2. 2
En esta hora de casi total oscuridad se
vislumbra un destello alentador: dentro del
cristianismo conservador cada día son más
los que están sintiendo un anhelo creciente
de encontrarse con Dios. Almas que desean
conocer las realidades espirituales, y no se
contentan con meras “interpretaciones” de
la Palabra de Dios. Los que tienen verdadera
sed de Dios no se contentan hasta que no be-
ben de la fuente de Agua Viva.
Esta genuina sed y hambre de Dios es el
único precursor de avivamientos en el mundo
religioso. Esta sed podrá ser al principio una
nube del tamaño de una mano, que atisban
unos pocos santos por aquí y por allá, pero
puede ser el retorno a la vida de muchas gen-
tes y la recuperación del esplendor que debe
acompañar siempre a la fe en Cristo, y que
parece haber desaparecido de las iglesias de
hoy en día.
Nuestros dirigentes religiosos deben re-
conocer este ardiente deseo. El evangelismo
de hoy en día parece haber levantado el altar
y dividido el sacrificio en trozos, sin percatar-
se, quizá, que no hay fuego en la cumbre del
monte Carmelo. Pero gracias a Dios porque
hay algunos que se preocupan por ello. Son
los que aman el altar, y se deleitan en el sa-
crificio, y no están conformes porque aún no
ven descender el fuego. Lo que desean, por
sobre todas las cosas, es la presencia de Dios.
Más que ninguna otra cosa desean gustar de
la “penetrante dulzura” del amor de Cristo,
del cual escribieron los profetas y cantaron
los salmistas.
No hay falta hoy en día de buenos maes-
tros bíblicos que enseñan correctamente la
doctrina de Cristo, pero muchos de ellos pa-
recen contentarse, año tras año con enseñar
los fundamentos de la fe, sin advertir que
en su ministerio hay falta de la Presencia, ni
nada en sus propias vidas que sea extraordi-
nario o sobrenatural. Ejercen su ministerio
entre creyentes espirituales, anhelantes de
experiencias que ellos no pueden satisfacer.
Lo digo con amor, pero en nuestros púlpi-
tos falta calidad espiritual. Nuestros tiempos
son semejantes a los de Milton, que le hicie-
ron exclamar, “las ovejas hambrientas miran
interrogantes, pero nadie las alimenta.” Es
algo patético y lamentable, ver a los hijos de
Dios sentados a la mesa del Padre y desfalle-
ciendo de hambre. Se confirma la sentencia
de Wesley, “la ortodoxia o correcta opinión,
es, después de todo, parte muy endeble de la
religión. Si bien es cierto que nadie puede te-
ner buen carácter sin tener buenas opiniones,
es posible tener buenas opiniones sin tener
buen carácter. Se pueden tener excelentes
opiniones acerca de Dios sin que ello signifi-
que que se lo ama o se desee servirle. Satanás
es una prueba de ello.”
Gracias a la notable difusión de la Biblia
que se ve hoy en día mucha gente tiene co-
rrectas opiniones, quizá más que nunca antes
en la historia. Sin embargo me pregunto si
hubo alguna vez un tiempo en que la tempe-
ratura espiritual estuvo en un grado tan bajo.
En grandes sectores de la iglesia se ha perdi-
do el arte de la verdadera adoración, y en su
lugar han puesto una cosa extraña y espuria
llamada “programa.” Esta palabra ha salido
del teatro y el circo, y se la aplica lamenta-
blemente al tipo de servicios que hoy pasan
por “adoración.”
La exposición sana y correcta de la Bi-
blia es imperativa en la iglesia del Dios vivo.
Sin ella ninguna iglesia puede ser una igle-
sia neotestamentaria en el estricto sentido
del término. Pero dicha exposición puede
hacerse de manera tal que deje a los oyentes
vacios de verdadero alimento espiritual. Las
almas no se alimentan solo de palabras, sino
con Dios mismo, y mientras los creyentes no
encuentren a Dios en una experiencia perso-
nal, las verdades que escuchen no les harán
ningún bien. Leer y enseñar la Biblia no es
un fin en sí mismo, sino el medio para que
lleguemos a conocer a Dios, y que podamos
deleitarnos con su presencia y gustemos cuan
dulce y grato es sentirle en el corazón.
A. W. Tozer
Editorial
Esta revista es una ofrenda de amor
a Dios, aquel que es mi todo, en
todo. Y tiene el mismo propósito por
el cual existimos: Glorificar a Dios,
por medio de disfrutar de Él eterna-
mente.
Tenemos que reconocer que vivimos
en un mundo totalmente humanista,
donde para muchas personas el úni-
co dios que tienen, es tan pequeño
que lo pueden llevar en el bolsillo,
y manejar según su conveniencia;
un dios que formaron en sus pen-
samientos y que se adecua a sus
necesidades solamente. Hay un des-
conocimiento del verdadero Dios en
los templos evangélicos. Las iglesias
han caído en la monotonía de acti-
vidades superfluas que consumen
todo nuestro tiempo y atención. Los
hombres ahora buscan motivación
en programas, conciertos, activida-
des y toda una serie de religión es-
tereotipada; cosas que por más pin-
torescas que parezcan no satisfacen
los deseos mas profundos del alma.
Necesitamos sentarnos y meditar en
Dios, pensar en Dios, vivir a Dios.
Solo es él aquel que puede llenar ese
abismo infinito que hay en nosotros
y colmarlo de la más profunda y du-
radera felicidad. Como cita un pre-
dicador: El hombre que tiene a Dios
por su posesión, tiene todo lo que es
necesario tener. Podrá carecer de
todos los tesoros materiales, o si los
posee, estos no le producirán ningún
placer especial. Y si los ve desapa-
recer, uno tras otro, apenas podrá
sentir la pérdida, por que teniendo a
Dios tiene la fuente de toda felicidad.
No importa cuántas cosas pierda, de
hecho no ha perdido nada. Todo lo
que posee, lo posee en Dios, pura y
legítimamente para siempre.
Mi amado lector, el fin de la revista
no es el mero entretenimiento, sino
que a través de estos escritos, llegues
a conocer, amar y deleitarte más en
tu creador.
Paúl Tinoco
STAFF
Dir. General: Paúl Tinoco
Colaboradores: Pr. Regino Acuña
Pr. Euler Enovore
Pr. Lander Mano
Diseño: Andrés Eyzaguirre O.
