctica para ellas o sus hijas. En 2011, Unicef publicaba que más de 6.000 comunidades en África ya habían abandonado esta práctica. Pero no se puede bajar la guardia, aseguran. En la Cumbre de la Niña, celebrada el pasado julio en Londres bajo el auspicio de la ONU, se alertó de que, en caso de que se mantengan las tasas de disminución de matrimonios infantiles y mutilación genital femenina, "el mero crecimiento demográfico determinará que el número de mujeres casadas en la infancia (más de 700 millones) se mantendrá al mismo nivel hasta 2050, y que el número de niñas sometidas a la ablación aumentará en 63 millones en ese mismo lapso". Así, para proteger los derechos de las pequeñas no queda más remedio que pisar el acelerador. 
- See more at: http://elpais.com/elpais/2014/10/10/planeta_futuro/1412954575_928101.html#sthash.TSA3sLkx.dpuf
CÁRITAS, EL SECRETARIADO DE LA COMISIÓN EPISCOPAL DE MIGRACIONES Y CONFER ADVIERTEN SOBRE LOS RIESGOS DE LA OPERACIÓN POLICIAL «MAS MAIORUM» PARA LA PROTECCIÓN DE LOS INMIGRANTES 
Madrid, 10 de octubre 2014.- Cáritas, el Secretariado de la Comisión Episcopal de Migraciones y CONFER (Conferencia Española de Religiosos) han advertido a toda su red territorial en España sobre los efectos que puede generar entre las personas inmigrantes la puesta en marcha del operativo policial que, bajo el epígrafe “Mos Maiorum”, ha sido diseñado desde el Consejo de la Unión Europea con el objetivo de que sea ejecutado en la semana del 13 al 26 de octubre de manera conjunta por todos los Estados de la UE. 
Según se señala textualmente en la citada Nota del Consejo, remitida con fecha del pasado 10 de julio, esta “Operación conjunta se va a realizar para:
• Detener a los migrantes irregulares y recoger información relevante para los servicios de inteligencia y con fines de investigación; 
• Identificar, procesar e interrumpir los grupos de crimen organizado; 
• Consolidar acciones conjuntas para lograr un impacto en la inmigración ilegal (actividades de control y vigilancia de las fronteras); 
• Llevar a cabo (en base de los resultados del análisis de riesgo), acciones de control a lo largo de las principales rutas de inmigración ilegal utilizadas por las redes de inmigración ilegal (dentro de la Área Schengen y las fronteras exteriores); 
• Recopilar y analizar información relacionada con los denominados movimientos secundarios”. 
Asimismo, a través de esta Operación desde el Consejo se pide de todos los países participantes que recaben la siguiente información: 
“A) Detalles de la interceptación: fecha y hora de detección, localización y lugar de interceptación, los medios de transporte; 
B) Detalles sobre las personas migrantes; nacionalidad, sexo y edad, lugar y fecha de entrada en la UE; 
C) Rutas del os migrantes: rutas, medios de transporte y la fecha de la intercepción después de haber llegado a la UE; rutas establecidas después de la interceptación y destino final de los migrantes; 
D) El modus operandi: los documentos falsos/falsificados de viaje incautados, solicitud de asilo, indicación de tráfico ilícito de migrantes irregulares, nacionalidad y país de residencia de los facilitadores, y dinero pagado por el viaje por cada migrante”. 
Posible vulneración de derechos humanos 
Ante la naturaleza y características de este operativo, Cáritas, el Secretariado de la Comisión Episcopal de Migraciones y CONFER (Conferencia Española de Religiosos) manifiestan su grave inquietud en cuanto a las posibles vulneraciones de derechos humanos que pueda acarrear, puesto que la selección del perfil de las personas a detener para obtener información incluye, necesariamente, un sesgo racial. 
Las mismas reservas se plantean con relación a los lugares donde se desarrollarían estas detenciones: ¿hablamos de espacios públicos, de instalaciones y dispositivos de acogida de organizaciones sociales como las nuestras? 
Pregunta al Parlamento Europeo 
La preocupación sobre los efectos de este operativo para las personas inmigrantes que viven en Europa es compartida en los ámbitos regionales de nuestras organizaciones. 
Prueba de ello es la pregunta que Cáritas Europa, la Comisión Católica de Migraciones Europea y el Servicio Jesuita a Refugiados han dirigido de manera
conjunta a la europarlamentaria Ska Keller para conocer, entre otras cuestiones, qué mecanismos se han puesto en marcha para garantizar que durante esta operación conjunta de la policía no sean violados los derechos fundamentales de los migrantes, incluyendo el principio de no discriminación y qué medidas de seguridad efectivas se van a adoptar para asegurar la adecuada protección de los datos personales recogidos. 
Habida cuenta de que una importante proporción de las personas migrantes en situación irregular que se encuentran en España son acompañadas de nuestras organizaciones, todas nuestras delegaciones territoriales permanecerán especialmente atentas durante los días señalados para la puesta en marcha del operativo “Mos Maiorum” a fin de registrar aquellas incidencias o sucesos que puedan ser objeto de la correspondiente denuncia. 
África, pecado de Europa 
Creado el 10 octubre 2014 por Victor Codina 
Victor Codina. Ahora que el tema del ébola, con miles de muertos en África occidental y el temor a contagios en España y en otros países, comienza a alarmar a todo el mundo y genera una psicosis de miedo y angustia… puede ser útil recordar un libro de Luís de Sebastián, economista y especialista en ciencias sociales y políticas, profesor de ESADE y de la UCA de San Salvador (1934- 2009). La obra se titula África, pecado de Europa (2006). Luís de Sebastián que unía al rigor científico una gran sensibilidad social y una profunda fe cristiana, quiso hablar del “pecado” de Europa con África, para demostrar que la injusticia que Europa ha cometido con África exige restitución, hay que devolverle lo robado, reparar el daño cometido. África ha sido colonizada por Francia, Inglaterra, España, Bélgica, Portugal, Holanda, Italia… Con la excusa de civilizar y modernizar el continente africano, las potencias coloniales se enriquecieron con las materias primas y crearon una situación de dependencia de las metrópolis que en algunos países dura hasta hoy. África para algunos es solo un lugar para safaris… Ahora son naciones independientes, con bandera e himno propio, pero donde una gran mayoría vive en situaciones precarias de alimentación, salud, educación y transportes, donde faltan infraestructuras básicas, hay conflictos bélicos y étnicos (a veces por cuestiones de los límites artificiales establecidos por las metrópolis), débiles democracias, hay hambrunas y sequías, miles de emigrantes que huyen hacia las costas del Mediterráneo español o italiano en busca de un futuro mejor, mientras hay niños soldados y se explotan las ricas minas de diamantes o de coltán (¡para nuestros móviles!) Este continente, del cual fueron arrebatados millones de esclavos para el trabajo de América, es el que padece el flagelo del ébola, que ahora nos preocupa porque llega a Europa… Pero África no solo es un continente que posee una gran riqueza de materias primas y de biodiversidad, sino un continente con una gran riqueza cultural, humana y religiosa, una gran sabiduría de sus tradiciones -desde Egipto a Cartago-, la fuerza imponente de su juventud, la vitalidad de sus mujeres, un profundo sentido religioso, la alegría de los diversos grupos cristianos y de unas Iglesias jóvenes. África es el continente de Mandela y Desmond Tutu, de mártires cristianos, de cooperadores y misioneros que se han jugado la vida por ayudar al pueblo. De África salieron Agustín, Orígenes y Atanasio, África fue la cuna del monacato y en África se santificaron Charles de Foucauld y los mártires trapenses de Tibhirine… No sabemos si Europa, ahora que tiene pánico ante el contagio del ébola, será suficiente humilde y lúcida para reconocer su pecado y reparar el daño cometido. En todo caso ojalá a través del clamor del pueblo sufriente escuchemos hoy la voz del Espíritu que nos pregunta, como a Caín, “¿dónde está tu
hermano Abel?” 
El examen de conciencia es una práctica antigua, pero muy buena 
2014-10-10 Radio Vaticana 
(RV).- (Con audio. Actualizado con video) Para no hacer entrar el mal en nuestro corazón hay una práctica antigua, pero muy buena, el examen de conciencia. Lo recordó el Papa Francisco en su homilía de la misa matutina celebrada en la capilla de la Casa de Santa Marta. Partiendo del Evangelio del día, en que se nos dice que el diablo jamás deja de tentarnos, porque como afirmó el Santo Padre “tiene paciencia”, y no deja lo que quiere para sí, “nuestra alma”, el Papa afirmó: “Después de las tentaciones, en el desierto, cuando Jesús fue tentado por el diablo, en la versión de Lucas se dice que el demonio lo dejó por un tiempo, pero durante la vida de Jesús volvía y volvía: cuando lo ponían a prueba, cuando le tendían trampas, en la Pasión, hasta en la Cruz. ‘Pero si Tú eres el Hijo de Dios, ven, ven con nosotros, así nosotros podemos creer’. Y todos nosotros sabemos que esta palabra toca el corazón: ‘¿Pero tú eres capaz? ¡Házmelo ver! No, no eres capaz’. Como el diablo hizo hasta el final con Jesús. Y así con nosotros”. Es necesario custodiar nuestro corazón donde habita el Espírito Santo – subrayó Francisco – “para que no entren los demás espíritus”. “Custodiar el corazón, como se custodia una casa, con llave”. Y después, vigilar sobre el corazón, como un centinela: “Cuántas veces – observó el Papa – entran los malos pensamientos, las malas intenciones, los celos, las envidias. Tantas cosas, que entran. ¿Pero quién ha abierto aquella puerta? ¿Por dónde han entrado? Si yo no me doy cuenta” de cuanto “entra en mi corazón, mi corazón se convierte en una plaza, donde todos van y vienen. Un corazón sin intimidad, un corazón donde el Señor no puede hablar y ni siquiera ser escuchado”. “Y Jesús dice otra cosa allí – ¿no? – que parece un poco extraña: ‘Quien no recoge conmigo, desparrama. Usa la palabra ‘recoger’. Tener un corazón recogido, un corazón sobre el cual nosotros sabemos qué cosa sucede, y aquí y allá se puede hacer la práctica tan antigua de la Iglesia, pero buena: el examen de conciencia. ¿Quién de nosotros, a la noche, antes de terminar la jornada, permanece solo, sola, y se hace la pregunta: qué cosa ha sucedido hoy en mi corazón? ¿Qué cosa ha sucedido? ¿Qué cosas han pasado a través de mi corazón? Si no lo hacemos, verdaderamente no sabemos vigilar bien ni
custodiar bien”. El examen de conciencia “es una gracia, porque custodiar nuestro corazón es custodiar el Espírito Santo, que está dentro de nosotros”: “Nosotros sabemos, Jesús habla claramente, que los diablos vuelven, siempre. También al final de la vida, Él – Jesús – nos da el ejemplo de esto. Y para custodiar, para vigilar, para que no entren los demonios, es necesario saber recogerse, es decir, entrar en silencio ante sí mismos y ante Dios, y al final de la jornada preguntarse: ‘¿Qué cosa ha sucedido hoy en mi corazón? ¿Ha entrado alguien que no conozco? ¿La llave está en su lugar?’. Y esto nos ayudará a defendernos de tantas maldades, incluso de las que nosotros podemos hacer, si entran estos demonios, que son muy astutos, y al final nos estafan a todos”. (María Fernanda Bernasconi - RV). 
Entrevista con el secretario general del Sínodo de los obispos - Un camino veloz 
2014-10-11 L’Osservatore Romano 
Es decididamente positivo el balance del Sínodo al final de la primera semana de trabajos y, por lo tanto, a mitad de camino de la tercera asamblea extraordinaria, reunida desde el domingo en el Vaticano para debatir sobre la familia. Quien habla es el secretario general del Sínodo de los obispos en una entrevista a L'Osservatore Romano. El sábado, por la mañana temprano, los locales del aula sinodal están casi desiertos y se oyen sólo las voces de los colaboradores, que trabajan también el sábado. 
Aprovechando el momento más tranquilo el cardenal Lorenzo Baldisseri relata sin formalidad, como es en su estilo directo y eficaz, la preparación de la asamblea, el trabajo proficuo de estos días verdaderamente intensos, el clima sereno, haciendo referencia, por último, a las próximas etapas de un camino que se está recorriendo muy ágilmente. 
Eminencia, para usted ha sido la primer vez, después de una vida sobre todo en las representaciones pontificias de medio mundo: ¿cómo ha ido? 
Tenía un poco de preocupación porque —incluso habiendo participado en muchas asambleas episcopales— no había estado nunca en un Sínodo y no lograba imaginar como sería esta nueva experiencia. Pensaba en una complejidad y en una rigidez mayores. En cambio no, el Sínodo es una asamblea como las demás, y existe una estructura y hay muchas personas, incluso muy preparadas, que han ayudado. 
¿Desde cuando se está trabajando y cuáles son las novedades de esta asamblea? 
Trabajamos desde hace más de un año y, si bien no hubo cambios formales, hemos experimentado una dinámica entre las normas y su aplicación, que obviamente puede ser rígida o flexible, y hemos aprovechado de este espacio. Entre las novedades, la principal y más significativa ha sido, en estos meses, la participación personal del Papa en todas las reuniones del Consejo ordinario de la Secretaría. En el debate en el aula hemos simplificado muchas formalidades e introducido el italiano, que incluso entre los padres sinodales es más conocido que el latín. Permitiendo de este modo, en un clima más informal, trabajos más eficientes y libres. 
¿Hubo, sin embargo, críticas sobre la información: un Sínodo blindado?
Todo lo contrario. También en este ámbito hemos simplificado, apuntando a los encuentros con los periodistas —incluso de cada uno de los padres, que son obviamente libres de conceder entrevistas— y abandonando el sistema de los resúmenes porque en realidad no reflejaban las intervenciones: el texto inicial escrito se sintetizaba y difundía, pero el pronunciado en el aula luego se modificaba. Pienso que de este modo se refleja más el debate. Un debate –lo repito– realmente libre. 
¿Cómo han sido estos días? 
Hemos respirado un clima sereno, incluso en la confrontación leal de los diversos puntos de vista, porque he visto en todos un gran amor a la Iglesia como pueblo de Dios, en todos una fidelidad indiscutible a la enseñanza en la tradición, con una mirada de misericordia a las personas. Hemos escuchado a todos los que pidieron intervenir: 180 intervenciones programadas y 85 en el espacio reservado a las intervenciones libres. En total, 265 intervenciones en el respeto escrupuloso de los tiempos, tanto que sobró una hora y media, que naturalmente hemos utilizado inmediatamente. «Usted tiene un reloj suizo» me dijo con un guiño el Papa. Pero el debate se ha facilitado también por el hecho de que el sesenta por ciento de las intervenciones llegaron antes y fue posible tenerlas en cuenta en la relación «ante disceptationem», base precisamente del debate. Que no fue para nada dramático, sino serio y constructivo. 
¿Y ahora? 
El lunes escucharemos la relación «post disceptationem», que está casi lista, luego el lunes por la tarde en los veinte círculos menores se prepararán los modos, es decir, las integraciones al testo, para llegar al jueves a su presentación en el aula. De aquí se pasará al documento final de esta asamblea, la «relatio synodi», otra novedad, que será votada el sábado y entregada al Papa. Mientras tanto, el sábado por la mañana, se publicará el «nuntius», es decir, el mensaje de la asamblea sinodal, que quiere hablar a los católicos y a los alejados, teniendo en cuenta a las personas, mujeres y hombres de hoy. El domingo tendrá lugar la misa conclusiva durante la cual —con la presencia y la participación de los jefes de las Iglesias orientales y de los presidentes de todas las Conferencias episcopales del mundo, miembros de esta asamblea— será proclamado beato quien ha instituido, en 1965, el Sínodo de los obispos: Giovanni Battista Montini, Pablo VI. Desde el lunes nos encaminaremos hacia la asamblea ordinaria que se tendrá dentro de un año. Procediendo con agilidad, como hemos hecho hasta ahora. (g.m.v.) 
Divorciados y vueltos a casar: se abre camino la “vía misericordiosa” en el Sínodo
La ternura del Papa 
Emerge clara una tendencia que privilegie respuestas basadas en la misericordia y la comprensión a los fieles que han fracasado en su unión conyugal, pero siempre partiendo de la indisolubilidad del matrimonio 
Andrés Beltramo Álvarez Ciudad del Vaticano Un vía misericordiosa con los divorciados y vueltos a casar, que no los margine y más bien los integre a la vida de la Iglesia, se ha abierto paso en las discusiones del Sínodo de los Obispos, la asamblea episcopal convocada por el Papa para analizar los desafíos de la familia en el contexto actual. El tema de los divorciados volvió a ser puesto sobre el tapete en las últimas discusiones ante el pleno de los 191 padres sinodales, que siguen sesionando a puertas cerradas en el Aula Nueva del Sínodo del Vaticano y ante la presencia del Papa Francisco, que durante todo el encuentro se ha mostrado afable y cercano, sobrio y alejado de todo protocolo. Dos discursos personales animaron el debate, que ya se planteó en torno a dos grandes ideas: una que sostiene a ultranza la doctrina de la Iglesia (que no acepta la ruptura de los matrimonios) sin abrir posibilidad alguna al análisis de casos especiales y otra más abierta a explorar caminos de acogida, aunque sin poner en riesgo el precepto de la indisolubilidad del matrimonio católico. Uno de estos mensajes fue pronunciado por el cardenal arzobispo de Viena, Cristophe Schönborn, quien confesó ante el pleno que él es hijo de divorciados, ha vivido en su piel el estigma de vivir en una familia desintegrada y llamó a no ignorar la soledad que se vive en estas situaciones. Otro obispo clamó: “Hermanos debemos, antes que nada, arrodillarnos delante del espíritu santo. No somos jefes de la misericordia de Dios, lo que Jesús pidió a los apóstoles es evangelizar y sanar”. Siguiendo en esa misma línea, varios de los participantes en el Sínodo se refirieron al camino penitencial que podrían emprender las personas divorciadas y vueltas a casar a las cuales se les podría, en ciertos casos, conferir la comunión (algo que hasta ahora está vetado). Según precisó el portavoz Vaticano, Federico Lombardi, se evidenció la necesidad de un itinerario penitencial, acompañado por una reflexión sobre los divorciados que se han quedado solos, que a menudo sufren en silencio, marginados de la vida social. Algunos obispos incluso dieron ejemplos de cómo ellos siguen caminos penitenciales con parejas divorciados, un itinerario basado en la reflexión sobre el impacto en los hijos de la ruptura, la reparación de las injusticias cometidas contra los ex esposos y cómo se afronta la relación con Dios en la nueva realidad de separados. “En segundo lugar, se ha subrayado la necesidad de tutelar a los hijos de los cónyuges divorciados a los impactos psicológicos del divorcio sobre ellos. En este ámbito ha sido recordado que una adecuada pastoral de los niños puede, a menudo, acercar a sus padres a la Iglesia”, agregó Lombardi. Sobre la concreta propuesta de abrir a la comunión a los divorciados, uno de los asistentes recordó cómo fue catalogado de “innovador y revolucionario en su tiempo” cuando el Papa Pío X (1903-1914) instauró la apertura de la eucaristía a los niños, que hasta ese momento no la recibían. También surgió la preocupación de algunos obispos por el impacto del divorcio en los niños, que son tratados como “pelotas de ping pon” que pasan de una casa a otra en los fines de semana. “¿Qué influencia puede tener en los niños un lenguaje típico del divorcio? Que ellos escuchen hablar de la novia de mi papá, el novio de mi mamá. De eso también se debe reflexionar”, apuntó uno de los obispos.
Sobre las dos líneas de pensamiento prevaleciente sobre este tema en el Sínodo, una de las preguntas lanzadas este viernes al portavoz Lombardi durante su diario encuentro con la prensa fue si él veía que se iba imponiendo una por encima de la otra. Él pidió prudencia y llamó a esperar a la relación después de la disertación, que será presentada el lunes próximo. Pero agregó una frase significativa: “Lo que podemos constatar es que se han dado pequeños pasos, desde el Instrumentum Laboris (documento preparatorio del Sínodo) hasta los discursos de los padres sinodales mandados con anticipación, a la discusión en el pleno”. 
Las Iglesias: «El Nobel a Malala y a Kailash es una oportunidad» 
(©Ansa) 
(©Ansa) Malala Yousafzai 
Vuelven a la agenda política de los gobiernos de Paquistán e India cuestiones como la condición de las mujeres y el derecho a la educación 
Paolo Affatato Roma Dos ciudadanos de India y Paquistán fueron premiados con el Premio Nobel de la Paz: es un hecho histórico y una oportunidad única y extraordinaria. Malala Yousafzai, chica paquistaní que fue víctima de un atentado talibán cuando tenía 12 años, y el hindú Kailash Satyarthi, activista de 60 años, obtuvieron el reconocimiento debido a su compromiso para defender los derechos de los niños, empezando por el derecho a la educación. El premio fue aplaudido por las Iglesias de Asia del sur con entusiasmo y orgullo, pero también como un impulso para un cambio real. Sobre todo en relación con la condición de las mujeres, en sociedades rígidamente machistas, y con el respeto de los derechos de la infancia. El motivo de esta decisión, se lee en la nota de los Nobel, es el siguiente: «Los niños deben poderi r a la escuela y no ser explotados por dinero. En los países más pobres del mundo, el 60% de la población tiene menos de 25 años de edad y es un prerrequisito para el desarrollo pacífico del mundo que los derechos de los niños y de los jóvenes sean respetados». Desde Karachi, donde coordina la comisión diocesana para los jóvenes, el sacerdote paquistaní Mario Rodrígues comentó para Vatican Insider: «Es la primera vez en absoluto que un ciudadano paquistaní vence un Nobel. El reconocimiento nos anima y tiene un alto valor social: ofrece al país un recorrido
hacia la paz y la prosperidad». Además, en un momento tan difícil para la nación, que vive fuertes turbulencias políticas y sociales, «el Nobel representa la oportunidad para dar pasos concretos en el campo de los derechos de las mujeres, fustigadas por una mentalidad extremista e integralista como la de los talibanes. Es tiempo de cambiar. Esperemos que se puedan abrir nuevas perspectivas: la campaña sobre el derecho a la instrucción, por ejemplo, es una campaña que une a la nación: musulmanes, cristianos y fieles de otras religiones». Concuerda Ataurehman Saman, investigador católico y director de las publicaciones en la comisión nacional Justicia y Paz (Ncjp), que considera el premio de Malala «una buena noticia para todo Paquistán, pues vuelve a poner en el centro del debate público la cuestión de los derechos de las mujeres y el derecho a la instrucción». Malala sufrió un atentado porque defendía el derecho al estudio para las niñas en el valle de Swat. «Es necesario que el gobierno adopte medidas adecuadas –dijo Saman a la agencia vaticana Fides– para garantizar el respeto de estos derechos», que son los mismos por los que se bate la Iglesia paquistaní. La monja también paquistaní Nasreen Daniel, comprometida cotidianamente en ayudar a chicas violadas o maltratadas, dijo a Vatican Insider que está «orgullosa y feliz». «Trabajamos mucho por el crecimiento y el desarrollo de las mujeres, y creemos que el Nobel a Malala es un signo de esperanza», añadió. Un poco más escéptica se mostró Fauzia Jacob, de la Asociación de las mujeres católicas, pues afirmó que no sabe «si el Premio podrá tener efectos positivos directos e inmediatos en la condición femenina en Paquistán, aunque, por supuesto, lo esperamos». Paquistán e India tienen en común estructuras sociales, culturas y tradiciones seculares, puesto que la división de ambos estados se dio hace poco más de 60 años. Muchas cuestiones sociales, como la defensa de los derechos de los niños, todavía se parecen mucho. Según Charles Irudayam, secretario de la comisión Justicia, Paz y Desarrollo, de los obispos hindúes, «el reconocimiento al activista Kailash Satyarthi servirá para aumentar la consciencia sobre el respeto de los derechos de los niños en la sociedad hindú». «Hay que recordar –explicó Irudayam a Vatican Insider– que la Iglesia católica está involucrada activamente en una campaña especial, con otras organizaciones de la sociedad civil. Se pide que el 9% del presupuesto estatal sea destinado a la defensa y promoción de los derechos de los niños; el 6% a la educación y el 3% a la salud. El primer derecho, efectivamente, es a la vida: cada 19 segundos un niño de menos de 5 años muere en la India debido a enfermedades fácilmente curables. Esperamos que ahora el nuevo gobierno del primer ministro Narendra Modi tome una postura clara con respecto a este tema». 
ESPIRITUALIDAD PARA TIEMPOS DE CRISIS
Miguel Ángel MESA BOUZAS 
Este libro que tienes en tus manos respira por todos los poros, y buena falta que nos hace respirar en estos tiempos de crisis. Por eso es tan urgente la espiritualidad. Siempre lo fue, y hoy lo es más todavía. La espiritualidad no es propiedad de ninguna religión, ni de la religión. Es el arte de respirar, de acoger y de infundir el Espíritu. Este libro nos ayuda a respirar. Late en cada página todo lo que duele a la vida, lo que la hiere y la ahoga. Y lo que la cura y alivia. Aquí encontrarás el diagnóstico justo en las palabras que salen al paso una y otra vez: explotación, paro, desahucio, opresión, pobreza, recortes... Es la elegía de la crisis, tan antigua y extendida. Pero acerca tu oído, escucha más adentro. Del fondo de la crisis sube el aliento de la vida nueva, del mundo nuevo, con otras palabras, las más bellas y verdaderas: vida, entraña, encarnar, regalo, gratitud, cotidianidad, hondura... Es el salmo de la vida. Cada página rebosa sencillez, claridad y hondura. No hay pretensión ni artificio. En la gracia de la palabra se derrama la gracia de la vida. Cada capítulo se abre con la cita de un pensamiento y se cierra con una bienaventuranza que abre la mirada y el aliento. Dice Pedro Casaldáliga en el epílogo: El libro es un abanico de actitudes complementarias, esenciales para que la espiritualidad no sea dicotómica ni vivida fuera del lugar y la hora. Es una espiritualidad que se nutre del Misterio de la Encarnación asimilado en la integridad de la Pascua. Es espiritualidad de la liberación... Una espiritualidad integral...
OJOS NUEVOS PARA UN MUNDO NUEVO. De la experiencia mística a otro mundo posible 
Antonio LÓPEZ BAEZA Todo creyente -de cualquier religión- que no haya caído en la trampa del fundamentalismo, ni se haya limitado a hacer de su fe un conjunto de creencias y prácticas evasivas de la realidad, sentirá la urgencia de encontrar el nexo vital que existe entre una auténtica fe en Dios y el servicio desinteresado al bien de la humanidad histórica. Sin dicho nexo desfallece la fe que, más pronto que tarde, resulta ser esa sal insípida de la que Jesús dice solo sirve para ser pisoteada, y que no pocas veces es la causa del descrédito de la práctica cristiana. El autor de este libro, desde su propia experiencia largamente meditada y compartida con numerosos grupos de oración, nos ayuda a entender que las dimensiones dialogante y contemplativa de la fe llevan consigo una verdadera fuerza revolucionaria para la consecución de ese otro mundo mejor, siempre posible. Insiste en que la verdadera Historia de Salvación es la que se escribe, día a día, a través de los creyentes de toda tradición religiosa que han hecho de su fe una experiencia mística. Y añade que todos los hombres y mujeres que buscan con sus vidas el bien de la Humanidad Histórica son igualmente obreros de la viña del Señor, aunque no actúen movidos por una ética confesional. Pero, para los seguidores de Jesús de Nazaret, cuya fe se autentifica en la Mística de la Encarnación, ha sonado la hora de no poder decir nada sobre Dios si no es mediante los hechos de su compromiso con la Vida y, en ella, con los que más sufren. 
Nueva biografía de Schopenhauer
Nueva biografía de Schopenhauer 
A finales de este mes de mayo de 2014 la madrileña Editorial Trotta publicará "Schopenhauer. Una biografía". Este libro contiene mi aportación al conocimiento y la interpretación de la vida del filósofo alemán Arthur Schopenhauer (1788-1860), el padre del pesimismo filosófico, el pensador por antonomasia de la caducidad y la negrura de la existencia. Hace ahora casi una década que vio la luz otro libro mío titulado "Schopenhauer, vida del filósofo pesimista" (Algaba, Madrid, 2005). Era la primera vez que un estudioso español daba a la imprenta una biografía del autor de El mundo como voluntad y representación; que yo sepa, fue la primera escrita en castellano y en España. Tuvo muy buena acogida entre los seguidores de Schopenhauer y el público en general. Sin embargo, aunque cuidado en su forma externa, este libro apareció con algunos errores; además, las obras del filósofo se trataban de manera muy somera; requería una nueva estructura y la revisión o ampliación de algunos pasajes; por eso decidí volver a escribirlo y darle una vida nueva, pues hace tiempo que ha desaparecido de las librerías. De manera que "Schopenhauer. Una biografía" es un libro nuevo que sustituye al que Algaba publicó en 2005. El gran sueño hecho realidad
