1. INTRODUCCIÓN
La siguiente información trata de dar a conocer temas interesantes como es el
―matrimonio‖ que es la unión del hombre y la mujer que se concreta a través de
determinados ritos o trámites legales o tradiciones y costumbres.
Este medio por el cual se encuentra el compromiso en la pareja, los derechos y las
obligaciones.
En la información que les presento consta de la definición, características, y
algunos tipos de matrimonio que existen hoy en día.
El matrimonio es importante para la buena educación de los hijos, y es admitido
para la procreación de hijos.
También se habla de los padres, que son los que son participes del matrimonio lo
cual son temas importantes para el desarrollo del hombre.
En el tema de los padres les presento su definición, características, tipos de
padres.
Estos dos temas son muy importantes ya que influyen en la sociedad y sobre todo
porque depende de estos factores para tener una buena o mala autoestima, ser o
no buenos ciudadanos y tener un desarrollo a lo largo de la vida.
2. MATRIMONIO
El origen etimológico de la palabra matrimonio como denominación de la
institución bajo ese nombre no es claro. Se suele derivar de la expresión "matris
munium" proveniente de dos palabras del latín: la primera "matris", que significa
"madre" y, la segunda, "munium", "gravamen o cuidado", viniendo a significar
"cuidado de la madre", en tanto se consideraba que la madre era la que contribuía
más a la formación y crianza de los hijos. Otra posible derivación provendría de
"matreum muniens", significando la idea de defensa y protección de la madre,
implicando la obligación del hombre hacia la madre de sus hijos.
Para efectos de mayor comprensión de la expresión "matrimonio" en su aspecto
etimológico es importante tener presente que, en muchas de las lenguas
romances, es válido el concepto del contrato de matrimonio considerado por el
Derecho Romano, que tiene su fundamento en la idea de que la posibilidad de ser
madre, que la naturaleza da a la mujer núbil, la llevase a procrear una familia. En
contraste con ese concepto occidental se puede mencionar el caso del idioma
árabe, en el que es entendido como «contrato de coito» o «contrato de
penetración», según la traducción de la expresión (`aqd nikāḩ ) al español. Con
todo, el término más usado en árabe para referirse a esta institución es, que
literalmente significa «unión, emparejamiento».
El matrimonio (del latín: matrimonĭum) es una institución social que crea un vínculo
conyugal entre sus miembros. Este lazo es reconocido socialmente, ya sea por
medio de disposiciones jurídicas o por la vía de los usos y costumbres. El
matrimonio establece entre los cónyuges —y en muchos casos también entre las
familias de origen de éstos— una serie de obligaciones y derechos que también
son fijados por el derecho, que varían, dependiendo de cada sociedad. De igual
manera, la unión matrimonial permite legitimar la filiación de los hijos procreados o
adoptados de sus miembros, según las reglas del sistema de parentesco vigente.
Por ser una institución sumamente extendida en el mundo —aunque no de modo
universal— la definición del matrimonio es materia de diversas disciplinas. Desde
el punto de vista del derecho occidental, el matrimonio constituye una unión de
dos personas que tiene por finalidad constituir una familia. Hasta hace pocos años
se consideraba un elemento esencial de la definición el hecho que ambos
contrayentes debían ser de sexo opuesto, pero en el último tiempo este elemento
ha sido objeto de moderaciones debido a la introducción, por algunos
ordenamientos, del matrimonio entre personas del mismo sexo.
Por su lado, en vista de la información etnográfica obtenida de diversas
sociedades, la antropología del parentesco define el matrimonio como la unión de
dos o más personas que cumplen roles de género definidos socialmente, incluso
tratándose de matrimonios homosexuales. El matrimonio, desde el punto de vista
antropológico, es una institución que permite legitimar la descendencia de una
3. mujer y crea relaciones de alianza entre los grupos de parentesco de los cuales
provienen sus miembros.
CARACTERÍSTICAS:
Las características generales de la institución del matrimonio incluidas en algunos
ordenamientos jurídicos son la dualidad, la heterosexualidad y el contenido en
cuanto a derechos y deberes. A partir del siglo XX, en las sociedades de influencia
occidental y procedente del liberalismo se recoge también el principio de igualdad,
con un peso creciente en las regulaciones derivadas.