Si la revista ha sido de ayuda espiritual
para su vida, o si desea apoyar este mi-
nisterio.Escríbanos a:
salmos42.2@hotmail.com o llame al cel.
72696078
3. 3
La familia fue la primera institución di-
vina, y por esta razón es fundamental,
ya todos estamos familiarizados con la
historia de Génesis capítulo 2, en donde
aparece un Adán solitario, nombrando
a los animales que se le presentaban. El
pasaje concluye así: “Más para Adán no
se halló ayuda idónea para él”; luego lee-
mos la hermosa historia de la provisión
que Dios hizo, puesto que tomó de la cos-
tilla de Adán e hizo a la mujer y la trajo
al hombre.
Muchos teólogos románticos su-
gieren que ésta fue la primera boda del
mundo y que fue Dios mismo quien la
realizó. Desde ese día hasta hoy, ningún
otro factor en la vida humana ha sido más
significativo que el hogar. Dios no solo
proveyó una ayuda idónea para Adán y
un esposo para Eva; sino que les dio to-
das las condiciones que un hogar necesita
para vivir a plenitud y ser feliz.
En primer lugar. Tenían perfecta
comunión y una intima relación de amor
con su creador, y quien tiene este tipo de
relación con Dios lo tiene todo.
En segundo lugar: tenían abundan-
cia de comida. Dios plantó en el Huerto
todo árbol delicioso a la vista y bueno
para comer. (Gn. 2:16)
En tercer lugar; vivían en un jardín
que Dios mismo había hecho para ellos,
cuya belleza jamás podríamos alcanzar
imaginar a cabalidad, hoy cuando pen-
samos en un lugar para recrearnos; pen-
samos en un lugar donde haya árboles,
flores, aves que canten y un arroyo con
aguas cristalinas; pues este primer matri-
monio tenía esto y mucho más. (Gn. 2:8-
16).
Dios creó al primer hombre y a la
primera mujer, Adán y Eva; para que tu-
vieran una relación de amor con El cada
día; Adán y su esposa esperaban ansio-
sos el momento cuando Dios su creador
descendía al huerto para disfrutar de esa
hermosa comunión y perfecta relación de
amor entre la criatura y su creador; no
podemos determinar con exactitud cuan-
to tiempo disfrutaron Adán y Eva de es-
tas abundantes bendiciones que tenían a
su disposición. La Biblia nos dice que un
día Dios descendió al huerto y ellos oye-
ron la voz de Dios que se paseaba por el
huerto al aire del día, ¿y qué paso? ahora
en lugar de correr al encuentro de Dios
como siempre lo habían hecho, el hombre
y su mujer se escondieron de la presencia
de Dios entre los arboles del huerto. (Gn.
3.8); trate de imaginar el corazón del Pa-
dre amante cuando les hizo la maravillo-
sa y amorosa pregunta: ¿Dónde estás tú?
Dios sabía que algo había ocurrido en la
relación de amor que hasta entonces ha-
bían disfrutado la primera pareja.
No hay duda de que el aspecto
individual mas importante de la vida es
una relación de amor apropiada con Dios;
cuando esta se rompió todo se transfor-
mó; la seguridad que sentían al estar en
comunión con Dios se transformó en
miedo por causa de su pecado y su des-
nudez, la abundancia se convirtió en
miseria, las bendiciones en maldición y
por último Jehová los sacó del huerto de
Edén. (Gen.3:16-24).
Dios no les había pedido a Adán y
a Eva que hicieran algo para El, todo lo
que Dios quería era que le amen y disfru-
ten de una relación de amor con El; cuan-
do esta relación se rompió todo lo demás
no tenía sentido.
Hoy tenemos hogares que tienen
muchos bienes materiales y muchas co-
modidades y sin embargo, no son felices.
Ya que la única manera en que un hogar
puede ser feliz es volviendo a una rela-
ción con Dios.
Si usted es una persona que está
preocupado por hacer cosas para Dios,
pues quiero decirle que Él no esta tan in-
teresado en lo que usted pueda hacer para
Él, sino en lo que usted pueda llegar a ser
para El. Dios quiere que usted le ame con
todo su corazón, con toda su alma y con
toda su mente.
Pr. Regino Acuña
4. 4
Esta enfermedad que por su expansión rápida, se ha convertido en una
pandemia, la misma que por su naturaleza esta cobrando muchas vidas y
está dejando grandes secuelas en la sociedad, en las familias y particular-
mente en el individuo.
Este artículo presenta lo que es la gripe H1N1, ella es “una enfermedad
causada por un virus llamado influenza el mismo que se presenta de tipo A,
B, y C, de los cuales el tipo A y B, suele causar enfermedad en los humanos
y particularmente el tipo A ha ocasionado pandemias” sin embargo no se
mencionará absolutamente nada acerca de su prevención y tratamiento, ya
que es de conocimiento colectivo.
Lo que se perseguirá, es dar a conocer que durante el desarrollo de la re-
velación progresiva de Dios, se tienen algunas alusiones referentes al cuida-
do divino al pueblo de Israel, estas tiene repercusiones en la vida cotidiana
del pueblo.
El pueblo fue receptor de las leyes de Dios para que normara su vida y así
reciban grandes bienestares, las leyes dadas al pueblo de Israel tenían como
propósito la prosperidad, entre estas se puede mencionar: Que las leyes de
las comidas eran para bien del cuerpo, el trato de las heridas era para la
salud, la acción de cavar un hoyo e improvisar una letrina durante la guerra
era para la higiene y finalmente las leyes sobre la moralidad, daban como
resultado la salud espiritual y emocional de los súbditos israelitas.
Muchos han creído que las leyes eran de carácter punitivo, por esto han
emitido conceptos con desdén acerca de ellas y por ende han tratado de ex-
poner la crueldad de Dios al tratar al ser humano.
Sin embargo estos hechos puntualmente mencionados en el pueblo de
Israel y sus leyes, daban como resultado que se mantengan con buena salud,
en contraste con las naciones vecinas, la cuales por no tener leyes, tenían un
montón de problemas en su diario vivir.
Concluyendo, Dios tiene cuidado de sus hijos, pero no solo de ellos, tam-
bién de su creación y cuando se dan estos hechos como la pandemia que se
vive de la gripe H1N1, se debe comprender no como un castigo, o como algo
fuera de vista divina, antes bien, como la expresión clara de independencia,
rebeldía y falta de apego a Dios por parte del género humano.
