4. El Antiguo Régimen es el sistema político,
económico y social vigente en Europa en el
siglo XVIII, caracterizado por la monarquía
absoluta, la sociedad estamental y una
economía de base agraria y señorial.
El término fue acuñado por los revolucionarios
franceses para aludir a todo aquello que
pretendían eliminar; de hecho, la Revolución
Francesa supuso el fin del Antiguo Régimen
y el comienzo de la Edad Contemporánea.
7. En nuestro país, durante los reinados de Carlos IV
(1788-1808) y Fernando VII (1808, 1814-1833), se
vivió la crisis del Antiguo Régimen y varias
tentativas de Revolución Liberal.
En dicho proceso, España se vio mezclada en los
efectos de la Revolución Francesa y las Guerras
Napoleónicas, y de hecho, sufrió la invasión francesa.
Fernando VII no aceptó el régimen liberal y durante su
reinado se produjo un enfrentamiento entre
Absolutismo y Liberalismo, mientras nuestro país
perdía la mayor parte de su Imperio Colonial
10. 1.1- LAS RELACIONES ENTRE ESPAÑAY FRANCIA
En 1788 asciende al trono Carlos IV que tendrá
que afrontar el cataclismo que, para todas las
monarquías de la época, supuso el estallido de la
Revolución Francesa en 1789.
El rey y su ministro Floridablanca (1789-1792),
intentaron evitar cualquier “contagio”
revolucionario cerrando todo tipo de contacto con
Francia -control en las aduanas, censura de las
noticias de Francia,...- Sin embargo, la
influencia revolucionaria era difícil de frenar.
11.
12. El fracaso en el intento de neutralizar la propaganda
revolucionaria provocó la caída de Floridablanca, que
será sustituido por el conde de Aranda en 1792, con la
intención de mejorar las relaciones con las
autoridades francesas y tratar así de proteger a Luis
XVI, cada vez en una situación más comprometida.
La radicalización revolucionaria a partir de agosto, el
destronamiento de Luis XVI y la proclamación de la
República, precipitó la caída de Aranda; de manera que,
en noviembre de 1792, Carlos IV confió el poder a
Manuel Godoy, que gobernará de manera autoritaria
tratando de contener el avance de las ideas
revolucionarias pero también acometiendo reformas.
15. La ejecución del rey francés Luis XVI, en enero de 1793,
impulsó a Carlos IV a declarar la guerra a la Francia
revolucionaria en coalición con otras monarquías absolutas
europeas (la denominada Guerra de la Convención -1793-
1795-).
La guerra acaba con la derrota militar española y la firma
de la Paz de Basilea, por la que nuestro país aceptó la
pérdida de la parte española de la isla de Sto. Domingo, y
la vuelta a la tradicional alianza con Francia contra
Inglaterra. Esta alianza se selló en el Tratado de San
Ildefonso (1796) que conllevó graves consecuencias con
respecto a las colonias americanas, ya que Inglaterra
colapsó el comercio español con América, gracias a la
superioridad de su flota.
16. Guerra contra la Convención, Guerra Gran en catalán o Guerra de
los Pirineos por desarrollarse únicamente en Guipúzcoa,
Navarra, Aragón, Cataluña y el Rosellón, fue desastrosa para
España, tras unos inicios esperanzadores
17. Preocupado por los avances franceses en
Navarra y Álava, Godoy llegó a un acuerdo
con Francia al margen de sus aliados
Así, se firma la PAZ DE BASILEA EN 1795, por la que España
recupera sus territorios pero entrega a Francia la isla de Santo
Domingo y algunas ventajas comerciales.
18. •Alianza contra Inglaterra, la armada franco-
española es derrotada en la Batalla de Trafalgar
(1805) contra el almirante británico Nelson.
20. A pesar de todo lo anterior, Godoy sigue secundando las órdenes
de Napoleón y, con la firma del Tratado de Fontainebleau en
1807, autorizaba la entrada y el establecimiento de tropas
francesas en España con el propósito de invadir Portugal.
En los primeros meses de 1808, se hizo evidente para todo
el mundo que el ejército francés tenía como objetivo no
confesado ocupar España, lo que provocó, el 19 de marzo
de 1808, el estallido del Motín de Aranjuez, motín
popular instigado por los partidarios de Fernando VII, que
culminó con la caída de Godoy y obligó a Carlos IV a
abdicar en su hijo con el título de Fernando VII, decisión
de la que se arrepintió pronto, intentando recuperar la
corona.