La dualidad del matrimonio es el principio por el que la institución está
prevista, en principio, para unir a dos personas y vincularlas para su
convivencia y procreación. En algunos ordenamientos (en especial los de
base islámica) se reconoce la posibilidad de que un hombre contraiga
matrimonio con más de una mujer. Pero incluso en este caso la institución
vincula a una persona con otra, pues las diversas mujeres que un
musulmán pueda tener no están unidas, en principio, por ningún nexo
matrimonial ni tienen derechos y obligaciones entre sí.
Tradicionalmente el matrimonio exige la pertenencia de cada contrayente a
uno de ambos sexos, de manera que un hombre y una mujer son los únicos
que, en principio, pueden contraer matrimonio. Este principio está siendo
modificado en algunos países en favor del principio de igualdad, a fin de
reconocer la paridad de derechos y obligaciones entre hombre y mujer y
extender los beneficios que implica la institución del matrimonio a parejas
formadas por personas del mismo sexo.
El contenido en cuanto a derechos y deberes de los cónyuges varía en
función del ordenamiento jurídico de cada país, pero por lo general todos
les imponen la obligación de vivir juntos y guardarse fidelidad, de
socorrerse mutuamente, de contribuir al levantamiento de las cargas
familiares y de ejercer conjuntamente la potestad doméstica y la patria
potestad sobre los hijos, que se presumen comunes salvo prueba en
contrario. Las singularidades del contenido del matrimonio en cuanto a
derechos y deberes de los cónyuges derivan en cada país de su propia
concepción cultural de la institución, que ha dado forma a la misma en su
legislación positiva y en su práctica jurídica.
4. Efectos jurídicos
El matrimonio produce una serie de efectos jurídicos entre los cónyuges y frente a
terceras personas, de los cuales los fundamentales son los deberes u obligaciones
conyugales, el parentesco, la adquisición de derechos sucesora les entre los
cónyuges y el régimen económico del matrimonio, que tiene distintas modalidades
en los diferentes países. Además, en varios países produce de derecho la
emancipación del contrayente menor de edad, con lo cual éste queda libre de la
patria potestad de sus padres y podrá en adelante actuar como si fuera mayor,
aunque posteriormente se divorcie.
La forma tradicional de matrimonio es entre un hombre y una mujer, con la
finalidad de constituir una familia. Esa definición ortodoxa ha sido cuestionada, de
una parte, porque se ha otorgado reconocimiento a las uniones entre un hombre y
una mujer con finalidades prácticamente idénticas al matrimonio, pero que
adoptan formas y denominaciones distintas (v. infra las sociedades de
convivencia).
la unidad (de uno, con una),
la indisolubilidad (para siempre) y
la apertura a la fecundidad (el matrimonio es para procrear).
La unidad indica que un hombre sólo puede tener una esposa, y la mujer sólo un
marido.
La indisolubilidad: Significa que la unión es permanente, es decir, que ha de
continuar así mientras vivan los cónyuges. El divorcio civil no disuelve el
vínculo conyugal, aunque así (falsamente) lo establezca la ley civil. Una vez
que un hombre y una mujer se han unido en matrimonio consumado no hay
poder en la tierra que pueda disolver ese vínculo. Lo que Dios ha unido, no
lo separe el hombre, (3) dijo Jesús, con su autoridad de Supremo
Legislador.
El vínculo matrimonial es, pues, por institución divina, perpetua e indisoluble, de
modo que una vez contraído no puede romperse sino con la muerte de uno de los
cónyuges.
El que los esposos tengan clara conciencia de la indisolubilidad de su unión, les
ayudará a poner todo su empeño en evitar las causas o motivos de desunión,
fomentando el amor y la tolerancia mutua.
La apertura a la fecundidad es otra característica esencial del matrimonio.
Quienes se casan han de tener la intención de procrear. Si después eso no se da
(por ejemplo, porque uno de los dos es estéril), el matrimonio es válido. Pero no lo
sería, por ejemplo, si establecieran el vínculo matrimonial con la intención de no
procrear, evitando absolutamente la descendencia.
5. Celebración de un matrimonio: En esos casos el matrimonio se realiza,
generalmente, por la forma civil o de Estado, porque las normas de muchas
religiones no permiten este tipo de uniones en su seno.
Con todo, en distintos tiempos y lugares se han reconocido otras variedades de
matrimonio.
La monogamia es la práctica más común.