Por esto, se recomienda a cada lector, a la búsqueda de Dios, a depositar
su vida en las manos de Dios, pues estando la persona en Dios, aunque la
vida física se termine, es perenne por estar espiritualmente en Dios, a los
hermanos se les aconseja a ser fieles a Dios y a los amigos a buscar, aceptar
y servir al Señor.
Dios les bendiga.
Pr. Euler Enovore Hitachi
La Gripe H1N1Mateo 6: 33, 34
5. 5
De acuerdo al relato bíblico, el
hombre fue creado a imagen y seme-
janza de Dios (Gn. 1:26, 27), por esta
razón, el único que puede llenar el
vacío existencial del hombre es preci-
samente Dios mismo, por esta razón,
conocer a Dios es de vital importancia.
Esta importancia está demostrada y
explicada claramente en las siguientes
afirmaciones bíblicas:
El Señor Jesucristo dice claramen-
te que conocerle significa tener vida
eterna (Jn. 17:3). Esto quiere decir que
nadie puede llegar a ser salvo, a menos
que llegue a conocer personalmente a
Dios. Esta clase de conocimiento men-
cionado en el Evangelio de Juan, se tra-
ta de un conocimiento por experiencia
propia, y solamente se puede adquirir
a través de un encuentro personal con
Cristo. Es creer y recibir a Jesucristo
como Salvador personal y con la con-
secuencia posterior de reconocerlo
como el Señor de su vida (Jn. 1:12).
Conocer sus atributos personales
y cada una de sus actividades como
el Creador del universo, incluyendo al
hombre y a los ángeles, es fundamental
para el cristiano, ya que toda idea sobre
Dios influye directamente en el resto de
las doctrinas y en la conducta diaria de
cada persona. Normalmente la razón
fundamental por la cual surgen falsas
interpretaciones o falsas ideas acerca
de Dios, es precisamente por falta de
un conocimiento correcto de la persona
y obra de El.
Por lo tanto, tener el mayor conoci-
miento posible acerca de Dios es tener
la mejor base posible para comprender
el resto de las doctrinas bíblicas y las
restantes enseñanzas de la Escritura,
colocando cada cosa en el lugar que le
corresponde. No hay nada más erróneo
y peligroso, que un sistema de doctri-
nas que no tienen un sólido fundamen-
to bíblico (2 Ti. 3:16, 17; 1 Co. 3:11).
Si bien el conocimiento intelectual
es importante, sin embargo, el conoci-
miento sobre Dios no puede quedar en
un mero intelectualismo, sino que ha
de producir como resultado una mayor
reverencia hacia El y una mejor dispo-
sición de obediencia a sus mandatos.
La Biblia es muy clara cuando dice
que, el amor del cristiano hacia Dios,
se debe reflejar a través de una comple-
ta obediencia a los mandamientos di-
vinos (Jn. 14:15). Entonces ¿Cómo se
puede saber lo que una persona cree?
O ¿Cuánto conoce a Dios? No es tanto
por lo que dice, sino más bien por lo
que hace. Una vida de obediencia es
la mayor prueba de que conocemos y
amamos a Dios.
Conocer a Dios es tener clara la
exigencia bíblica para quienes son sus
hijos: “Sed, pues, vosotros perfectos,
como vuestro Padre que está en los
cielos es perfecto” (Mt. 5:48), o dicho
de otro modo: “...como Aquel que os
llamó es Santo, sed también vosotros
santos en toda vuestra manera de vi-
vir; porque escrito está: Sed
santos, porque Yo Soy
Santo” (1P. 1:15-16).
Es importante reco-
nocer que desde la caída
en el huerto del Edén, el
hombre se encuentra en
una desventaja muy no-
table con respecto al en-
tendimiento de las cosas
espirituales (1 Co. 2:14).
Por esta razón, sus pen-
samientos acerca de Dios
son solamente especula-
ción finita.
Es importante resaltar
que, en medio de los inten-
tos del hombre por llegar a
obtener algún grado de conocimiento
acerca del Dios infinito, y precisamen-
te porque el hombre, debido a sus limi-
taciones, no puede llegar a conocerle,
es que Dios a tomado la iniciativa de
darse a conocer (Ex. 3:1-7, 13, 14).
En el Nuevo Testamento, la máxima
revelación de la persona de Dios, es a
través de Su hijo, Jesucristo, la tercera
persona de la Trinidad, quien dio a co-
nocer o explicó al Padre (Jn. 1:1, 14,
18), a tal punto que Cristo dijo que ver
a él era ver al Padre (Jn. 14:6-11).
Para concluir es necesario contestar
algunas preguntas necesarias: ¿conoces
a Dios por creer en Jesucristo como tu
salvador personal? ¿si tu respuesta es
sí ¿estás creciendo en el conocimiento
de Dios por cultivar una relación diaria
con Él? ¿Estás reflejando cuanto cono-
ces a Dios a través de una vida de obe-
diencia o santidad como expresión de
cuanto Le amas?
Pr. Lander Mano
6. 6
Mi amigo el cristianismo no es una re-
lación legalista, es una relación de amor;
y las personas que son legalistas nunca
tienen la victoria, diez mil ¡no hagas eso!,
nunca lo harán una pizca más como el Se-
ñor Jesús, es Él mismo quien lo hace en
usted, usted necesita pasar tiempo con el
Señor Jesucristo.
Usted no puede amar a alguien que usted
no conoce, y no puede conocer a alguien
con quien no pasa tiempo, conocerlo es
amarlo, amarlo es confiar en él, confiar en
él es obedecerle y obedecerle es ser gran-
demente bendecido.
“obedecer y confiar en Jesús es la regla
marcada para andar en la luz”, y empieza
con su devocional, con una conversación
diaria con Dios.
FACTORES QUE INFLUYEN EN
COMO TENER UN DEVOCIONAL
PROVECHOSO
1. USTED DEBE TENER UN TIEM-
PO APROPIADO.
a.Debe ser la mejor hora posible. No
le de las sobras al Señor, El se merece lo
mejor.
b.Debe ser temprano en el día. (Sal. 5:3)
¿Por qué en la mañana? Obviamente por-
que es cuando usted se alista para vivir el
día, usted no va de viaje y hasta después
lee el mapa, usted no
ora por su pan, su
pan diario hasta que
el día se halla termi-
nado, es obvio que
ésta es la oración
que abre la puerta
de la mañana, es un
tiempo para empe-
zar con Dios. Todo
atleta conoce que es
el comienzo el que
le asegura un buen
final. Y pienso que
por lo menos toma
una media hora para
tener un devocional
beneficioso, media
hora es mejor que
nada, así que em-
piece con algo de
tiempo; y a propósi-
to, ¡no encontrará el
tiempo para hacerlo!