Algaba, 2005 
Schopenhauer nunca quiso escribir sobre sí mismo en sentido autobiográfico (apenas si dejó un puñado de textos sobre su persona y carácter; muy reveladores, por cierto). Argumentaba que a él le importaban más las ideas de los grandes hombres que las peripecias de sus vidas. Escribió que ocuparse de la vida de los filósofos era como si al contemplar un cuadro, nos fijásemos más en las molduras del marco que lo enmarca que en el cuadro en sí. No comparto esta idea. Vida y obra conforman una unidad inseparable (es una verdad de Perogrullo que sin vida no hay obra); creo que al conocer las peripecias vitales de un autor se comprenderá mejor su obra (sin ir más lejos: ¿Qué circunstancias contribuyeron al nacimiento de sus ideas? ¿Hubo hechos concretos que las motivaron? ¿En qué ambiente escribió sus libros?). La vida de Schopenhauer tal vez no sea clave para comprender muchas de sus ideas, pero es relevante para conocer las particularidades del carácter del que brotó su pensamiento; para saber cuál fue la intención principal que motivó a Schopenhauer a crear su extraordinario sistema de filosofía o qué influencias lo estimularon para pensar; cómo supo de su vocación, cómo sintió la llamada de la filosofía y su porqué. La belleza de su obra y su rotundidad filosófica también enraízan en la vida del filósofo, no en vano el propio Schopenhauer admitía que toda su obra había surgido de su experiencia personal más que de los libros que había leído o de las teorías de otros filósofos. Schopenhauer, de carácter desabrido, hombre enérgico, orgulloso de sí mismo y de su inteligencia, sólo vivió para su obra; ella fue la razón de su vivir; esto da que pensar desde un punto de vista filosófico (¿Vivir? ¿Filosofar? ¿Todo uno?). No engendró hijos, engendró "obra", libros. No se casó, reiteraba a quien quisiera oírle que su única esposa era la filosofía. Vivió solo y, en apariencia, aislado de sus congéneres, pero anhelaba su aplauso y su admiración. Al mismo tiempo, despreciaba a sus contemporáneos por considerarlos muy por debajo de él en cuanto a capacidad intelectual; los rechazaba porque los creía incapaces de reconocer que entre ellos habitaba un genio al que debían rendir admiración y pleitesía; Schopenhauer se consideraba sin empacho el filósofo más importante desde Platón y Kant, el más cimero del siglo XIX y de los siglos venideros; en alguna ocasión incluso llegó a decir que después de él ya no hacía falta continuar pensando en hallar sistemas filosóficos que explicasen el mundo, pues su sistema había dado con la clave del ser y de la existencia. Lo cierto es que algo de genialidad si que tuvo Schopenhauer puesto que terminó siendo reconocido por el público de su época, que leía y admiraba sus obras. Y aún hoy se leen con satisfacción y provecho a pesar de que muchas de sus afirmaciones nos parezcan salidas de tono. La vida de Schopenhauer en conjunto y vista en perspectiva ejemplifica la obsesión de un hombre por conseguir el cumplimiento de un sueño, la realidad de un anhelo. "Go, catch your Dream" reza el popular lema norteamericano que tanto inspiró a Steve Jobs, por ejemplo; Schopenhauer atrapó su sueño a su manera: él quería ser un gran filósofo, desvelar el misterio de la existencia, dar con la razón y el sentido del mundo, y murió satisfecho creyendo que había cumplido ese sueño. La historia de aquel anhelo y el cumplimiento del sueño de Schopenhauer, además de otras cosas, es lo que relata "Schopenhauer. Una biografía". La vida de Schopenhauer fue paradigma de qué significa querer y poder, anhelar y desear, obtener y poseer. Un deseo muy intenso suele satisfacerse en esta vida, igual que un sueño adorado suele hacerse realidad; eso sí, hay que quererlo con mucha intensidad y trabajar lo que haga falta para conseguirlo: "quieres, luego puedes; pero antes tendrás que padecer por lo que quieres", tal podría ser la máxima que guió a Schopenhauer.
Otras biografías de Schopenhauer 
Safranski-Alianza Editorial 
Biografías de Schopenhauer abundan en alemán en mayor número que en otros idiomas. En 1987 Rüdiger Safranski publicó la que hasta hoy sigue siendo la más famosa: Schopenhauer und die wilden Jahre der Philosophie (Schopenhauer y los años salvajes de la filosofía); sin duda, esta obra constribuyó a despertar el interés por la persona y las ideas de Schopenhauer en Alemania, pero también más allá de las fronteras alemanas, puesto que tras su éxito de ventas en los países germanófonos, se tradujo al inglés y a la mayoría de idiomas europeos. Vio la luz en un momento propicio, puesto que en 1988 se celebró mundialmente el bicentenario del nacimiento del filósofo de Dánzig; el libro de Safranski sirvió para recuperar la vigencia del pensador. Los ecos de aquella celebración también recalaron en España, donde esta biografía apareció en 1990 bajo el sello de Alianza Editorial. En la actualidad la comercializa Tusquets. Safranski dio con una fórmula que más adelante continuó aplicando a las demás biografías que ha escrito: narrar la vida de su biografiado sin olvidarse de repasar con cierta exhaustividad el ambiente intelectual de su época. Sin embargo, en el fondo este libro poco o nada novedoso aportaba a lo ya sabido sobre la vida de Schopenhauer; Safranski recapituló y expuso otra vez lo que otros biógrafos anteriores dieron a la luz mucho antes que él. Actualizó lo ya sabido y, de manera muy amena, lo transformó en un relato más ágil y apasioanante. El lector se enterará de muchas cosas en esta biografía, pero si busca una comprensión exhaustiva de la filosofía y los afanes intelectuales de Schopenhauer acaso se vea decepcionado. Safranski pasa por encima de las interpretaciones profundas, falta hondura a la hora de explicar con claridad y concisión las ideas principals de la obra capital de Schopenhauer, aunque los episodios de su vida están muy bien narrados y documentados. Este "Schopenhauer" de Safranski continúa siendo el libro más divulgado y el más célebre porque tiene suficientes méritos para ello. Safranski hizo un buen trabajo de divulgación; de su cosecha es el estilo apasionado, pues en lo que atañe a las investigaciones principales y los testimonios sobre la vida de Schopenhauer, los encontró bien servidos. Apenas fallecido el filósofo pesimista, Wilhelm von Gwinner (1825-1917) publicó la primera biografía; andando el tiempo fue ampliándola y se convirtió en "la biografía canónica de Schopenhauer"; durante casi siglo y medio esta fue "la biografía por antonomasia del maestro"; me refiero a Schopenhauers Leben (Vida de Schopenhauer), cuyo texto definitivo, el de la tercera edición "estructurada de nuevo, aumentada y revisada", apareció en 1910 (Leipzig, Brockhaus).
Tercera edición de 1910 
Cuando Schopenhauer murió, y dada la admiración de la que su persona y obra gozaban en Alemania, Gwinner publicó un pequeño libro hagiográfico con el título de Arthur Schopenhauer aus persönlichem Umgang dargestellt (1862). Este "retrato de Schopenhauer desde el trato personal", como reza el título, consituyó el germen para la posterior "gran biografía" que hemos mencionado. Gwinner, jurista de profesión, trató mucho a Schopenhauer en sus últimos años. Fue su albacea, a su cargo quedó el cumplimiento de su testamento, y tuvo acceso a todo el legado manuscrito del filósofo antes que otras personas allegadas al difunto. Según Julius Frauenstädt, discípulo y amigo de Schopenhauer, encargado asimismo de velar por la edición póstuma de la obra del maestro —enfrentado a Gwinner y acaso celoso de él—, este último habría tenido acceso privilegiado a un cuaderno con apuntes íntimos de Schopenhauer del que se habría servido a capricho para extraer episodios y testimonios e incluirlos en su primera aproximación biográfica. Tal cuaderno llevaba el epígrafe griego "Eís heautón", "para sí mismo" (igual que el célebre escrito de Marco Aurelio, conocio como "Meditaciones"). Frauenstädt aseguró, además, que Gwinner, celoso de su posesión, no había querido que nadie más leyese ese cuaderno y lo había destruido. Lo cierto es que entre los manuscritos de Schopenhauer se encontró un puñado de páginas con algunas notas esbozadas agrupadas bajo este título de "Eís heautón", y que estas notas versaban sobre su propia persona y personalidad. De ahí a que existiera un cuaderno entero plagado de anotaciones "íntimas" hay gran distancia y suscita serias dudas. Frauenstädt, a su vez, también reunió recuerdos de Schopenhauer y, junto con Ernst Otto Lindner —un discípulo y admirador del filósofo—, publicó en 1863 el volumen titulado Über Schopenhauer (Sobre Schopenhauer. W. Hayn, Berlín). El tomo contine escritos misceláneos de recuerdos, cartas y algunos párrafos extraídos del legado manuscrito. Otro admirador de Schopenhauer, Eduard Grisebach, publicó en 1897: Schopenhauer. Geschichte seines Lebens (Schopenhauer, historia de su vida. Erst Hofmann, Berlín); una biografía, de menor envergadura que la de Gwinner, pero que contiene cartas inéditas del filósofo y recuerdos de algunas personas que rememoraban encuentros con él y las conversaciones que mantuvieron.
Griesebach, 1897 
Las biografías de Gwinner, Frauenstädt y Grisebach aportaron ya la mayor parte de la infomación de la que nos hemos nutrido los biógrafos posteriores hasta la actualidad. Trabajos más específicos, centrados en episodios concretos de la vida de Schopenhauer han ido apareciendo luego, claro está. La labor del gran estudioso Arthur Hübscher es inapreciable en cuanto se refiere a la catalogación de obras, inéditos y testimonios, así como al cuidado de la célebre edición de obras completas de Julius Frauenstädt (Brockhaus, Mannheim. Jubiläumausgabe en siete tomos, 1988); esta es la la edición de obras completas que hoy se considera canónica entre los estudiosos de Schopenhauer. Suele ser la más citada, la edición de referencia. A Hübscher debemos asimismo una magnífica edición muy asequible de los manuscritos del legado de Schopenhauer (Der handschriftliche Nachlass dtv, 1985) y la recopilación más completa de las "Conversaciones" del filósofo (Gespräche, Carl Winter, 1933; nueva edición, aumentada: Friedrich Fromman, Stuttgart y Bad-Cannstatt, 1971). En 1977, el austriaco Karl Pisa, periodista y escritor polifacético, interesado en la política de su país tanto como en personajes de la talla de Paracelso, Tocqueville y Schopenhauer, publicó su meritoria biografía Schopenhauer, Geist und Sinnlichkeit (Espíritu y sensualidad, Paul Neff Verlag, Viena); bien escrita, amena y documentada. Ésta fue la mejor via y la más actualizada para conocer a Schopenauer hasta de que llegase Safranski. Schopenhauer y los años salvajes de la filosofía dejó en el olvido a Pisa, cuyo libro es asimismo muy ameno y bien documentado, Safranski obtuvo mucho de él, sin duda. Pero el éxito de Safranski no ha amendrentado a otros divulgadores de la filosofía, a Robert Zimmer, por ejemplo, quien en 2010 publicó en Alemnia Arthur Schopenhauer. Ein Philosophiscer Weltbürger (Arthur Schopenhauer, un filósofo cosmopolita) dtv, Múnich, 2010). Un libro ameno y con numerosos aciertos. La última biografía del autor de El mundo como voluntad y representación de la que tengo noticia es
la del norteamericano David E. Cartwright, profesor de filosofía en la Universidad de Wisconsin. El título: Schopenhauer. A Biography (Cambridge University Press, 2010). Un vistazo a su contenido constata que se trata de una biografía sólida y bien documentada, con detalladas explicaciones de las obras de Schopenhauer y el relato pormenorizado de los espisodios de su vida. El editor señala en la cubierta "This is the first comprehensive biography of Schopenhauer written in Englisch". La verdad es que la mayor parte de los biógrafos de Schopenhauer escribieron o escriben en alemán, sin embargo, en el mundo anglosajón contamos con monografías y estudios suficientes sobre Schopenhauer. Precisamente fue en el mundo anglosajón donde arraigó pronto un gran interés por los libros de Schopenhauer. Hay que recordar, que fue un inglés quien dio el pistoletazo de salida para que la fama del filósofo pesimista fuera más conocido en Alemania y después sus ideas traspasaran las fronteras del continente y llegasen a Inglaterra: John Oxenford, con el célebre artículo en la Westminster Rewiew: "Iconoclasm in german Philosophy" publicado en 1850. Treinta años despúes de la muerte del filósofo, acompañado por una época en la que sus ideas eran ya muy populares en Inglaterra, fue un escocés quien escribió la primera biografía en inglés de Schopenhauer. William Wallace (1843-1897) descendía de nobles escoceses. Filósofo y humanista de profesión, se interesó por la filosofía alemana, tradujo nada menos que la Lógica de Hegel al inglés y escribió una biografía de Kant, además de esta: Life of Schopenhauer (Vida de Schopenhauer, Londres, W. Scott, 1890). Sorprendentemente esta obrita, en la actualidad desconocida para el público de habla inglesa, está traducida al castellano, aunque hace tiempo descatalogada. He aquí la referencia: William Wallace, Schopenhauer. Prólogo de Fernando Savater, Traducción de Joaquín Bochaca. Ediones de Nuevo arte Thor, Barcelona, 1988. Por supuesto que este libro de Wallace no es ni de lejos tan "comprehensive" (exhaustivo, abarcador) como la biografía firmada por Cartwright; pero, basado fielmente en las obras testimoniales de Gwinner y Frauenstädt, y bien escrito, ostenta el honor de haber sido la primera biografía de Schopenhauer escrita por un autor no alemán y fuera de Alemania. 
Wallace en castellano 
En 1988, con ocasión de las celebraciones del segundo centenario del nacimiento de Schopenhauer, apareció en español este libro de Wallace con un prólogo de Fernando Savater, gran admirador del filósofo psimista, como es bien sabido. Igualmente en la época del mencionado bicentebnario, la editorial
Cátedra publicó en castellano el libro del filósofo británico Brian Magee: Schopenhauer (Madrid, 1991); este autor, gran devoto de Wagner y Schopenhauer, explica con claridad los puntos más importantes de la metafísica, la ética y la estética del filósofo y reserva un apartado final para tratar de su influencia en autores posteriores, tales como Wittgenstein y Freud. Aunque no es propiamente una "biografía", Magee comenta los rasgos de carácter de Schopenhauer y repasa de manera somera las etapas de su vida. Es un libro que ha quedado injustamente relegado, y que bien merece una segunda oportunidad. Confiamos en que se reedite. Aparte de este puñado de títulos mencionados, quedan sin reseñar aquí algunas valiosas monografías más, por ejemplo, las de Arthur Hübscher o la archiconocida de Walter Abedroth (rororo Monographien); pero no he pretendido ser exhaustivo sino sólo abrir camino al lector curioso a fin de que prosiga a su antojo investigando en la bibliografia biográfica de Schopenhauer. Espero que este nuevo libro de Trotta, Schopenhauer. Una biografía, sirva para aportar una visión verosímil del hombre que fue Schopenhauer , de cómo vivió y, a grandes rasgos, de lo que pensó y escribió. 
Schopenhauer, Wilhelm Busch 
La carga del pasado 
La Transición demostró que el cambio era posible y que los dirigentes actuaron de manera sensata. Pero no hay milagros: muchos problemas heredados quedaron en pie. Desligarse de ellos exige un gran esfuerzo 
José Álvarez Junco 12 OCT 2014 - 00:00 CEST
NICOLÁS AZNÁREZ 
Hace solo veinte, o incluso diez, años, España parecía haber superado muchos de los problemas que habían mantenido al país hundido en un atraso secular. Un atraso relativo, solo comparado con Inglaterra, Francia o Alemania, pero vivido como muy humillante por nuestros bisabuelos, que creían en pueblos o razas superiores e inferiores y no podían admitir compararse con Polonia, Turquía o Marruecos. Mirándose en el espejo de la Europa avanzada, las generaciones del 98 o del 14 se angustiaron y desesperaron ante lo que percibieron como país pobre, dividido entre unos pocos latifundistas con ínfulas nobiliarias y unos millones de braceros toscos e ignorantes; con unos períodos de efervescencia política seguidos por otros en que reinaba el orden gracias a la fuerza, el caciquismo y el falseamiento del sufragio; sometido a una influencia clerical desmesurada incluso para el mundo católico y a un intervencionismo militar que se traducía en constantes pronunciamientos y dictaduras; y enfrentado con el nuevo desafío catalán y vasco. Ese inestable cóctel llevó, tras muchos zig-zags, al baño de sangre de 1936-39. Pero pareció superado al terminar el largo período franquista, con una Transición relativamente fácil. No seré yo quien reniegue de la Transición. Pero sí del clima triunfalista que generó. De repente, pareció que todo iba bien: habíamos resuelto nuestros problemas —salvo el territorial—: ni éramos pobres ni dominaban ya militares, curas y latifundistas. Sacábamos pecho. Éramos un país europeo, “normal”. Hablábamos del “milagro español”. Celebrábamos con toda pompa los fastos del 92. Nuestros ferrocarriles y carreteras deslumbraban ahora a los europeos, que hacía nada de tiempo estaban a años luz de nosotros —era en parte gracias al dinero europeo, pero eso mejor olvidarlo—. Nuestra renta per cápita iba a superar a la italiana, luego a la británica, y era cuestión de tiempo alcanzar a franceses y alemanes. En cuanto a nuestra democracia, quién podía ponerle un pero. Qué importaba que en Inglaterra o Estados Unidos hubiera tardado siglos en formarse y la nuestra fuera de ayer y poco menos que caída del cielo. Pero no hay milagros. La Transición, con todas sus virtudes, se hizo sin cumplir un requisito que hubiera preocupado a un Giner de los Ríos: la preparación pedagógica indispensable para cualquier avance político. Es verdad que en el mundo clandestino del antifranquismo se había ido creando una cierta cultura democrática, pero estaba cargada de rasgos jacobinos o inquisitoriales; no se interiorizaron los valores de libertad, de respeto al otro, de convivencia con el disidente. Faltó ese saber ser libres que no se establece por decreto, como se establecen las convocatorias electorales, sino que se aprende con tiempo, esfuerzo y duros golpes al dictador que todos llevamos dentro. Una función pedagógico-política de este tipo podía haber cumplido la malhadada Educación para la Ciudadanía, pero esta se enfocó por otros derroteros, más sofisticados, más provocadores frente a la moral católica tradicional, menos centrados en lo que aquí necesitamos: aprender a debatir, a escuchar al discrepante, a practicar la libertad de manera responsable; es decir, a hacer exactamente lo contrario de lo que hacen los tertulianos o los reality shows televisados. Mi generación no pudo leer a Giner de los Ríos o a John Stuart Mill. Para las siguientes, se decidió que no hacía falta (y ahora el Gobierno suprime, sin más, la educación cívica). Y eso se paga. 
El pesimismo es lo que menos necesitamos ahora. Construyamos sobre los datos positivos 
Una democracia que no se asienta sobre una ciudadanía educada y consciente de sus derechos es necesariamente de mala calidad. Porque el ciudadano sin formación política tiende a cometer errores de bulto. Uno de los primeros es caer en el populismo, que consiste en aceptar la ingenua idea de que el pueblo es bueno y que todo iría bien si se hiciera lo que él quiere o intuye; los culpables de nuestros males son los dirigentes, “los políticos”. Lo cual elimina la responsabilidad de la ciudadanía, pese a ser ella quien ha generado y ha elegido a estos. Y conduce a un segundo error: poner desmesuradas esperanzas en un líder o un partido, sentarse a esperar redentores, políticos fuertes y honestos que, sin esfuerzo por nuestra parte, nos resolverán los problemas. Lo cual provoca enseguida el desencanto. El elector defraudado gira entonces al otro extremo y empieza a denigrar al que ayer veneraba. Ortega lo escribió: hay que “desterrar, podar del alma colectiva, la esperanza en el genio, que viene a ser una manifestación del espíritu de la lotería. (…) Prefiero para mi patria la labor de cien hombres de mediano talento, pero honrados y tenaces, que la aparición de ese genio, de ese Napoleón que esperamos”. ¿Cómo pudimos creer que, en un abrir y cerrar de ojos, habíamos superado un pasado tan duro, que toda nuestra herencia cultural había desaparecido por arte de magia? El ser humano se comporta según le enseña el entorno en que crece. Lo cual de ningún modo significa que estemos sometidos a un destino fatal, que el pasado sea una losa imposible de levantar. Sobran los ejemplos de cambios; el cambio existe, es incluso inevitable en la historia; pero las herencias y las continuidades, también. Que el cambio era posible se demostró durante la Transición. Un exfalangista, joven, listo y ambicioso,
comprendió que era inevitable desmantelar el régimen y lo hizo en relativamente poco tiempo. Un rey, joven también y menos corto de lo que creíamos, entendió que las circunstancias no le permitían comportarse como su abuelo. Los dirigentes de la oposición renunciaron a los maximalismos revolucionarios a cambio de un sistema democrático parlamentario. Los dirigentes actuaron, pues, de manera sensata. Pero muchos problemas heredados quedaron en pie. 
Sentarse a esperar redentores que nos resuelvan las dificultades conduce al desencanto 
Dejando de lado los aspectos económicos, que no son mi campo, y ciñéndome a lo institucional y cultural, no era lógico pensar que unos funcionarios, jueces, militares o policías que habían aprendido a desempeñar sus tareas en un régimen de sumisión, halago al jefe y cultivo de clientelas, iban a convertirse en impecables servidores de la ley y el bien público sin necesidad de ningún tipo de reciclaje. Ni que unos ciudadanos que habían obedecido durante siglos por puro miedo al castigo, una vez suavizado este y sin aprendizaje alguno iban a interiorizar y cumplir las normas de convivencia. Ni que los propios políticos que condujeron la Transición iban a dejar de aprovechar el entorno y los reflejos heredados para recaer en el clientelismo y el autoritarismo. Ni que un país con tan pobre tradición científica iba a empezar a tener, sin un enorme esfuerzo de inversión y nuevos métodos de enseñanza y de selección del personal, tantos premios Nobel de Física o Medicina como otros donde se había cultivado la ciencia durante siglos. Ni que profesores para quienes una clase consistía en recitar un monólogo ante un grupo de oyentes pasivos, que debían repetirlo luego memorizado en un examen, iban de repente a saber incentivar la lectura, fomentar la participación de sus estudiantes y debatir y pensar juntos. Ni que una ciudadanía acostumbrada a escabullirse de la hacienda pública, y a admirar a los defraudadores, iba a pagar honradamente sus impuestos. Ni que quienes habían crecido al amparo de caciques no iban a votar, ahora que podían votar, a alcaldes corruptos pero que traían dinero al pueblo. No estoy recetando un retorno a la literatura del “Desastre” y al “problema de España”, a la autoflagelación y al ensayismo fácil sobre caracteres colectivos de raíz metafísica. Una dosis de pesimismo es lo que menos necesitamos ahora. En la España actual hay datos positivos, como el que nadie cuestione la legitimidad de la democracia; o que no haya una extrema derecha populista, al contrario que en nuestra siempre envidiada Francia; o el carácter pacífico del proceso catalán —por ambas partes; y pese a las pasiones que levanta—; o la insólita transformación de nuestras fuerzas armadas. Construyamos sobre esos datos. No hay que ser fatalistas, pero tampoco ingenuos. Evitemos la ilusión milagrera. Las ataduras del pasado son superables, pero para desligarse de ellas hay que reconocer su existencia y realizar un gran esfuerzo. 
José Álvarez Junco es historiador. Su último libro es Las historias de España (Pons / Crítica). 
La esposa de la canción
El País | Gustavo Martín Garzo 
“Santa Teresa”, escribe Cioran, “era una esposa de la canción, un corazón traspasado, el misterio del solitario, de una pasión divina imparcial, la misma fuerza, lo mismo… Todo su tambaleo en un trance de éxtasis es la esposa del Cantar que deambula y no encuentra, es todo el embebecimiento sabroso, es la esposa de la canción que ha logrado su propósito, o que ha sido secuestrada por sorpresa”. Una esposa en busca de su amado, que sigue su rastro en la oscuridad, que se adentra con él donde nadie puede verles. El Dios en el que cree Santa Teresa no es una entidad abstracta, como el dios de las grandes religiones, sino que tiene una dimensión humana. No solo habla con él sino que llega a describirlo físicamente: habla de su cuerpo, de sus gestos, del color de sus ojos. Habla de él como la esposa del Cantar lo hace de su amado. Y, como la esposa, también ella busca un lugar escondido y secreto, donde recibirle, pues todo ese mundo de visiones, arrobamientos y gozos inefables, ese mundo de hermosos desatinos de los que ella da cuenta en sus escritos solo hablan del cuerpo transfigurado por el amor. Los pasajes en que nos cuenta sus raptos no tienen nada en común con los delirios de un psicótico. Un delirio es un sueño que no se puede compartir, que solo le pertenece al que lo tiene, que no cabe abandonar. Y los delirios de Santa Teresa lejos de apartarla del mundo la hacen soñar con una comunidad de iguales, una comunidad de mujeres. En realidad, tan pronto se encuentra con Dios corre a reunirse con sus monjas para contárselo. Y como prueba de ello ahí está el Libro de la vida, que es sin duda uno de los libros más extraordinarios, inclasificables y deleitosos que se han escrito en nuestra lengua. Una Sherezade celeste es lo que Santa Teresa soñaba ser. Santa Teresa no se limita a hablar con Dios sino que lo ve, y se ve atravesada por él. Este es el famoso pasaje en que Santa Teresa describe uno de esos encuentros: “Vi a un ángel cabe mí hacia el lado izquierdo en forma corporal… No era grande, sino pequeño, hermoso mucho, el rostro tan encendido que parecía de los ángeles muy subidos, que parece todos se abrasan… Veíale en las manos un dardo de oro largo, y al fin del hierro me parecía tener un poco de fuego. Este me parecía meter por el corazón algunas veces y que me llegaba a las entrañas: al sacarle me parecía las llevaba consigo, y me dejaba toda abrasada en amor grande de Dios. Era tan grande el dolor que me hacía dar aquellos quejidos, y tan excesiva la suavidad que me pone este grandísimo dolor que no hay desear que se quite, ni se contenta el alma con menos que Dios. No es dolor corporal, sino espiritual, aunque no deja de participar el cuerpo algo, y aun harto. Es un requiebro tan suave que pasa entre el alma y Dios, que suplico yo a su bondad lo dé a gustar a quien pensare que miento… Los días que duraba esto andaba como embobada, no quisiera ver ni hablar, sino abrasarme con mi pena, que para mí era mayor gloria, que cuantas hayan tomado lo criado”. Se trata de un rapto consentido, la escena de una amante arrebatada en la noche por el ser que ama. Estamos en el reino de la adoración, y adorar algo es abandonar el reino del yo, del sujeto, y desaparecer
en esa noche de la que hablan las canciones de alba. Los amantes, en esas canciones, no quieren que la noche termine, no quieren que amanezca porque eso supone encontrarse con aquellos que eran antes de conocerse. “El cuerpo del amor se vuelve transparente”, escribe José Ángel Valente en uno de sus poemas. Y añade: “No busca el alba, no amanece el cantor”. Es de ese espacio sustraído a la identidad, a la razón, al alba, de lo que habla Santa Teresa en sus trances. “La poesía”, escribió Lorca, “no quiere adeptos sino amantes. Pone ramas de zarzamoras y erizos de cristal para que se hieran por su amor las manos que la buscan”. Santa Teresa es una de esas amantes, por eso sufre constantes trastornos y llega a enfermar una y otra vez en ese camino de perfección. Se ha hablado de crisis epilépticas, de problemas histéricos, de trastornos derivados de unas fiebres reumáticas mal curadas y de otras dolencias reales o imaginarias. Pero su cuerpo es el cuerpo de todos los seres heridos de los cuentos. Los cuerpos heridos por la pena o el desprecio de los demás, que no fue sino lo que ella misma tuvo que sufrir a causa del origen judío de su familia y de su condicion de mujer. Es la ley de los cuentos, que nada esté completo, por eso su mundo está poblado de seres y lugares rotos. Seres a los que les faltan los brazos, que no pueden ver o andar, que viven presos en torres que nadie visita, que han perdido la voz o que tienen que realizar las tareas más complicadas o visitar los reinos más extraños. Santa Teresa siempre cumple con esas tareas y regresa de esos reinos. Como el trapecista, vuela a lo alto, pero sabe que tiene que descender, ocuparse de sus monjas, de su escritura, de sus compromisos con el mundo y con su propia fe. Por eso quiere reformar el Carmelo, para hacer frente a esos compromisos. Para ella, un convento es un lugar donde vivir. De ahí su humor, la ironía que desprenden sus escritos. La ironía transforma el templo en una casa. “No era grande, sino pequeño”, escribe del ángel que la visita. Ese ángel es una metáfora preciosa del amor, porque el amor, como el juego de los niños, es el reino de lo pequeño. La celda en que escribía Santa Teresa era un lugar diminuto. Escribía sentada en el suelo, poniendo el papel sobre el duro jergón, ya que apenas había espacio para más. Es curioso señalar a este respecto la importancia que tienen los diminutivos en el Libro de la vida. Se ha hablado de su valor afectivo, y de cómo esa forma gramatical expresa el estado de pobreza espiritual del alma que empieza su camino de perfección, pero su verdadero significado es otro. “Casa de trece pobrecillas, unos trabajillos envueltos en mil contentos, una triste pastorcilla, estas maripositas de las noches…”, todos esos diminutivos son su manera de mantenerse en ese reino de lo pequeño esencial. Lo pequeño es el símbolo de lo que está en el umbral, lo abierto a otras formas de realidad, al lugar donde viven los deseos. Su mundo es el mundo de graciosa afectividad de los villancicos y las canciones populares. Pero ¿no es la escritura también una forma de hacerse pequeña, de desaparecer en ese silencio que es su sola razón de existir? Santa Teresa no escribe porque se lo hayan pedido sus superiores, pues de ser así ¿cómo sus palabras tendrían esa gracia, estarían tan llenas de deseo? Escribir para ella es relacionarse con lo que desconoce. La búsqueda de un interlocutor providencial que le haga decir lo que no sabe explicar; la espera, en suma, de la gracia. Una respuesta a preguntas que no nos habíamos hecho, eso es la gracia para ella. Tal es el misterio de Santa Teresa, y lo que hace que cinco siglos después de su nacimiento podamos seguir leyéndola con gozo: transforma la religión en poesía. Porque religión y poesía no siempre son lo mismo (y esta es la desgracia de las religiones). La religión nos ofrece respuestas; la poesía nos enseña a amar las preguntas aun sabiendo que no pueden ser contestadas. Gustavo Martín Garzo es escritor 