21. •1807 Tratado de Fontainebleau.
Godoy autorizaba el paso y
acantonamiento de tropas francesas
por España con el objetivo de una
campaña de conquista de Portugal.
•1806 Francia decreta el bloqueo
continental contra Inglaterra, no
dejando a ninguna potencia
europea comerciar con ella. No lo
acatará Portugal.
24. Esta coyuntura fue aprovechada por Napoleón que se
presentó como árbitro entre padre e hijo, convocándolos
a una reunión en la ciudad francesa de Bayona, dónde
los forzó a abdicar en su hermano José Bonaparte
(abdicaciones de Bayona)
25. Abdicaciones de
Bayona
Carlos IV Fernando VII Napoleón
José
Bonaparte
Sucesos de Bayona 1808. Abdicaciones
Carlos IV y Fernando VII son llamados por Napoleón a Bayona, donde
acuden, uno creyendo recuperar su trono, y otro ver reafirmado su
poder. En Bayona se produjeron una serie de abdicaciones:
Fernando VII en Carlos IV; éste en Napoleón y éste en José I
Bonaparte.
Se convocan Cortes en Bayona, para la elaboración de una
Constitución
29. 1.2- LA GUERRA DE LA INDEPENDENCIA (1808-1814)
Al contrario de lo que Napoleón esperaba, el pueblo
español reaccionó contra lo que consideraba como
una usurpación.
Así, el Dos de Mayo de 1808, el pueblo de Madrid se
levantó contra los franceses, provocando una brutal
represión (fusilamientos del 3 de mayo). El
levantamiento de Madrid dio lugar a un movimiento
popular que se fue extendiendo por toda España. Es el
inicio de la GUERRA de la INDEPENDENCIA (1808-14).
31. A partir de este momento, se produjo un
vacío de poder que posibilitaría la
quiebra del Antiguo Régimen en
España.
Para hacer frente al invasor, se
constituyeron las Juntas locales y,
posteriormente, las Provinciales, que
asumieron la soberanía en nombre del
rey ausente, declararon la guerra a
Napoleón y buscaron el apoyo de
Gran Bretaña. En septiembre de
1808, las Juntas Provinciales se
coordinaron y se constituyó la Junta
Central Suprema, presidida por
Floridablanca, que se estableció como
órgano de gobierno, refugiándose de los
invasores en la Isla de León en Cádiz.
32. Primera fase de la guerra (mayo-octubre de 1808)
Los franceses se centraron en tratar de sofocar los
levantamientos urbanos surgidos por todo el país.
En junio tuvo lugar el sitio de Zaragoza, cuya posesión era
fundamental para controlar la importante vía de
comunicación del valle del Ebro. La ciudad aragonesa
resistió heroicamente bajo el mando del general Palafox.
Escudo de Distinción a los defensores de
Zaragoza creado por el General Palafox
33. •Los sitios: resistencia de algunas ciudades
españolas ante el avance francés, como Zaragoza o
Gerona. Aguantando el hambre, los bombardeos, las
restricciones, etc. para evitar que tomaran más
zonas.
Zaragoza
34. En julio de 1808, el general Castaños derrotó a las tropas
francesas en la batalla de Bailén.
+ Este hecho tuvo una gran repercusión internacional pues, por
primera vez, un ejército napoleónico era derrotado en campo
abierto; además, las tropas francesas se vieron obligadas a
levantar el sitio de Zaragoza.
Se dieron entonces las condiciones adecuadas para que las
Juntas Provinciales formasen la Junta Central Suprema,
encargada de coordinar la lucha y dirigir el país. Esta Junta
reconoció a Fernando VII como rey legítimo de España y
asumió la autoridad hasta su retorno.
35. RENDICIÓN EN BAILÉN – representación inspirada
en el cuadro de Velázquez «La Rendición de Breda»
36.
37.
38. Segunda fase de la guerra (noviembre de 1808 - julio de 1812)
Esta segunda fase viene determinada por la reacción francesa
ante la derrota de Bailén.