El matrimonio se considera una institución importante porque contribuye a definir
la estructura de la sociedad, al crear un lazo de parentesco entre personas
(generalmente) no cercanas en línea de sangre (al respecto, recordemos que
también hay comunidades en las que se acostumbra el matrimonio entre primos o
entre parientes de distintos grados; véanse las entradas acerca de la endogamia y
el incesto). Una de sus funciones ampliamente reconocidas es la procreación y
socialización de los hijos (si bien no es absolutamente necesario casarse para
tener hijos, ni todos los matrimonios heterosexuales los tienen), así como la de
regular el nexo entre los individuos y la descendencia que resulta en el
parentesco, rol social y estatus.
En las sociedades de influencia occidental suele distinguirse entre matrimonio
religioso y matrimonio civil, siendo el primero una institución cultural derivada de
los preceptos de una religión, y el segundo una forma jurídica que implica un
reconocimiento y un conjunto de deberes y derechos legal y culturalmente
definidos.
TIPOS DE MATRIMONIO
El matrimonio es dependiendo de la religión o del ordenamiento jurídico, los
derechos, deberes y requisitos del matrimonio son distintos. Ahora bien, no todas
las sociedades establecen la distinción entre matrimonio civil y matrimonio
religioso. Esta distinción sólo puede existir en aquellos contextos donde el Estado
ha atraído el reconocimiento del matrimonio como una de sus atribuciones. En
algunos países occidentales el matrimonio civil no ha sido reconocido hasta fechas
relativamente recientes. Por ejemplo, Chile lo reconoce desde 1884.3 Argentina, lo
hace desde 1888, en virtud de la Ley 2393. Algunos estados que han adoptado el
matrimonio civil no reconocen las uniones conyugales realizadas bajo las normas
religiosas, otros las reconocen como opción con validez jurídica equivalente al
matrimonio civil. En contraparte, las religiones no suelen reconocer el matrimonio
civil como una forma de unión conyugal acorde con sus preceptos.
6. MATRIMONIO CIVIL:
Es el matrimonio que se contrae ante las autoridades civiles (jueces o autoridades
municipales) y no ante las autoridades religiosas ni siguiendo el rito de una religión
(matrimonio religioso).
MATRIMONIO RELIGIOSO:
Se puede definir como una unión cuya estructura esencial viene exigida por los
dogmas de la religión a la que pertenecen los contrayentes, y no por la naturaleza
humana común para todo ser humano.
MATRIMONIO CATÓLICO:
Es una alianza por la que un hombre y una mujer constituyen una íntima
comunidad de vida y de amor. Por su naturaleza está ordenada al bien de los
cónyuges y a la generación y educación de los hijos. Entre bautizados, el
matrimonio es, además, un sacramento. Por eso, un matrimonio de paganos que,
al cabo de los años, recibiera el bautismo, no necesita repetir ningún rito o
ceremonia: en el momento de recibirlo, su vínculo conyugal se convierte en
sacramento.
Según la Iglesia Católica, el origen del matrimonio entre una pareja no es sólo
cultural, sino que procede de la misma naturaleza humana en cuanto que, al
principio "Dios los creó hombre y mujer". El matrimonio sería, por tanto, una
institución y no un producto cultural cuyas principales características -unidad,
indisolubilidad y apertura a la vida- vendrían definidas por la propia naturaleza del
concepto católico de amor entre hombre y mujer, que exige a los esposos o
cónyuges amarse el uno al otro para siempre y que alcanza su mayor expresión
en la procreación. Por eso, la Iglesia Católica se ha opuesto tradicionalmente al
adulterio, la poligamia, el rechazo de la fecundidad y el divorcio.16 También,
recientemente, se ha manifestado en contra tanto a las legislaciones que permiten
las uniones entre personas del mismo sexo como a aquéllas que equiparan el
estatus jurídico de dichas uniones al del matrimonio, porque entiende que
«significaría no solamente aprobar un comportamiento desviado y convertirlo en
un modelo para la sociedad actual, sino también ofuscar valores fundamentales
que pertenecen al patrimonio común de la humanidad»
MATRIMONIO DE LA LEY DEL LEVIRATO:
7. La ley del levirato simplemente el levirato es un tipo de matrimonio en el cual una
mujer viuda que no ha tenido hijos se debe casar (obligatoriamente) con uno de
los hermanos de su fallecido esposo.
Para continuar la línea sucesoria y la descendencia familiar, el nombre del primer
varón de esta nueva unión ha de ser el mismo que el correspondiente al difunto, y
heredará sus bienes.