Salamanca y la serie Isabel en Tve
¡Vaya! Si más pronto lo digo (lo escribía aquí el pasado sábado) con la verdad histórica por delante, más pronto me lo desdicen con televisión por medio en la serie Isabel. Y habría sido fácil, me parece a mí, con los medios que hoy tiene a mano el montaje, poner la muerte del príncipe don Juan donde realmente tuvo lugar, en Salamanca. 
Me gustaría preguntarle al director de la serie, Jordi Frades, qué insignificante ahorro logró para producción con esa falsa localización, si es que la asesora histórica de la serie, Teresa Cunillera, segoviana por más señas, no prefirió olvidar el dato, como otros que también ignora, y barrer para casa, para Segovia, o sin más razones simplificó las geografías para facilitar un rodaje más cómodo y más barato. De hecho la serie adolece de una gran falta de concreción sobre lugares y ciudades quizás por la dificultad que crea el seguimiento de una corte tan itinerante como la de Isabel y Fernando que se pasaron los años de su reinado entre Segovia, Valladolid, Madrid y Medina, con estancias cortas en otras tantas ciudades. La mayor parte de la serie se olvida de esto y se concentra excesivamente en Segovia. 
Es interesante recordar que el destino quiso que, una semana antes de la muerte del príncipe, Isabel y Fernando estuvieran en Salamanca camino de Valencia de Alcántara para casar a su hija Isabel con don Manuel de Portugal. Con su hijo ya enfermo acordaron que Fernando se quedara aquí; y días después, tras la muerte del príncipe, Fernando partió para Garrovillas donde le dio a Isabel la fatal noticia. Isabel, sin detenerse ya en Salamanca, nunca quiso volver a ciudad de tan tristes recuerdos. Sí lo hizo el rey Fernando que residió en Salamanca largas temporadas. Su última visita fue para firmar con Felipe el Hermoso la llamada Concordia de Salamanca, que duró poco y a ambos les valió de nada. 
Ya mucho antes el rey Fernando tuvo que acudir a Salamanca para detener a Rodrigo Maldonado del bando de Santo Tomé, caballero violento y denunciado una y otra vez ante los reyes; fue detenido en Salamanca y su mujer se hizo fuerte en el castillo de Monleón a donde acudió el rey para terminar con este peligroso foco de resistencia cerca de la frontera con Portugal y entregar el castillo a caballero más fiel. Y así lo hizo. 
Y muchas más cosas y noticias que no caben en la Serie de TV a pesar de tantos episodios y mucho menos en una página de 25 líneas como ésta. Baste por hoy. 
Santa Teresa y los “Evangelizadores con Espíritu” 
El provincial de los Carmelitas Descalzos y el obispo emérito de San Sebastián, Mons. Juan María Uriarte, participarán los días 20, 21 y 22 de octubre en una nueva edición de las Jornadas de Formación para Laicos que organiza anualmente la Delegación Diocesana de Apostolado Seglar de Málaga. 
Bajo el título genérico: “Evangelizadores con Espíritu”, las conferencias se desarrollarán en el salón de actos del colegio de Las Esclavas (Calle Liborio García), a las 19.00 horas. 
Abrirá las jornadas el día 20 el Padre Miguel Márquez Calle, provincial de los Carmelitas Descalzos de Castilla, que disertará sobre: “Evangelii Gaudium y Teresa de Jesús: recuperar la frescura de los orígenes, el amor primero”. El título de la ponencia aglutina dos de las prioridades pastorales de la Diócesis este curso: “Iniciar como diócesis la recepción de la Exhortación Apostólica ‘Evangelii Gaudium’” y “Celebrar el Año Teresiano y de la Vida Consagrada”. 
El P. Márquez Calle es licenciado en Teología (Especialidad Dogmático-Fundamental), por la Universidad Pontificia de Comillas, ha ejercido la docencia de las materias: Mariología, Mística y Espiritualidad en diversos centros en España y en Santo Domingo y es autor de numerosas publicaciones.
Los días 21 y 22 de octubre será el obispo emérito de San Sebastián, Mons. Juan María Uriarte Goiricelaya, quien ofrecerá sendas ponencias bajo el título: “Actitudes personales y comunitarias para la misión”. 
Mons. Uriarte es Licenciado en Teología por la Universidad Pontificia de Comillas y en Psicología por la Universidad de Lovaina. Ha ejercido diversos ministerios como formador de sacerdotes: formador del Seminario Menor de Bilbao, director espiritual y finalmente rector del Seminario Mayor. Ordenado obispo en 1976, ha ejercido como Auxiliar de Bilbao (1976-1991) y como ordinario de Zamora (1991- 2000). De 2000 a 2010 ocupó la sede de Bilbao. En la Conferencia Episcopal ha sido presidente de la Comisión Episcopal del Clero durante dos trienios y miembro del Comité Ejecutivo. 
El bastón de Teresa abre un “Camino de Luz” 
Teresa de la rueca a la pluma / 1 día ago 
La idea de la vida como camino, como peregrinaje, incluso como “misión”, está íntimamente ligada a la vida y a la memoria de Santa Teresa de Jesús. Su espíritu andariego, emprendedor, creativo y de búsqueda de la fe y de la verdad, se ha extendido por todo el mundo. 
En la presentación de este proyecto, que ha tenido lugar en la Casa Natal de Santa Teresa, el P. Emilio José Martínez, Vicario General de los Carmelitas Descalzos, ha indicado que Camino de Luz quiere ser un reconocimiento y un homenaje a ese aspecto tan particular de la vida de Santa Teresa, y a la vez, es una manera de comenzar de forma simbólica el centenario propiamente dicho. 
Esta iniciativa, en la que se recorrerán 29 países a todo lo largo y ancho del mundo busca unir personas de diferentes razas y culturas, ya que es una invitación a participar a todo el que desee vivir esta experiencia, y resaltar así al espíritu universal tanto de Teresa como del V Centenario que celebramos. En la página web de Camino de Luz, hay un formulario para inscribirse y participar en cualquiera de los países en los que se va a desarrollar. 
El Vicario General ha detallado que la peregrinación “Camino de Luz” partirá de Ávila el día 15 de octubre de 2014 (festividad de la Santa), y recorrerá el mundo por lugares teresianos en los cinco continentes -Europa, Asia, América, África y Oceanía-, incluidas misiones en activo, hasta llegar a Ávila el 28 de marzo de 2015, lugar y fecha de su nacimiento y, por tanto, cuando se cumple el V Centenario de Santa Teresa. A partir de esta fecha, “Camino de Luz” se desarrollará por las 17 fundaciones teresianas. 
Acompañará todo el recorrido un signo-reliquia muy significativo como es el bastón de Santa Teresa. “Esta iniciativa tiene como objetivo invitar a todo el mundo a seguir caminando con Teresa. Por eso, hemos elegido esta reliquia que con inmensa generosidad nos ha cedido la Comunidad de Padres de Carmelitas de Ávila y que permitirá a Santa Teresa estar muy presente en los cinco continentes”, ha subrayado el Vicario General del Carmelo Descalzo. 
A lo largo del Camino de Luz, acompañará al bastón de Santa Teresa un segundo símbolo, el candil. Este elemento, diseñado en el estudio de “Ibán Ramón + Dídac Ballester”, es el encargado de portar la luz a lo largo del camino. Haciendo una clara referencia a la figura de la Santa, el candil está construido a partir de una pantalla poliédrica a través de la cual se refleja la luz que en este camino pretende ser sobre todo una mirada hacia el futuro, por ello, desde el estudio de diseño se ha trabajado con especial interés que la imagen que transmita se ajuste a unos códigos visuales totalmente contemporáneos y modernos. 
Toda la información en caminodeluz.stj500.com
La familia de santa Teresa 
La semana pasada escribía dando un pequeño perfil de cómo era san Teresa. Hoy quiero hablar de su familia y la primera pregunta que se me ocurre es: ¿Cómo era la familia de Teresa? Teresa tuvo la suerte y el regalo de tener una familia cristiana. Sus padres y hermanos le ayudaron a tener una fe fuerte, comprometida con la vida, pendiente de Dios y con afán de buscar y vivir “la verdad de cuando niña” . A Don Alonso se le murió su primera mujer. Se quedó viudo muy joven, con dos hijos, y volvió a casarse. Teresa, nacida el 28 de marzo de1515, es hija del segundo matrimonio, de D. Alonso Sánchez de Cepeda con Dª Beatriz de Ahumada. Dos hijos del primer matrimonio más diez del segundo, hacen que en la familia de Teresa haya 12 hermanos. Al referirse a sus hermanos y medios hermanos, Santa Teresa escribe: “por la gracia de Dios, todos se asemejan en la virtud a mis padres, excepto yo”. 1. Sus padres. Eran virtuosos o con grandes cualidades humanas como la fortaleza, la templanza, la prudencia, la justicia, la fe, la esperanza y la caridad. Cuando Teresa habla de su infancia alaba a sus padres y dice: “No cabe duda que el tener unos buenos padres, es uno de los grandes dones que se pueden recibir en la vida”. Y cuando enumera las virtudes de sus progenitores, en unas pinceladas los retrata perfectamente. En este ambiente impregnado de virtudes y cualidades humanas, de fe y religiosidad, Teresa ‘despierta a la vida’. Se siente atraída poderosamente por la verdad y por las cosas eternas, tiene prisa por ganar bienes eternos. Teresa reconoce la influencia de sus padres, el cómo vivían su relación con Dios y con los demás. Teresa era la más querida de su padre. Su padre era temeroso de Dios, hombre de verdad, honesto y leal, sensible al dolor de los otros, de mucha caridad con los pobres y piedad con los enfermos, no consintió en tener ningún esclavo, aficionado a leer libros espirituales. Jamás nadie le vio jurar ni murmurar. Muy honesto en gran manera. Su madre era la encargada propiamente de educar a sus hijos en el rezo y en las buenas costumbres. Y también tenía muchas virtudes. Pasó la vida con grandes enfermedades. Grandísima honestidad (...) muy apacible y de harto entendimiento. Le gustaba leer, a escondidas, libros de caballerías, aunque lo hacía para distraerse de los grandes trabajos que tenía y de las enfermedades que pasó. Tenía un cuidado especial para que rezaran sus hijos y fueran devotos de la Virgen y de algunos santos. A Teresa le tocó conocer desde niña el sacrificio, el sufrimiento, la renuncia y la muerte de lo más querido: su madre. Todo esto le hizo fuerte ante las dificultades de la vida. “Acuérdome que cuando murió mi madre, quedé yo de edad de doce años, poco menos. Como yo comencé a entender lo que había perdido, afligida fuime a una imagen de nuestra Señora y supliquéla fuese mi madre con muchas lágrimas. Paréceme que, aunque se hizo con simpleza, que me ha valido”. Y la Virgen, como madre, estuvo presente en el largo caminar de Teresa. Teresa era el amor de su padre. Ella tuvo la suerte de estar muy cerca de él en los últimos años de su vida. Su muerte fue la de un gran creyente, dando consejos a los presentes, encargándoles que le encomendasen a Dios. Teresa fue educada como se hacía entonces en los hogares cristianos. Francisco de Osuna describe magistralmente en su Norte de los estados lo que se hacía: “Si fuese cosa posible con la leche avían de recibir los niños la doctrina cristiana... Y cuando el pobre viniere a tu puerta, llévele el niño la limosna porque aprenda a hacer el bien…” Como se ve no sólo le enseñaban a rezar, sino a practicar la caridad. 2. Sus Hermanos. La buena relación entre los padres, determina la relación entre los hermanos. Durante toda su vida Teresa está pendiente de la suerte y de los negocios de sus hermanos, para ellos pide luz para que puedan hacer lo mejor. Es importante la buena relación de los hermanos. Estas relaciones les ayudan en el crecimiento personal y social. La familia de Teresa era grande y todos ellos heredaron la virtud de sus padres. Con el que más
trato tuvo fue con su hermano Rodrigo, casi de su edad, con el que se juntaba para leer vidas de santos y para planificar el ser mártires. Desde niña, aprendió a orar, a practicar sus devociones, a practicar la caridad, a dar limosna como podía. Toda esta manera de ser y relacionarse con los cercanos, la volcará Teresa tiempo después, en su familia religiosa, haciendo y consiguiendo que cada convento sea una familia, un palomarcito, donde todas han de ser amigas, todas se han de amar y querer. En el seno de su amplia familia de sangre Teresa aprende de modo inmediato y elocuente lo que a lo largo de su vida será parte de su magisterio: buenas costumbres, decir siempre la verdad, rodearse de buenas lecturas y amistades, compartir experiencias y piedad, tratarse con cariño y corrección, y motivarse entre todos para alcanzar el ideal de ser perfectos. 
¿Qué Vida Religiosa reflejan los jóvenes del S. XXI? Perfil de los jóvenes religiosos de hoy. La formación en la fidelidad 
Escrito por Editor. 
El día 9 se celebró la segunda conferencia ofrecida por la Revista Vida Religiosa con motivo del Año de la Vida Consagrada. El ponente, Pascual Chávez, ex-Rector Mayor de los Salesianos, desarrolló una cuestión de primer orden. ¿Por dónde orientar el diálogo sincero de las congregaciones con los jóvenes?. La respuesta fue tan buena que el Salon de actos se quedó pequeño. Ofrecemos un extracto de la conferencia que aparecerá publicada, en su totalidad, en nuestra Revista próximamente. 
He sido invitado a hablar de un tema que, aunque con un título diverso, ha sido enfrentado en diversas ocasiones por la Unión de los Superiores Generales, especialmente después del Congreso de los Jóvenes Religiosos. En la asamblea de noviembre de 1997, que tuvo como tema “Hacia el porvenir con los jóvenes religiosos – Desafíos, propuestas y esperanzas”, ha intentado conocer mejor la realidad de la nueva generación de religiosos. A esto se añade la reflexión hecha posteriormente en el Congreso Internacional sobre la Vida Religiosa organizado por las dos Uniones USG y UISG en noviembre de 2004 con el tema “Pasión por Cristo, pasión por la Humanidad”. 
Posteriormente, las siguientes asambleas de la USG encararon los temas: “Lo que está brotando” (mayo 2005); “Fidelidad y abandonos en la Vida Consagrada” (noviembre 2005); “Para una Vida Consagrada fiel” (mayo 2006)”. Y aunque no exclusivamente dedicada a los jóvenes religiosos, en noviembre de 2010 concluimos una serie de reflexiones con el tema “Vida Consagrada en Europa: compromiso por una profecía evangélica”. Como se ve, ha habido el esfuerzo por comprender y acompañar mejor la novedad que la vida consagrada en general está viviendo, y, en particular, la encarnada por los jóvenes religiosos.
Quisiera sintetizar en tres rasgos la novedad de los jóvenes consagrados: búsqueda de profunda experiencia de Dios, anhelo de comunión aunque no siempre acompañado por pretensión de comunidad, entrega a la causa de los más pobres y marginados. Características que van unidas frecuentemente a fragilidad psicológica, a inconsistencia vocacional, a marcado sujetivismo.[1] 
La finalidad de esta reflexión, pues, más que pretender decir algo “nuevo”, trata de estimular la reflexión común. Por ello, trataré de mantenerme lo más fiel posible al título y al significado del mismo: ofrecer un marco antropológico que nos ayude a conocer mejor el perfil de los jóvenes religiosos de hoy, y en el cual puedan ubicarse posteriormente las propuestas que ayuden a robustecer la fidelidad de la vida consagrada de quienes somos llamados a ella, con particular atención hacia las generaciones jóvenes. 
Es indudable que la problemática fundamental toca la médula y el desarrollo de la fe, a partir de la experiencia personal y comunitaria del Dios de Jesucristo. Presuponiéndolo, debemos hacer aquí una “reducción metodológica” desde un enfoque específico: ¡ojalá que podamos acercarnos lo más posible a dicha problemática, donde Naturaleza y Gracia, sin confundirse, se encuentran e interactúan! En concreto, el tema de la fidelidad toca tantos aspectos esenciales de la persona, que necesariamente debemos renunciar a una visión exhaustiva, y contentarnos con ubicarlo dentro de este marco antropológico. 
Por otra parte, la problemática no es exclusiva de la vida religiosa o consagrada: ¡baste pensar en la situación dramática, y muchas veces trágica, de tantos matrimonios y familias en el mundo, e incluso dentro de la Iglesia! En el campo de la vida religiosa, afecta por igual a Institutos de reciente fundación, como a Congregaciones más antiguas e incluso Órdenes eremíticas y monásticas. Más aún: aunque nos interesa sobre todo en relación a las generaciones jóvenes, no se refiere sólo a ellas: la posibilidad de apartarnos del seguimiento radical de Jesús no desaparece sino con la muerte. Como señala bellamente D. Bonnhoeffer, la primera palabra que el Señor dirige a Pedro es también la última: “Sígueme”. 
Antes de afrontar el contenido de esta reflexión, conviene explicitar una valoración axiológica previa, de tipo formal: ¿se trata de una situación problemática, incluso peligrosa, de la que hay que defendernos, o de un kairós que, además de inevitable, se convierte en un reto fascinante para nuestra fidelidad creativa a Dios, a la Iglesia y a la humanidad? Creo que estamos convencidos de que, aun con toda la seriedad que la situación exige, se trata más bien de lo segundo: es la consecuencia de creer que el Espíritu Santo sigue presente y actuante en nuestra Iglesia y en el mundo; pero también porque, en éste como en muchos otros aspectos se hace presente la “ley del péndulo”: nuestro tiempo acentúa dialécticamente elementos que, en forma explicable pero injusta, se habían descuidado en otras épocas. De nosotros depende, con la ayuda del mismo Espíritu, buscar su justo equilibrio. 
Dicho simbólicamente: la cultura actual, sobre todo juvenil, ha dado un giro total al caleidoscopio antropológico: se contempla una imagen totalmente nueva, en la que podemos reconocer, sin embargo, los mismos factores estructurales que, en la cultura anterior, reflejaban la luz de una manera muy diversa, y por ello, también proyectaban
una imagen distinta. Creemos, pues, que se trata, según la feliz expresión de G. K. Chesterton, de una de esas “virtudes que se han vuelto locas”. 
Dentro todavía del campo formal, he considerado más conveniente escoger una línea, entre otras, esperando que sea suficientemente relevante como para ofrecer suficientes pistas de reflexión. La alternativa habría sido tocar muchos temas, necesariamente de manera superficial e imposible de ahondar. Por ejemplo, el trabajo de grupo y de asamblea de la USG, de mayo del 2006, elencó además de los que yo propuse (la historicidad, la libertad, la experiencia y la renuncia) otros aspectos antropológicos que consideraba imprescindibles para toda vida consagrada que quiera ser plenamente humana y por lo tanto creíble. Y se refería a la autenticidad, a las relaciones interpersonales y afectividad, a la postmodernidad y al multiculturalismo, por ser “la base de la fidelidad vocacional”. 
Uno de los aspectos que entonces -hace 8 años-, no apareció en absoluto y que pienso hoy debería mencionarse-sugerirse, pues va adquiriendo una relevancia tal que ya se podría considerar una megatendencia en nuestro mundo, sobre todo juvenil, es la virtualidad. Esta no es problema de los “medios de comunicación”, cada vez más impensablemente sofisticados, sino que es problema de comunicación, de encuentro personal e interpersonal, y que en la vida religiosa -me parece- se va haciendo cada vez más presente, en dos vertientes: la comunitaria y la apostólica. Sin embargo, es una realidad tan nueva, compleja, ambivalente y, sobre todo, tan abierta al futuro, que es imposible hacer ahora una valoración crítica. Incluso en el tiempo de esa Asamblea de la USG de mayo del 2006 prácticamente todavía no existía facebook, twitter, whatsapp, instagram. Hoy en día, las personas pasan gran parte de su tiempo en el mundo virtual. Algunos tienen abiertos los social network todo el día, de este modo la vida virtual resulta siempre más el espacio en el que las personas viven su vida. Estas “nuevas formas de comportamiento” representan un grande desafío y una oportunidad para la Iglesia. La verdad de la fe no ha cambiado. Nuestra Tradición no ha cambiado, pero la gente vive en un mundo nuevo. 
No cabe duda que, al igual que los demás aspectos antropológicos, también la “virtualidad” en la comunicación, esta realidad totalmente nueva y hoy omnipresente en los jóvenes, se nos presenta como oportunidad y como desafío también en la formación, si bien para esto quizá todavía no estamos del todo preparados. Dicho irónicamente: quizá a un joven de nuestros días, la renuncia que implica la vida religiosa (castidad, pobreza, etc.) es menos fuerte que el tener que renunciar al ‘tablet’, al móvil, al ‘facebook’, al ‘twitter’, al ‘whatsapp’. 
A este propósito quisiera hacer referencia a la brillante e iluminadora ‘lectio’ con el título “Comunicación”, ofrecida por el conocido semiólogo Umberto Eco, en el Festival de la Comunicación a Camogli, el pasado 13 de Septiembre. En su ponencia Eco habló de la comunicación ‘soft’ y ‘hard’, una red donde es difícil mantener separadas las dos tipologías. Pues bien, citando a Marshal McLuhan, el sociólogo canadiense famoso por su tesis “el medio es el mensaje”, Eco decía que “usando paradojas, había centrado el interés sobre el medio, había ya entendido como el usuario es un dependiente del medio”. Esto lo ha llevado a hablar de Zygmunt Bauman, de Twitter, de la comunicación de algunos personajes, incluído Papa Francisco, del social network, de la comunicación de la comunicación, del exceso de información que lleva a la pérdida del pasado.
A mí por ahora me basta mencionar este aspecto para centrarme, como he dicho antes, en aquellas dimensiones esenciales de la estructura humana, tratando de privilegiar la profundidad. 
[1] Cfr., a este respecto, el cap. IV, “Los jóvenes religiosos, problemas y retos” de la obra de GABINO URIBARRI BILBAO, Portar las marcas de Jesús. Teología y espiritualidad de la vida consagrada, Madrid, 2001, pp. 109-129. En el ámbito italiano, cfr. Rino FISICHELLA, Identità dissolta. Il cristianesimo lingua madre dell’Europa, Mondadori, Milano 2009, 115 – 132. A. CENCINI, “Mi fido…, dunque decido. Educare alla fiducia nelle scelte vocazionali, Milano 2009, pp.82-93. Y, más recientemente, la conferencia “La radicalità evangelica nell’epoca delle radici fragili”. 
CUANDO EL AMOR SE ACABA: Don y Arte para que no sea demasiado tarde 
José Cristo Rey García Paredes 
El ideal está claro. La cuestión es el camino para conseguirlo. De hecho, a no pocas parejas estas palabras les parecerán utópicas. Hablar de “totalidad”, “unidad profundamente personal que va más allá…” es emplear un lenguaje que podría hacer olvidar la dificultad que implica la convivencia, la correlación. Por eso, queremos abordar el tema de la fidelidad de forma realística, analizando en la medida de lo posible el complejo entramado de la fidelidad y la forma pedagógica de cultivarla. 
Cuando el amor se acaba 
El deseo amoroso se apaga y se manifiesta su inicio en diversas actitudes negativas, de las cuales podríamos resaltar tres: la indiferencia, el libertinaje y el acostumbramiento. 
 Cuando cede el deseo entra la indiferencia y poco a poco el hastío. La cohabitación puede ocultar un progresivo deterioro de la fidelidad y la unión se vuelve cada vez más frágil o insignificante. 
 Cuando el amor insaciable no se fija en una persona, sino sucesivamente en personas distintas, se da el vagabundeo amoroso, el libertinaje. Quien así actúa es fiel a su inestabilidad interior. En su vida no cuaja ningún tipo de fidelidad amorosa, digna de ese nombre. Nadie es capaz de llenar la
soledad de tales personas, de sacarlas de su angustia interior y con nadie se quieren comprometer, ni ofrecerle lo que ellas son. La entrega amorosa, en ese caso, tiene una −muy previsible− fecha de caducidad. 
 Cuando el amor se vuelve rutinario, la fidelidad se petrifica, se endurece, y entonces ya no es fidelidad al amor, sino mero acostumbramiento: “hay algo peor que tener un alma perversa; es tener un alma acostumbrada”, decía Péguy. Estar juntos coincide entonces con un endurecerse juntos y perder capacidad de amor. El acostumbramiento se fija en un determinado tiempo y rechaza toda evolución; idolatra un momento determinado de la existencia; sacraliza gestos, costumbres y sólo quiere la repetición de lo mismo. En el acostumbramiento el espíritu traiciona al cónyuge, aunque el cuerpo no haga nada. Toda rigidez es una traición, una infidelidad fundamental bajo pretexto de fidelidad. El enfriamiento del deseo anuncia el momento del abandono, de la ruptura y de la muerte del amor. En el enfriamiento del deseo influye la infidelidad, un nuevo enamoramiento, una situación inaguantable para quien ya no ama. 
Sin embargo, quien sigue enamorado y pierde el amor del cónyuge ve cómo todo su mundo se convulsiona. La persona enamorada siente una afinidad metafísica con su amado o amada y descubre que su amor entra en la esfera del ser. La persona rechazada tiene la impresión de que la vida, el mundo, el universo, son gobernados por fuerzas locas o inmorales, por una divinidad enloquecida, por un demonio. Perder a la persona amada, ser rechazado o rechazada por ella, le resulta intolerable e irreparable, cuando hay auténtico enamoramiento y uno preve una vida luminosa y feliz con la otra persona. Pero cuando se pierde a la persona amada, no sólo se pierde a una persona concreta sino la potencia creadora de la vida, su soplo divino. El rechazo y el abandono amoroso produce en la persona afectada una catástrofe emotiva y mental. Esta “catástrofe amorosa” produce una “situación extrema” en la cual el individuo va descubriendo que esa situación acabará por destruirlo irremediablemente (Roland Barthes). De ahí que la desilusión amorosa acabe, no pocas veces, en locura, crimen, suicidio, violencia doméstica o ateísmo. Personas así decepcionadas se vuelven malas, violentas, o se echan desenfrenadamente en brazos de una sexualidad descontrolada o de una ambición desmedida. 
¿Cómo mantener la fidelidad? 
¿Es posible el sueño de los amantes, el “para siempre” (“for ever”), el amor eterno de pareja? ¿Será verdad lo que se promete en la fórmula del matrimonio: “prometo serte fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, todos los días de mi vida? ¿Qué hay en el “para siempre” o en la “indisolubilidad” de gracia y qué hay de compromiso? 
Superar el narcisismo 
Fue san Agustín quien −en alguna ocasión− escribió lo siguiente: “yo amo amar; yo me amo amando”. Con ello indicaba que es, más espontáneo, amarse a uno mismo cuando decimos amar a otro, que amar al otro olvidándose de uno mismo. Y es que cuando amamos nos sentimos bien: descubrimos que somos grandes, nobles, fuertes, generosos y que existimos. La cuestión está en averiguar qué amamos cuando decimos que amamos a alguien. Lo normal no suele ser amar al otro, sino amar la imagen que del otro nos hemos formado. El otro se convierte en el espejo en el que contemplamos la grandeza de nuestros sentimientos y el ardor de nuestra generosidad. Amamos a otra persona porque ella responde a una necesidad que encontramos en el fondo de nosotros. Dicen que en esto consiste la llamada “crisis del después de la luna de miel”: uno descubre que el otro es verdaderamente “otro” y no responde del todo a la idea que de él o de ella nos habíamos formado; y conectado con esto, uno se da cuenta de que el otro no está ahí para satisfacer nuestras propias necesidades inconscientes, sino que resiste y existe para sí. No pocos divorcios tienen lugar antes de los cinco años de matrimonio. Uno de los cónyuges, o los dos, descubren que el otro no responde a sus deseos, que es diferente. La percepción más nítida de esa diferencia facilita el que haya parejas que sucumban a la dificultad y ya no se levanten. La fidelidad en ese caso sólo sería una imposición, una carga insoportable, sobre todo, cuando surge una alternativa seductora. (Sobre “Eros y Narciso”). 
Aprender el arte de amar
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas
La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas

Contenu connexe

Tendances

Informe 'Mujeres africanas. Mirada al futuro'
Informe 'Mujeres africanas. Mirada al futuro'Informe 'Mujeres africanas. Mirada al futuro'
Informe 'Mujeres africanas. Mirada al futuro'Fundación CODESPA
 
Protección infantil
Protección infantilProtección infantil
Protección infantilDiana Torres
 
Adolescentesvih
AdolescentesvihAdolescentesvih
Adolescentesvihservida
 
Violencia de género y vihsida.
Violencia de género y vihsida.Violencia de género y vihsida.
Violencia de género y vihsida.lborrasespanol
 
Examen final Matemáticas
Examen final MatemáticasExamen final Matemáticas
Examen final MatemáticasAylin Yunuen
 
¿Por qué la pobreza tiene rostro de mujer?
¿Por qué la pobreza tiene rostro de mujer?¿Por qué la pobreza tiene rostro de mujer?
¿Por qué la pobreza tiene rostro de mujer?Bealva
 
Derechos Sexuales y reproductivos de los adolescentes
Derechos Sexuales y reproductivos de los adolescentesDerechos Sexuales y reproductivos de los adolescentes
Derechos Sexuales y reproductivos de los adolescentesXimena Morales
 
El COVID-19 en América Latina
El COVID-19 en América LatinaEl COVID-19 en América Latina
El COVID-19 en América LatinaAndinaVirtual
 
La mujer en la india
La mujer en la indiaLa mujer en la india
La mujer en la indiandimentte
 
Embarazo adolescente diplomado upel
Embarazo adolescente diplomado upelEmbarazo adolescente diplomado upel
Embarazo adolescente diplomado upelNCecily
 
Maltrato a los niños
Maltrato a los niñosMaltrato a los niños
Maltrato a los niñosjessyx
 

Tendances (14)

Derechos humanos educacion
Derechos humanos educacionDerechos humanos educacion
Derechos humanos educacion
 
Explotación sexual
Explotación sexualExplotación sexual
Explotación sexual
 
Informe 'Mujeres africanas. Mirada al futuro'
Informe 'Mujeres africanas. Mirada al futuro'Informe 'Mujeres africanas. Mirada al futuro'
Informe 'Mujeres africanas. Mirada al futuro'
 
Protección infantil
Protección infantilProtección infantil
Protección infantil
 
Adolescentesvih
AdolescentesvihAdolescentesvih
Adolescentesvih
 
Violencia de género y vihsida.
Violencia de género y vihsida.Violencia de género y vihsida.
Violencia de género y vihsida.
 
Examen final Matemáticas
Examen final MatemáticasExamen final Matemáticas
Examen final Matemáticas
 
¿Por qué la pobreza tiene rostro de mujer?
¿Por qué la pobreza tiene rostro de mujer?¿Por qué la pobreza tiene rostro de mujer?
¿Por qué la pobreza tiene rostro de mujer?
 
Derechos Sexuales y reproductivos de los adolescentes
Derechos Sexuales y reproductivos de los adolescentesDerechos Sexuales y reproductivos de los adolescentes
Derechos Sexuales y reproductivos de los adolescentes
 
El COVID-19 en América Latina
El COVID-19 en América LatinaEl COVID-19 en América Latina
El COVID-19 en América Latina
 
La mujer en la india
La mujer en la indiaLa mujer en la india
La mujer en la india
 
Embarazo adolescente diplomado upel
Embarazo adolescente diplomado upelEmbarazo adolescente diplomado upel
Embarazo adolescente diplomado upel
 
PresentacióN1
PresentacióN1PresentacióN1
PresentacióN1
 
Maltrato a los niños
Maltrato a los niñosMaltrato a los niños
Maltrato a los niños
 

Similaire à La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas

Trata De Blancas Y Prostitucion Infantil
Trata De Blancas Y Prostitucion InfantilTrata De Blancas Y Prostitucion Infantil
Trata De Blancas Y Prostitucion InfantilJuan Pablo
 
INFANCIAS ROBADAS Informe mundial sobre la infancia 2017. Save The Children
INFANCIAS ROBADAS Informe mundial sobre la infancia 2017. Save The ChildrenINFANCIAS ROBADAS Informe mundial sobre la infancia 2017. Save The Children
INFANCIAS ROBADAS Informe mundial sobre la infancia 2017. Save The Childreneraser Juan José Calderón
 
Violencia contra la mujer
Violencia contra la mujerViolencia contra la mujer
Violencia contra la mujermajo1020
 
Violenvia Femenina, maltrato
Violenvia Femenina, maltratoViolenvia Femenina, maltrato
Violenvia Femenina, maltratonathasa
 
Impidamos un matrimonio en el día de san valentín
Impidamos un matrimonio en el día de san valentínImpidamos un matrimonio en el día de san valentín
Impidamos un matrimonio en el día de san valentínSami Sami
 
Violenvia Femenina Presentacion 7[1]
Violenvia Femenina Presentacion 7[1]Violenvia Femenina Presentacion 7[1]
Violenvia Femenina Presentacion 7[1]guest9dd911a
 
Violencia Femenina Presentacion 7
Violencia Femenina Presentacion 7Violencia Femenina Presentacion 7
Violencia Femenina Presentacion 7simosa
 
Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7danielmora
 
Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7fhumk
 
Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7Magoliax
 
Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7miguelmaq
 
Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7rapido
 
Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7danielmora
 
Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7sergiorafael
 
Violencia Femenina Presentacion 7
Violencia Femenina Presentacion 7Violencia Femenina Presentacion 7
Violencia Femenina Presentacion 7andinso
 

Similaire à La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas (20)

Trata De Blancas Y Prostitucion Infantil
Trata De Blancas Y Prostitucion InfantilTrata De Blancas Y Prostitucion Infantil
Trata De Blancas Y Prostitucion Infantil
 
Lizeth
LizethLizeth
Lizeth
 
INFANCIAS ROBADAS Informe mundial sobre la infancia 2017. Save The Children
INFANCIAS ROBADAS Informe mundial sobre la infancia 2017. Save The ChildrenINFANCIAS ROBADAS Informe mundial sobre la infancia 2017. Save The Children
INFANCIAS ROBADAS Informe mundial sobre la infancia 2017. Save The Children
 
Derechos reproductivos
Derechos reproductivosDerechos reproductivos
Derechos reproductivos
 
Videoconferencia
VideoconferenciaVideoconferencia
Videoconferencia
 
Violencia contra la mujer
Violencia contra la mujerViolencia contra la mujer
Violencia contra la mujer
 
Violenvia Femenina, maltrato
Violenvia Femenina, maltratoViolenvia Femenina, maltrato
Violenvia Femenina, maltrato
 
Impidamos un matrimonio en el día de san valentín
Impidamos un matrimonio en el día de san valentínImpidamos un matrimonio en el día de san valentín
Impidamos un matrimonio en el día de san valentín
 
Violenvia Femenina Presentacion 7[1]
Violenvia Femenina Presentacion 7[1]Violenvia Femenina Presentacion 7[1]
Violenvia Femenina Presentacion 7[1]
 
Violenvia Femenina
Violenvia FemeninaViolenvia Femenina
Violenvia Femenina
 
Violencia Femenina Presentacion 7
Violencia Femenina Presentacion 7Violencia Femenina Presentacion 7
Violencia Femenina Presentacion 7
 
Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7
 
Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7
 
Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7
 
Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7
 
Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7
 
Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7
 
Violenvia Femenina
Violenvia FemeninaViolenvia Femenina
Violenvia Femenina
 
Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7Violenvia Femenina Presentacion 7
Violenvia Femenina Presentacion 7
 
Violencia Femenina Presentacion 7
Violencia Femenina Presentacion 7Violencia Femenina Presentacion 7
Violencia Femenina Presentacion 7
 

Plus de Juan Antonio Mateos Pérez

Plus de Juan Antonio Mateos Pérez (20)

Las desamortizaciones del siglo xix
Las desamortizaciones del siglo xixLas desamortizaciones del siglo xix
Las desamortizaciones del siglo xix
 
Iglesias rupestres de goreme
Iglesias rupestres de goremeIglesias rupestres de goreme
Iglesias rupestres de goreme
 
Boletín nº 15 semana santa 2016 [2371029]
Boletín nº 15 semana santa 2016 [2371029]Boletín nº 15 semana santa 2016 [2371029]
Boletín nº 15 semana santa 2016 [2371029]
 
Domingo de ramos c
Domingo de ramos cDomingo de ramos c
Domingo de ramos c
 
Boletín 14 navidad 15 [18682116]
Boletín  14 navidad 15 [18682116] Boletín  14 navidad 15 [18682116]
Boletín 14 navidad 15 [18682116]
 
La posada del silencio nº 103, curso vi
La posada del silencio nº 103, curso viLa posada del silencio nº 103, curso vi
La posada del silencio nº 103, curso vi
 
La posada del silencio nº 102, curso vi
La posada del silencio nº 102, curso viLa posada del silencio nº 102, curso vi
La posada del silencio nº 102, curso vi
 
La posada del silencio nº 102, curso vi
La posada del silencio nº 102, curso viLa posada del silencio nº 102, curso vi
La posada del silencio nº 102, curso vi
 
La posada del silencio, nº 100, curso vi
La posada del silencio, nº 100, curso viLa posada del silencio, nº 100, curso vi
La posada del silencio, nº 100, curso vi
 
La posada del silencio, nº 99, curso VI
La posada del silencio, nº 99, curso VILa posada del silencio, nº 99, curso VI
La posada del silencio, nº 99, curso VI
 
La posada del silencio nº 97, curso vi
La posada del silencio nº 97, curso viLa posada del silencio nº 97, curso vi
La posada del silencio nº 97, curso vi
 
Boletín nº 12 corpus 2015
Boletín nº 12 corpus 2015Boletín nº 12 corpus 2015
Boletín nº 12 corpus 2015
 