Napoleón, que había subestimado la capacidad de resistencia
española, envió la Grand Armée, y ocupa casi toda la Península
(el ejército francés vence a los ingleses en Espinosa de los
Monteros y a Castaños y Palafox en Tudela).
En enero de 1809, los británicos eran obligados a reembarcarse
tras sufrir una derrota en la batalla de La Coruña y los españoles
son derrotados en la batalla de Uclés.
+ Zaragoza sufrió un segundo sitio, más devastador que el primero,
y cayó en poder de los franceses.
40. Napoleón abandonó el país en enero de 1809. Ante el imparable
avance francés, la Junta Central tuvo que desplazarse a distintos
lugares y finalmente terminó por refugiarse en Cádiz, la única
ciudad que, ayudada por los británicos, resistirá al asedio de las
tropas napoleónicas.
Desde 1809, la guerra se convierte en una guerra de desgaste.
Con el ejército español desarticulado, la resistencia a la invasión
se realizó mediante la conocida como guerra de guerrillas,
una forma peculiar de lucha armada, especialmente en el medio
rural, basada en partidas o pequeños grupos locales de entre unos
30 y 50 combatientes.
42. + Su fortaleza radica en la táctica que utilizan: el guerrillero rehúye la
batalla frontal, en la que se sabe inferior, y opta por golpear
repetidamente, mediante emboscadas, a grupos reducidos de enemigos.
+ La procedencia social de estos guerrilleros es muy variada:
labradores, artesanos, estudiantes, abogados, soldados de las unidades
dispersadas, clérigos e incluso delincuentes y bandoleros.
43. Desde el punto de vista bélico, el
ejército tradicional español era incapaz
de hacer frente al ataque francés.
De este modo las formas de defensa
predominantes serán: las guerrillas y
los sitios.
Organización bélica
44. + Los guerrilleros, con su conocimiento del terreno y el apoyo de
la población civil, hostigaban al ejército francés permanentemente
y, por sorpresa, destruían sus instalaciones, interferían sus
movimientos y asaltaban los convoyes de avituallamiento,
sometiendo a los franceses a una presión y desgaste continuo,
obligando a mantener a un elevado número de hombres en tareas
de vigilancia y escolta, sin poder participar en operaciones de
guerra convencional, al tiempo que se mina la moral de los
invasores constantemente amenazados por un enemigo invisible.
+ El ejército francés, incapaz de luchar con efectividad contra estas
guerrillas, reaccionó aplicando una dura represión contra la
población en su conjunto lo que no hizo sino fortalecer a la propia
resistencia.
45.
46.
47.
48. Tercera fase de la guerra (julio de 1812- 1814)
Se inició cuando Napoleón se vio obligado a retirar de España una
parte muy importante de sus tropas para afrontar la invasión de
Rusia.
En julio de 1812, el general Wellington, al frente de tropas inglesas,
portuguesas y españolas, ayudado por las partidas guerrilleras, derrota
a los franceses en Los Arapiles, los termina expulsando de Andalucía y
entra en Madrid, obligando a José I a dejar la capital. Las tropas
francesas iniciaron un repliegue hacia el norte.
En el verano de 1813, las batallas de Vitoria y San Marcial consuman
la derrota francesa obligando a José I a cruzar la frontera.
Napoleón decidió entonces pactar el fin del conflicto con los
españoles y permitir el retorno de Fernando VII. Para ello se firma
el Tratado de Valençay (1813)
53. 1.3- EL PRIMER INTENTO DE
REVOLUCIÓN LIBERAL
Tras recibir la corona española en
1808, José Bonaparte se
enfrentó a la difícil tarea de
dirigir el país pues ...
La mayoría de la población
española no le acepta; tiene que
hacer frente a la guerra de
independencia y los generales
franceses actúan por su cuenta en
muchas ocasiones e incluso el
propio Napoleón le desautoriza
interviniendo de forma continua en
los asuntos de España.
54. José I ofreció a los españoles un programa reformista,
dotando al país de una nueva ley fundamental, el
Estatuto Real de Bayona de 1808, una carta
otorgada que tenía un carácter autoritario, pero que
suponía un gran avance respecto al Antiguo Régimen
la igualdad de los españoles ante la ley, los impuestos
y el acceso a los cargos públicos, l reconocer la abolir
el régimen señorial y abrir el camino a la
desamortización. Pero, por contra, no establecía una
separación de poderes, las Cortes se elegían por
sufragio indirecto y el Estado seguía siendo
confesional.