¿sabe porque? Por-
que el diablo se encargará de eso, así que
usted tendrá que hacerse el tiempo.
El mejor tiempo para mi es después del
desayuno, tengo que luchar para levantar-
me en las mañanas, la alarma del reloj la
pongo generalmente como a las 6.00 am
o 6.30 am mas o menos, pero tengo que
levantarme y empezar, mas nunca quiero
levantarme, cada mañana, es como una
resurrección para mi, es muy difícil des-
pegar mi espalda de la cama, lo confie-
so, no se si será malo o no, pero así soy,
mientras mas tiempo pase, mas fuerte me
pongo, si quiero estar alerta tengo que le-
vantarme y empezar, porque como ya les
dije mi esposa es una alondra y yo soy un
búho , ella es como un resorte para salir
de la cama y yo soy bastante perezoso,
y cuando me levanto por la mañana, me
golpeo contra el baño, pongo mi rodilla
en la pasta de dientes para apretarla, tan
solo trato de empezar el día. Lo que trato
de hacer es bañarme, rasurarme, desayu-
nar, y mi esposa y yo tenemos un tiempo
de oración a la hora del desayuno, oramos
por nuestra familia, por el resto del mun-
do y luego me retiro a mi estudio, como
a esa hora es mi mejor tiempo para tener
mi devocional.
2. USTED DEBE TENER UNA PRE-
PARACIÓN APROPIADA
a.Debe estar físi-
camente alerta. Un
tiempo cuando su
mente no esta llena
de telarañas, cuan-
do usted pueda
pensar claramente.
b.Debe estar puro
y limpio moral-
mente. ¿Sabe lo
que es un devocio-
nal? Un devocional
es tener compañe-
rismo con un Dios
Santo. la razón por
la que algunos no
tienen su devocio-
nal es porque se
sienten incómodos,
y la razón por la
que se sienten in-
cómodos es porque
no quiere mirar a
Dios, y la razón por
la que no quieren mirar a Dios cara a cara
es porque hay pecado en sus vidas. Usted
debe tener su corazón limpio y puro antes
de tener su tiempo con Dios. (Sal. 66:18)
Bien ¿Cómo se purifica moralmente? us-
ted examina su corazón antes de empezar
su devocional y se dice: “Oh Dios exa-
mina mi corazón, pruébame y ve si hay
en mi camino de maldad” y si Dios y el
Espíritu Santo le señala algo, confiéselo.
(1 Jn.1:9) No hay razón por la cual ningu-
no de nosotros no pueda ser tan limpio y
puro como la blanca nieve (1 Jn. 1:7).
c.Debe estar mentalmente atento: Ne-
cesita estar firme mentalmente, es difícil
para mí, tengo un tipo de mente un tanto
peculiar, y por eso tengo que ceñir los lo-
mos de mi mente y afirmarlos. cuando us-
ted vaya a tener su devocional sea serio,
valla con ánimo, con deseo y ansias de
recibir algo, usted debe estar firmemente
dispuesto y decir: Señor aquí vengo.
3. USTED DEBE TENER UN LU-
GAR APROPIADO.
¿Y cuál es ese lugar apropiado? Je-
sús dijo: “Mas tú, cuando ores, entra en
tu aposento, cerrada la puerta ora a tu
padre…” (Mt 6:6) la palabra aposento
significa: lugar de aislamiento, un lugar
donde usted pueda cerrarle las puertas al
mundo y abrirle las ventanas a los cie-
los. ¿Por qué el Señor nos pide entrar al
aposento y orar? Por dos razones. Uno es
porque lo que usted es cuando esta solo,
es lo que verdaderamente es; y la otra ra-
zón es para evitar las distracciones visua-
les y auditivas. Ore y pídale a Dios que le
de un lugar especial.
4. USTED NECESITA TENER LAS
HERRAMIENTAS APROPIADAS.
a.Una Biblia. Que sea leíble, no use una
Biblia con letra diminuta, invierta en una
buena Biblia, con márgenes anchos, de
buen papel, y no tenga miedo de escribir
en ella, tomar notas, gástela y consíga-
se otra, pero, no tire a la basura la vieja,
guárdela y repásela de vez en cuando,
esta será como un viejo amigo.
b.Un Diario. En donde pueda escribir
algunas notas, usted tal vez diga: ¡oh! no
se preocupe pastor yo tengo una buena
memoria, lo recordaré. Mi amigo a quien
esta engañando, es mejor que lo anote, lo
7. 7
grabará en su mente, y la tinta mas débil
es mejor que la mejor memoria.
c.Un diario de oración: Yo he tenido un
diario de oración por mucho tiempo, no lo
uso todas las mañanas pero si algunas de
ellas, lo utilizo para recordar peticiones
de oración por mi familia, por mis seres
queridos, por ustedes, por mi iglesia y por
mi mismo. Esto le ayudará a orar siste-
máticamente por cosas o personas por las
que usted no ora con mucha frecuencia.
d.Un cuaderno o una agenda: donde
anotará esas cosas que debe hacer duran-
te el día, sus asignaciones diarias, esas
cosas vendrán a su mente cuando ore, o
vienen a su mente antes de orar, para que
usted pueda orar concerniente a ellas.
5. UN PROCEDIMIENTO APRO-
PIADO
a.Guarde silencio. La Biblia dice: “Es-
tad. quietos, y conoced que yo soy Dios”.
(Sal 46:10) Fije y enfoque su mente en
Él, tranquilícese, relájese, reconozca su
presencia; usted esta teniendo una entre-
vista privada con el Señor Jesucristo, us-
ted necesita pensar acerca de eso, piense
en el hecho que Jesús esta allí con usted
para pasar un tiempo a solas con usted.