La posada del silencio nº 96, curso vi
La posada del silencio nº 96, curso viLa posada del silencio nº 96, curso vi
La posada del silencio nº 96, curso vi
 
La posada del silencio nº 95, curso vi
La posada del silencio nº 95, curso viLa posada del silencio nº 95, curso vi
La posada del silencio nº 95, curso vi
 
La posada del silencio nº 94, curso vi
La posada del silencio nº 94, curso viLa posada del silencio nº 94, curso vi
La posada del silencio nº 94, curso vi
 
La posada del silencio nº 94, curso vi
La posada del silencio nº 94, curso viLa posada del silencio nº 94, curso vi
La posada del silencio nº 94, curso vi
 
La posada del silencio nº 92, curso vi
La posada del silencio nº 92, curso viLa posada del silencio nº 92, curso vi
La posada del silencio nº 92, curso vi
 
La posada del silencio nº 91, curso vi
La posada del silencio nº 91, curso viLa posada del silencio nº 91, curso vi
La posada del silencio nº 91, curso vi
 
La posada del silencio nº 90, curso vi
La posada del silencio nº 90, curso viLa posada del silencio nº 90, curso vi
La posada del silencio nº 90, curso vi
 
La posada del silencio nº 90, curso vi
La posada del silencio nº 90, curso viLa posada del silencio nº 90, curso vi
La posada del silencio nº 90, curso vi
 