El matrimonio por levirato se ha realizado en sociedades con fuerte estructura de
clanes en los que se ha prohibido el matrimonio exogámico, es decir fuera del
clan. Ha sido tradicionalmente habitual en los pueblos punjabis, jats, israelitas,
hunos (chinos xiongnu, hsiong-nu, etcétera), mongoles y tibetanos.
MATRIMONIO DE CONVENIENCIA:
Un matrimonio de conveniencia es aquel casamiento fraudulento que se produce
fundamentalmente para obtener beneficios jurídicos, económicos o sociales, sin
que exista un vínculo sentimental intenso entre los contrayentes. A veces también
recibe el nombre de matrimonio blanco (calco de la expresión francesa mariage
blanc), por la carencia de relaciones sexuales en ellos.
MATRIMONIO CONCERTADO:
El matrimonio concertado o arreglado es aquel que está pactado sin concurso de
la libertad de los contrayentes.
En países como India, China, Japón, algunas partes de África y el mundo árabe
los matrimonios arreglados son muy comunes. Estas uniones sirven para
preservar o limitar el acceso a un cierto orden económico y social a través de
pactos entre familias y no mediante el compromiso de los cónyuges con el otro. La
pareja "arreglada" no espera empezar su matrimonio por amor, sino que acepta
conformarse con normas impuestas por su entorno social dentro de la unión a
medida que esta progresa. El "amor de compañía" (el que se tiene por una
persona con la que se comparte mucho tiempo) puede surgir a lo largo de la
unión, pero carece del componente emocional de un "amor romántico".
Numerosos son los casos de matrimonios arreglados, llegando a su cúspide en el
siglo XVII y XVIII, cuando en Europa, las familias aristócratas y nobles
concertaban matrimonios para sus hijos con el fin de acrecentar la fortuna y crear
lazos de poder por medio de tales "empresas".
En general, tras este tipo de matrimonio, salían a la luz numerosos escándalos de
amantes que concretaban o suplantaban en el plano amoroso a la esposa real; un
8. ejemplo no tan antiguo es el matrimonio de Napoleón I con María Luisa,
archiduquesa austriaca con el fin de firmar un tratado de paz por medio del
matrimonio.
MATRIMONIO ENTRE PERSONAS DEL MISMO SEXO:
El matrimonio entre personas del mismo sexo corresponde a los matrimonios legal
o socialmente reconocidos entre personas del mismo sexo o género. También
conocido como matrimonio gay, matrimonio homosexual o matrimonio igualitario,
esta unión reconoce jurídicamente la relación y convivencia homosexual a
igualdad con una pareja en matrimonio heterosexual, manteniendo la naturaleza,
los requisitos y los efectos que el ordenamiento jurídico venía reconociendo
previamente a los matrimonios.
Aunque existen reminiscencias de matrimonios entre personas del mismo sexo
desde la Antigüedad, la institución moderna de matrimonios reconocidos
legalmente entre personas del mismo sexo se ha desarrollado principalmente
desde comienzos del siglo XXI. En 2001, los Países Bajos fueron el primer Estado
en reconocer esta institución y posteriormente ha sido extendido a once países y
ciertas entidades sub nacionales de otros tres. El debate al respecto es intenso en
muchos países y varios han prohibido expresamente la realización de este tipo de
uniones.
MATRIMONIO MORGANÁTICO:
El matrimonio morganático es la unión realizada entre dos personas de rango
social desigual en el cual se impide que el cónyuge y cualquier hijo de dicha unión
hereden u obtenga los títulos, privilegios y propiedades del noble. Es conocido
como «matrimonio de la mano izquierda» porque en este tipo de matrimonio el
novio sostiene la mano derecha de la novia con su extremidad izquierda cuando lo
normal es hacerlo al revés.
Este tipo de matrimonio era conocido en el derecho germánico, del que pasó al
derecho de muchos pueblos. Según parece, su nombre proviene de morgen
(matutino) y gabe (don). En ocasiones se le denomina también matrimonio sálico.
La Iglesia Católica lo consideró siempre como un matrimonio más.1
Principalmente, se realiza entre un noble y una plebeya, o viceversa, aunque estos
últimos son casos poco comunes, ya que generalmente las mujeres no heredan ni
reciben títulos y privilegios. En esta forma de matrimonio cada cónyuge mantiene
su estado original. A los hijos nacidos de este matrimonio se los conoce como hijos
morganáticos y, a efectos legales, son considerados hijos legítimos.