Una de estas noches tuve la oportunidad
de enseñar por algunos días en el Centro
de aprendizaje del Dr. Billy Graham, una
de esas noche el Dr. Graham y su espo-
sa, nos invitaron a mi y a mi esposa para
cenar, así que fuimos y pasamos un rato
agradable en su compañía, hablamos de
temas relacionados con la bendición de
Dios para nuestras vidas y que experien-
cia tan humilde y grandiosa fue para no-
sotros. Pero amigo,todos tenemos un ho-
nor mas grande cada mañana, y eso es el
encontrarse con Jesús, estar a solas con
Él, cenar con Él, y Él con nosotros.
Ahora bien usted no tiene que hacer-
lo, pero quiero compartírselo, es una de
las cosas más dulces que en mi opinión
personal he aprendido a hacer. en priva-
do con el Señor cuando usted esta listo
para pasar ese tiempo con El mire hacia
arriba, y levante sus manos hacia El, ele-
ve sus manos en alabanza y adoración y
diga: Señor te alabo, luego alza sus ma-
nos de nuevo y diga Señor me rindo a ti,
me entrego a ti ,soy tuyo, estoy bajo tu
mando, álcelas una ves más y diga Señor
yo recibo (como esperando recibir algo);
pruebe, pon estas tres cosas en práctica,
esto hará que piense acerca de la presen-
cia de Dios. Este tipo de cosas es mejor
hacerlo en privado que en público, y se
lo comparto porque ha sido para mi una
tremenda bendición hacerlo.
b.Sumérjase en la Palabra de Dios. Em-
piece primero leyendo la palabra de Dios,
esto preparará su corazón parar orar, us-
ted oye a Dios y luego habla con Él en
oración; un devocional es un tiempo a so-
las con Dios donde usted escucha a Dios
y Dios le escucha a usted. Ahora, cuando
usted lee la Biblia léela por calidad y no
por cantidad. Deténgase, piense al leer la
palabra de Dios y pregúntese ¿Qué me
esta diciendo Dios a mi?; no que dice,
porque claro que dice algo, es la pala-
bra de Dios, tampoco se pregunte ¿Qué
quiere Dios que le diga a alguien? o ¿Qué
voy a enseñar en la escuela dominical?
sino ¿Qué me esta diciendo Dios a mi?
Lea la Biblia en secuencia, en párrafo o
unidades, use su sentido común cuando
lo lea, lea del Antiguo Testamento y lea
del Nuevo Testamento, lea regularmente
los Salmos, porque aprenderá a adorar y
le motivarán, lea regularmente del libro
de Proverbios, porque recibirá sabiduría,
que su lectura Bíblica sea totalmente ba-
lanceada.
c.Medite en la palabra de Dios. Usted
se enfoca en la palabra de Dios y medita
en la palabra de Dios, y deja que la pala-
bra de Dios lo penetre. Hágase estas pre-
guntas con un corazón limpio y la Biblia
arderá en llamas en sus manos: ¿Existe
una promesa a la que pueda acogerme?
¿Existe una lección para aprender? ¿Exis-
te una bendición para disfrutar? ¿Existe
un mandamiento para obedecer? ¿Existe
un pecado por evitar? ¿Existe un nuevo
pensamiento para llevar conmigo?.
d.Apunte lo que ha aprendido. Aquí es
donde utiliza su diario, apúntelo, no esta
escribiendo para el público, ni esta tratan-
do de impresionar a otras personas con un
lenguaje distinguido, es algo personal. al
mismo tiempo tome su agenda y anote las
cosas que usted necesita hacer durante el
día, los puntos de acción, las obligacio-
nes, metas y decisiones, que salen de ese
tiempo.
e.Ore y vierta su alma. Sea natural, no
trate de usar palabras elegantes cuando
ora. Jesús dijo que no usáramos repeti-
ciones vanas, Dios no lo escucha por su
mucho hablar, sea honrado con Dios, dí-
gale como se siente, Él ya lo sabe, pero
dígaselo; cuando esta a solas, ore audi-
blemente. ¿porque? porque mantiene su
mente en la meta, le permite que se enfo-
que, hable coherentemente, usted le esta
hablando a Dios, hable claro, piense en
lo que esta diciendo cuando ora, y no ore
con afán ni se alargue, es decir, cuando
terminó, pues, terminó.
f.Comparta lo que ha aprendido: Com-
parta lo que el Señor le ha mostrado en
sus devocionales, nosotros debemos ex-
hortarnos entre nosotros, Dios no nos
hizo para ser depósitos, Dios nos hizo
para ser canales.
g.Obedezca lo que Dios le dice: Su tren
espiritual va a correr en dos rieles, uno es
la revelación, el otro la obediencia, y si
cualquiera de esos rieles no esta, su tren
se detiene, aprenda a obedecer la Palabra
de Dios y cuando usted falle, confiésalo
al Señor.
Ahora usted dirá: pastor si empiezo a
hacer esto, que tan pronto veré un cam-
bio en mi vida; pues no lo se, creo que
usted vera un cambio enseguida, pero no
espere nada radical, ni dramático, mas si
usted se disciplina en obedecer la palabra
de Dios y alimenta su alma, el cambio no
será espasmódico, ni drástico, pero con el
transcurso del tiempo lo cambiará por la
eternidad.
Pr. Adrián Roger
8. 8
“Y amarás a
Jehová tu Dios de todo tu corazón
y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas.”
Dt.6:5
¿Por qué he de hacerlo? ¿Por qué he
de amarle con todo mi ser? Hasta la pre-
gunta es necia. No podría ni aún conce-
bir la pregunta que hice, sino fuera por
Él. Si he de amarle con todo corazón,
alma y fuerzas, tengo que entender que es
“amar”; y también que es, “corazón, alma
y fuerzas”. Amar es la forma suprema y
noble que ve algo infinitamente precioso
en su objeto; también el amor a Dios, es
una experiencia gozosa de comunión con
Él, que se demuestra en la obediencia a sus
mandamientos.
Y hacerlo con el “corazón”, nos habla
del hombre interior; que incluye el carác-
ter, la personalidad, la voluntad, la sabidu-
ría, las pasiones y los deseos. El “Alma”
destaca nuestra vida como un todo. Y las
“Fuerzas”, señala la capacidad de realizar
grandes esfuerzos físicos y mentales. Todo
esto y mucho más es lo que significa y de-
nota este versículo.
¿Es Dios precioso para ti? ¿Sientes
pasión por estar en comunión con él cada
día? ¿Tu carácter, tus pensamientos y pa-
siones se centran en él? ¿Obedeces sus
mandamientos con alegría? Cuan fácil
es decir que amamos a Dios, cuan fácil
es cantar “te amo oh Jehová…”,
pero ¿realmente lo estamos
viviendo?
