Plus de Lilly Soto Vásquez. Universidad Pontificia de Salamanca, Universidad Galileo; Universidad Rafael Landívar y Universidad de San Carlos de Guatemala , Universidad Mariano Gálvez
Plus de Lilly Soto Vásquez. Universidad Pontificia de Salamanca, Universidad Galileo; Universidad Rafael Landívar y Universidad de San Carlos de Guatemala , Universidad Mariano Gálvez (20)
La evolución de la presencia rusa en américa latina
1. 1
La evolución de la presencia rusa en América Latina
Lilly Soto Vásquez
La presencia rusa en América Latina cumple en el 2014, 188 años.
En 1826, cuando Rusia era gobernada por el zar Nicolás I se iniciaron las relaciones
comerciales entre Rusia y América Latina.
De 1826 a 1828, 49 barcos con mercancías brasileñas llegaron a puertos rusos. Se
transportaba azúcar de caña, café, cacao, algodón, caucho, colorantes. También llegaba
madera tropical para el revestimiento decorativo de los palacios de San Petersburgo.
Rusia exportaba primordialmente trigo, pero también cables, lonas y lienzos.
Un rol destacado en estas relaciones lo jugó el emisario ruso Serguéi Lomonósov,
debido a su educación, al dominio de diferentes lenguas y a su experiencia en el trabajo
diplomático realizado en Inglaterra, Estados Unidos, Francia y España gozaba de
prestigio en la cúpula brasileña. Vivió 12 años en Brasil y enseñaba el ruso al joven
monarca Pedro II.
Brasil se independizó de Portugal y Rusia lo reconoció en diciembre de 1827.
Posteriormente, y después de la revolución rusa (1917), fue México, el primer país del
Hemisferio Occidental, en reconocer a la Unión Soviética (URSS), en 1924. Por ello, en
1984, se conmemoró solemnemente el sexagésimo aniversario del establecimiento de
relaciones diplomáticas entre ambos países. En el año 2010, cumplieron 125 años las
relaciones ruso-argentinas. Las mismas se iniciaron en 1885.
En el período de la Guerra Fría (1947-1991) las relaciones con América Latina se vieron
disminuidas, como producto de la influencia de los Estados Unidos en la política
exterior de los países de América Latina.
Con los países centroamericanos se mantuvieron relaciones en el marco de la
Organización de Naciones Unidas (ONU) y en 1979, a raíz del triunfo de la Revolución
Sandinista se establecieron con Nicaragua, profundizándose las mismas en la década del
80.
Con la caída del muro de Berlín (1989) y del socialismo real en 1991, los países de la
otrora Unión Soviética (URSS) se dieron a la tarea de conformar una nueva entidad
estadual nominada Federación Rusa (Rusia) e iniciaron un nuevo período en sus
relaciones con América Latina.
El Salvador estableció relaciones con Rusia, el 3 de junio de 1992 y desde entonces se
han realizado diversos encuentros entre funcionarios para fortalecerlas.
Con Guatemala se iniciaron en el 2007, a partir de la visita del Presidente ruso,
Vladimir Putin con motivo de su participación en la 119 sesión del Comité Olímpico
Internacional que se realizó en Ciudad Guatemala del 30 de junio al 7 de julio de 2007.
En Septiembre de 2002, en Nueva York se reunió el Ministro de Relaciones Exteriores
de la Federación Rusa con los ministros de relaciones exteriores de Centroamérica para
2. 2
dar seguimiento a las anteriores reuniones celebradas en San José, Costa Rica (1997) y
en Nueva York (1999).
En este III Encuentro (2002) los ministros abordaron diversos temas de interés mundial
y confirmaron su decisión de contrarrestar, de manera efectiva, el terrorismo
internacional, el narcotráfico y demás crímenes conexos. Apoyaron la creación de la
coalición antiterrorista internacional y se pronunciaron a favor de que su actividad fuera
de largo plazo y de carácter integral.
Otros temas que fueron abordados fueron la posibilidad de ampliar relaciones
comerciales y el apoyo particularmente, en el tema de Infraestructura del Plan Puebla
Panamá (PPP).
En la actualidad, (2014) Rusia mantiene relaciones con los 35 países que conforman el
continente americano. Posee 20 Embajadas y 3 Consulados. A su vez, en Rusia
funcionan 18 embajadas de países latinoamericanos y de Estados Unidos y seis
embajadores están acreditados simultáneamente.
Pero donde se observa una mayor actividad es en las inversiones de capital ruso en
América Latina particularmente en energía (petróleo, gas), creación de infraestructura y
en la venta de armamento así como en la condonación de deudas por parte de Rusia,
particularmente a Cuba y Nicaragua. Según el Dr. Yuri Paníev en su trabajo RusiaAmérica Latina. Cooperación económico-comercial ruso latinoamericana: adelantos y
deficiencias (Iberoamérica, №3, 2013, р. 111- 127), Rusia ha ofertado a Argentina apoyo en
“el transporte ferroviario, el estudio de la Antártica, para que se necesitan rompehielos y
helicópteros rusos, la exploración del espacio cósmico y la utilización de la energía
atómica para fines pacíficos”. Estos temas lo abordaremos en futuros artículos, pero les
adelantamos la infografía correspondiente para profundizar sobre el estudio de las
relaciones comerciales entre Rusia y los países de América Latina.
En síntesis, las relaciones ruso-latinoamericanas han estado presentes desde 1826,
profundizándose en la primera década del siglo XXI, hecho que fue confirmado por el
presidente Vladimir Putin, en el 2012, quien afirmara en la reunión de embajadores y
representantes permanentes de la Federación Rusa:“Seguiremos ampliando la
colaboración con los países de América Latina y de África. Hace todavía unos años
a tal cuestión no se le prestaba la debida atención”
Guatemala de la Asunción, 6 de enero de 2014