55.
56. Con José Bonaparte colaboraron los llamados
afrancesados quienes se sentían identificados con su
programa reformista y apostaban por un poder fuerte
que modernizase España, sin riesgo de excesos
revolucionarios. Al final de la guerra muchos tuvieron
que exiliarse.
+ Frente a los afrancesados estaban los patriotas, bando
que agrupaba posiciones políticas muy diferentes: desde
los que deseaban la vuelta al absolutismo con Fernando
VII, hasta los que veían en la guerra la oportunidad
para implantar en España un régimen liberal.
57. Por otro lado, hay que tener presente que la Junta Suprema
Central, convertida en el gobierno de la resistencia a la
ocupación francesa, acabará recibiendo la influencia de los
sectores más reformistas; por este motivo, además de
dirigir la guerra, asumió la tarea de modernizar las
instituciones del Antiguo Régimen (finalmente, serán las
Cortes quienes se ocupen de esta tarea).
Pero quienes realmente propugnaron los cambios fueron
los liberales que exigían un régimen político libre,
parlamentarios, en oposición al absolutismo monárquico;...
58.
59. 1.4- LAS CORTES DE CÁDIZ Y LA CONSTITUCIÓN DE 1812
• La obra de los diputados reunidos en Cádiz, en
pleno conflicto bélico, significó la creación del primer
sistema liberal español, uno de los más avanzados de
Europa en aquellos momentos y ejemplo para otros
muchos países europeos y americanos.
• La Constitución que elaboran para la liquidación
del Antiguo Régimen está inspirada en los principios
del racionalismo francés, pero es la obra de una
minoría liberal y contará con una escasa aceptación
popular.
60. En 1810, la Junta Suprema Central, que se había refugiado en
Cádiz traspasó sus poderes a un Consejo de Regencia que
sustituiría al rey en su ausencia. Este Consejo convocó a las
Cortes para reorganizar la vida pública y llenar el vacío de
poder.
Las Cortes de Cádiz se convocaron en circunstancias muy
especiales, por un lado fueron de asamblea única y no por
estamentos como era tradicional, además, Cádiz, ciudad
comercial, contaba con un importante peso de la burguesía.
Estas cortes tuvieron así una composición social e intelectual
proclive a la modernización del sistema político y de hecho,
llevaron a cabo una revolución política que se concretó en la
Constitución de 1812.
62. + Aunque, los liberales (partidarios de reformas revolucionarias) son el
grupo social que finalmente se imponga; existirán otras tendencias
sociales como los absolutistas o serviles, partidarios de mantener el
tradicional orden monárquico o los jovellanistas, en una posición
intermedia entre absolutistas y liberales, ideológicamente continuadora de
la Ilustración y el despotismo ilustrado, que defiende la soberanía
compartida entre el rey y las Cortes.
63. La Constitución de 1812 se trata de un texto muy extenso en
el que se regulan con mucho detalle todas las cuestiones
relacionadas con la vida política y los derechos de los
ciudadanos.
Presenta un carácter claramente liberal (muy avanzada para la
España del momento) a un nivel similar a la Constitución
Francesa de 1791.
En ella se reflejan los principios del liberalismo frente al
ordenamiento político, social, y económico del Antiguo
Régimen. Se recogen aspectos como:
Soberanía Nacional: el poder reside en la nación, lo
que significa el fin de la monarquía absoluta de origen
divino. En su lugar se establece una monarquía
parlamentaria.
64.
65. o División de poderes:
+ El poder legislativo recae en las Cortes aunque con intervención
del rey. Las Cortes son unicamerales.
+ El poder ejecutivo reside en el rey, pero para evitar el retorno del
absolutismo, se limita su poder.
+ El poder judicial es competencia exclusiva de los tribunales. Se
prohíbe la intervención de las Cortes y del rey.
66. o Sufragio universal masculino. Tenían derecho a voto todos los
hombres mayores de 25 años, que elegían a unos compromisarios que
eran los que elegían a los diputados (procedimiento electoral indirecto).