Dios derramó su
amor en nuestros co-
razones por el Espíritu
Santo que nos fue dado
(Rom. 5:5) y es ese
mismo amor
el que nos
impulsa a
a m a r -
le a ÉL. Pero debemos
de entender que si nosotros le
amamos a Él, es por que Él nos amó
primero (1 Jn. 4:19). Dios demuestra su
amor al mundo de muchas maneras. Aquí
algunas de ellas.
El acto de respirar, debería recordar-
nos la grandeza de Dios, ¿Qué sería del
hombre si por unos cuantos minutos, Dios
se descuidara del aire que respiramos?
Pasaría algo trágico, la sangre dejaría de
llevar oxígeno a cada célula del cuerpo,
y solo bastarían de tres a quince minutos
para qué miles de células cerebrales mue-
ran y dejen de trabajar, el hombre moriría
en pocos minutos. Sin embargo, Dios tiene
el control de todo lo que pasa en el univer-
so entero. Es por eso que cada respiro nos
debería traer a la mente el amor sublime de
Dios para con nosotros.
¿Y quéde las fuerzas? ¿Son innatas en
uno o vienen de Dios? un hombre decía:
yo no le debo nada a Dios, yo trabajo con
mis manos día y noche, y todo lo que ten-
go lo debo a mi esfuerzo y dedicación…
¡Oh necio! Si tan solo supieras, que si hoy
puedes pararte para ir al trabajo, es por la
gracia de Dios. Es él quien da la chispa
de energía al nodo sino auricular para que
esta estimule la contracción cardiaca y así
tu corazón pueda latir todos los días. Es
Él quien creo los alimentos y permitió que
estos se metabolicen en la maravillosa fá-
brica del cuerpo y así generen energía para
tus movimientos. ¿Acaso tú hiciste algo?
Todo lo hizo él.
Cada mirada, cada asombro, cada
sonrisa que nace del contemplar su crea-
ción también debería inclinarnos a amar
mas a Dios. ¿Por qué se tomó el tiempo en
hacer las cosas tan bellas? Al ver la pues-
ta de sol, la variedad en las estaciones del
año, las flores de diferentes olores, formas
y colores. Cada riachuelo y gruta que vier-
te su agua cristalina, cada animal con su
diferente particularidad y función, cada
estrella y planeta solar bien estructurado y
miles de maravillas mas que él hizo. Ante
esto solo puedo exclamar: “Dios mara-
villoso y sabio, excelso en sobremanera;
tu creación es solo una pisca de tu perso-
na, una pequeña coma de tu
grandeza, un diminuto tilde
de quien eres.
También al ver
l o s
talentos y do-
nes que da a cada ser
humano: Da inspiración al poe-
ta, fuerza al agricultor, conocimiento al
maestro, ingenio al inventor, ternura a los
de Educación especial, compasión a la en-
fermera, belleza al pintor, melodías al mú-
sico, etc. Solo Dios puede hacerlo, nada es
innato en uno mismo, Él es la fuente de
donde fluyen los dones y talentos, es por
eso que la sabiduría se inclina ante él y la
inteligencia lo llama Padre.
Otra de las cosas que nos dio es su
Bendita Palabra, la Biblia. Una prueba más
de su amor; esta se diferencia de los demás
libros en que no es nosotros quien la lee-
mos a ella, sino que es ella quien nos lee a
nosotros. Es ella el bisturí que nos deja al
descubierto ante el Padre, y hace que nues-
tro corazón se quebrante, y nuestras meji-
llas se empapen de lágrimas. También es
ella la que llena de alegría nuestros ojos, y
da paz a nuestro corazón. Bien dijo Philip
Bliss ¡que bellas son, que bellas son! Be-
llas palabras de vida.
Dios nos dio muchas bendiciones,
pero la mayor bendición fue que Él se dio
a si mismo. Siendo Dios se hizo hombre,
“se despojó a sí mismo, tomando forma
de siervo, hecho semejante a los hombres;
y estando en la condición de hombre, se
humilló así mismo, haciéndose obediente
hasta la muerte, y muerte de cruz” (Fil.
2:7-8). ¡El murió!, Pablo Washer comen-
ta al respecto: “esas palabras deberían ser
suficientes para romperte el corazón en
mil pedazos y arrojarte al piso y adorar a
Cristo, ¡Él murió! Y fue por su sangre que
derramó en ese árbol, la única razón por
la que la mugre de nuestros pecados pue-
de ser lavada.” ¡Cristo murió!, pero ahí no
quedó todo. Él fue sepultado y la muerte
no tuvo poder sobre Él; esta susurraba:
aquí se va a quedar, sin embargo en el
asombro una mañana lo vio despertar. ¡La
muerte esta vencida! ¡Jesús resucitó! Pós-
trese toda rodilla que vida nueva ofrece
hoy. ¡El lo hizo todo! ¡Al suelo mi propia
justicia! ¡Sean tenidos por trapos sucios!
Y a él solo la Gloria.
¿Que por qué he de amarle? la res-
puesta es obvia: porque Él es Digno.
Paúl Tinoco
9. 9
¿Qué es la Adoración?
Es una respuesta a Dios, por lo que Él
es y por su obra, de aquellos que son
creyentes, por Él ser digno de esa ado-
ración.
¿Cuál es la base para Adorar
Correctamente?
Es pensar en lo que a Dios le gusta y de-
manda según la Biblia, lo que a Dios le
gusta y según lo que dicen los paráme-
tros bíblicos. Si no hay una Teología Bí-
blica básica, nos vamos a enredar en la
cultura, en los estilos y en las preferen-
cias. Tiene que haber un conocimiento
bíblico, para saber como adorar a Dios.
¿Cuál es la prioridad en la Ado-
ración?
Sencillamente exaltar a Dios, magnificar
a Dios, alabar a Dios.
¿Cuáles son las características
de la verdadera adoración?
Juan 5:24 lo dice: sencillamente en espí-
ritu y en verdad, que sea una adoración
sincera, basada en la verdad de Dios;
una adoración sincera, emotiva, reveren-
te, yo hablo de un gozo reverente, pero
básicamente es una respuesta del cora-
zón, usando mi cerebro para entender la
verdad de Dios que es la Biblia.
¿Por qué en nuestros días la
adoración se ha convertido más
en un deber que en un acto su-
blime?