La educación clave para acabar con la discriminación de las niñas

  • 1. VÍDEO DE HOY: Antonio Piñero La condena de nacer niña Ser mujer en algunos países significa estar destinada a la discriminación y la violencia Una de cada cuatro adolescentes en el mundo ha sufrido algún tipo de maltrato Alejandra Agudo Madrid 10 OCT 2014 - 19:57 CEST18
  • 2. FOTORRELATO: Seis jóvenes comparten sus historias de discriminación y lucha. / claudio álvarez Cada tres segundos una niña en el mundo es obligada a casarse antes de haber cumplido los 18, la de edad en que se las considera adultas, según la Convención de los Derechos del Niño. Casi una de cada cuatro adolescentes de entre 15 y 19 años del planeta —70 millones— han sido víctimas de violencia física; cada diez minutos, muere una por ello. En los países en desarrollo, la principal causa de fallecimiento de chicas son las complicaciones derivadas del embarazo y el parto: 50.000 pierden la vida cada año. Unos 140 millones de pequeñas y mujeres han sufrido mutilación genital femenina, un número que aumenta en dos millones cada año... Todos estos datos son solo un puñado de los muchos recogidos en el informe Estado Mundial de las Niñas 2014 de Plan Internacional basado en información de la ONU, que describe la condena que representa nacer mujer aún hoy, en pleno siglo XXI. "Estas cifras indican que existe una mentalidad que tolera, perpetúa e incluso justifica la violencia. Y deben servir de alarma para todos en todas partes". Lo dice Geeta Rao Gupta, directora adjunta de Unicef al hilo de la celebración hoy, 11 de octubre, del Día Internacional de la Niña. Los datos del organismo sostienen esta afirmación: "En todo el mundo, cerca de la mitad de las niñas cree que está justificado que un hombre golpee a su mujer o compañera bajo determinadas circunstancias, como por ejemplo si rechaza tener relaciones sexuales, si abandona la casa sin permiso, si discute, si descuida a los niños o si quema la cena". La solución principal para evitar que ser niña sea sinónimo de víctima, coinciden las organizaciones especializadas en infancia y mujer, pasa por la educación, tanto en su entorno como, sobre todo, para ellas. La formación les dará el poder para decidir, decir no, conocer sus derechos y hacerlos valer. Aunque, en ocasiones, esto entrañe un importante riesgo. La recién premiada con el Nobel de la Paz, Malala Yousafzai, fue disparada en la cabeza por los talibanes en 2012 por defender la escolarización de las mujeres, Para Concha López, directora de Plan Internacional en España, el acceso a la educación "no es solo una cuestión de derechos", sino también económica. "Si ellas estudian, estarán más formadas y tendrán herramientas para acceder a un empleo digno; aumentarán el PIB de sus países", aseguró durante la presentación en España del informe. Pese a los avances en el Objetivo del Milenio de lograr la enseñanza primaria universal, no se logrará en 2015 como se había fijado. En gran parte por la elevada tasa de abandono, sobre todo entre las menores, como advierte el informe de seguimiento de 2014, principalmente porque se casan y son madres, pero también por la falta de recursos familiares. "En África subsahariana, solo el 23% de las pequeñas pobres de zonas rurales finalizaron la educación primaria", destaca el documento. 140 millones de pequeñas y mujeres han sufrido mutilación genital femenina Ellas son víctimas de una espiral de discriminación tan difícil de romper como lo es intentar cambiar la mentalidad, las tradiciones o las costumbres. Ni siquiera la aprobación de leyes para su protección consiguen, por sí solas, este objetivo. "Sucede con la mutilación genital en muchos países. Hay que trabajar comunidad por comunidad, con los líderes y los ancianos para erradicar esta práctica. Solo con legislación que la prohíba no vale, porque luego se hace a escondidas", explica Marta Arias, responsable de sensibilización de Unicef España. Con todo, el reto, opina, no es imposible. "Son procesos muy lentos. Se trata de crear entornos protectores y para ello hace falta que estén implicados los políticos, los sistemas judiciales, la policía, las comunidades de cada país", detalla. Ramatou Kane, trabajadora de Plan Internacional en Níger conoce bien el círculo de pobreza, discriminación, violencia y falta de oportunidades. Males que se retroalimentan menoscabando los derechos de las menores, aunque estos estén protegidos por ley. "En el país tenemos el porcentaje más alto de matrimonios infantiles. El 75% de las chicas se casan antes de cumplir los 18. La primera razón es que dejan la escuela. Vuelven a casa de sus padres y como no saben qué hacer con ellas o cómo protegerlas de que se queden embarazas para deshonor de la familia, las casan. El segundo motivo es económico en tanto que enlazarlas con alguien bien posicionado supone una ayuda para la familia", explica la experta nigeriana durante una visita en España. La realidad que expone Kane no es exclusiva de Níger. En todo el mundo, 700 millones de mujeres se casaron antes de alcanzar la mayoría de edad. De ellas, 250 millones tenían menos de 15 incluso. La mayoría, matrimonios forzados. Según denuncia Plan, 14 millones de menores son obligadas a casarse al año, 39.000 cada día. La tradición explica, en parte, esta práctica. En India, Bangladesh o Nepal, es
  • 3. común que los progenitores elijan un varón para que sus hijas se desposen durante la adolescencia. Sherin A. nació hace 16 años en Bangladesh. Cuando tenía 12 sus padres acordaron su matrimonio con un primo nueve años mayor que ella. "Mi historia es representativa de la de las demás niñas de mi país", dice. Ella, sin embargo, esquivó la estadística. "Les dije que no me quería casar, que quería estudiar", recuerda. Su madre fue difícil de convencer. De hecho, la pequeña tuvo que acudir a Plan Internacional para que fueran ellos quienes persuadieran a su madre de romper el compromiso. Sherin sigue en la escuela y quiere llegar a la universidad para ser arquitecta como su tío. "Quiero ser como él", dice. Con todo, la joven no tiene inconveniente en casarse en el futuro con quien sus padres elijan. "Yo me podría equivocar. Ellos harán una mejor elección que yo", razona. Pero eso será cuando finalice su formación y tenga un trabajo, zanja. 14 millones de menores son obligadas a casarse cada año Una de las consecuencias de los casamientos tempranos son los embarazos adolescentes, que suponen un alto riesgo para la vida de las chicas. Aunque detrás de estos hay múltiples causas como las violaciones, la falta de formación en salud sexual y reproductiva así como la imposibilidad de acceder a métodos anticonceptivos. Unicef estima que 120 millones de jóvenes de menos de 20 años en el mundo han sido víctimas de abusos sexuales. El 50% de las agresiones, añade Plan, las sufren menores de 16. Jenniffer Rossana C. ha vivido a sus 17 años una historia que engrosa varias de estas estadísticas. Sin titubear relata cómo ha sido víctima de la violencia doméstica de niña, sufrió un intento de violación de su padrastro y se marchó del hogar materno, se casó con 14 años con un chico de 18 que la pegaba hasta que su suegro, voluntario de Plan, medió y amenazó con denunciar a su propio hijo. Con 15 tuvo una hija. Desde entonces, su afán es estudiar. "Hago Derecho porque quiero ser abogada para defender a las mujeres, no a una, a todas", dice. En Ecuador, su país, un 30% de las adolescentes están o han estado embarazadas. "En dos décadas ha aumentado un 80% el porcentaje", denuncia María Antonia López, especialista de la organización en derechos de la mujer. Entre las amenazas que enfrentan muchas niñas por ciertas tradiciones arraigadas en el lugar donde nacen o la situación de pobreza, la mutilación genital femenina es, sin duda, una de las prácticas considerada más agresiva contra la mujer. Cada año aumenta en dos millones el número de las que se les practica la extirpación del clítoris. La ONU estima que entre 130 y 140 millones en el mundo han pasado por la operación en los 29 países de África y Oriente Medio donde está arraigada. Halaa El Din M., egipcia de 14 años, se libró del bisturí gracias a su determinación para convencer a sus padres de que no le practicaran a ella y sus hermanas la ablación. Por su cuenta, se fue a pedir consejo en su comunidad para que le dieran argumentos que persuadieran a sus progenitores. Lo consiguió. Pude decir no a una tradición que menoscababa mis derechos", Halaa, 14 años. Egipto "Pude decir no a una tradición que menoscababa mis derechos", dice orgullosa Halaa, quien ha estado en Madrid en compañía de otras seis chicas de otros países en el marco de la campaña Por ser Niña, de Plan España, que reclama educación gratuita para todas ellas en todo el mundo, al menos durante nueve años (6 de primaria y 3 de secundaria). Como Halaa, son cada vez más las que rechazan esta práctica para ellas o sus hijas. En 2011, Unicef publicaba que más de 6.000 comunidades en África ya habían abandonado esta práctica. Pero no se puede bajar la guardia, aseguran. En la Cumbre de la Niña, celebrada el pasado julio en Londres bajo el auspicio de la ONU, se alertó de que, en caso de que se mantengan las tasas de disminución de matrimonios infantiles y mutilación genital femenina, "el mero crecimiento demográfico determinará que el número de mujeres casadas en la infancia (más de 700 millones) se mantendrá al mismo nivel hasta 2050, y que el número de niñas sometidas a la ablación aumentará en 63 millones en ese mismo lapso". Así, para proteger los derechos de las pequeñas no queda más remedio que pisar el acelerador. - See more at: http://elpais.com/elpais/2014/10/10/planeta_futuro/1412954575_928101.html#sthash.TSA3sLkx.dpuf
  • 4. CÁRITAS, EL SECRETARIADO DE LA COMISIÓN EPISCOPAL DE MIGRACIONES Y CONFER ADVIERTEN SOBRE LOS RIESGOS DE LA OPERACIÓN POLICIAL «MAS MAIORUM» PARA LA PROTECCIÓN DE LOS INMIGRANTES Madrid, 10 de octubre 2014.- Cáritas, el Secretariado de la Comisión Episcopal de Migraciones y CONFER (Conferencia Española de Religiosos) han advertido a toda su red territorial en España sobre los efectos que puede generar entre las personas inmigrantes la puesta en marcha del operativo policial que, bajo el epígrafe “Mos Maiorum”, ha sido diseñado desde el Consejo de la Unión Europea con el objetivo de que sea ejecutado en la semana del 13 al 26 de octubre de manera conjunta por todos los Estados de la UE. Según se señala textualmente en la citada Nota del Consejo, remitida con fecha del pasado 10 de julio, esta “Operación conjunta se va a realizar para:
  • 5. • Detener a los migrantes irregulares y recoger información relevante para los servicios de inteligencia y con fines de investigación; • Identificar, procesar e interrumpir los grupos de crimen organizado; • Consolidar acciones conjuntas para lograr un impacto en la inmigración ilegal (actividades de control y vigilancia de las fronteras); • Llevar a cabo (en base de los resultados del análisis de riesgo), acciones de control a lo largo de las principales rutas de inmigración ilegal utilizadas por las redes de inmigración ilegal (dentro de la Área Schengen y las fronteras exteriores); • Recopilar y analizar información relacionada con los denominados movimientos secundarios”. Asimismo, a través de esta Operación desde el Consejo se pide de todos los países participantes que recaben la siguiente información: “A) Detalles de la interceptación: fecha y hora de detección, localización y lugar de interceptación, los medios de transporte; B) Detalles sobre las personas migrantes; nacionalidad, sexo y edad, lugar y fecha de entrada en la UE; C) Rutas del os migrantes: rutas, medios de transporte y la fecha de la intercepción después de haber llegado a la UE; rutas establecidas después de la interceptación y destino final de los migrantes; D) El modus operandi: los documentos falsos/falsificados de viaje incautados, solicitud de asilo, indicación de tráfico ilícito de migrantes irregulares, nacionalidad y país de residencia de los facilitadores, y dinero pagado por el viaje por cada migrante”. Posible vulneración de derechos humanos Ante la naturaleza y características de este operativo, Cáritas, el Secretariado de la Comisión Episcopal de Migraciones y CONFER (Conferencia Española de Religiosos) manifiestan su grave inquietud en cuanto a las posibles vulneraciones de derechos humanos que pueda acarrear, puesto que la selección del perfil de las personas a detener para obtener información incluye, necesariamente, un sesgo racial. Las mismas reservas se plantean con relación a los lugares donde se desarrollarían estas detenciones: ¿hablamos de espacios públicos, de instalaciones y dispositivos de acogida de organizaciones sociales como las nuestras? Pregunta al Parlamento Europeo La preocupación sobre los efectos de este operativo para las personas inmigrantes que viven en Europa es compartida en los ámbitos regionales de nuestras organizaciones. Prueba de ello es la pregunta que Cáritas Europa, la Comisión Católica de Migraciones Europea y el Servicio Jesuita a Refugiados han dirigido de manera
  • 6. conjunta a la europarlamentaria Ska Keller para conocer, entre otras cuestiones, qué mecanismos se han puesto en marcha para garantizar que durante esta operación conjunta de la policía no sean violados los derechos fundamentales de los migrantes, incluyendo el principio de no discriminación y qué medidas de seguridad efectivas se van a adoptar para asegurar la adecuada protección de los datos personales recogidos. Habida cuenta de que una importante proporción de las personas migrantes en situación irregular que se encuentran en España son acompañadas de nuestras organizaciones, todas nuestras delegaciones territoriales permanecerán especialmente atentas durante los días señalados para la puesta en marcha del operativo “Mos Maiorum” a fin de registrar aquellas incidencias o sucesos que puedan ser objeto de la correspondiente denuncia. África, pecado de Europa Creado el 10 octubre 2014 por Victor Codina Victor Codina. Ahora que el tema del ébola, con miles de muertos en África occidental y el temor a contagios en España y en otros países, comienza a alarmar a todo el mundo y genera una psicosis de miedo y angustia… puede ser útil recordar un libro de Luís de Sebastián, economista y especialista en ciencias sociales y políticas, profesor de ESADE y de la UCA de San Salvador (1934- 2009). La obra se titula África, pecado de Europa (2006). Luís de Sebastián que unía al rigor científico una gran sensibilidad social y una profunda fe cristiana, quiso hablar del “pecado” de Europa con África, para demostrar que la injusticia que Europa ha cometido con África exige restitución, hay que devolverle lo robado, reparar el daño cometido. África ha sido colonizada por Francia, Inglaterra, España, Bélgica, Portugal, Holanda, Italia… Con la excusa de civilizar y modernizar el continente africano, las potencias coloniales se enriquecieron con las materias primas y crearon una situación de dependencia de las metrópolis que en algunos países dura hasta hoy. África para algunos es solo un lugar para safaris… Ahora son naciones independientes, con bandera e himno propio, pero donde una gran mayoría vive en situaciones precarias de alimentación, salud, educación y transportes, donde faltan infraestructuras básicas, hay conflictos bélicos y étnicos (a veces por cuestiones de los límites artificiales establecidos por las metrópolis), débiles democracias, hay hambrunas y sequías, miles de emigrantes que huyen hacia las costas del Mediterráneo español o italiano en busca de un futuro mejor, mientras hay niños soldados y se explotan las ricas minas de diamantes o de coltán (¡para nuestros móviles!) Este continente, del cual fueron arrebatados millones de esclavos para el trabajo de América, es el que padece el flagelo del ébola, que ahora nos preocupa porque llega a Europa… Pero África no solo es un continente que posee una gran riqueza de materias primas y de biodiversidad, sino un continente con una gran riqueza cultural, humana y religiosa, una gran sabiduría de sus tradiciones -desde Egipto a Cartago-, la fuerza imponente de su juventud, la vitalidad de sus mujeres, un profundo sentido religioso, la alegría de los diversos grupos cristianos y de unas Iglesias jóvenes. África es el continente de Mandela y Desmond Tutu, de mártires cristianos, de cooperadores y misioneros que se han jugado la vida por ayudar al pueblo. De África salieron Agustín, Orígenes y Atanasio, África fue la cuna del monacato y en África se santificaron Charles de Foucauld y los mártires trapenses de Tibhirine… No sabemos si Europa, ahora que tiene pánico ante el contagio del ébola, será suficiente humilde y lúcida para reconocer su pecado y reparar el daño cometido. En todo caso ojalá a través del clamor del pueblo sufriente escuchemos hoy la voz del Espíritu que nos pregunta, como a Caín, “¿dónde está tu
  • 7. hermano Abel?” El examen de conciencia es una práctica antigua, pero muy buena 2014-10-10 Radio Vaticana (RV).- (Con audio. Actualizado con video) Para no hacer entrar el mal en nuestro corazón hay una práctica antigua, pero muy buena, el examen de conciencia. Lo recordó el Papa Francisco en su homilía de la misa matutina celebrada en la capilla de la Casa de Santa Marta. Partiendo del Evangelio del día, en que se nos dice que el diablo jamás deja de tentarnos, porque como afirmó el Santo Padre “tiene paciencia”, y no deja lo que quiere para sí, “nuestra alma”, el Papa afirmó: “Después de las tentaciones, en el desierto, cuando Jesús fue tentado por el diablo, en la versión de Lucas se dice que el demonio lo dejó por un tiempo, pero durante la vida de Jesús volvía y volvía: cuando lo ponían a prueba, cuando le tendían trampas, en la Pasión, hasta en la Cruz. ‘Pero si Tú eres el Hijo de Dios, ven, ven con nosotros, así nosotros podemos creer’. Y todos nosotros sabemos que esta palabra toca el corazón: ‘¿Pero tú eres capaz? ¡Házmelo ver! No, no eres capaz’. Como el diablo hizo hasta el final con Jesús. Y así con nosotros”. Es necesario custodiar nuestro corazón donde habita el Espírito Santo – subrayó Francisco – “para que no entren los demás espíritus”. “Custodiar el corazón, como se custodia una casa, con llave”. Y después, vigilar sobre el corazón, como un centinela: “Cuántas veces – observó el Papa – entran los malos pensamientos, las malas intenciones, los celos, las envidias. Tantas cosas, que entran. ¿Pero quién ha abierto aquella puerta? ¿Por dónde han entrado? Si yo no me doy cuenta” de cuanto “entra en mi corazón, mi corazón se convierte en una plaza, donde todos van y vienen. Un corazón sin intimidad, un corazón donde el Señor no puede hablar y ni siquiera ser escuchado”. “Y Jesús dice otra cosa allí – ¿no? – que parece un poco extraña: ‘Quien no recoge conmigo, desparrama. Usa la palabra ‘recoger’. Tener un corazón recogido, un corazón sobre el cual nosotros sabemos qué cosa sucede, y aquí y allá se puede hacer la práctica tan antigua de la Iglesia, pero buena: el examen de conciencia. ¿Quién de nosotros, a la noche, antes de terminar la jornada, permanece solo, sola, y se hace la pregunta: qué cosa ha sucedido hoy en mi corazón? ¿Qué cosa ha sucedido? ¿Qué cosas han pasado a través de mi corazón? Si no lo hacemos, verdaderamente no sabemos vigilar bien ni
  • 8. custodiar bien”. El examen de conciencia “es una gracia, porque custodiar nuestro corazón es custodiar el Espírito Santo, que está dentro de nosotros”: “Nosotros sabemos, Jesús habla claramente, que los diablos vuelven, siempre. También al final de la vida, Él – Jesús – nos da el ejemplo de esto. Y para custodiar, para vigilar, para que no entren los demonios, es necesario saber recogerse, es decir, entrar en silencio ante sí mismos y ante Dios, y al final de la jornada preguntarse: ‘¿Qué cosa ha sucedido hoy en mi corazón? ¿Ha entrado alguien que no conozco? ¿La llave está en su lugar?’. Y esto nos ayudará a defendernos de tantas maldades, incluso de las que nosotros podemos hacer, si entran estos demonios, que son muy astutos, y al final nos estafan a todos”. (María Fernanda Bernasconi - RV). Entrevista con el secretario general del Sínodo de los obispos - Un camino veloz 2014-10-11 L’Osservatore Romano Es decididamente positivo el balance del Sínodo al final de la primera semana de trabajos y, por lo tanto, a mitad de camino de la tercera asamblea extraordinaria, reunida desde el domingo en el Vaticano para debatir sobre la familia. Quien habla es el secretario general del Sínodo de los obispos en una entrevista a L'Osservatore Romano. El sábado, por la mañana temprano, los locales del aula sinodal están casi desiertos y se oyen sólo las voces de los colaboradores, que trabajan también el sábado. Aprovechando el momento más tranquilo el cardenal Lorenzo Baldisseri relata sin formalidad, como es en su estilo directo y eficaz, la preparación de la asamblea, el trabajo proficuo de estos días verdaderamente intensos, el clima sereno, haciendo referencia, por último, a las próximas etapas de un camino que se está recorriendo muy ágilmente. Eminencia, para usted ha sido la primer vez, después de una vida sobre todo en las representaciones pontificias de medio mundo: ¿cómo ha ido? Tenía un poco de preocupación porque —incluso habiendo participado en muchas asambleas episcopales— no había estado nunca en un Sínodo y no lograba imaginar como sería esta nueva experiencia. Pensaba en una complejidad y en una rigidez mayores. En cambio no, el Sínodo es una asamblea como las demás, y existe una estructura y hay muchas personas, incluso muy preparadas, que han ayudado. ¿Desde cuando se está trabajando y cuáles son las novedades de esta asamblea? Trabajamos desde hace más de un año y, si bien no hubo cambios formales, hemos experimentado una dinámica entre las normas y su aplicación, que obviamente puede ser rígida o flexible, y hemos aprovechado de este espacio. Entre las novedades, la principal y más significativa ha sido, en estos meses, la participación personal del Papa en todas las reuniones del Consejo ordinario de la Secretaría. En el debate en el aula hemos simplificado muchas formalidades e introducido el italiano, que incluso entre los padres sinodales es más conocido que el latín. Permitiendo de este modo, en un clima más informal, trabajos más eficientes y libres. ¿Hubo, sin embargo, críticas sobre la información: un Sínodo blindado?
  • 9. Todo lo contrario. También en este ámbito hemos simplificado, apuntando a los encuentros con los periodistas —incluso de cada uno de los padres, que son obviamente libres de conceder entrevistas— y abandonando el sistema de los resúmenes porque en realidad no reflejaban las intervenciones: el texto inicial escrito se sintetizaba y difundía, pero el pronunciado en el aula luego se modificaba. Pienso que de este modo se refleja más el debate. Un debate –lo repito– realmente libre. ¿Cómo han sido estos días? Hemos respirado un clima sereno, incluso en la confrontación leal de los diversos puntos de vista, porque he visto en todos un gran amor a la Iglesia como pueblo de Dios, en todos una fidelidad indiscutible a la enseñanza en la tradición, con una mirada de misericordia a las personas. Hemos escuchado a todos los que pidieron intervenir: 180 intervenciones programadas y 85 en el espacio reservado a las intervenciones libres. En total, 265 intervenciones en el respeto escrupuloso de los tiempos, tanto que sobró una hora y media, que naturalmente hemos utilizado inmediatamente. «Usted tiene un reloj suizo» me dijo con un guiño el Papa. Pero el debate se ha facilitado también por el hecho de que el sesenta por ciento de las intervenciones llegaron antes y fue posible tenerlas en cuenta en la relación «ante disceptationem», base precisamente del debate. Que no fue para nada dramático, sino serio y constructivo. ¿Y ahora? El lunes escucharemos la relación «post disceptationem», que está casi lista, luego el lunes por la tarde en los veinte círculos menores se prepararán los modos, es decir, las integraciones al testo, para llegar al jueves a su presentación en el aula. De aquí se pasará al documento final de esta asamblea, la «relatio synodi», otra novedad, que será votada el sábado y entregada al Papa. Mientras tanto, el sábado por la mañana, se publicará el «nuntius», es decir, el mensaje de la asamblea sinodal, que quiere hablar a los católicos y a los alejados, teniendo en cuenta a las personas, mujeres y hombres de hoy. El domingo tendrá lugar la misa conclusiva durante la cual —con la presencia y la participación de los jefes de las Iglesias orientales y de los presidentes de todas las Conferencias episcopales del mundo, miembros de esta asamblea— será proclamado beato quien ha instituido, en 1965, el Sínodo de los obispos: Giovanni Battista Montini, Pablo VI. Desde el lunes nos encaminaremos hacia la asamblea ordinaria que se tendrá dentro de un año. Procediendo con agilidad, como hemos hecho hasta ahora. (g.m.v.) Divorciados y vueltos a casar: se abre camino la “vía misericordiosa” en el Sínodo
  • 10. La ternura del Papa Emerge clara una tendencia que privilegie respuestas basadas en la misericordia y la comprensión a los fieles que han fracasado en su unión conyugal, pero siempre partiendo de la indisolubilidad del matrimonio Andrés Beltramo Álvarez Ciudad del Vaticano Un vía misericordiosa con los divorciados y vueltos a casar, que no los margine y más bien los integre a la vida de la Iglesia, se ha abierto paso en las discusiones del Sínodo de los Obispos, la asamblea episcopal convocada por el Papa para analizar los desafíos de la familia en el contexto actual. El tema de los divorciados volvió a ser puesto sobre el tapete en las últimas discusiones ante el pleno de los 191 padres sinodales, que siguen sesionando a puertas cerradas en el Aula Nueva del Sínodo del Vaticano y ante la presencia del Papa Francisco, que durante todo el encuentro se ha mostrado afable y cercano, sobrio y alejado de todo protocolo. Dos discursos personales animaron el debate, que ya se planteó en torno a dos grandes ideas: una que sostiene a ultranza la doctrina de la Iglesia (que no acepta la ruptura de los matrimonios) sin abrir posibilidad alguna al análisis de casos especiales y otra más abierta a explorar caminos de acogida, aunque sin poner en riesgo el precepto de la indisolubilidad del matrimonio católico. Uno de estos mensajes fue pronunciado por el cardenal arzobispo de Viena, Cristophe Schönborn, quien confesó ante el pleno que él es hijo de divorciados, ha vivido en su piel el estigma de vivir en una familia desintegrada y llamó a no ignorar la soledad que se vive en estas situaciones. Otro obispo clamó: “Hermanos debemos, antes que nada, arrodillarnos delante del espíritu santo. No somos jefes de la misericordia de Dios, lo que Jesús pidió a los apóstoles es evangelizar y sanar”. Siguiendo en esa misma línea, varios de los participantes en el Sínodo se refirieron al camino penitencial que podrían emprender las personas divorciadas y vueltas a casar a las cuales se les podría, en ciertos casos, conferir la comunión (algo que hasta ahora está vetado). Según precisó el portavoz Vaticano, Federico Lombardi, se evidenció la necesidad de un itinerario penitencial, acompañado por una reflexión sobre los divorciados que se han quedado solos, que a menudo sufren en silencio, marginados de la vida social. Algunos obispos incluso dieron ejemplos de cómo ellos siguen caminos penitenciales con parejas divorciados, un itinerario basado en la reflexión sobre el impacto en los hijos de la ruptura, la reparación de las injusticias cometidas contra los ex esposos y cómo se afronta la relación con Dios en la nueva realidad de separados. “En segundo lugar, se ha subrayado la necesidad de tutelar a los hijos de los cónyuges divorciados a los impactos psicológicos del divorcio sobre ellos. En este ámbito ha sido recordado que una adecuada pastoral de los niños puede, a menudo, acercar a sus padres a la Iglesia”, agregó Lombardi. Sobre la concreta propuesta de abrir a la comunión a los divorciados, uno de los asistentes recordó cómo fue catalogado de “innovador y revolucionario en su tiempo” cuando el Papa Pío X (1903-1914) instauró la apertura de la eucaristía a los niños, que hasta ese momento no la recibían. También surgió la preocupación de algunos obispos por el impacto del divorcio en los niños, que son tratados como “pelotas de ping pon” que pasan de una casa a otra en los fines de semana. “¿Qué influencia puede tener en los niños un lenguaje típico del divorcio? Que ellos escuchen hablar de la novia de mi papá, el novio de mi mamá. De eso también se debe reflexionar”, apuntó uno de los obispos.
  • 11. Sobre las dos líneas de pensamiento prevaleciente sobre este tema en el Sínodo, una de las preguntas lanzadas este viernes al portavoz Lombardi durante su diario encuentro con la prensa fue si él veía que se iba imponiendo una por encima de la otra. Él pidió prudencia y llamó a esperar a la relación después de la disertación, que será presentada el lunes próximo. Pero agregó una frase significativa: “Lo que podemos constatar es que se han dado pequeños pasos, desde el Instrumentum Laboris (documento preparatorio del Sínodo) hasta los discursos de los padres sinodales mandados con anticipación, a la discusión en el pleno”. Las Iglesias: «El Nobel a Malala y a Kailash es una oportunidad» (©Ansa) (©Ansa) Malala Yousafzai Vuelven a la agenda política de los gobiernos de Paquistán e India cuestiones como la condición de las mujeres y el derecho a la educación Paolo Affatato Roma Dos ciudadanos de India y Paquistán fueron premiados con el Premio Nobel de la Paz: es un hecho histórico y una oportunidad única y extraordinaria. Malala Yousafzai, chica paquistaní que fue víctima de un atentado talibán cuando tenía 12 años, y el hindú Kailash Satyarthi, activista de 60 años, obtuvieron el reconocimiento debido a su compromiso para defender los derechos de los niños, empezando por el derecho a la educación. El premio fue aplaudido por las Iglesias de Asia del sur con entusiasmo y orgullo, pero también como un impulso para un cambio real. Sobre todo en relación con la condición de las mujeres, en sociedades rígidamente machistas, y con el respeto de los derechos de la infancia. El motivo de esta decisión, se lee en la nota de los Nobel, es el siguiente: «Los niños deben poderi r a la escuela y no ser explotados por dinero. En los países más pobres del mundo, el 60% de la población tiene menos de 25 años de edad y es un prerrequisito para el desarrollo pacífico del mundo que los derechos de los niños y de los jóvenes sean respetados». Desde Karachi, donde coordina la comisión diocesana para los jóvenes, el sacerdote paquistaní Mario Rodrígues comentó para Vatican Insider: «Es la primera vez en absoluto que un ciudadano paquistaní vence un Nobel. El reconocimiento nos anima y tiene un alto valor social: ofrece al país un recorrido
