Este documento ofrece consejos sobre cómo asegurar que los niños coman alimentos saludables. Recomienda establecer buenos hábitos alimenticios como comidas regulares, bocadillos saludables y comer juntos con los niños. También sugiere servir porciones pequeñas, ofrecer variedad de alimentos nutritivos y enfatiza que un desayuno balanceado puede prevenir la obesidad infantil.
2. Como padre o
persona encargada
del cuidado del
niño, debes saber
que para los niños
es fundamental
comer alimentos
saludables pero, los
padres y los niños
no siempre se
ponen de acuerdo
acerca de lo que
deben comer.
4. Comienza con buenos hábitos
alimenticios
• Los niños de corta edad necesitan tres
comidas regulares más uno o dos bocadillos.
• Planifica el horario de los bocadillos de tal
forma que no queden demasiado cerca de
los horarios de las comidas principales.
• Escoge bocadillos de los cinco grupos
alimenticios señalados en la Pirámide Guía
de los Alimentos.
5. •Enseña buenos hábitos alimenticios con
el ejemplo.
•Disfruta las comidas con tus hijos. Ellos
aprenderán de ti cómo y qué comer.
¡Tus hábitos alimenticios
saludables harán que tú
también seas más saludable!
6. Porciones para niños
• Sirve porciones pequeñas a los niños de
corta edad, si se quedan con hambre ellos
pedirán más comida.
• Ofréceles nuevos alimentos en porciones
aún más pequeñas, como una o dos
cucharadas.
7. • Con frecuencia los niños quieren comer el
mismo alimento comida tras comida, este
comportamiento se conoce como "manía
por un alimento".
• Es posible que los niños de corta edad
coman menos un día y más al día
siguiente, el apetito de los niños depende
de su crecimiento y nivel de actividad.
8. • Ofrece a los niños de corta edad una
variedad de alimentos de los cinco grupos
alimenticios. Para crecer y ser saludables,
los niños necesitan
comer diferentes
Alimentos cada
día.
9. Un desayuno equilibrado puede
prevenir la obesidad infantil
• El desayuno supone, al menos, ¼ de las
necesidades nutricionales de los niños.
Cuando los niños no desayunan bien no
tienen la energía y la vitalidad para
afrontar el esfuerzo físico e intelectual
que les exigen las actividades escolares.
10. Además, un desayuno no adecuado hará
con que los niños sientan, a media
mañana, la necesidad de un gran aporte
energético, encontrados en productos de
alto contenido de azúcar y de ácidos
grasos, directamente relacionados con el
crecimiento de los índices de sobrepeso y
de obesidad durante la infancia, por su
alto contenido calórico.
11. El desayuno ideal
y adecuado es el que sea variado en alimentos
que tengan nutrientes necesarios:
• Lácteos: leche, yogur, y/o queso
• Cereales: galletas, pan, copos, entre otros
• Grasas: aceite de oliva, mantequilla o
margarina
• Frutas o Zumo
• Otros: mermelada, algún fiambre, miel, etc.
12. Todo es una cuestión de hábito. Si desde la
más temprana edad los niños son
acostumbrados a desayunar bien, su
organismo se habituará a esta costumbre,
y le exigirá un buen desayuno todos los
días, y ellos se sentirán satisfechos.
13. Y la familia estará previniendo lo que hoy es
una preocupación mundial de los expertos
de alimentación: la obesidad infantil.