9. MATRIMONIO SORORATO O SORORAL:
El Sororato o matrimonio sororal es una práctica que consiste en la unión
matrimonial de un varón con un conjunto de hermanas (denominándose en este
caso muchas veces como poliginia sororal), o bien con una hermana como esposa
principal y las otras como concubinas.
Por extensión también se denomina sororato a la práctica según la cual, cuando
queda viudo, un hombre debe casarse con una hermana de su mujer. Por contra,
se denomina levirato a la práctica por la que una viuda debe casarse con un
hermano de su marido.
PROBLEMÁTICA DEL MATRIMONIO
Leman enumera estos cinco factores como causantes de problemas en el
matrimonio:
1. Pérdida de una actitud y comportamiento complaciente: Un comentario
que se escucha con mucha frecuencia, especialmente a las esposas, es
que sus esposos no las escuchan. Aquel hombre que era todo oídos y toda
atención para con ella durante el noviazgo, con los años de matrimonio
tiende a perder la ‗sintonía‘ o ‗salir de frecuencia‘ tan pronto su esposa
empieza a hablar. Esto se debe a que el esposo ya no está pendiente de
complacerla, de hacer todo lo que esté a su alcance para demostrarle que
le importa.
2. Cuando fue la última vez que te preguntaste:‗Qué puedo hacer para
complacer – de verdad complacer, sorprender, agradar,- a mi pareja´. Lo
más probable es que tu pareja no necesite un carro, un anillo de diamantes,
un viaje ni nada por el estilo. Yo apuesto peso a gallareta (como dicen aquí
en mi tierra) a que todo lo que necesita es una demostración de tu parte de
que estás realmente deseos@ de agradarle, de complacerle, de mimarle,
de demostrarle que te importa.
Comunicación Negativa:Un segundo factor a tomar en cuenta es
nuestra forma de comunicarnos. Si nuestros métodos de
comunicación son negativos, esto puede dar pie a problemas
importantes en el matrimonio. Algunos ejemplos de
comportamientos de comunicación negativa, los que debemos evitar
y re-aprender para convertirlos en positivos son:
10. Comunicación de un problema en párrafos largos, vagos o muy
emocionales (las mujeres somos fabulosas para esto).
Quejas cruzadas:en lugar de escuchar a la pareja cuando trata de
comunicarnos una queja, inmediatamente brincamos y aportamos
nuestras propias quejas y convertimos lo que pudiera ser una
comunicación constructiva y de crecimiento para la relación, en un
match de quejas a ver cuál se queja más.
Críticas:buscar la forma de criticar constantemente a la pareja no es
para nada constructivo, aun cuando se piense que son críticas
constructivas. Más aún si no tomamos en cuenta nuestro tono de
voz, el cual dice mucho más que nuestras palabras.
Exageraciones: aquellas frases que utilizan las palabras ‗Tú
siempre‘, ‗Tú nunca‘ etc.
Lectura Mental Negativa: Cuando asumimos que somos capaces
de leer la mente del otro y le acusamos de motivos subyacentes
equivocados. Si tienes que asumir algo, asume que las
motivaciones de tu pareja son positivas y puras. Cuántas veces no
hemos expresado ‗tú estás haciendo esto para molestarme‘ (yo soy
una que lo digo cada vez que cojo cuerda).
Monopolizar la conversación: a veces lo que debería ser una
conversación se convierte en un monólogo (de nuevo, las esposas
somos famosas por esto).
Culpabilizar: mantenernos en una actitud de buscar la culpa en el
otro no siendo conscientes que cada moneda tiene dos caras y que
difícilmente la ‗culpa‘ de cualquier situación sea de uno solo.
Orientarse hacia el problema: es decir, mantenernos enfocados en
el problema en lugar de dar pasó a buscarle una solución positiva.
En lugar de mantenernos enfocados en el punto de nuestra
conversación hasta tanto alcancemos un acuerdo.
3.-Tiempos Juntos:Otra razón importantísima por la que los matrimonios
comienzan a tener problemas es que no pasan tiempos juntos….y SOLOS. No es
11. que los esposos tengan que estar todo el tiempo juntos…tampoco hay que sofocar
al otro demandándole que nos dedique todo el tiempo disponible. Pero si para
mí mi pareja es lo más importante, yo definitivamente voy a desear y buscar la
forma de pasar tiempo con él….a solas.
