3. Señor Dios, que por el misterio de Pentecostés santificas a tu
Iglesia extendida por todas las naciones, derrama los dones del
Espíritu Santo sobre todos los confines de la tierra y no dejes de
realizar hoy en el corazón de tus fieles aquellas maravillas que
obraste en los comienzos de la predicación del Evangelio.
4. “Los apóstoles regresaron del monte de los Olivos a Jerusalén.
Cuando llegaron a la ciudad, subieron a la sala donde solían reunirse.
Todos ellos íntimamente unidos dedicaban a la oración, en compañía
de algunas mujeres, de
María la madre de Jesús y de sus hermanos”.
Hechos 1,12-14
5. Al acercarse la Fiesta de Pentecostés, la Venida del Espíritu Santo, nosotros
también nos reuniremos en oración, con María la Madre del Señor,
esperando la promesa de la venida del Espíritu Santo. Cada día desde el
jueves de la Ascensión de Jesús al cielo, hasta el domingo de Pentecostés,
nos reuniremos para rezar juntos y para reflexionar la Palabra de Dios.
7. “Si ustedes se aman cumplirán mis mandamientos. Y yo rezaré al Padre y Él les dará
otro intercesor para que esté siempre con ustedes, el Espíritu de la Verdad a quien el
mundo no puede recibir porque no lo ve ni lo conoce.
No los dejaré huérfanos, volveré a ustedes.
Yo les digo estas cosas mientras permanezco con ustedes, pero el Espíritu Santo,
que le Padre enviará en mi nombre les enseñará todo y les recordará lo que les he
dicho”.
Juan 14,15
PRIMER DÍA
8. Dijo Jesús a Nicodemo: “Te aseguro que el que no nace del agua y del
Espíritu no puede entrar en el Reino de Dios.
Lo que nace de la carne es carne, lo que nace del Espíritu es espíritu. No
te extrañes de que te he dicho: ustedes tienen que nacer de lo alto. El
viento sopla donde quiere; tu oyes su voz pero no sabes de dónde viene ni
a dónde va. Lo mismo sucede a todo el que ha nacido del Espíritu”.
Juan 3,3
SEGUNDO DÍA
9. “Nadie puede decir ‘Jesús es el Señor’ si no está impulsado por el
Espíritu Santo. Ciertamente hay diversidad de servicios, pero un solo
Señor. Hay diversidad de actividades pero es el mismo Dios que
realiza todo en todos. En cada uno el Espíritu se manifiesta para el
bien común. En todo es el mismo y único Espíritu el que actúa,
distribuyendo sus dones a cada uno en particular como él quiere”.
1Corintios 12,3
TERCER DÍA
10. “Al oír a los apóstoles todos oraron a Dios diciendo; ‘Señor, tu por
medio del Espíritu Santo pusiste estas palabras en labios de nuestro
padre David. Ahora Señor, mira cómo nos amenazan, y permítenos
anunciar tu Palabra con toda libertad’. Cuando terminaron de orar,
tembló el lugar donde estaban reunidos, todos quedaron llenos del
Espíritu Santo y anunciaban decididamente la Palabra de Dios”.
Hechos 4,25
CUARTO DÍA
11. “Cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén oyeron que los
samaritanos también habían recibido la Palabra de Dios, les enviaron a
Pedro y a Juan. Estos al llegar oraron por ellos para que recibieran el
Espíritu Santo. Porque todavía no había descendido sobre ninguno de
ellos, sino que solamente estaban bautizados en el nombre del
Señor Jesús. Entonces les impusieron las manos y recibieron el Espíritu
Santo”.
Hechos 8,14
QUINTO DÍA
12. “Mientras Pedro estaba hablando, el Espíritu Santo descendió sobre todos
los que escuchaban la Palabra. Los fieles de origen judío que habían
venido con Pedro quedaron admirados de que el Espíritu Santo era
también derramado sobre los paganos. Los oían hablar en diversas lenguas
y proclamar la grandeza de Dios. Pedro dijo: ‘¿Acaso se puede negar el
agua del bautismo a los que recibieron el Espíritu Santo como nosotros?’
Y ordenó que fueran bautizados en el nombre del Señor Jesús”.
Hechos 10,44
SEXTO DÍA
13. “Pablo llegó a Éfeso, encontró a algunos discípulos y les preguntó: ¿Recibieron el
Espíritu Santo? Ellos le dijeron: ‘Ni siquiera hemos oído decir que hay un espíritu
santo’. Entonces, ¿Qué bautismo recibieron? Les preguntó Pablo. Y ellos
respondieron ‘El de Juan’. Pablo les dijo ‘Juan bautizaba con un bautismo de
penitencia, diciendo al pueblo que creyera en el que vendría después de él, es decir
Jesús’. Al oír estas palabras, ellos se hicieron bautizar en el nombre del Señor
Jesús. Pablo les impuso las manos y descendió sobre ellos el Espíritu Santo”.
Hechos 19,1
SÉPTIMO DÍA
14. “Dios nos reveló todo por medio del Espíritu, porque el Espíritu lo
penetra todo, hasta lo más íntimo de Dios.
Nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que
viene de Dios, para que reconozcamos los dones gratuitos que Dios
nos ha dado. El hombre puramente natural no valora lo que viene del
Espíritu de Dios, es una locura para él y no lo puede entender, porque
para juzgarlo necesita del Espíritu”.
1Corintios 2,10
OCTAVO DÍA
15. “¿No saben Hermanos que ustedes son templo de Dios y que el
Espíritu Santo habita en ustedes? Si alguno destruye ese templo de
Dios, Dios lo destruirá a él. Porque el templo de Dios es sagrado y
ustedes son ese templo”.
1Corintios 3,16
NOVENO DÍA
16. ORACION FINAL
Señor, vení a visitar nuestro barrio, nos conoces a cada uno, tomanos
de la mano y guianos. Que te encontremos en cada hermano, que
tengamos la puerta abierta para recibirte y las manos dispuestas a
ayudar a todos. Jesús danos el Espíritu Santo que nos prometiste.
Amén.
“Los frutos del Espíritu son: el amor, la alegría y la paz, la tolerancia, la
amabilidad, la bondad, la confianza, la mansedumbre y el dominio de sí
mismo. Si vivimos animados por el Espíritu, dejémonos conducir
también por Él”.
Carta a los Gálatas 5,22