  • 12. hacia la paz y la prosperidad». Además, en un momento tan difícil para la nación, que vive fuertes turbulencias políticas y sociales, «el Nobel representa la oportunidad para dar pasos concretos en el campo de los derechos de las mujeres, fustigadas por una mentalidad extremista e integralista como la de los talibanes. Es tiempo de cambiar. Esperemos que se puedan abrir nuevas perspectivas: la campaña sobre el derecho a la instrucción, por ejemplo, es una campaña que une a la nación: musulmanes, cristianos y fieles de otras religiones». Concuerda Ataurehman Saman, investigador católico y director de las publicaciones en la comisión nacional Justicia y Paz (Ncjp), que considera el premio de Malala «una buena noticia para todo Paquistán, pues vuelve a poner en el centro del debate público la cuestión de los derechos de las mujeres y el derecho a la instrucción». Malala sufrió un atentado porque defendía el derecho al estudio para las niñas en el valle de Swat. «Es necesario que el gobierno adopte medidas adecuadas –dijo Saman a la agencia vaticana Fides– para garantizar el respeto de estos derechos», que son los mismos por los que se bate la Iglesia paquistaní. La monja también paquistaní Nasreen Daniel, comprometida cotidianamente en ayudar a chicas violadas o maltratadas, dijo a Vatican Insider que está «orgullosa y feliz». «Trabajamos mucho por el crecimiento y el desarrollo de las mujeres, y creemos que el Nobel a Malala es un signo de esperanza», añadió. Un poco más escéptica se mostró Fauzia Jacob, de la Asociación de las mujeres católicas, pues afirmó que no sabe «si el Premio podrá tener efectos positivos directos e inmediatos en la condición femenina en Paquistán, aunque, por supuesto, lo esperamos». Paquistán e India tienen en común estructuras sociales, culturas y tradiciones seculares, puesto que la división de ambos estados se dio hace poco más de 60 años. Muchas cuestiones sociales, como la defensa de los derechos de los niños, todavía se parecen mucho. Según Charles Irudayam, secretario de la comisión Justicia, Paz y Desarrollo, de los obispos hindúes, «el reconocimiento al activista Kailash Satyarthi servirá para aumentar la consciencia sobre el respeto de los derechos de los niños en la sociedad hindú». «Hay que recordar –explicó Irudayam a Vatican Insider– que la Iglesia católica está involucrada activamente en una campaña especial, con otras organizaciones de la sociedad civil. Se pide que el 9% del presupuesto estatal sea destinado a la defensa y promoción de los derechos de los niños; el 6% a la educación y el 3% a la salud. El primer derecho, efectivamente, es a la vida: cada 19 segundos un niño de menos de 5 años muere en la India debido a enfermedades fácilmente curables. Esperamos que ahora el nuevo gobierno del primer ministro Narendra Modi tome una postura clara con respecto a este tema». ESPIRITUALIDAD PARA TIEMPOS DE CRISIS
  • 13. Miguel Ángel MESA BOUZAS Este libro que tienes en tus manos respira por todos los poros, y buena falta que nos hace respirar en estos tiempos de crisis. Por eso es tan urgente la espiritualidad. Siempre lo fue, y hoy lo es más todavía. La espiritualidad no es propiedad de ninguna religión, ni de la religión. Es el arte de respirar, de acoger y de infundir el Espíritu. Este libro nos ayuda a respirar. Late en cada página todo lo que duele a la vida, lo que la hiere y la ahoga. Y lo que la cura y alivia. Aquí encontrarás el diagnóstico justo en las palabras que salen al paso una y otra vez: explotación, paro, desahucio, opresión, pobreza, recortes... Es la elegía de la crisis, tan antigua y extendida. Pero acerca tu oído, escucha más adentro. Del fondo de la crisis sube el aliento de la vida nueva, del mundo nuevo, con otras palabras, las más bellas y verdaderas: vida, entraña, encarnar, regalo, gratitud, cotidianidad, hondura... Es el salmo de la vida. Cada página rebosa sencillez, claridad y hondura. No hay pretensión ni artificio. En la gracia de la palabra se derrama la gracia de la vida. Cada capítulo se abre con la cita de un pensamiento y se cierra con una bienaventuranza que abre la mirada y el aliento. Dice Pedro Casaldáliga en el epílogo: El libro es un abanico de actitudes complementarias, esenciales para que la espiritualidad no sea dicotómica ni vivida fuera del lugar y la hora. Es una espiritualidad que se nutre del Misterio de la Encarnación asimilado en la integridad de la Pascua. Es espiritualidad de la liberación... Una espiritualidad integral...
  • 14. OJOS NUEVOS PARA UN MUNDO NUEVO. De la experiencia mística a otro mundo posible Antonio LÓPEZ BAEZA Todo creyente -de cualquier religión- que no haya caído en la trampa del fundamentalismo, ni se haya limitado a hacer de su fe un conjunto de creencias y prácticas evasivas de la realidad, sentirá la urgencia de encontrar el nexo vital que existe entre una auténtica fe en Dios y el servicio desinteresado al bien de la humanidad histórica. Sin dicho nexo desfallece la fe que, más pronto que tarde, resulta ser esa sal insípida de la que Jesús dice solo sirve para ser pisoteada, y que no pocas veces es la causa del descrédito de la práctica cristiana. El autor de este libro, desde su propia experiencia largamente meditada y compartida con numerosos grupos de oración, nos ayuda a entender que las dimensiones dialogante y contemplativa de la fe llevan consigo una verdadera fuerza revolucionaria para la consecución de ese otro mundo mejor, siempre posible. Insiste en que la verdadera Historia de Salvación es la que se escribe, día a día, a través de los creyentes de toda tradición religiosa que han hecho de su fe una experiencia mística. Y añade que todos los hombres y mujeres que buscan con sus vidas el bien de la Humanidad Histórica son igualmente obreros de la viña del Señor, aunque no actúen movidos por una ética confesional. Pero, para los seguidores de Jesús de Nazaret, cuya fe se autentifica en la Mística de la Encarnación, ha sonado la hora de no poder decir nada sobre Dios si no es mediante los hechos de su compromiso con la Vida y, en ella, con los que más sufren. Nueva biografía de Schopenhauer
  • 15. Nueva biografía de Schopenhauer A finales de este mes de mayo de 2014 la madrileña Editorial Trotta publicará "Schopenhauer. Una biografía". Este libro contiene mi aportación al conocimiento y la interpretación de la vida del filósofo alemán Arthur Schopenhauer (1788-1860), el padre del pesimismo filosófico, el pensador por antonomasia de la caducidad y la negrura de la existencia. Hace ahora casi una década que vio la luz otro libro mío titulado "Schopenhauer, vida del filósofo pesimista" (Algaba, Madrid, 2005). Era la primera vez que un estudioso español daba a la imprenta una biografía del autor de El mundo como voluntad y representación; que yo sepa, fue la primera escrita en castellano y en España. Tuvo muy buena acogida entre los seguidores de Schopenhauer y el público en general. Sin embargo, aunque cuidado en su forma externa, este libro apareció con algunos errores; además, las obras del filósofo se trataban de manera muy somera; requería una nueva estructura y la revisión o ampliación de algunos pasajes; por eso decidí volver a escribirlo y darle una vida nueva, pues hace tiempo que ha desaparecido de las librerías. De manera que "Schopenhauer. Una biografía" es un libro nuevo que sustituye al que Algaba publicó en 2005. El gran sueño hecho realidad
  • 16. Algaba, 2005 Schopenhauer nunca quiso escribir sobre sí mismo en sentido autobiográfico (apenas si dejó un puñado de textos sobre su persona y carácter; muy reveladores, por cierto). Argumentaba que a él le importaban más las ideas de los grandes hombres que las peripecias de sus vidas. Escribió que ocuparse de la vida de los filósofos era como si al contemplar un cuadro, nos fijásemos más en las molduras del marco que lo enmarca que en el cuadro en sí. No comparto esta idea. Vida y obra conforman una unidad inseparable (es una verdad de Perogrullo que sin vida no hay obra); creo que al conocer las peripecias vitales de un autor se comprenderá mejor su obra (sin ir más lejos: ¿Qué circunstancias contribuyeron al nacimiento de sus ideas? ¿Hubo hechos concretos que las motivaron? ¿En qué ambiente escribió sus libros?). La vida de Schopenhauer tal vez no sea clave para comprender muchas de sus ideas, pero es relevante para conocer las particularidades del carácter del que brotó su pensamiento; para saber cuál fue la intención principal que motivó a Schopenhauer a crear su extraordinario sistema de filosofía o qué influencias lo estimularon para pensar; cómo supo de su vocación, cómo sintió la llamada de la filosofía y su porqué. La belleza de su obra y su rotundidad filosófica también enraízan en la vida del filósofo, no en vano el propio Schopenhauer admitía que toda su obra había surgido de su experiencia personal más que de los libros que había leído o de las teorías de otros filósofos. Schopenhauer, de carácter desabrido, hombre enérgico, orgulloso de sí mismo y de su inteligencia, sólo vivió para su obra; ella fue la razón de su vivir; esto da que pensar desde un punto de vista filosófico (¿Vivir? ¿Filosofar? ¿Todo uno?). No engendró hijos, engendró "obra", libros. No se casó, reiteraba a quien quisiera oírle que su única esposa era la filosofía. Vivió solo y, en apariencia, aislado de sus congéneres, pero anhelaba su aplauso y su admiración. Al mismo tiempo, despreciaba a sus contemporáneos por considerarlos muy por debajo de él en cuanto a capacidad intelectual; los rechazaba porque los creía incapaces de reconocer que entre ellos habitaba un genio al que debían rendir admiración y pleitesía; Schopenhauer se consideraba sin empacho el filósofo más importante desde Platón y Kant, el más cimero del siglo XIX y de los siglos venideros; en alguna ocasión incluso llegó a decir que después de él ya no hacía falta continuar pensando en hallar sistemas filosóficos que explicasen el mundo, pues su sistema había dado con la clave del ser y de la existencia. Lo cierto es que algo de genialidad si que tuvo Schopenhauer puesto que terminó siendo reconocido por el público de su época, que leía y admiraba sus obras. Y aún hoy se leen con satisfacción y provecho a pesar de que muchas de sus afirmaciones nos parezcan salidas de tono. La vida de Schopenhauer en conjunto y vista en perspectiva ejemplifica la obsesión de un hombre por conseguir el cumplimiento de un sueño, la realidad de un anhelo. "Go, catch your Dream" reza el popular lema norteamericano que tanto inspiró a Steve Jobs, por ejemplo; Schopenhauer atrapó su sueño a su manera: él quería ser un gran filósofo, desvelar el misterio de la existencia, dar con la razón y el sentido del mundo, y murió satisfecho creyendo que había cumplido ese sueño. La historia de aquel anhelo y el cumplimiento del sueño de Schopenhauer, además de otras cosas, es lo que relata "Schopenhauer. Una biografía". La vida de Schopenhauer fue paradigma de qué significa querer y poder, anhelar y desear, obtener y poseer. Un deseo muy intenso suele satisfacerse en esta vida, igual que un sueño adorado suele hacerse realidad; eso sí, hay que quererlo con mucha intensidad y trabajar lo que haga falta para conseguirlo: "quieres, luego puedes; pero antes tendrás que padecer por lo que quieres", tal podría ser la máxima que guió a Schopenhauer.
  • 17. Otras biografías de Schopenhauer Safranski-Alianza Editorial Biografías de Schopenhauer abundan en alemán en mayor número que en otros idiomas. En 1987 Rüdiger Safranski publicó la que hasta hoy sigue siendo la más famosa: Schopenhauer und die wilden Jahre der Philosophie (Schopenhauer y los años salvajes de la filosofía); sin duda, esta obra constribuyó a despertar el interés por la persona y las ideas de Schopenhauer en Alemania, pero también más allá de las fronteras alemanas, puesto que tras su éxito de ventas en los países germanófonos, se tradujo al inglés y a la mayoría de idiomas europeos. Vio la luz en un momento propicio, puesto que en 1988 se celebró mundialmente el bicentenario del nacimiento del filósofo de Dánzig; el libro de Safranski sirvió para recuperar la vigencia del pensador. Los ecos de aquella celebración también recalaron en España, donde esta biografía apareció en 1990 bajo el sello de Alianza Editorial. En la actualidad la comercializa Tusquets. Safranski dio con una fórmula que más adelante continuó aplicando a las demás biografías que ha escrito: narrar la vida de su biografiado sin olvidarse de repasar con cierta exhaustividad el ambiente intelectual de su época. Sin embargo, en el fondo este libro poco o nada novedoso aportaba a lo ya sabido sobre la vida de Schopenhauer; Safranski recapituló y expuso otra vez lo que otros biógrafos anteriores dieron a la luz mucho antes que él. Actualizó lo ya sabido y, de manera muy amena, lo transformó en un relato más ágil y apasioanante. El lector se enterará de muchas cosas en esta biografía, pero si busca una comprensión exhaustiva de la filosofía y los afanes intelectuales de Schopenhauer acaso se vea decepcionado. Safranski pasa por encima de las interpretaciones profundas, falta hondura a la hora de explicar con claridad y concisión las ideas principals de la obra capital de Schopenhauer, aunque los episodios de su vida están muy bien narrados y documentados. Este "Schopenhauer" de Safranski continúa siendo el libro más divulgado y el más célebre porque tiene suficientes méritos para ello. Safranski hizo un buen trabajo de divulgación; de su cosecha es el estilo apasionado, pues en lo que atañe a las investigaciones principales y los testimonios sobre la vida de Schopenhauer, los encontró bien servidos. Apenas fallecido el filósofo pesimista, Wilhelm von Gwinner (1825-1917) publicó la primera biografía; andando el tiempo fue ampliándola y se convirtió en "la biografía canónica de Schopenhauer"; durante casi siglo y medio esta fue "la biografía por antonomasia del maestro"; me refiero a Schopenhauers Leben (Vida de Schopenhauer), cuyo texto definitivo, el de la tercera edición "estructurada de nuevo, aumentada y revisada", apareció en 1910 (Leipzig, Brockhaus).
  • 18. Tercera edición de 1910 Cuando Schopenhauer murió, y dada la admiración de la que su persona y obra gozaban en Alemania, Gwinner publicó un pequeño libro hagiográfico con el título de Arthur Schopenhauer aus persönlichem Umgang dargestellt (1862). Este "retrato de Schopenhauer desde el trato personal", como reza el título, consituyó el germen para la posterior "gran biografía" que hemos mencionado. Gwinner, jurista de profesión, trató mucho a Schopenhauer en sus últimos años. Fue su albacea, a su cargo quedó el cumplimiento de su testamento, y tuvo acceso a todo el legado manuscrito del filósofo antes que otras personas allegadas al difunto. Según Julius Frauenstädt, discípulo y amigo de Schopenhauer, encargado asimismo de velar por la edición póstuma de la obra del maestro —enfrentado a Gwinner y acaso celoso de él—, este último habría tenido acceso privilegiado a un cuaderno con apuntes íntimos de Schopenhauer del que se habría servido a capricho para extraer episodios y testimonios e incluirlos en su primera aproximación biográfica. Tal cuaderno llevaba el epígrafe griego "Eís heautón", "para sí mismo" (igual que el célebre escrito de Marco Aurelio, conocio como "Meditaciones"). Frauenstädt aseguró, además, que Gwinner, celoso de su posesión, no había querido que nadie más leyese ese cuaderno y lo había destruido. Lo cierto es que entre los manuscritos de Schopenhauer se encontró un puñado de páginas con algunas notas esbozadas agrupadas bajo este título de "Eís heautón", y que estas notas versaban sobre su propia persona y personalidad. De ahí a que existiera un cuaderno entero plagado de anotaciones "íntimas" hay gran distancia y suscita serias dudas. Frauenstädt, a su vez, también reunió recuerdos de Schopenhauer y, junto con Ernst Otto Lindner —un discípulo y admirador del filósofo—, publicó en 1863 el volumen titulado Über Schopenhauer (Sobre Schopenhauer. W. Hayn, Berlín). El tomo contine escritos misceláneos de recuerdos, cartas y algunos párrafos extraídos del legado manuscrito. Otro admirador de Schopenhauer, Eduard Grisebach, publicó en 1897: Schopenhauer. Geschichte seines Lebens (Schopenhauer, historia de su vida. Erst Hofmann, Berlín); una biografía, de menor envergadura que la de Gwinner, pero que contiene cartas inéditas del filósofo y recuerdos de algunas personas que rememoraban encuentros con él y las conversaciones que mantuvieron.
  • 19. Griesebach, 1897 Las biografías de Gwinner, Frauenstädt y Grisebach aportaron ya la mayor parte de la infomación de la que nos hemos nutrido los biógrafos posteriores hasta la actualidad. Trabajos más específicos, centrados en episodios concretos de la vida de Schopenhauer han ido apareciendo luego, claro está. La labor del gran estudioso Arthur Hübscher es inapreciable en cuanto se refiere a la catalogación de obras, inéditos y testimonios, así como al cuidado de la célebre edición de obras completas de Julius Frauenstädt (Brockhaus, Mannheim. Jubiläumausgabe en siete tomos, 1988); esta es la la edición de obras completas que hoy se considera canónica entre los estudiosos de Schopenhauer. Suele ser la más citada, la edición de referencia. A Hübscher debemos asimismo una magnífica edición muy asequible de los manuscritos del legado de Schopenhauer (Der handschriftliche Nachlass dtv, 1985) y la recopilación más completa de las "Conversaciones" del filósofo (Gespräche, Carl Winter, 1933; nueva edición, aumentada: Friedrich Fromman, Stuttgart y Bad-Cannstatt, 1971). En 1977, el austriaco Karl Pisa, periodista y escritor polifacético, interesado en la política de su país tanto como en personajes de la talla de Paracelso, Tocqueville y Schopenhauer, publicó su meritoria biografía Schopenhauer, Geist und Sinnlichkeit (Espíritu y sensualidad, Paul Neff Verlag, Viena); bien escrita, amena y documentada. Ésta fue la mejor via y la más actualizada para conocer a Schopenauer hasta de que llegase Safranski. Schopenhauer y los años salvajes de la filosofía dejó en el olvido a Pisa, cuyo libro es asimismo muy ameno y bien documentado, Safranski obtuvo mucho de él, sin duda. Pero el éxito de Safranski no ha amendrentado a otros divulgadores de la filosofía, a Robert Zimmer, por ejemplo, quien en 2010 publicó en Alemnia Arthur Schopenhauer. Ein Philosophiscer Weltbürger (Arthur Schopenhauer, un filósofo cosmopolita) dtv, Múnich, 2010). Un libro ameno y con numerosos aciertos. La última biografía del autor de El mundo como voluntad y representación de la que tengo noticia es
  • 20. la del norteamericano David E. Cartwright, profesor de filosofía en la Universidad de Wisconsin. El título: Schopenhauer. A Biography (Cambridge University Press, 2010). Un vistazo a su contenido constata que se trata de una biografía sólida y bien documentada, con detalladas explicaciones de las obras de Schopenhauer y el relato pormenorizado de los espisodios de su vida. El editor señala en la cubierta "This is the first comprehensive biography of Schopenhauer written in Englisch". La verdad es que la mayor parte de los biógrafos de Schopenhauer escribieron o escriben en alemán, sin embargo, en el mundo anglosajón contamos con monografías y estudios suficientes sobre Schopenhauer. Precisamente fue en el mundo anglosajón donde arraigó pronto un gran interés por los libros de Schopenhauer. Hay que recordar, que fue un inglés quien dio el pistoletazo de salida para que la fama del filósofo pesimista fuera más conocido en Alemania y después sus ideas traspasaran las fronteras del continente y llegasen a Inglaterra: John Oxenford, con el célebre artículo en la Westminster Rewiew: "Iconoclasm in german Philosophy" publicado en 1850. Treinta años despúes de la muerte del filósofo, acompañado por una época en la que sus ideas eran ya muy populares en Inglaterra, fue un escocés quien escribió la primera biografía en inglés de Schopenhauer. William Wallace (1843-1897) descendía de nobles escoceses. Filósofo y humanista de profesión, se interesó por la filosofía alemana, tradujo nada menos que la Lógica de Hegel al inglés y escribió una biografía de Kant, además de esta: Life of Schopenhauer (Vida de Schopenhauer, Londres, W. Scott, 1890). Sorprendentemente esta obrita, en la actualidad desconocida para el público de habla inglesa, está traducida al castellano, aunque hace tiempo descatalogada. He aquí la referencia: William Wallace, Schopenhauer. Prólogo de Fernando Savater, Traducción de Joaquín Bochaca. Ediones de Nuevo arte Thor, Barcelona, 1988. Por supuesto que este libro de Wallace no es ni de lejos tan "comprehensive" (exhaustivo, abarcador) como la biografía firmada por Cartwright; pero, basado fielmente en las obras testimoniales de Gwinner y Frauenstädt, y bien escrito, ostenta el honor de haber sido la primera biografía de Schopenhauer escrita por un autor no alemán y fuera de Alemania. Wallace en castellano En 1988, con ocasión de las celebraciones del segundo centenario del nacimiento de Schopenhauer, apareció en español este libro de Wallace con un prólogo de Fernando Savater, gran admirador del filósofo psimista, como es bien sabido. Igualmente en la época del mencionado bicentebnario, la editorial
  • 21. Cátedra publicó en castellano el libro del filósofo británico Brian Magee: Schopenhauer (Madrid, 1991); este autor, gran devoto de Wagner y Schopenhauer, explica con claridad los puntos más importantes de la metafísica, la ética y la estética del filósofo y reserva un apartado final para tratar de su influencia en autores posteriores, tales como Wittgenstein y Freud. Aunque no es propiamente una "biografía", Magee comenta los rasgos de carácter de Schopenhauer y repasa de manera somera las etapas de su vida. Es un libro que ha quedado injustamente relegado, y que bien merece una segunda oportunidad. Confiamos en que se reedite. Aparte de este puñado de títulos mencionados, quedan sin reseñar aquí algunas valiosas monografías más, por ejemplo, las de Arthur Hübscher o la archiconocida de Walter Abedroth (rororo Monographien); pero no he pretendido ser exhaustivo sino sólo abrir camino al lector curioso a fin de que prosiga a su antojo investigando en la bibliografia biográfica de Schopenhauer. Espero que este nuevo libro de Trotta, Schopenhauer. Una biografía, sirva para aportar una visión verosímil del hombre que fue Schopenhauer , de cómo vivió y, a grandes rasgos, de lo que pensó y escribió. Schopenhauer, Wilhelm Busch La carga del pasado La Transición demostró que el cambio era posible y que los dirigentes actuaron de manera sensata. Pero no hay milagros: muchos problemas heredados quedaron en pie. Desligarse de ellos exige un gran esfuerzo José Álvarez Junco 12 OCT 2014 - 00:00 CEST
  • 22. NICOLÁS AZNÁREZ Hace solo veinte, o incluso diez, años, España parecía haber superado muchos de los problemas que habían mantenido al país hundido en un atraso secular. Un atraso relativo, solo comparado con Inglaterra, Francia o Alemania, pero vivido como muy humillante por nuestros bisabuelos, que creían en pueblos o razas superiores e inferiores y no podían admitir compararse con Polonia, Turquía o Marruecos. Mirándose en el espejo de la Europa avanzada, las generaciones del 98 o del 14 se angustiaron y desesperaron ante lo que percibieron como país pobre, dividido entre unos pocos latifundistas con ínfulas nobiliarias y unos millones de braceros toscos e ignorantes; con unos períodos de efervescencia política seguidos por otros en que reinaba el orden gracias a la fuerza, el caciquismo y el falseamiento del sufragio; sometido a una influencia clerical desmesurada incluso para el mundo católico y a un intervencionismo militar que se traducía en constantes pronunciamientos y dictaduras; y enfrentado con el nuevo desafío catalán y vasco. Ese inestable cóctel llevó, tras muchos zig-zags, al baño de sangre de 1936-39. Pero pareció superado al terminar el largo período franquista, con una Transición relativamente fácil. No seré yo quien reniegue de la Transición. Pero sí del clima triunfalista que generó. De repente, pareció que todo iba bien: habíamos resuelto nuestros problemas —salvo el territorial—: ni éramos pobres ni dominaban ya militares, curas y latifundistas. Sacábamos pecho. Éramos un país europeo, “normal”. Hablábamos del “milagro español”. Celebrábamos con toda pompa los fastos del 92. Nuestros ferrocarriles y carreteras deslumbraban ahora a los europeos, que hacía nada de tiempo estaban a años luz de nosotros —era en parte gracias al dinero europeo, pero eso mejor olvidarlo—. Nuestra renta per cápita iba a superar a la italiana, luego a la británica, y era cuestión de tiempo alcanzar a franceses y alemanes. En cuanto a nuestra democracia, quién podía ponerle un pero. Qué importaba que en Inglaterra o Estados Unidos hubiera tardado siglos en formarse y la nuestra fuera de ayer y poco menos que caída del cielo. Pero no hay milagros. La Transición, con todas sus virtudes, se hizo sin cumplir un requisito que hubiera preocupado a un Giner de los Ríos: la preparación pedagógica indispensable para cualquier avance político. Es verdad que en el mundo clandestino del antifranquismo se había ido creando una cierta cultura democrática, pero estaba cargada de rasgos jacobinos o inquisitoriales; no se interiorizaron los valores de libertad, de respeto al otro, de convivencia con el disidente. Faltó ese saber ser libres que no se establece por decreto, como se establecen las convocatorias electorales, sino que se aprende con tiempo, esfuerzo y duros golpes al dictador que todos llevamos dentro. Una función pedagógico-política de este tipo podía haber cumplido la malhadada Educación para la Ciudadanía, pero esta se enfocó por otros derroteros, más sofisticados, más provocadores frente a la moral católica tradicional, menos centrados en lo que aquí necesitamos: aprender a debatir, a escuchar al discrepante, a practicar la libertad de manera responsable; es decir, a hacer exactamente lo contrario de lo que hacen los tertulianos o los reality shows televisados. Mi generación no pudo leer a Giner de los Ríos o a John Stuart Mill. Para las siguientes, se decidió que no hacía falta (y ahora el Gobierno suprime, sin más, la educación cívica). Y eso se paga. El pesimismo es lo que menos necesitamos ahora. Construyamos sobre los datos positivos Una democracia que no se asienta sobre una ciudadanía educada y consciente de sus derechos es necesariamente de mala calidad. Porque el ciudadano sin formación política tiende a cometer errores de bulto. Uno de los primeros es caer en el populismo, que consiste en aceptar la ingenua idea de que el pueblo es bueno y que todo iría bien si se hiciera lo que él quiere o intuye; los culpables de nuestros males son los dirigentes, “los políticos”. Lo cual elimina la responsabilidad de la ciudadanía, pese a ser ella quien ha generado y ha elegido a estos. Y conduce a un segundo error: poner desmesuradas esperanzas en un líder o un partido, sentarse a esperar redentores, políticos fuertes y honestos que, sin esfuerzo por nuestra parte, nos resolverán los problemas. Lo cual provoca enseguida el desencanto. El elector defraudado gira entonces al otro extremo y empieza a denigrar al que ayer veneraba. Ortega lo escribió: hay que “desterrar, podar del alma colectiva, la esperanza en el genio, que viene a ser una manifestación del espíritu de la lotería. (…) Prefiero para mi patria la labor de cien hombres de mediano talento, pero honrados y tenaces, que la aparición de ese genio, de ese Napoleón que esperamos”. ¿Cómo pudimos creer que, en un abrir y cerrar de ojos, habíamos superado un pasado tan duro, que toda nuestra herencia cultural había desaparecido por arte de magia? El ser humano se comporta según le enseña el entorno en que crece. Lo cual de ningún modo significa que estemos sometidos a un destino fatal, que el pasado sea una losa imposible de levantar. Sobran los ejemplos de cambios; el cambio existe, es incluso inevitable en la historia; pero las herencias y las continuidades, también. Que el cambio era posible se demostró durante la Transición. Un exfalangista, joven, listo y ambicioso,
  • 23. comprendió que era inevitable desmantelar el régimen y lo hizo en relativamente poco tiempo. Un rey, joven también y menos corto de lo que creíamos, entendió que las circunstancias no le permitían comportarse como su abuelo. Los dirigentes de la oposición renunciaron a los maximalismos revolucionarios a cambio de un sistema democrático parlamentario. Los dirigentes actuaron, pues, de manera sensata. Pero muchos problemas heredados quedaron en pie. Sentarse a esperar redentores que nos resuelvan las dificultades conduce al desencanto Dejando de lado los aspectos económicos, que no son mi campo, y ciñéndome a lo institucional y cultural, no era lógico pensar que unos funcionarios, jueces, militares o policías que habían aprendido a desempeñar sus tareas en un régimen de sumisión, halago al jefe y cultivo de clientelas, iban a convertirse en impecables servidores de la ley y el bien público sin necesidad de ningún tipo de reciclaje. Ni que unos ciudadanos que habían obedecido durante siglos por puro miedo al castigo, una vez suavizado este y sin aprendizaje alguno iban a interiorizar y cumplir las normas de convivencia. Ni que los propios políticos que condujeron la Transición iban a dejar de aprovechar el entorno y los reflejos heredados para recaer en el clientelismo y el autoritarismo. Ni que un país con tan pobre tradición científica iba a empezar a tener, sin un enorme esfuerzo de inversión y nuevos métodos de enseñanza y de selección del personal, tantos premios Nobel de Física o Medicina como otros donde se había cultivado la ciencia durante siglos. Ni que profesores para quienes una clase consistía en recitar un monólogo ante un grupo de oyentes pasivos, que debían repetirlo luego memorizado en un examen, iban de repente a saber incentivar la lectura, fomentar la participación de sus estudiantes y debatir y pensar juntos. Ni que una ciudadanía acostumbrada a escabullirse de la hacienda pública, y a admirar a los defraudadores, iba a pagar honradamente sus impuestos. Ni que quienes habían crecido al amparo de caciques no iban a votar, ahora que podían votar, a alcaldes corruptos pero que traían dinero al pueblo. No estoy recetando un retorno a la literatura del “Desastre” y al “problema de España”, a la autoflagelación y al ensayismo fácil sobre caracteres colectivos de raíz metafísica. Una dosis de pesimismo es lo que menos necesitamos ahora. En la España actual hay datos positivos, como el que nadie cuestione la legitimidad de la democracia; o que no haya una extrema derecha populista, al contrario que en nuestra siempre envidiada Francia; o el carácter pacífico del proceso catalán —por ambas partes; y pese a las pasiones que levanta—; o la insólita transformación de nuestras fuerzas armadas. Construyamos sobre esos datos. No hay que ser fatalistas, pero tampoco ingenuos. Evitemos la ilusión milagrera. Las ataduras del pasado son superables, pero para desligarse de ellas hay que reconocer su existencia y realizar un gran esfuerzo. José Álvarez Junco es historiador. Su último libro es Las historias de España (Pons / Crítica). La esposa de la canción
  • 24. El País | Gustavo Martín Garzo “Santa Teresa”, escribe Cioran, “era una esposa de la canción, un corazón traspasado, el misterio del solitario, de una pasión divina imparcial, la misma fuerza, lo mismo… Todo su tambaleo en un trance de éxtasis es la esposa del Cantar que deambula y no encuentra, es todo el embebecimiento sabroso, es la esposa de la canción que ha logrado su propósito, o que ha sido secuestrada por sorpresa”. Una esposa en busca de su amado, que sigue su rastro en la oscuridad, que se adentra con él donde nadie puede verles. El Dios en el que cree Santa Teresa no es una entidad abstracta, como el dios de las grandes religiones, sino que tiene una dimensión humana. No solo habla con él sino que llega a describirlo físicamente: habla de su cuerpo, de sus gestos, del color de sus ojos. Habla de él como la esposa del Cantar lo hace de su amado. Y, como la esposa, también ella busca un lugar escondido y secreto, donde recibirle, pues todo ese mundo de visiones, arrobamientos y gozos inefables, ese mundo de hermosos desatinos de los que ella da cuenta en sus escritos solo hablan del cuerpo transfigurado por el amor. Los pasajes en que nos cuenta sus raptos no tienen nada en común con los delirios de un psicótico. Un delirio es un sueño que no se puede compartir, que solo le pertenece al que lo tiene, que no cabe abandonar. Y los delirios de Santa Teresa lejos de apartarla del mundo la hacen soñar con una comunidad de iguales, una comunidad de mujeres. En realidad, tan pronto se encuentra con Dios corre a reunirse con sus monjas para contárselo. Y como prueba de ello ahí está el Libro de la vida, que es sin duda uno de los libros más extraordinarios, inclasificables y deleitosos que se han escrito en nuestra lengua. Una Sherezade celeste es lo que Santa Teresa soñaba ser. Santa Teresa no se limita a hablar con Dios sino que lo ve, y se ve atravesada por él. Este es el famoso pasaje en que Santa Teresa describe uno de esos encuentros: “Vi a un ángel cabe mí hacia el lado izquierdo en forma corporal… No era grande, sino pequeño, hermoso mucho, el rostro tan encendido que parecía de los ángeles muy subidos, que parece todos se abrasan… Veíale en las manos un dardo de oro largo, y al fin del hierro me parecía tener un poco de fuego. Este me parecía meter por el corazón algunas veces y que me llegaba a las entrañas: al sacarle me parecía las llevaba consigo, y me dejaba toda abrasada en amor grande de Dios. Era tan grande el dolor que me hacía dar aquellos quejidos, y tan excesiva la suavidad que me pone este grandísimo dolor que no hay desear que se quite, ni se contenta el alma con menos que Dios. No es dolor corporal, sino espiritual, aunque no deja de participar el cuerpo algo, y aun harto. Es un requiebro tan suave que pasa entre el alma y Dios, que suplico yo a su bondad lo dé a gustar a quien pensare que miento… Los días que duraba esto andaba como embobada, no quisiera ver ni hablar, sino abrasarme con mi pena, que para mí era mayor gloria, que cuantas hayan tomado lo criado”. Se trata de un rapto consentido, la escena de una amante arrebatada en la noche por el ser que ama. Estamos en el reino de la adoración, y adorar algo es abandonar el reino del yo, del sujeto, y desaparecer
