2. La vocación de Abraham
Objetivo:
Iniciar la reflexión con el texto de la llamada de Dios a Abraham, sobre los
elementos en el proceso vocacional para poder orar desde la propia vida el
llamado que Dios nos hace a salir a su encuentro desde la fe.
Día I: Gen 12, 1-9: vocación de Abraham.
“El Señor dijo a Abram: "Vete de tu tierra, y
de tu patria, y de la casa de tu padre, a la tierra
que yo te mostraré. De ti haré una nación
grande y te bendeciré. Engrandeceré tu
nombre; y sé tú una bendición. Bendeciré a
quienes te bendigan y maldeciré a quienes te
maldigan. Por ti se bendecirán todos los linajes
de la tierra." Marchó, pues, Abram, como se lo
había dicho el Señor, y con él marchó Lot.
Tenía Abram 75 años cuando salió de Jarán.
Tomó Abram a Saray, su mujer, y a Lot, hijo
de su hermano, con toda la hacienda que
habían logrado, y el personal que habían adquirido en Jarán, y salieron para dirigirse a Canaán.
Llegaron a Canaán,y Abram atravesó el país hasta el lugar sagrado de Siquem, hasta la encina de
Moré. Por entonces estaban los cananeos en el país. el Señor se apareció a Abram y le dijo: "A tu
descendencia he de dar esta tierra". Entonces él edificó allí un altar al Señor que se le había
aparecido.De allí pasó a la montaña, al oriente de Betel, y desplegó su tienda, entre Betel al
occidente y Ay al oriente. Allí edificó un altar al Señor e invocó su nombre. Luego Abram fue
desplazándose por acampadas hacia el Négueb.”
Canción: Señor hazme entender (nuevos horizontes)
Parafraseando el texto…….
Abraham, sal de tu tierra, de tu patria, de tu parentela, y dirígete hacia el
país que yo te indicaré.
Abraham se queda desconcertado.
- ¿Que me vaya a otra parte? ¿Hacia dónde? ¿Qué país me señalará? ¡Con
las dificultades que entraña el dejar aquí todas las cosas, hasta mis seres
más queridos, pues me dice que me aleje de todos mis familiares! ¿Qué
querrá hacer de mí este Dios?...
Dios entonces prosigue:
- Haré de ti un gran pueblo, te bendeciré, haré famoso tu nombre, y llegarás a ser una verdadera
bendición. Porque en ti y en tu descendencia serán bendecidas todas las familias de la tierra.
Una canción: Señor hazme entender (nuevos horizontes)
3. Constataciones (claves para reflexionar el texto)
La vocación se manifiesta como voz, es decir, como intervención
concreta en el espacio y el tiempo. Su carácter inesperado, imprevisible,
sorprendente, es reflejo de la absoluta iniciativa de Dios.
En Abraham aparece también la obediencia como la actitud adecuada
por parte del ser humano. Responder a Dios es ante todo escucharlo a
fondo. Su resultado es una transformación de la persona expresada por
el cambio de nombre: Abram-Abraham.
La vida entera de Abraham se desenvuelve bajo el signo de la libre
iniciativa de Dios. Dios interviene primero. Le «hace salir» de su tierra
y lo conduce por sus caminos, a un país desconocido.
Lo importante es hacer como el Patriarca Abraham, que será siempre un modelo luminoso. Cerramos
los ojos como lo hizo él, y nos decimos con profunda convicción:
- ¡Adelante, que quien guía la vida es Dios, el Dios que me llamó! ¡Dios lo quiere, y aquí estoy!...
¡Fiarse de Dios! ¿No será ésta la clave para la paz de corazón?... ¿Habrá algo que dé tanta seguridad
como la fe, aunque no se vea nada?... Aparentemente, no se ve nada con la fe. Pero no hay nada que
difunda tanta luz como la fe.
Preguntas personales:
1. Abraham se fió de Dios y le respondió generosamente, ¿por qué respondió así a lo que
Dios le pedía?¿Confío yo también en Dios de manera que no me siento solo?“A todos
los que esperan se puede aplicar lo que dijo S. Pablo de Abraham: creyó, esperando
contra toda esperanza (Rom 4, 8).
2. ¿cómo puede suceder esto?» Sucede porque se aferra a
estas verdades:, Dios me ama inmensamente, Dios es fiel a las
promesas. Y es El, el Dios de las misericordias, quien enciende en mi la
confianza; por lo cual yo no me siento ni solo, ni abandonado, sino
implicado en un destino de compromiso.
3. Abraham es invitado por Dios a salir de “su tierra”, a
confiar en sus las promesa, para poder iniciar la misión que le ha
encomendado. ¿Qué te impide salir de “tu tierra”, “confiar solo en
Dios” e iniciar la misión?
Permite que Dios te llame por tu nombre y te muestre tu vocación.
Jesús, el Hijo de Dios, nos invita a escuchar la voz de su Padre y con
valentía vivir comprometidos con esa VOZ, que nos llama. Nadie lo
hará por TI.
Un video para TI: Cristo te llama.