4.- Baja Autoestima:Amén de lo súper-utilizado del término y del hecho de que
con tanto material sobre auto-estima ya uno se siente medio anormal si no la tiene
baja, lo cierto del caso es que las personas emocionalmente saludables tienen un
concepto saludable de sí mismos. No son ‗lo máximo‘, pero tampoco son la ‗lacra
de la sociedad‘. Una persona emocionalmente saludable reconoce sus dones y
sus defectos, está en crecimiento buscando mejorar aquello en lo que es falible,
se perdona a sí misma sus errores y miserias, los acepta con humildad y trata de
aprender de ellos. Esta visión de uno mismo es especialmente importante en el
matrimonio ya que está elevada al cuadrado. Podemos y debemos ser
complemento ayudándonos mutuamente a mantener un buen balance y auto-
estima…. o podemos hacernos daño afectando la estima del otro y perdiendo el
equilibrio en el matrimonio. Si tu pareja sufre de baja auto-estima, le toca
enfrentar el problema de frente y buscar la ayuda que sea necesaria. Pero más
que nada, necesita de una pareja que le motive a enfrentar esos problemas y que
cuente con él para aportar el necesario balance de auto-estima en el matrimonio.
5.- Falta de Valores Elementales:En la experiencia del Dr. Leman, y en la mía
propia…y en la de tantos autores cuyo material he compartido a través de estos
artículos, y en la de tantas parejas que nos han regalado el privilegio de sus
testimonios, indiscutiblemente que la moraleja es: los matrimonios que toman en
cuenta la cara espiritual de la vida tienen una mucho mejor relación que aquellos
que no lo hacen. Estos son matrimonios en los que tanto hombre como mujer
tienen una relación personal con Dios y ambos comprenden y aceptan que hay
valores eternos según los cuales enmarcan sus vidas. Tienen un sentido profundo
de la vida y de su misión en ella…y este sentido es parte integral de sus
matrimonios.
12. PADRES
PADRE: es, en un contexto biológico, aquel ser vivo de sexo masculino que ha
tenido descendencia directa. El término recíproco es «hijo».
‧tḗ
El término hebreo ʼav y el griego pa r se usan con varios sentidos:
como progenitor, cabeza de una casa o familia ancestral, antepasado,
originador de una nación, fundador de una clase o profesión, protector,
originador de algo y como expresión de respeto.
En el caso de los mamíferos como el ser humano, el padre concibe a su
hijo tras la cópula con la futura madre. En organismos asexuados, padre
también puede significar madre, en el caso de los organismos
unicelulares que se reproducen por división, el padre es una célula que se
divide para producir células "hijas".
Comúnmente el padre cumple un rol muy importante dentro del desarrollo de
los niños, el título de padre también puede ser dado a aquel hombre que cumpla
este papel sin estar emparentado biológicamente con el niño o niña. Mayormente
esto ocurre con hombres que han adoptado niños o con hombres casados con
mujeres que previamente habían engendrado descendencia. El término también
se puede referir a una persona a la cual se le identifica con el estereotipo de
padre.
La determinación de los lugares atribuidos a la paternidad han sido imposiciones
sociales y culturales que han ido cambiando con el tiempo.
Papá, papa, papi, papito, pa, son expresiones típicamente familiares utilizadas
para referirse a un padre. Coloquialmente también se usa en varios países la
expresión mi viejo para referirse al propio padre.
LA MADRE: en el contexto biológico es aquel ser vivo de sexo femenino que ha
tenido descendencia directa. El enlace maternal describe los sentimientos que una
madre tiene por sus hijos.
En el caso de los mamíferos como el ser humano, la madre gesta a su hijo
(primeramente llamado embrión y luego feto) en la matriz hasta que el feto esté
suficientemente desarrollado para nacer. La madre entra en labor de parto y da a
luz.
13. En organismo asexuado, madre también puede significar padre, en el caso de los
organismos unicelulares que se reproducen por división, la madre es una célula
que se divide para producir células "hijas".
Comúnmente la madre cumple un rol muy importante dentro del desarrollo de los
niños, el título de madre también puede ser dado a aquella mujer que cumpla este
papel sin estar emparentada biológicamente con el niño o niña. Mayormente esto
ocurre con mujeres que han adoptado niños o con mujeres casadas con hombres
que previamente habían engendrado descendencia. El término también se puede
referir a una persona a la cual se le identifica con el estereotipo de madre.
