1. UNIVERSIDAD NACIONAL DE EDUCACIÓN
ENRIQUE GUZMÁN Y VALLE
A L M A M A T E R D E L M A G I S T E R I O N A C I O N A L
MASAJES AL
BEBÉ
Semana nueve
2. El debe no debe estar cansado, ni con
hambre
Es recomendable realizarlo después del
baño o antes de acostarse y siempre
media hora después de haber comido
Debe estar relaja y con ganas de ejecutar
el masaje no debe ser algo forzado ni para
el bebé ni para la que realiza el masaje.
Si el bebé no lo esta disfrutando detente
de inmediato
El bebe debe de estar sin ropa por lo que
la habitación de be estar a una
temperatura templada y libre de
corriente de aire
Aconsejamos poner una música de fondo
suave y relajante
CONDICIONES A
TENER EN CUENTA
3. CONDICIONES A
TENER EN CUENTA
Frotar tus manos antes de comenzar
para evitar que estén frías.
Es recomendable que uses para tus
manos una loción o crema de bebe para
que se deslice por su cuerpo
Durante el masaje establezca un
contacto visual con el bebé, háblale,
sonríele, cántale y trasmítele toda la
ternura que sientes. Esta
comunicación debe ser constante-
Los movimientos de tus manos
al masajear deben ser lentos y
rítmicos con una presión suave
y uniforme
4. CONDICIONES A
TENER EN CUENTA
Los movimientos deben realizarse:
▪ De arriba – Abajo, es decir se
empieza en la cabeza y termina
en los pies<
▪ De adentro – afuera, siempre
frote del centro hacia fuera.
▪ Primero masajes por el frente y
después de espalda
Repita el movimiento de tres a
5 veces.
5. SESION DE MASAJES
Con las palmas de la mano acaricia desde el centro de la cabeza al
centro de la barbilla en forma cariñosa y suave, sin presiones, pero
con cierta firmeza
Suavemente desliza las yemas de los dedos desde el centro de la
frente hacia afuera a lo largo de las cejas.
Coloca los pulgares a cada lado de las fosas de la nariz,
súbelos hasta que se junten en la frente.
1
2
3
Cara
6. 4
5
6
Rodeo los ojos con cuidado, con los dedos índices avanza por encima
de las cejas hacia el extremo y por abajo hasta la base de la nariz
Traza grandes círculos con ambas manos y con las yemas de los
dedos sobre la mejilla. Los círculos serán cada vez mas pequeños
hasta que las puntas de los dedos gire suave sobre un punto
Termina con caricia alrededor de la boca con la
yema de los dedos
7. Cuello
Levanta suavemente al bebe de la espalda para que la cabeza
caiga levemente hacia atrás y desliza dos dedos en forma
horizontal a lo largo del cuello
Pecho y abdomen
Desliza las manos lentamente del centro hacia
afuera, es decir hacia los costados del centro
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8. Pecho y abdomen
Desliza la mano izquierda lentamente hacia abajo, desde el hombro
izquierdo al lado derecho, luego desliza la mano derecha
lentamente hacia abajo, desde el hombro derecho al lado izquierdo
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Masajea el estómago hacia abajo desde el pecho hasta
debajo del ombligo, una mano seguida de la otra, moviendo
ambas en la misma dirección.
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Con los dedos haz una línea imaginaria entre el cuello y mas allá
del ombligo
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9. Brazos y manos
Acuesta al bebe ligeramente de lado. Cógele el hombro
con una mano y la muñeca con la otra, desliza la mano
por el brazo con movimientos rotarios hasta la muñeca,
para finalizar con ligeras presiones sobre las palmas de
la mano y cada dedo
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2
Sostén la muñeca del bebe con ambas manos y masajéalo. Inicia
con la palma, moviendo los pulgares hacia los dedos del bebé.
Luego masajea los dedos mientras que vas desdoblando y
realizando movimientos rotatorios en cada mano. Repite el
maseje en el otro brazo y mano.
10. Piernas y pie
Agarra la pierna con una mano por el tobillo y la otra
mano deslízala desde el muslo hasta el pie con
movimientos rotatorios. Repite el movimiento varias
veces
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En la misma forma que le masajeaste las manos masajéale la
planta de los pies con los pulgares desde el talón hasta los
dedos y termina con movimientos rotatorios en cada dedo
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Masajeale la planta de los pies en la misma
dirección, pero esta vez hazlo con la palma de ma
mano
11. Espalda
Alternando las palmas de las manos el áreas entre el
cuello y la base de las nalguitas
Con la llema de los dedos termina haciendo pequeños
círculos sobre las vertebras de la columna vertebral,
deslizándose desde el cuello hasta la base de las nalgas.
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Para finalizar, con una toalla o una mantita, abriga al
niño entre tus brazos en forma estrecha y vigorosa ,
acúnalo para que se acentué el contacto y la
comunicación.