Sencillamente por falta de conocimiento
Bíblico y específicamente de quien es el
objeto de nuestra Adoración.
¿Para que Dios se deleite en la
adoración, como tiene que ser
esta?
Si es deleite para Dios, tiene que ser una
adoración echa como a él le gusta, como
a él le place, por que en la adoración no
estoy buscando mi placer o mi satisfac-
ción, eso sería egocéntrico, antropocén-
trico; y la adoración primordialmente es
Teocéntrica, basada en Dios.
En cuanto a la música en la ado-
ración ¿Podría darnos algunos
principios bíblicos?
En el Nuevo Testamento solo hay una, se
refiere a la llenura del Espíritu o al con-
trol del Espíritu, y luego dice: hablando
entre vosotros con Salmos e Himnos y
Cánticos Espirituales. Eso es lo único
que dice el Nuevo Testamento y ese es el
único versículo que se repite dos veces,
una es controlados por el Espíritu Santo
y otra es basado en la Palabra de Dios;
y en cuanto a la música le digo: vaya a
esos dos pasajes y de ahí saque el prin-
cipio bíblico.
Hay una frase que comúnmente
se escucha y es esta: yo escucho
esto, porque a mi me gusta ¿es
eso lo que debe buscar el cris-
tiano?
No, porque muchas veces lo que a mi me
gusta no le gusta a Dios; entonces tene-
mos que volver otra vez, donde está la
autoridad; al principio al medio y al fi-
nal; y tiene que ser la Palabra de Dios.
¿No cree que la causa de todo
esto, viene de un desconoci-
miento de quien es Dios?
Por eso tenemos los problemas, si hubie-
ra más conocimiento de Dios, si hubiera
más cercanía a Dios, tuviéramos menos
problemas; vamos a tener siempre pro-
blemas, pero sería menos, y estamos ha-
blando de la adoración a Dios; y es don-
de menos problemas deberíamos tener, y
es donde más problemas tenemos; senci-
llamente es por un desconocimiento de
la Palabra de Dios.
10. 10
Mi nombre es José Egüez, naci en Portachuelo, de allí
vine muy pequeño aquí a Santa Cruz, viví en el barrio Pillín,
Tercer anillo. Mi madre es Lourdes Egüez, y mi padre Francis-
co Guanega. Ellos se separaron, mi padre dejó a mi madre yo
estando en su vientre, y mi madre me crió sola; de pequeño co-
mencé a trabajar, ayudaba a mi madre vendiendo pan de arroz
y cuidando autos en los mercados Mutualista y los Pozos.
Fue en ese tiempo que conocí la droga, a la edad de doce
años unos amigos me invitaron cocaína y fui agarrando el vi-
cio; también comencé a fumar, llegué a los quince años y ya
era adicto al cigarro, me fumaba una cajetilla de cigarro diario;
ya a los dieciséis años me fui envolviendo más en la mari-
guana, después procedentemente llegué a lo que es el pitillo,
cumpliendo casi los veinte años.
De ahí en adelante mi vida fue
un desorden total, tuve una pareja, con
la cual tuve un hijo, ella me dejó
cuando el niño tenía a penas un año
de edad, porque yo era una perso-
na adicta a las drogas, borracho
y malo; mi vida estaba bien des-
truida, sufrí bastante en el mundo
de las drogas.
También me enferme de Herpes, eso me
lo diagnosticaron los médicos y me dijeron que
esa enfermedad no tenía cura, que se iba a expan-
dir a mi organismo y llegar a mi cerebro, y de ahí
iba a tener muerte cerebral, recuerdo muy bien
que el doctor me dijo que iba a quedar como un
vegetal.
Así fue mi vida, dura, metido en las dro-
gas, en el alcohol, en las pandillas. En el año
de 1998 fui líder de una pandilla llamada “los
lagartos” en el barrio los Tusequi, allí hice
muchas fechorías y cosas malas. Cumplí los
veintidós años, y ya era mas perverso; a los
veinticuatro me recuerdo muy bien que yo
vivía en san Joaquín, vivía en una laguna,
allí estaba metido porque ya las drogas
me habían hundido mas y la adicción
al pitillo me llevo a huir de la socie-
dad y estar refugiado allá en los
montes, en la oscuridad con unos
amigos, tomando.
Pero en ese tiempo recuerdo hubo una persona que me
predicó, un amigo, me leyó un texto bíblico, que hasta ahora
no se me puede borrar de mi mente, que esta en Ap.21:8 “Pero
los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los
fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos
tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre”, y me
recuerdo muy bien que yo decía: y mi religión que, pues yo era
católico, yo de vez en cuanto, me persignaba y rezaba; pero él
me dijo que eso de nada me servía.
Después mi padre murió, fue atropellado, mis herma-
nos cayeron por narcotráfico y mi madre se fue
de la casa, me dejo solo con mi hijo de cinco
años. Entonces yo fui a mi casa, allí estuve
viviendo con mi hijo, no tenía comida, no
tenia nada; solamente pensaba en beber, la
plata que conseguía era solamente para eso,
para tomar, para comprarme droga. De ahí
fui al médico y salieron mis análisis donde el
médico me daba un año mas de vida, porque
después iba a quedar inválido; mis hermanos
cayeron preso, y yo ahí hundido.
Me recuerdo bien que había una persona
que me predicaba de Jesucristo, había un hermano que
me visitaba siempre, iba y me buscaba ahí en los canales,
él me venía hablando de Jesucristo, me decía que Dios tenía
poder para cambiar mi vida, para darme la fuerza para dejar
la droga, yo no le creía al principio, yo creía que era religio-
sidad, que quería meterme y emborracharme en su religión,
pero realmente me di cuenta de lo que él me hablaba.
Y fue así que llegue a conocer a Jesucristo. Un día
después de carnaval del año 2002, me recuerdo le tiré los
tres días de carnaval bebiendo, consumiendo drogas con
mis amigos en mi casa; mi hijo estaba allí, me pedía co-
mida y yo agarraba y le echaba guasca; fue allí que casi
muero de intoxicación por las drogas. Porque aparte que
estaba hundido en las drogas, tenía muchos problemas:
mis hermanos presos, mi padre había muerto y yo es-
taba enfermo; así que lo que hice fue lo que me dijo
el hermano, me recuerdo muy bien sus palabras: que
en el lugar donde yo este, que Dios iba a estar allí,
y que él tenía el poder para cambiarme, y que yo
tenía solamente que buscarlo en oración.