En algunas sociedades el status de madre soltera suele tener connotaciones
negativas. Especialmente en América Latina y en los países de la cuenca del
Mediterráneo, se ha desarrollado una compleja figura en torno a la madre, en que
ésta es al mismo tiempo cabecilla y víctima del entramado social, vinculada
directamente con el fenómeno del machismo. En México y otros países
latinoamericanos con una fuerte herencia hispana y amerindia, la figura de la
madre suele estar asociada, drásticamente, a valores disímbolos.
QUE SIGNIFICASERPADRES:
Concebir una vida y gestarla no es función exclusiva de la mujer, también es de
competencia masculina. Cuando un hombre se entera que será padre puede sentir
una alegría indescriptible pero también sentir confusión y temor por lo que viene
por delante.
Estos sentimientos son comunes y la paternidad se convierte en un desafío,
proteger a su nueva familia, proveerla de los cuidados y recursos necesarios,
formar y educar a nuevo ser serán las nuevas tareas para el futuro padre.
¿CUÁNDO SE COMIENZA A SER PADRE?
Algunos afirman que el hombre tarda más en ―hacerse‖ padre que la mujer en
convertirse en madre ya que la madre experimenta los cambios físicos que la
conectan con la maternidad mucho antes que el varón, en algunos casos, puede
que el hombre necesite ver a su hijo para conectarse emocionalmente con él. En
general, un varón comienza a transformarse en padre cuando decide tener un hijo
se apropia de este proyecto desde la idea y desde el sentimiento. Durante la
gestación, el hijo es para él una intuición, el vínculo que establece con él será de
14. otro tipo, ya que sólo podrá percibirlo a través del vientre de la madre, tocándolo
cuando patea, o viendo su imagen a través de una ecografía. Los tiempos han
cambiado y ahora los padres se involucran más tempranamente en la vida de sus
hijos, desde la gestación, el proceso de parto y los cuidados postnatales. Los
estudios indican que estar en contacto con el bebé en las primeras horas de su
nacimiento favorece el vínculo padre-hijo, el padre sentirá mayor apego, un lazo
entre ambos que lo involucrará aún más en la vida de su hijo.
CLASIFICACIÓN DE PADRES DE ACUERDO A SU RELACIÓN CON SUS
HIJOS:
Podemos diferenciar los distintos tipos de padres que pueden existir, según su
actitud ante distintos aspectos de la educación de los hijos y de la relación que
tienen con ellos.
1. Un primer aspecto es el grado de control que los padres ejercen sobre sus hijos.
Hay padres que quieren controlar todo lo que éstos hacen e influir constantemente
en el comportamiento de sus hijos sin ofrecerles ninguna autonomía. En el otro
extremo estarían aquellos padres que no ejercen control alguno y tienen una
actitud negligente en la educación de sus hijos.
2. Otro aspecto a tener en cuenta es la comunicación existente entre padres e
hijos. Hay padres que hablan a menudo con sus hijos, tienen una comunicación
fluida con éstos, les dan explicaciones del porqué de los castigos y escuchan y
piden opinión a sus hijos. Por otro lado también hay padres poco comunicativos
con los niños, raramente piden su opinión y tampoco dan explicaciones sobre su
comportamiento con ellos.
3. La exigencia con respecto a los hijos es otro aspecto que distingue a unos
padres de otros. Mientras que algunos padres son muy exigentes con sus hijos
respecto a su grado de madurez, consecución de objetivos académicos, etc., otros
apenas plantean retos a sus hijos.
4. La capacidad para expresar afecto y cariño a los hijos es otro factor que
distingue a unos padres de otros. Mientras algunos muestran su cariño e interés
por el niño constantemente, otros se muestran más fríos e indiferentes.
Según la intensidad de estos factores en la relación padre-hijo podemos clasificar
a los padres en:
15. Padres autoritarios.Tienen un alto grado de control y de exigencia pero
hacen poca demostración de afecto y tienen una pobre comunicación con
sus hijos.
padres infantiles: Cuando los papas no quieren ejercer su rol de padres
las cosas se complican en la casa y los hijos entran en crisis, pues las
normas y las estructuras que debieran tener se trastocan o se pierden. Esta
realidad es más usual de lo que se piensa y ocurre en familias donde existe
un temor al conflicto y una gran inseguridad personal.
