2. ¿Qué es? Es un accidente geográfico consistente en la acumulación de sedimentos no consolidados por efecto de la dinámica local del oleaje. Estos sedimentos son normalmente arenas, si bien también hay playas de gravas y de bolos. Existen muchas clases de playas, pudiendo existir varias de ellas sobre un mismo banco de sedimentos, debido a que en unos metros el tipo de rompiente puede variar dando origen a un tipo de playa distinto.
3. ¿Cómo se forma? Se forma cuando el oleaje y las corrientes del mar propician la llegada de sedimento a una zona de la costa. Entonces una playa se forma bajo dos supuestos: el primero, que la forma de la costa sea tal que haya una zona donde 'entre' una determinada cantidad de sedimento y que sea estable con los diferentes estados de clima marítimo. El segundo, que exista una zona en la que si bien el sedimento se va perdiendo por algún lado, haya un aporte de sedimento por otro que lo pueda compensar. Una vez que se han depositados los sedimentos, la playa es modelada según el tipo de rompiente que la afecta.
4. La playa como hábitat Una playa es algunas veces un entorno inestable que expone a las plantas y animales que lo habitan a condiciones siempre cambiantes. Sin embargo, esos patrones cíclicos diarios y estacionales llevan a numerosos organismos vegetales y animales, las fuentes de alimentación y de supervivencia. Algunos pequeños animales hurgan en la arena y se alimentan con el material depositado por las olas. También la habitan cangrejos, insectos, y pequeños pájaros. Las tortugas de mar depositan sus huevos en las playas. Los restos de animales muertos y algas depositados en la zona superior de la playa y dunas hace posible la aparición de una tímida vegetación compuesta por matas y otras flores.