Se necesitaba disponer de rentas propias para poder ser diputado
(elegibilidad censitaria).
o Declaración de derechos de los ciudadanos: se establecen derechos
individuales como la libertad de pensamiento y opinión, la igualdad de
los españoles ante la ley o el derecho de propiedad. En el aspecto fiscal,
los tributos se pagarían por todos los españoles sin distinción. Se
considera iguales a los españoles de ambos hemisferios (España y
América).
o Otros títulos de la Constitución contemplan el servicio militar
obligatorio, la creación de la Milicia Nacional, la implantación de una
enseñanza primaria, pública y obligatoria, la religión católica como
la única del Estado, etc.
67. Además del texto constitucional, las Cortes de Cádiz aprobaron
una toda una serie de leyes y decretos destinados a eliminar el
Antiguo Régimen y a reorganizar el Estado como un régimen
liberal: libertad de imprenta y supresión de la censura;
supresión de los señoríos jurisdiccionales; eliminación de los
mayorazgos y desamortización de las tierras comunales, órdenes
religiosas suprimidas, conventos y monasterios destruidos;
abolición de la Inquisición; libertad de trabajo y anulación de
los gremios.
La obra de las Cortes de Cádiz no tuvo una gran incidencia
en la práctica. La situación de guerra impidió una efectiva
aplicación de lo legislado y después, al final de la misma, la
vuelta de Fernando VII frustró la experiencia liberal ya que se
produjo el retorno del absolutismo.
70. • El regreso del rey planteaba el problema de su integración
en el nuevo modelo político definido por la Constitución de
1812. Fernando VII había abandonado el país como un
monarca absoluto y debía regresar ahora como un monarca
constitucional. Conocido como “el deseado” por el apoyo que
le había mostrado la población, pronto despejó cualquier tipo de
dudas ante la nueva situación política al abolir toda la
legislación y las reformas liberales. Pero la vuelta atrás
resultará imposible.
• El enfrentamiento entre absolutismo y liberalismo se
mantuvo durante todo su reinado, lo que muestra tanto la fuerza
del Antiguo Régimen como la debilidad de las fuerzas liberales.
• La muerte de Fernando VII en 1833 dará paso al
afianzamiento, no exento de dificultades, del sistema liberal en
España durante el reinado de su hija Isabel II.
74. 2.1- EL SEXENIO ABSOLUTISTA (1814-1820)
Por el Tratado de Valençay (1813), Fernando VII volvió a
España, pero, en lugar de ir a jurar la Constitución a Madrid, se
dirigió a Valencia; recibió el Manifiesto de los Persas (1814),
el documento en el que los absolutistas españoles le invitaban a
anular la Constitución de 1812.
Efectivamente, el rey les hizo caso y por el Decreto de Valencia
(1814) declaró nula y sin efecto la Constitución de 1812 y
toda la legislación de las Cortes de Cádiz con ello, se restauró
toda la legislación anterior a 1808, se restableció el régimen
señorial, la Inquisición, los gremios y se devolvieron los bienes
desamortizados; en definitiva, se restablecía plenamente el
Antiguo Régimen.
77. De manera casi inmediata se procedió a la persecución
de los liberales y los afrancesados, que comenzaron a
formar Sociedades Secretas que conspiraron contra el
gobierno.
Por otro lado, se produjo la caída de la economía y la
ruina de la Hacienda por los efectos de la guerra y el
proceso de independencia de las colonias americanas.
Fernando VII se negó a emprender cualquier
reforma fiscal que afectara a los grupos
privilegiados.
78. Además, cundió el descontento en el ejército, especialmente
entre los antiguos guerrilleros. Este descontento se expresó en
los pronunciamientos.
Estos se iniciaban con una sublevación militar contra el
gobierno pero podía arrastrar una sublevación civil y ser
utilizados por los liberales como ocurrió repetidamente: Spoz y
Mina (1814), Díaz Porlier (La Coruña, 1815), etc. todos
estos pronunciamientos fracasaron porque o fueron descubiertos
antes de producirse o no contaron con suficiente apoyo. Sus
protagonistas lo pagaron con su libertad, teniendo que marchar
al exilio o incluso con la vida.
Finalmente, en 1820, el Pronunciamiento de Riego en Cabezas
de San Juan consiguió su objetivo y obligó a Fernando VII a
jurar la constitución de 1812. Así se inició el Trienio Liberal.