  • 25. en esa noche de la que hablan las canciones de alba. Los amantes, en esas canciones, no quieren que la noche termine, no quieren que amanezca porque eso supone encontrarse con aquellos que eran antes de conocerse. “El cuerpo del amor se vuelve transparente”, escribe José Ángel Valente en uno de sus poemas. Y añade: “No busca el alba, no amanece el cantor”. Es de ese espacio sustraído a la identidad, a la razón, al alba, de lo que habla Santa Teresa en sus trances. “La poesía”, escribió Lorca, “no quiere adeptos sino amantes. Pone ramas de zarzamoras y erizos de cristal para que se hieran por su amor las manos que la buscan”. Santa Teresa es una de esas amantes, por eso sufre constantes trastornos y llega a enfermar una y otra vez en ese camino de perfección. Se ha hablado de crisis epilépticas, de problemas histéricos, de trastornos derivados de unas fiebres reumáticas mal curadas y de otras dolencias reales o imaginarias. Pero su cuerpo es el cuerpo de todos los seres heridos de los cuentos. Los cuerpos heridos por la pena o el desprecio de los demás, que no fue sino lo que ella misma tuvo que sufrir a causa del origen judío de su familia y de su condicion de mujer. Es la ley de los cuentos, que nada esté completo, por eso su mundo está poblado de seres y lugares rotos. Seres a los que les faltan los brazos, que no pueden ver o andar, que viven presos en torres que nadie visita, que han perdido la voz o que tienen que realizar las tareas más complicadas o visitar los reinos más extraños. Santa Teresa siempre cumple con esas tareas y regresa de esos reinos. Como el trapecista, vuela a lo alto, pero sabe que tiene que descender, ocuparse de sus monjas, de su escritura, de sus compromisos con el mundo y con su propia fe. Por eso quiere reformar el Carmelo, para hacer frente a esos compromisos. Para ella, un convento es un lugar donde vivir. De ahí su humor, la ironía que desprenden sus escritos. La ironía transforma el templo en una casa. “No era grande, sino pequeño”, escribe del ángel que la visita. Ese ángel es una metáfora preciosa del amor, porque el amor, como el juego de los niños, es el reino de lo pequeño. La celda en que escribía Santa Teresa era un lugar diminuto. Escribía sentada en el suelo, poniendo el papel sobre el duro jergón, ya que apenas había espacio para más. Es curioso señalar a este respecto la importancia que tienen los diminutivos en el Libro de la vida. Se ha hablado de su valor afectivo, y de cómo esa forma gramatical expresa el estado de pobreza espiritual del alma que empieza su camino de perfección, pero su verdadero significado es otro. “Casa de trece pobrecillas, unos trabajillos envueltos en mil contentos, una triste pastorcilla, estas maripositas de las noches…”, todos esos diminutivos son su manera de mantenerse en ese reino de lo pequeño esencial. Lo pequeño es el símbolo de lo que está en el umbral, lo abierto a otras formas de realidad, al lugar donde viven los deseos. Su mundo es el mundo de graciosa afectividad de los villancicos y las canciones populares. Pero ¿no es la escritura también una forma de hacerse pequeña, de desaparecer en ese silencio que es su sola razón de existir? Santa Teresa no escribe porque se lo hayan pedido sus superiores, pues de ser así ¿cómo sus palabras tendrían esa gracia, estarían tan llenas de deseo? Escribir para ella es relacionarse con lo que desconoce. La búsqueda de un interlocutor providencial que le haga decir lo que no sabe explicar; la espera, en suma, de la gracia. Una respuesta a preguntas que no nos habíamos hecho, eso es la gracia para ella. Tal es el misterio de Santa Teresa, y lo que hace que cinco siglos después de su nacimiento podamos seguir leyéndola con gozo: transforma la religión en poesía. Porque religión y poesía no siempre son lo mismo (y esta es la desgracia de las religiones). La religión nos ofrece respuestas; la poesía nos enseña a amar las preguntas aun sabiendo que no pueden ser contestadas. Gustavo Martín Garzo es escritor Salamanca y la serie Isabel en Tve
  • 26. ¡Vaya! Si más pronto lo digo (lo escribía aquí el pasado sábado) con la verdad histórica por delante, más pronto me lo desdicen con televisión por medio en la serie Isabel. Y habría sido fácil, me parece a mí, con los medios que hoy tiene a mano el montaje, poner la muerte del príncipe don Juan donde realmente tuvo lugar, en Salamanca. Me gustaría preguntarle al director de la serie, Jordi Frades, qué insignificante ahorro logró para producción con esa falsa localización, si es que la asesora histórica de la serie, Teresa Cunillera, segoviana por más señas, no prefirió olvidar el dato, como otros que también ignora, y barrer para casa, para Segovia, o sin más razones simplificó las geografías para facilitar un rodaje más cómodo y más barato. De hecho la serie adolece de una gran falta de concreción sobre lugares y ciudades quizás por la dificultad que crea el seguimiento de una corte tan itinerante como la de Isabel y Fernando que se pasaron los años de su reinado entre Segovia, Valladolid, Madrid y Medina, con estancias cortas en otras tantas ciudades. La mayor parte de la serie se olvida de esto y se concentra excesivamente en Segovia. Es interesante recordar que el destino quiso que, una semana antes de la muerte del príncipe, Isabel y Fernando estuvieran en Salamanca camino de Valencia de Alcántara para casar a su hija Isabel con don Manuel de Portugal. Con su hijo ya enfermo acordaron que Fernando se quedara aquí; y días después, tras la muerte del príncipe, Fernando partió para Garrovillas donde le dio a Isabel la fatal noticia. Isabel, sin detenerse ya en Salamanca, nunca quiso volver a ciudad de tan tristes recuerdos. Sí lo hizo el rey Fernando que residió en Salamanca largas temporadas. Su última visita fue para firmar con Felipe el Hermoso la llamada Concordia de Salamanca, que duró poco y a ambos les valió de nada. Ya mucho antes el rey Fernando tuvo que acudir a Salamanca para detener a Rodrigo Maldonado del bando de Santo Tomé, caballero violento y denunciado una y otra vez ante los reyes; fue detenido en Salamanca y su mujer se hizo fuerte en el castillo de Monleón a donde acudió el rey para terminar con este peligroso foco de resistencia cerca de la frontera con Portugal y entregar el castillo a caballero más fiel. Y así lo hizo. Y muchas más cosas y noticias que no caben en la Serie de TV a pesar de tantos episodios y mucho menos en una página de 25 líneas como ésta. Baste por hoy. Santa Teresa y los “Evangelizadores con Espíritu” El provincial de los Carmelitas Descalzos y el obispo emérito de San Sebastián, Mons. Juan María Uriarte, participarán los días 20, 21 y 22 de octubre en una nueva edición de las Jornadas de Formación para Laicos que organiza anualmente la Delegación Diocesana de Apostolado Seglar de Málaga. Bajo el título genérico: “Evangelizadores con Espíritu”, las conferencias se desarrollarán en el salón de actos del colegio de Las Esclavas (Calle Liborio García), a las 19.00 horas. Abrirá las jornadas el día 20 el Padre Miguel Márquez Calle, provincial de los Carmelitas Descalzos de Castilla, que disertará sobre: “Evangelii Gaudium y Teresa de Jesús: recuperar la frescura de los orígenes, el amor primero”. El título de la ponencia aglutina dos de las prioridades pastorales de la Diócesis este curso: “Iniciar como diócesis la recepción de la Exhortación Apostólica ‘Evangelii Gaudium’” y “Celebrar el Año Teresiano y de la Vida Consagrada”. El P. Márquez Calle es licenciado en Teología (Especialidad Dogmático-Fundamental), por la Universidad Pontificia de Comillas, ha ejercido la docencia de las materias: Mariología, Mística y Espiritualidad en diversos centros en España y en Santo Domingo y es autor de numerosas publicaciones.
  • 27. Los días 21 y 22 de octubre será el obispo emérito de San Sebastián, Mons. Juan María Uriarte Goiricelaya, quien ofrecerá sendas ponencias bajo el título: “Actitudes personales y comunitarias para la misión”. Mons. Uriarte es Licenciado en Teología por la Universidad Pontificia de Comillas y en Psicología por la Universidad de Lovaina. Ha ejercido diversos ministerios como formador de sacerdotes: formador del Seminario Menor de Bilbao, director espiritual y finalmente rector del Seminario Mayor. Ordenado obispo en 1976, ha ejercido como Auxiliar de Bilbao (1976-1991) y como ordinario de Zamora (1991- 2000). De 2000 a 2010 ocupó la sede de Bilbao. En la Conferencia Episcopal ha sido presidente de la Comisión Episcopal del Clero durante dos trienios y miembro del Comité Ejecutivo. El bastón de Teresa abre un “Camino de Luz” Teresa de la rueca a la pluma / 1 día ago La idea de la vida como camino, como peregrinaje, incluso como “misión”, está íntimamente ligada a la vida y a la memoria de Santa Teresa de Jesús. Su espíritu andariego, emprendedor, creativo y de búsqueda de la fe y de la verdad, se ha extendido por todo el mundo. En la presentación de este proyecto, que ha tenido lugar en la Casa Natal de Santa Teresa, el P. Emilio José Martínez, Vicario General de los Carmelitas Descalzos, ha indicado que Camino de Luz quiere ser un reconocimiento y un homenaje a ese aspecto tan particular de la vida de Santa Teresa, y a la vez, es una manera de comenzar de forma simbólica el centenario propiamente dicho. Esta iniciativa, en la que se recorrerán 29 países a todo lo largo y ancho del mundo busca unir personas de diferentes razas y culturas, ya que es una invitación a participar a todo el que desee vivir esta experiencia, y resaltar así al espíritu universal tanto de Teresa como del V Centenario que celebramos. En la página web de Camino de Luz, hay un formulario para inscribirse y participar en cualquiera de los países en los que se va a desarrollar. El Vicario General ha detallado que la peregrinación “Camino de Luz” partirá de Ávila el día 15 de octubre de 2014 (festividad de la Santa), y recorrerá el mundo por lugares teresianos en los cinco continentes -Europa, Asia, América, África y Oceanía-, incluidas misiones en activo, hasta llegar a Ávila el 28 de marzo de 2015, lugar y fecha de su nacimiento y, por tanto, cuando se cumple el V Centenario de Santa Teresa. A partir de esta fecha, “Camino de Luz” se desarrollará por las 17 fundaciones teresianas. Acompañará todo el recorrido un signo-reliquia muy significativo como es el bastón de Santa Teresa. “Esta iniciativa tiene como objetivo invitar a todo el mundo a seguir caminando con Teresa. Por eso, hemos elegido esta reliquia que con inmensa generosidad nos ha cedido la Comunidad de Padres de Carmelitas de Ávila y que permitirá a Santa Teresa estar muy presente en los cinco continentes”, ha subrayado el Vicario General del Carmelo Descalzo. A lo largo del Camino de Luz, acompañará al bastón de Santa Teresa un segundo símbolo, el candil. Este elemento, diseñado en el estudio de “Ibán Ramón + Dídac Ballester”, es el encargado de portar la luz a lo largo del camino. Haciendo una clara referencia a la figura de la Santa, el candil está construido a partir de una pantalla poliédrica a través de la cual se refleja la luz que en este camino pretende ser sobre todo una mirada hacia el futuro, por ello, desde el estudio de diseño se ha trabajado con especial interés que la imagen que transmita se ajuste a unos códigos visuales totalmente contemporáneos y modernos. Toda la información en caminodeluz.stj500.com
  • 28. La familia de santa Teresa La semana pasada escribía dando un pequeño perfil de cómo era san Teresa. Hoy quiero hablar de su familia y la primera pregunta que se me ocurre es: ¿Cómo era la familia de Teresa? Teresa tuvo la suerte y el regalo de tener una familia cristiana. Sus padres y hermanos le ayudaron a tener una fe fuerte, comprometida con la vida, pendiente de Dios y con afán de buscar y vivir “la verdad de cuando niña” . A Don Alonso se le murió su primera mujer. Se quedó viudo muy joven, con dos hijos, y volvió a casarse. Teresa, nacida el 28 de marzo de1515, es hija del segundo matrimonio, de D. Alonso Sánchez de Cepeda con Dª Beatriz de Ahumada. Dos hijos del primer matrimonio más diez del segundo, hacen que en la familia de Teresa haya 12 hermanos. Al referirse a sus hermanos y medios hermanos, Santa Teresa escribe: “por la gracia de Dios, todos se asemejan en la virtud a mis padres, excepto yo”. 1. Sus padres. Eran virtuosos o con grandes cualidades humanas como la fortaleza, la templanza, la prudencia, la justicia, la fe, la esperanza y la caridad. Cuando Teresa habla de su infancia alaba a sus padres y dice: “No cabe duda que el tener unos buenos padres, es uno de los grandes dones que se pueden recibir en la vida”. Y cuando enumera las virtudes de sus progenitores, en unas pinceladas los retrata perfectamente. En este ambiente impregnado de virtudes y cualidades humanas, de fe y religiosidad, Teresa ‘despierta a la vida’. Se siente atraída poderosamente por la verdad y por las cosas eternas, tiene prisa por ganar bienes eternos. Teresa reconoce la influencia de sus padres, el cómo vivían su relación con Dios y con los demás. Teresa era la más querida de su padre. Su padre era temeroso de Dios, hombre de verdad, honesto y leal, sensible al dolor de los otros, de mucha caridad con los pobres y piedad con los enfermos, no consintió en tener ningún esclavo, aficionado a leer libros espirituales. Jamás nadie le vio jurar ni murmurar. Muy honesto en gran manera. Su madre era la encargada propiamente de educar a sus hijos en el rezo y en las buenas costumbres. Y también tenía muchas virtudes. Pasó la vida con grandes enfermedades. Grandísima honestidad (...) muy apacible y de harto entendimiento. Le gustaba leer, a escondidas, libros de caballerías, aunque lo hacía para distraerse de los grandes trabajos que tenía y de las enfermedades que pasó. Tenía un cuidado especial para que rezaran sus hijos y fueran devotos de la Virgen y de algunos santos. A Teresa le tocó conocer desde niña el sacrificio, el sufrimiento, la renuncia y la muerte de lo más querido: su madre. Todo esto le hizo fuerte ante las dificultades de la vida. “Acuérdome que cuando murió mi madre, quedé yo de edad de doce años, poco menos. Como yo comencé a entender lo que había perdido, afligida fuime a una imagen de nuestra Señora y supliquéla fuese mi madre con muchas lágrimas. Paréceme que, aunque se hizo con simpleza, que me ha valido”. Y la Virgen, como madre, estuvo presente en el largo caminar de Teresa. Teresa era el amor de su padre. Ella tuvo la suerte de estar muy cerca de él en los últimos años de su vida. Su muerte fue la de un gran creyente, dando consejos a los presentes, encargándoles que le encomendasen a Dios. Teresa fue educada como se hacía entonces en los hogares cristianos. Francisco de Osuna describe magistralmente en su Norte de los estados lo que se hacía: “Si fuese cosa posible con la leche avían de recibir los niños la doctrina cristiana... Y cuando el pobre viniere a tu puerta, llévele el niño la limosna porque aprenda a hacer el bien…” Como se ve no sólo le enseñaban a rezar, sino a practicar la caridad. 2. Sus Hermanos. La buena relación entre los padres, determina la relación entre los hermanos. Durante toda su vida Teresa está pendiente de la suerte y de los negocios de sus hermanos, para ellos pide luz para que puedan hacer lo mejor. Es importante la buena relación de los hermanos. Estas relaciones les ayudan en el crecimiento personal y social. La familia de Teresa era grande y todos ellos heredaron la virtud de sus padres. Con el que más
  • 29. trato tuvo fue con su hermano Rodrigo, casi de su edad, con el que se juntaba para leer vidas de santos y para planificar el ser mártires. Desde niña, aprendió a orar, a practicar sus devociones, a practicar la caridad, a dar limosna como podía. Toda esta manera de ser y relacionarse con los cercanos, la volcará Teresa tiempo después, en su familia religiosa, haciendo y consiguiendo que cada convento sea una familia, un palomarcito, donde todas han de ser amigas, todas se han de amar y querer. En el seno de su amplia familia de sangre Teresa aprende de modo inmediato y elocuente lo que a lo largo de su vida será parte de su magisterio: buenas costumbres, decir siempre la verdad, rodearse de buenas lecturas y amistades, compartir experiencias y piedad, tratarse con cariño y corrección, y motivarse entre todos para alcanzar el ideal de ser perfectos. ¿Qué Vida Religiosa reflejan los jóvenes del S. XXI? Perfil de los jóvenes religiosos de hoy. La formación en la fidelidad Escrito por Editor. El día 9 se celebró la segunda conferencia ofrecida por la Revista Vida Religiosa con motivo del Año de la Vida Consagrada. El ponente, Pascual Chávez, ex-Rector Mayor de los Salesianos, desarrolló una cuestión de primer orden. ¿Por dónde orientar el diálogo sincero de las congregaciones con los jóvenes?. La respuesta fue tan buena que el Salon de actos se quedó pequeño. Ofrecemos un extracto de la conferencia que aparecerá publicada, en su totalidad, en nuestra Revista próximamente. He sido invitado a hablar de un tema que, aunque con un título diverso, ha sido enfrentado en diversas ocasiones por la Unión de los Superiores Generales, especialmente después del Congreso de los Jóvenes Religiosos. En la asamblea de noviembre de 1997, que tuvo como tema “Hacia el porvenir con los jóvenes religiosos – Desafíos, propuestas y esperanzas”, ha intentado conocer mejor la realidad de la nueva generación de religiosos. A esto se añade la reflexión hecha posteriormente en el Congreso Internacional sobre la Vida Religiosa organizado por las dos Uniones USG y UISG en noviembre de 2004 con el tema “Pasión por Cristo, pasión por la Humanidad”. Posteriormente, las siguientes asambleas de la USG encararon los temas: “Lo que está brotando” (mayo 2005); “Fidelidad y abandonos en la Vida Consagrada” (noviembre 2005); “Para una Vida Consagrada fiel” (mayo 2006)”. Y aunque no exclusivamente dedicada a los jóvenes religiosos, en noviembre de 2010 concluimos una serie de reflexiones con el tema “Vida Consagrada en Europa: compromiso por una profecía evangélica”. Como se ve, ha habido el esfuerzo por comprender y acompañar mejor la novedad que la vida consagrada en general está viviendo, y, en particular, la encarnada por los jóvenes religiosos.
  • 30. Quisiera sintetizar en tres rasgos la novedad de los jóvenes consagrados: búsqueda de profunda experiencia de Dios, anhelo de comunión aunque no siempre acompañado por pretensión de comunidad, entrega a la causa de los más pobres y marginados. Características que van unidas frecuentemente a fragilidad psicológica, a inconsistencia vocacional, a marcado sujetivismo.[1] La finalidad de esta reflexión, pues, más que pretender decir algo “nuevo”, trata de estimular la reflexión común. Por ello, trataré de mantenerme lo más fiel posible al título y al significado del mismo: ofrecer un marco antropológico que nos ayude a conocer mejor el perfil de los jóvenes religiosos de hoy, y en el cual puedan ubicarse posteriormente las propuestas que ayuden a robustecer la fidelidad de la vida consagrada de quienes somos llamados a ella, con particular atención hacia las generaciones jóvenes. Es indudable que la problemática fundamental toca la médula y el desarrollo de la fe, a partir de la experiencia personal y comunitaria del Dios de Jesucristo. Presuponiéndolo, debemos hacer aquí una “reducción metodológica” desde un enfoque específico: ¡ojalá que podamos acercarnos lo más posible a dicha problemática, donde Naturaleza y Gracia, sin confundirse, se encuentran e interactúan! En concreto, el tema de la fidelidad toca tantos aspectos esenciales de la persona, que necesariamente debemos renunciar a una visión exhaustiva, y contentarnos con ubicarlo dentro de este marco antropológico. Por otra parte, la problemática no es exclusiva de la vida religiosa o consagrada: ¡baste pensar en la situación dramática, y muchas veces trágica, de tantos matrimonios y familias en el mundo, e incluso dentro de la Iglesia! En el campo de la vida religiosa, afecta por igual a Institutos de reciente fundación, como a Congregaciones más antiguas e incluso Órdenes eremíticas y monásticas. Más aún: aunque nos interesa sobre todo en relación a las generaciones jóvenes, no se refiere sólo a ellas: la posibilidad de apartarnos del seguimiento radical de Jesús no desaparece sino con la muerte. Como señala bellamente D. Bonnhoeffer, la primera palabra que el Señor dirige a Pedro es también la última: “Sígueme”. Antes de afrontar el contenido de esta reflexión, conviene explicitar una valoración axiológica previa, de tipo formal: ¿se trata de una situación problemática, incluso peligrosa, de la que hay que defendernos, o de un kairós que, además de inevitable, se convierte en un reto fascinante para nuestra fidelidad creativa a Dios, a la Iglesia y a la humanidad? Creo que estamos convencidos de que, aun con toda la seriedad que la situación exige, se trata más bien de lo segundo: es la consecuencia de creer que el Espíritu Santo sigue presente y actuante en nuestra Iglesia y en el mundo; pero también porque, en éste como en muchos otros aspectos se hace presente la “ley del péndulo”: nuestro tiempo acentúa dialécticamente elementos que, en forma explicable pero injusta, se habían descuidado en otras épocas. De nosotros depende, con la ayuda del mismo Espíritu, buscar su justo equilibrio. Dicho simbólicamente: la cultura actual, sobre todo juvenil, ha dado un giro total al caleidoscopio antropológico: se contempla una imagen totalmente nueva, en la que podemos reconocer, sin embargo, los mismos factores estructurales que, en la cultura anterior, reflejaban la luz de una manera muy diversa, y por ello, también proyectaban
  • 31. una imagen distinta. Creemos, pues, que se trata, según la feliz expresión de G. K. Chesterton, de una de esas “virtudes que se han vuelto locas”. Dentro todavía del campo formal, he considerado más conveniente escoger una línea, entre otras, esperando que sea suficientemente relevante como para ofrecer suficientes pistas de reflexión. La alternativa habría sido tocar muchos temas, necesariamente de manera superficial e imposible de ahondar. Por ejemplo, el trabajo de grupo y de asamblea de la USG, de mayo del 2006, elencó además de los que yo propuse (la historicidad, la libertad, la experiencia y la renuncia) otros aspectos antropológicos que consideraba imprescindibles para toda vida consagrada que quiera ser plenamente humana y por lo tanto creíble. Y se refería a la autenticidad, a las relaciones interpersonales y afectividad, a la postmodernidad y al multiculturalismo, por ser “la base de la fidelidad vocacional”. Uno de los aspectos que entonces -hace 8 años-, no apareció en absoluto y que pienso hoy debería mencionarse-sugerirse, pues va adquiriendo una relevancia tal que ya se podría considerar una megatendencia en nuestro mundo, sobre todo juvenil, es la virtualidad. Esta no es problema de los “medios de comunicación”, cada vez más impensablemente sofisticados, sino que es problema de comunicación, de encuentro personal e interpersonal, y que en la vida religiosa -me parece- se va haciendo cada vez más presente, en dos vertientes: la comunitaria y la apostólica. Sin embargo, es una realidad tan nueva, compleja, ambivalente y, sobre todo, tan abierta al futuro, que es imposible hacer ahora una valoración crítica. Incluso en el tiempo de esa Asamblea de la USG de mayo del 2006 prácticamente todavía no existía facebook, twitter, whatsapp, instagram. Hoy en día, las personas pasan gran parte de su tiempo en el mundo virtual. Algunos tienen abiertos los social network todo el día, de este modo la vida virtual resulta siempre más el espacio en el que las personas viven su vida. Estas “nuevas formas de comportamiento” representan un grande desafío y una oportunidad para la Iglesia. La verdad de la fe no ha cambiado. Nuestra Tradición no ha cambiado, pero la gente vive en un mundo nuevo. No cabe duda que, al igual que los demás aspectos antropológicos, también la “virtualidad” en la comunicación, esta realidad totalmente nueva y hoy omnipresente en los jóvenes, se nos presenta como oportunidad y como desafío también en la formación, si bien para esto quizá todavía no estamos del todo preparados. Dicho irónicamente: quizá a un joven de nuestros días, la renuncia que implica la vida religiosa (castidad, pobreza, etc.) es menos fuerte que el tener que renunciar al ‘tablet’, al móvil, al ‘facebook’, al ‘twitter’, al ‘whatsapp’. A este propósito quisiera hacer referencia a la brillante e iluminadora ‘lectio’ con el título “Comunicación”, ofrecida por el conocido semiólogo Umberto Eco, en el Festival de la Comunicación a Camogli, el pasado 13 de Septiembre. En su ponencia Eco habló de la comunicación ‘soft’ y ‘hard’, una red donde es difícil mantener separadas las dos tipologías. Pues bien, citando a Marshal McLuhan, el sociólogo canadiense famoso por su tesis “el medio es el mensaje”, Eco decía que “usando paradojas, había centrado el interés sobre el medio, había ya entendido como el usuario es un dependiente del medio”. Esto lo ha llevado a hablar de Zygmunt Bauman, de Twitter, de la comunicación de algunos personajes, incluído Papa Francisco, del social network, de la comunicación de la comunicación, del exceso de información que lleva a la pérdida del pasado.
  • 32. A mí por ahora me basta mencionar este aspecto para centrarme, como he dicho antes, en aquellas dimensiones esenciales de la estructura humana, tratando de privilegiar la profundidad. [1] Cfr., a este respecto, el cap. IV, “Los jóvenes religiosos, problemas y retos” de la obra de GABINO URIBARRI BILBAO, Portar las marcas de Jesús. Teología y espiritualidad de la vida consagrada, Madrid, 2001, pp. 109-129. En el ámbito italiano, cfr. Rino FISICHELLA, Identità dissolta. Il cristianesimo lingua madre dell’Europa, Mondadori, Milano 2009, 115 – 132. A. CENCINI, “Mi fido…, dunque decido. Educare alla fiducia nelle scelte vocazionali, Milano 2009, pp.82-93. Y, más recientemente, la conferencia “La radicalità evangelica nell’epoca delle radici fragili”. CUANDO EL AMOR SE ACABA: Don y Arte para que no sea demasiado tarde José Cristo Rey García Paredes El ideal está claro. La cuestión es el camino para conseguirlo. De hecho, a no pocas parejas estas palabras les parecerán utópicas. Hablar de “totalidad”, “unidad profundamente personal que va más allá…” es emplear un lenguaje que podría hacer olvidar la dificultad que implica la convivencia, la correlación. Por eso, queremos abordar el tema de la fidelidad de forma realística, analizando en la medida de lo posible el complejo entramado de la fidelidad y la forma pedagógica de cultivarla. Cuando el amor se acaba El deseo amoroso se apaga y se manifiesta su inicio en diversas actitudes negativas, de las cuales podríamos resaltar tres: la indiferencia, el libertinaje y el acostumbramiento.  Cuando cede el deseo entra la indiferencia y poco a poco el hastío. La cohabitación puede ocultar un progresivo deterioro de la fidelidad y la unión se vuelve cada vez más frágil o insignificante.  Cuando el amor insaciable no se fija en una persona, sino sucesivamente en personas distintas, se da el vagabundeo amoroso, el libertinaje. Quien así actúa es fiel a su inestabilidad interior. En su vida no cuaja ningún tipo de fidelidad amorosa, digna de ese nombre. Nadie es capaz de llenar la
  • 33. soledad de tales personas, de sacarlas de su angustia interior y con nadie se quieren comprometer, ni ofrecerle lo que ellas son. La entrega amorosa, en ese caso, tiene una −muy previsible− fecha de caducidad.  Cuando el amor se vuelve rutinario, la fidelidad se petrifica, se endurece, y entonces ya no es fidelidad al amor, sino mero acostumbramiento: “hay algo peor que tener un alma perversa; es tener un alma acostumbrada”, decía Péguy. Estar juntos coincide entonces con un endurecerse juntos y perder capacidad de amor. El acostumbramiento se fija en un determinado tiempo y rechaza toda evolución; idolatra un momento determinado de la existencia; sacraliza gestos, costumbres y sólo quiere la repetición de lo mismo. En el acostumbramiento el espíritu traiciona al cónyuge, aunque el cuerpo no haga nada. Toda rigidez es una traición, una infidelidad fundamental bajo pretexto de fidelidad. El enfriamiento del deseo anuncia el momento del abandono, de la ruptura y de la muerte del amor. En el enfriamiento del deseo influye la infidelidad, un nuevo enamoramiento, una situación inaguantable para quien ya no ama. Sin embargo, quien sigue enamorado y pierde el amor del cónyuge ve cómo todo su mundo se convulsiona. La persona enamorada siente una afinidad metafísica con su amado o amada y descubre que su amor entra en la esfera del ser. La persona rechazada tiene la impresión de que la vida, el mundo, el universo, son gobernados por fuerzas locas o inmorales, por una divinidad enloquecida, por un demonio. Perder a la persona amada, ser rechazado o rechazada por ella, le resulta intolerable e irreparable, cuando hay auténtico enamoramiento y uno preve una vida luminosa y feliz con la otra persona. Pero cuando se pierde a la persona amada, no sólo se pierde a una persona concreta sino la potencia creadora de la vida, su soplo divino. El rechazo y el abandono amoroso produce en la persona afectada una catástrofe emotiva y mental. Esta “catástrofe amorosa” produce una “situación extrema” en la cual el individuo va descubriendo que esa situación acabará por destruirlo irremediablemente (Roland Barthes). De ahí que la desilusión amorosa acabe, no pocas veces, en locura, crimen, suicidio, violencia doméstica o ateísmo. Personas así decepcionadas se vuelven malas, violentas, o se echan desenfrenadamente en brazos de una sexualidad descontrolada o de una ambición desmedida. ¿Cómo mantener la fidelidad? ¿Es posible el sueño de los amantes, el “para siempre” (“for ever”), el amor eterno de pareja? ¿Será verdad lo que se promete en la fórmula del matrimonio: “prometo serte fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, todos los días de mi vida? ¿Qué hay en el “para siempre” o en la “indisolubilidad” de gracia y qué hay de compromiso? Superar el narcisismo Fue san Agustín quien −en alguna ocasión− escribió lo siguiente: “yo amo amar; yo me amo amando”. Con ello indicaba que es, más espontáneo, amarse a uno mismo cuando decimos amar a otro, que amar al otro olvidándose de uno mismo. Y es que cuando amamos nos sentimos bien: descubrimos que somos grandes, nobles, fuertes, generosos y que existimos. La cuestión está en averiguar qué amamos cuando decimos que amamos a alguien. Lo normal no suele ser amar al otro, sino amar la imagen que del otro nos hemos formado. El otro se convierte en el espejo en el que contemplamos la grandeza de nuestros sentimientos y el ardor de nuestra generosidad. Amamos a otra persona porque ella responde a una necesidad que encontramos en el fondo de nosotros. Dicen que en esto consiste la llamada “crisis del después de la luna de miel”: uno descubre que el otro es verdaderamente “otro” y no responde del todo a la idea que de él o de ella nos habíamos formado; y conectado con esto, uno se da cuenta de que el otro no está ahí para satisfacer nuestras propias necesidades inconscientes, sino que resiste y existe para sí. No pocos divorcios tienen lugar antes de los cinco años de matrimonio. Uno de los cónyuges, o los dos, descubren que el otro no responde a sus deseos, que es diferente. La percepción más nítida de esa diferencia facilita el que haya parejas que sucumban a la dificultad y ya no se levanten. La fidelidad en ese caso sólo sería una imposición, una carga insoportable, sobre todo, cuando surge una alternativa seductora. (Sobre “Eros y Narciso”). Aprender el arte de amar