1. ENCUENTRO DE PASTORAL “ERA CIEGO Y
AHORA VEO: NUESTRAS CEGUERAS”
1.Momento de oración: video “ABRE LOS OJOS” http://
www.youtube.com/watch?
v=dbk4FyEwfxY&feature=related
2. Trabajo en parejas: Lectura de Juan 9, 1. 6-9. 13-17.
34-38 (Evangelio del cuarto domingo de Cuaresma, lo tengo
en documento)
3 video “Ceguera” http://www.youtube.com/watch?
v=H2IZVOsVahM.
4. Reflexión LA LUZ DEL MUNDO
5. Actividad bíblica: En las parejas van a recibir un hoja
en la cual Jesús cura a un hombre ciego y de cada uno de los
6 tópicos deben responder después de leer cualquier cita
bíblica la pregunta que se propone .
6. Socialización:
7. Oración: QUIERO VER, SEÑOR, PERO CONTIGO
2. LA LUZ DEL MUNDO
La curación del ciego de nacimiento representa el camino bautismal, que se recorre en cada
Cuaresma. Este hombre fue a lavarse los ojos en la piscina de Siloé y volvió con vista (Jn 9,
7). Curado, personifica a todos los que han recibido el bautismo quienes pasaron de las
tinieblas del pecado a la visión de la fe por la gracia de Dios, concedida por su Hijo Jesús.
Jesús escupió en tierra, hizo barro con la saliva y se lo untó en los ojos (Jn 9, 8). Este gesto
recuerda que el ser humano salió del polvo de la tierra por el aliento creador de Dios (Gén
2, 7). El fango representa la suciedad que se le adhirió al hombre por el pecado original,
cometido por los primeros padres. Es también signo de la ceguera espiritual en la que vive
la humanidad por la cizaña sembrada en el mundo por el padre de la mentira.
Jesús lo envió a lavarse en la piscina de Siloé que significa Enviado (Jn 9,7). El ser
humano, para purificarse del pecado y ser iluminado por Cristo, debe lavarse en la fuente
bautismal. Por su ingreso a la Iglesia, enviada por Cristo para dar a conocer el Evangelio, el
bautizado recibe la verdad iluminadora de Dios.
La nueva visión: El cristiano es una criatura nueva que tiene la visión de la fe que nace por
la escucha de la Palabra de Dios. Por la virtud de la esperanza aguarda la vida eterna y la
resurrección. Reconoce lo bueno que hay en el mundo por la caridad. Con el carisma del
amor contempla su ambiente y a los demás seres humanos desde el punto de vista de Dios.
El bautizado tiene una visión nueva de sí mismo y del mundo porque fue sanado de la
ceguera del pecado.
El bautizado externamente se parece a cualquier otro niño, pero no es igual a los demás.
Decían del ciego curado que no era el mismo, pero que se le parecía (Jn 9, 9). El bautizado
experimentó un cambio en su persona. Mientras va creciendo en el amor, el cristiano
manifiesta con sus actos que es hijo adoptivo de Dios. El bautismo pone al ser humano en
lo alto para alumbrar a los demás con una vida íntegra o el cumplimiento de los
mandamientos.
El encuentro con Jesús: El bautizado tiene el privilegio de encontrarse con Cristo vivo en
la Iglesia. El primero de los sacramentos integra al ser humano en la familia de Jesús para
conocerlo, tener una relación personal con él y seguirlo. El ciego curado tuvo un encuentro
con Jesús que lo llevó a creer en su palabra y a adorarlo (Jn 7, 35-36).
A cada bautizado, Jesús le hace la misma pregunta que hizo al hombre curado: -¿Crees tú
en el Hijo del hombre? Uno de los compromisos bautismales es creer en la persona de
Jesús. Para profesar la fe en Él hay que conocerlo o saber quién es Él. La pregunta del que
había sido ciego recoge esa verdad: -¿Y quién es, Señor, para que crea en él? Los miembros
de la Iglesia están encargados de dar a conocer a Jesús y mostrarlo al mundo con las obras
del amor.
Sin un encuentro personal con Jesús no se puede vivir el bautismo. El pecado no permite
que el bautismo dé fruto. Por eso, el segundo compromiso bautismal es la renuncia al
pecado para que la gracia del bautismo dé fruto abundante.