Padres democráticos.Tienen una buena comunicación, son cariñosos con
sus hijos y tienen un grado de control y de exigencia alto.
Padres permisivos. Padres cariñosos y con buena comunicación con sus
hijos pero poco exigentes y con poco control sobre ellos.
Padres negligentes o indiferentes.Poseen niveles bajos de control,
exigencia, afecto y comunicación. Este caso es común en familias
desestructuradas.
Padres sobreprotectores: es un estilo de paternidad que tiene como
característica principal el exceso de cuidados y/o protección hacia los hijos;
como padres debemos brindarles seguridad y protección para que éstos
crezcan sanos y seguros, tanto física como mentalmente, sin embargo
otorgarlo en exceso es enfermizo o patológico, sobre todo por los daños
psicológicos que ocasiona.
CLASIFICACIONES DE PADRES SEGÚN SU MANERA DE PENSAR
La manera de pensar y de ver el mundo por parte de los padres influye de manera
notable en su relación con los hijos.
En este sentido podemos establecer tres grandes grupos de padres:
1. Los tradicionales. Tienen una concepción muy estereotipada sobre las
funciones del padre y de la madre dentro del seno familiar. El padre cumple
un papel más autoritario, utilizando el castigo como principal táctica
educativa y dejan a la madre la comunicación y la afectividad.
16. 2. Los modernos. La participación del padre y de la madre en la educación
de sus hijos es muy similar, no tienen problema en exteriorizar su afecto y
se muestran más comunicativos con los hijos.
3. La mayoría de los padres formarían un grupo intermedio, que tiene
elementos de las dos clasificaciones anteriores.
DEFECTOS COMUNES DE ALGUNOS PADRES
Hay una serie de defectos en la relación de los padres con sus hijos que se repiten
a menudo, podemos destacar los siguientes:
Los padres que consciente o inconscientemente ridiculizan a sus hijos
infravalorando sus actitudes y capacidades.
Aquellos que quitan importancia a los problemas de los hijos. En ocasiones
lo hacen con buena voluntad, para evitar que se preocupen, pero los niños
lo percibirán como falta de interés de los padres y tenderán a contarles
cada vez menos cosas.
También hay algunos padres con tendencia a sermonear a sus hijos
destacando el valor de su sabiduría y su experiencia y desdeñando la
experiencia personal del propio hijo.
ACTITUDES RECOMENDABLES EN LA RELACIÓN CON LOS HIJOS
El prototipo de padre ideal para la educación de los hijos sería el padre tipo
democrático, que es comunicativo y cariñoso, pero a la vez pone límites y enseña
responsabilidad a sus hijos.
Como en todas las facetas de la vida lo mejor es saber mantener un equilibrio. Por
un lado tener autoridad y por otro, saber ser indulgente. Por un lado exigirles que
sean responsables y cumplan con sus deberes y por otro demostrarles cariño y
ofrecerles todo el apoyo que necesiten.
Conseguir ese equilibrio siempre será muy positivo en la relación con los hijos,
pero será especialmente importante cuando los hijos lleguen a la adolescencia.
17. CONCLUSIÓN:
La conclusión de estos temas es que tiene mucha importancia para la evolución
del humano, el matrimonio es la unión de dos personas para procrear hijos, los
cuales se convierten en padres.
El matrimonio es importante porque de ay se empieza la educación de los hijos,
hay diferentes tipos de matrimonio de los cuales algunos son conflictivos por el
tipo de matrimonio que se llevó acabo, y estos llevan a educar benéficamente o no
a sus hijos.
En el tema de los padres nos dice que tanto la madre como el padre influyen en la
educación de los hijos y que de ellos dependen el comportamiento que tengan sus
hijos ya que hay diferentes tipos de padres, que algunos son sobreprotectores,
infantiles, autoritarios, democráticos, etc.
Depende de cómo sean los padres para el comportamiento de sus hijos.
Como en todas las facetas de la vida lo mejor es saber mantener un equilibrio. Por
un lado tener autoridad y por otro, saber ser indulgente. Por un lado exigirles que
sean responsables y cumplan con sus deberes y por otro demostrarles cariño y
ofrecerles todo el apoyo que necesiten.
Esto es como serían los buenos padres los excelentes padres. Que apoyen a sus
hijos, que los aconsejen y sobre todo que los amen por sobre todas las cosas.