79. Algunos pronunciamientos contra Fernando VII fueron los
de Milans del Boch en Valencia, de Espoz y Mina en
Pamplona, Porlier en La Coruña, la Conspiración del
Triángulo o la Conjura del Palmar
Milans del Boch
Juan Díaz
Porlier
Espoz y Mina
81. El Trienio Liberal fue un período en el que, aunque
limitadamente pudieron llevarse a la práctica algunos de los
principios de la Constitución de 1812.
Así se abolió el Feudalismo, los mayorazgos y la Inquisición;
se pusieron las bases de las posteriores desamortizaciones.
Sin embargo, la oposición al régimen liberal fue fortísima.
Por un lado, los propios liberales debilitaron el sistema al
dividirse entre sí entre moderados o doceañistas (partidarios de
reformas limitadas que no perjudicasen los intereses de las
élites sociales. Tienen voluntad de colaborar con el rey. Acusan a
sus adversarios de republicanismo y radicalismo y exaltados o
veinteañistas (partidarios de reformas más radicales favorables
a las clases medias y populares y el establecimiento de un
régimen plenamente liberal).
82. Moderados: (Doceañistas): Partidarios
de reformas liberales con prudencia.
Buscan un pacto con los privilegiados,
pero seguían creyendo en la Const. 1812
reformando sus aspectos más radicales.
Reforzar el poder ejecutivo de Corona,
Parlamento bicameral y eliminar el
sufragio universal
Sectores liberales. Dos tendencias diferentes (no partidos):
Exaltados: (Veintañistas):
(progresistas con Isabel II)
Partidarios de acelerar reformas de
1812, radicalizar, y enfrentarse al rey.
Apoyos: Sectores liberales urbanos,
parte ejército, intelectuales
Martínez de la Rosa
Romero Alpuente
83.
84. Por otro lado, el propio rey Fernando VII utilizó todos
los resortes que le daba la propia constitución (veto
suspensivo), para limitar su aplicación.
Además, a partir de 1822 se organizó la oposición
absolutista tanto interna (realistas y guerrilleros en
Navarra y Cataluña creación de la Regencia de
Urgel, cerca de la frontera francesa, como gobierno
alternativo al liberal de Madrid que fracasó), como
externa (reunión de las potencias de la Santa Alianza
en el Congreso de Verona).
85. El fracaso de la Regencia de Urgel hizo evidente para Fernando
VII que la única forma para acabar con el régimen liberal era la
intervención de las potencias absolutistas europeas; para ello,
solicitó a la Santa Alianza (la coalición militar de potencias
europeas absolutistas) la intervención en España para
reinstaurar el absolutismo.
En el Congreso de Verona de octubre de 1822, se aprobó la
medida y la tarea fue encomendada a Francia.
En abril de 1823, casi cien mil soldados comandados por el
duque de Angulema, los Cien mil Hijos de San Luis,
penetraron en el territorio español donde se les unieron
algunas partidas realistas. Recorrieron la Península sin apenas
oposición, derrotaron a los liberales y repusieron a
Fernando VII como monarca absoluto
89. 2.3- LA DÉCADA OMINOSA (1823-33)
Tras el desembarco de Fernando VII en 1823 en el
Puerto de Santa María, declaró que a lo largo de esos tres
años había sido prisionero y anuló la obra reformadora
de Cádiz el monarca trataba de nuevo de volver al
absolutismo y al Antiguo Régimen.
Inmediatamente, se inició la represión contra los
liberales; se abordó una depuración de la administración,
lo que llevó a la expulsión de miles de funcionarios,
especialmente docentes.
90. Fernando VII buscó la
colaboración de ministros que
iniciaron reformas
administrativas e impusieron
una moderación de la política
absolutista, como López
Ballesteros, que emprendió una
reforma de la Hacienda
(Creación del presupuesto del
Estado, etc.)
La reforma permitió un cierto
equilibrio presupuestario,
gracias a la disminución de los
gastos militares tras la
independencia de las colonias.
91. El sector más intransigente del absolutismo, en
1826, publica el Manifiesto de los realistas
puros, grupo que tenía como líder al hermano del
rey, Carlos María Isidro y que compondrán la
base social del futuro carlismo (clero
reaccionario, campesinos de zonas de Navarros,
País Vasco, Cataluña y Aragón, etc.).