3. ACTIVIDAD BÍBLICA “FUI CIEGO, ME HIZO VER”
1. LA CONDICIÓN DE ESTE HOMBRE... CIEGO
A. El resultado de la ceguera es incredulidad (2 Cor. 4:3-4)
B. El efecto de la ceguera es el pecado (Mat. 6:23; Jn. 3:19)
C. El productor de la ceguera es Satanás (2 Cor. 4:4)
D. La consecuencia de la ceguera es separación de Dios (Ef. 4:18)
¿Qué produce en nosotros la ceguera espiritual?
2. LA POSICIÓN DE ESTE HOMBRE... UN MENDIGO
A. El pecado lleva uno a la vergüenza (Rom. 6:21; Jer. 51:51)
B. El pecado trae tristeza y aflicción (Gen. 3:16-19; Job 14:1)
C. El pecado nos separa de seres queridos (Luc. 8:27;
Núm. 5:2;Lev. 13:45)
¿Cómo nos hace vivir la ceguera espiritual?
3. LA NECESIDAD DE ESTE HOMBRE... MISERICORDIA
A. Todos le rechazaban (v. 48; Jn. 5:7; Sal. 142:4)
B. Ningún doctor le podía sanar (Mar. 5:26; Jn. 9:32)
C. Nadie lo quería, porque era un mendigo (v. 46)
D. Todos le ignoraron, excepto Jesús (v. 48)
¿A quién podemos acudir para curar nuestra ceguera?
4. EL DESEO DE ESTE HOMBRE... SU VISTA
A. Los ciegos desean ver (v. 51; Luc. 4:18; Mat. 4:24)
B. Los sordos desean oír (Mat. 12:22; Luc. 11:14)
C. Los atormentados desean ser librados (Luc. 16:24; Mat. 15:22)
D. El pecador desea ser librado de la condenación (Luc. 18:13;
Hch. 16:30)
¿Qué necesitamos para curar nuestra ceguera?
5. EL SANADOR DE ESTE HOMBRE... JESÚS
A. Él vino a buscar y salvar (Luc. 19:10; Mat. 18:11)
B. Él desea dar descanso a los cansados (Mat. 11:28-30)
C. Él libra los que claman a Él (Joel 2:32; Rom. 10:13)
¿Cómo cura Jesús nuestra ceguera?
6. EL CAMBIO EN ESTE HOMBRE... SIGUIÓ A JESÚS
A. Él cambió su vida pasada por una nueva (2 Cor. 5:17)
B. Él negó a si mismo para seguir a Jesús (Mat. 16:23; 10:38;
Luc. 19:5-8)
C. El abandonó todo para seguir a Jesús (v. 52; Luc. 5:11)
¿Qué sucede cuando salimos de nuestra ceguera
4. QUIERO VER, SEÑOR, PERO CONTIGO
Por Javier Leoz.
Tócame, Señor, porque sabes que soy débil barro y, con tu mano, en
un poco más de barro pon sobre mis ojos algo que despierte mi
ceguera. ¡Son tantas cosas las que no veo con claridad!. Confundo,
la verdad, con mis propias verdades tu voluntad con mis oportunos
caprichos.
Quiero ver, Señor, pero con tus ojos. Que no me conforme
con lo puramente externo con aquello que, siendo bueno, me dice
que Tú no puedes darme la luz que necesito con aquello que, siendo
luminoso, no llega a clarificar mi conciencia ni mi destino. ¿Me
ayudarás, Señor, a ver como Tú y contigo? Que contemple las
maravillas del mundo pero que lo haga con ojos agradecidos hacia el
cielo.
Porque, en cuántos momentos, llego a pensar que todo lo que
me rodea y siento es obra exclusiva de la invención del hombre.
¿Me ayudarás, Señor, a superar la ceguera espiritual?. ¿Me curarás
cuando mis ojos ya no lloren por los demás?. ¿Limpiarás mis
miradas cuando sean egoístas y vacías?. ¿Enseñarás a mis ojos el
resplandor de tu rostro, Señor?
QUIERO VER, SEÑOR, PERO CONTIGO. Que, en el
horizonte, sepa descubrirte como lo más importante. Que no me
falle, hoy ni nunca, el telescopio de la fe. Ese telescopio que sabe
llegar donde el ojo humano no alcanza. Esa fe que es lente perfecta
para sentirte y vivirte y para reconocerte como lo que eres: ¡El
Señor!.
Ayúdame, Señor, a creer en Ti, a esperar en Ti sin condiciones,
pruebas ni exigencias. Ayúdame, Señor, a verte por encima de toda
apariencia más allá de aquello que, mi ceguera espiritual, me invita a
engañarme diciéndome que no existes. Amén.