El gobierno nacionalista entre 1936-1951 en Bolivia se caracterizó por un enfoque económico en la minería, un ambiente social de apoyo a los trabajadores y una ideología nacionalista y patriótica promovida por los presidentes Enrique Peñaranda y Gualberto Villarroel. Sin embargo, la economía no aprovechó plenamente los recursos minerales y la goma, y el gobierno de Peñaranda perdió popularidad debido a problemas políticos que llevaron a la muerte de Villarroel.