Este grupo era partidario de Carlos María Isidro
como sucesor del rey, ya que éste no tenía hijos
varones.
93. + Pero, en 1829, Fernando
VII contrajo su cuarto
matrimonio con María de
Cristina de Nápoles. Un
año más tarde, nació
Isabel. Su concepción
provocó que el rey
redactara la Pragmática
Sanción que anulaba la
Ley Sálica dictada por
Felipe V y permitía que
una mujer heredara el
trono.
94.
95. + Los partidarios de Carlos María Isidro intentarían
revocar la decisión, mientras que María Cristina, para
proteger los derechos de su hija, se vería abocada a una
futura alianza con los liberales moderados. En definitiva,
al culminar el reinado de Fernando VII, tras su muerte
en septiembre de 1833, España estaba, de nuevo, al
borde de la guerra civil.
96. 1833 muere Fernando VII (Isabel tiene 3 años)
comenzando la regencia de Mª Cristina a la espera de la
mayoría de edad de Isabel, la que será Isabel II
99. - Entre 1808 y 1825 se produjo el proceso de
emancipación de las colonias americanas.
Aunque los Borbones, durante el Siglo XVIII,
intentaron mejorar la administración de las colonias y,
sobre todo, convertirlas en un inmenso mercado y
fuente de materias primas para la economía española, la
debilidad del imperio lo hizo imposible.
100. - Diversos factores explican el desencadenamiento del movimiento
independentista:
El creciente descontento de los criollos, descendientes de españoles
nacidos en América, quienes pese a su riqueza y cultura tenían vedado
el acceso a los grandes cargos políticos en las colonias, reservados para
los peninsulares.
Las limitaciones al libre comercio y al desarrollo económico de las
colonias impuestas por el régimen colonial. Estas limitaciones
perjudicaban económicamente a la burguesía criolla.
La presión fiscal que España ejercía sobre las colonias.
La influencia de las ideas ilustradas y ejemplo de la independencia
de los Estados Unidos de América.
La crisis política producida por la invasión napoleónica, que privó
de legitimidad a las autoridades que representaban a la monarquía de
José I en las colonias.
101. - En el proceso de independencia se pueden distinguir dos grandes etapas:
Primera etapa (1808-1816) los territorios americanos se declararon
independientes de la España napoleónica, pero mantuvieron sus lazos con
las autoridades de Cádiz, enviando representantes a las Cortes.
Segunda etapa (1816-1818) coincidió con la reacción absolutista de
Fernando VII. Las autoridades españolas sofocaron los alzamientos rebeldes.
Tercera etapa (a partir de 1818)las batallas de Simón Bolívar en
Venezuela y de José de San Martín en Argentina, Chile y Perú decidieron el
final de la guerra a favor de las colonias , sobre todo tras la batalla de
Ayacucho, Perú (1824).
o De esta manera, a partir de 1824, la corona española sólo mantenía el dominio
de Cuba, Puerto Rico, Filipinas y algunas islas del Pacífico.
- Por último, las consecuencias para España fueron la relegación definitiva al
papel de potencia de segundo orden y la pérdida del mercado americano y de
los recursos que hubieran podido ser base de un desarrollo industrial.
102. Tras la batalla de Ayacucho (1824)
en Perú, se perdieron los territorios
americanos quedando solo Cuba y
Puerto Rico.
103.
104. Las consecuencias, además de
acabar con tres siglos de relación
entre la metrópoli y América, fue
el origen de profundas
transformaciones en ambos
territorios.
•Sin sus posesiones americanas España
quedó relegada a potencia de segundo
orden y perdió un inmenso mercado, justo
en el momento en el que otros países se
estaban industrializando.
•Para América, el sueño de Bolívar de
crear una Gran Colombia fracasó, y los
nuevos estados americanos fueron presa
del neocolonialismo de Estados Unidos y
Reino Unido
105. 4- LA OBRA DE GOYA
COMO TESTIMONIO DE
LA ÉPOCA
106. Francisco de Goya y Lucientes es una figura única
dentro del panorama pictórico español y uno de los
más grandes genios del arte universal.
Su obra constituye un magnífico testimonio de la
conflictiva época que le toco vivir.
Primeros años de formación
Su primera época está marcada por su formación
barroca en Zaragoza, un periodo en Roma (1771) y las
enseñanzas de su cuñado Francisco Bayeu. La
protección de Bayeu le abre las puertas de la corte
(1774), dedicándose en principio a la realización de
cartones para la Real Fábrica de Tapices entre los que
destacan: El quitasol y La Pradera de San Isidro, que
guardan cierto gusto rococó con colores suaves y
armonizados, elegancia, gracia y delicadeza.
109. 1789-1808. Pintor de Carlos IV
Se convierte en el pintor de la nobleza y los intelectuales de la
corte. La estimación de su arte y su prestigio van creciendo
hasta culminar en su nombramiento como pintor de Cámara
de Carlos IV.
En 1792 sufre una grave enfermedad que le dejará sordo y
que dará un giro a su vida y a su obra hacia los aspectos más
tristes y sórdidos, que alterna con los encargos que recibe del
rey, los nobles y la iglesia: La Familia de Carlos IV, Frescos
de San Antonio de la Florida, La Condesa de Chinchón, La
Duquesa de Alba, La maja vestida y desnuda.
+ En todos ellos pone más atención en los rostros que en los
vestidos, en los que las pinceladas son meras manchas de color.
111. 1808-1814. La guerra
Su obra se ve convulsionada por la tragedia de la Guerra de
Independencia cuyo horror refleja con cruel verismo en sus
grabados y en sus cuadros. Sus cuadros se convierten en obras
históricas, el mejor reflejo de la época que le toca vivir: El dos
de mayo: La carga de los mamelucos y El tres de mayo: Los
fusilamientos de la Moncloa.
112. 1814-1828. Última época
Retirado a la Quinta del Sordo, se encierra en un mundo de
sueños sombríos y dramáticos que traducirá en las Pinturas
Negras hechas en las paredes de su casa: Saturno devorando
a sus hijos, El Aquelarre, La lucha a garrotazos…
Son pinturas casi monocromas. La técnica se basa en la
mancha, más que en la precisión anatómica o de perspectiva.
En 1824, desengañado ante el absolutismo de Fernando VII,
marcha a Francia, donde morirá cuatro años más tarde en la
ciudad de Burdeos. Su obra más significativa de esta época
será la Lechera de Burdeos pintada con una pincelada libre,
abocetada y rápida que anuncia el impresionismo.
113.
114. La obra artística de Goya se completa con multitud de cuadernos
de dibujo y obra gráfica entre la que destacan sus series de
grabados, fiel reflejo de la sociedad de su época:
Los Caprichos (1799) representa una sátira de la sociedad
española de finales del siglo XVIII, sobre todo de la nobleza y
del clero.
Si quebró el cántaro criticó en esta estampa la
violencia en la educación de los niños. Los
ilustrados creían que la educación podía
corregir los defectos y errores humanos.
115. Los desastres de la guerra (1810-1815). El horror de la
Guerra de la Independencia se muestra especialmente crudo
y penetrante en esta serie donde no hay héroes, ni grandes
hazañas, no hay buenos ni malos. Hay una sola realidad:
el horror de la guerra que trae consigo el hambre, la
destrucción y la muerte. Goya trasciende el conflicto y
presenta la esencia de los acontecimientos, sin anécdotas,
sin lugar ni tiempo preciso. El artista da su visión del
hombre que se va deshumanizando y es capaz de actuar
de una manera monstruosa, sin dignidad ni respeto hacia sí
mismo ni hacia los demás. Frente a la actitud de los otros
artistas de su tiempo, Goya rompe la tradición de heroicidad
bélica, y nos presenta el desamparo del hombre ante las
consecuencias de la guerra. Goya transmite un mensaje
universal ya que podemos sentir no solo el rechazo a esta
guerra, sino a todas las guerras.
116. «¿Qué hay que hacer más?». Goya refleja en
su obra gráfica la brutalidad y barbarie a que
se llegó en la Guerra de la Independencia
Española.
117. Los disparates (1815-1823). En ella destacan las visiones
oníricas, la presencia de la violencia y el sexo y la crítica a las
instituciones relacionadas con el Antiguo Régimen.
La Tauromaquia (1816) en torno al mundo de las corridas de
toros. Artista irrepetible, su arte, personalísimo y original, será
clave e influirá en gran parte de la pintura moderna posterior:
impresionismo, expresionismo y surrealismo.
EL MODO DE VOLAR