11. 11
Lo único que hice fue orar, me hinque, prendí una vela
porque estaba en la oscuridad, y le dije a Dios que si él existía
que se haga real en mi vida, que
si era verdad lo que me decía el
hermano, que si eran verdad las
historias bíblicas que él me con-
taba: que Dios levantaba muertos,
que daba vida a los paralíticos,
que había hecho ver a los ciegos,
si esas historias eran reales, yo le dije, que él me ayude a salir
de ese vicio en el que desde la niñez estaba metido. Le dije
que si realmente existía, él me ayude a cambiar y que me dé
la fuerza, el valor para dejar la droga, yo le dije: Dios mío
ayúdame, tu ves como estoy, de ahí me puse a llorar, yo quería
seguir hablando, quería seguir desahogándome, contándole a
Dios, pero fue un llanto, un quebrantamiento de mi corazón, y
me humille y llore como unos cinco minutos,casi nunca había
llorado, era duro, ni cuando se murió mi padre llore tanto; pi-
diéndole a Dios que me ayude, que me de fuerzas para salir del
vicio, que me de amor para mi hijo, porque yo era un bruto, yo
llegaba drogado y le pegaba; él me pedía pan, y yo agarraba
y le daba un manaso y lo echaba a dormir. Le dije a Dios que
si él me ayudaba a cambiar, yo iba a servirlo a él hasta el fin
de mi vida.
Ese día sentí algo lindo, algo especial, algo que nunca
había sentido; al otro día sentí una hambre, una necesidad de
leer la Biblia, recuerdo muy bien que fue el hermano que me
habló y me invitó a ir a la iglesia, y yo acepte ir allá. Me fui
cargando la Biblia, llegamos allí, para mi era extraño cantar en
una iglesia a Dios, por que yo antes me burlaba de ellos, me
burlaba de los evangelistas, y me enfurecía si me invitaban a
la iglesia, pero ahí estaba y en mi necesidad y en mi angustia
clame a Dios.
Ahora hermanos ya llevo siete años en la iglesia, Dios
me dio una esposa y tres hijos, y con el que yo tuve, son cuatro
a los cuales amo muchísimo, sane de la enfermedad que tenía,
porque incluso fui donde el médico que me estaba viendo y me
hice nuevos análisis. Y recuerdo lo que el doctor me dijo: esto
solo puede ser obra de Dios, y le dije: si doctor, porque ahora
yo acepte a Cristo y le entregue mi vida, mi enfermedad y ya
no tenía nada de aquello que yo adolecía. El cigarro después
de catorce años lo dejé, también dejé la cocaína, la mariguana,
el pitillo, de un momento a otro.
Yo animo a todas las personas que lean esto, y les digo
que Dios tiene poder para deshacer las obras del diablo, por-
que yo era una presa de Satanás, yo era
un alma que estaba en poder de Satanás,
pero gracias al amor y a la misericordia
de Dios, ahora estoy donde estoy, Dios a
sido muy bueno conmigo, me sacó de las
drogas, restauro mi familia y me ha dado
un lugar donde vivir.
Ahora puedo decir que Dios tiene poder, Dios es real, y
se ha manifestado de muchas maneras en estos años que vivo
de cristiano, he visto su poder, su amor, su misericordia, su
perdón, su provisión; como Dios me a ayudado en todos los
aspectos de mi vida, en toda prueba, en cada situación, Dios
me ha dado fuerzas para seguir, por la misericordia de Dios
estoy ahora de pie en este lugar.
Yo siempre doy gracias al hermano que me predicó y
me llevó a la iglesia. Actualmente asisto a la Iglesia Bautista
Nueva Jerusalén, en la cual sirvo como líder; Dios me ha dado
el don de evangelista, y me encanta predicar por las calles, por
los mercados, los hospitales y la cárcel, allí doy mi testimonio
y llevamos víveres con los hermanos de la iglesia, ayudamos a
muchas personas que necesitan de Dios.
Hno. José Egüez
“Lo único que hice fue orar, me hinque,
prendí una vela porque estaba en la
oscuridad, y le dije a Dios que si él existía
que se haga real en mi vida.”
12. Comienza la aventura
Hola niños, imagínense por un momento que
están en el huerto del edén, ahí te encuentras
caminando por los pastos verdes, tomas una
flor y hueles su aroma, escuchas el canto de
las aves y puedes ver toda la naturaleza tan
hermosa. De repente te encuentras en medio
del huerto y ves algo que te llama mucho la
atención.
Un animal muy hermoso
Desde lejos puedes ver un árbol muy grande,
con frutas agradables, y recuerdas haber es-
cuchado a Adán que lo llamaba el árbol de la
ciencia del bien y del mal, era un árbol muy
misterioso, ya que Dios les había prohibido
tanto a Adán como a Eva comer del fruto de
ese árbol, y mientras observas el árbol, ves
volar a un animal muy hermoso, con cuatro
patas, alas de diferentes colores y ves que se
posa sobre el árbol, como si estuviera espe-
rando a alguien.
La curiosidad de Eva
De repente escuchas unos pasos y te pregun-
tas ¿de quien será?, y ves a Eva venir a lo
lejos, la ves mirando a todos lados, como si
quisiera que nadie la viera, y ves que se dirige
al árbol, al árbol que Dios le había prohibido
y que Adán su esposo le había advertido que
ni siquiera tocara el fruto. Pero Eva un poco
curiosa quería saber más acerca del árbol.
Satanás toma forma de un animal
Y de repente ves que aquel animal empieza
a abrir la boca y comienza a hablar, ¿hablar?
¿Acaso los animales hablan? ¡No!, ¡claro que
no!, pero este si lo puede hacer, y te pregun-
tas ¿Por qué será? Y luego te das cuenta que
aquel animal esta poseído por una fuerza muy
malvada, conocido como Satanás.
Satanás engaña a Eva
Palabras mentirosas, si, palabras mentirosas
comienzan a salir de la serpiente, Palabras
como: “Dios no les quiere, el quiere que se
mueran de hambre, por eso les ha prohibido
comer de todo árbol que hay en el huerto”.
Entonces Eva se ve media confundida y le
dice: “Dios dijo que del fruto de todos los ár-
boles del huerto podemos comer, pero del fru-
to del árbol de la ciencia del bien y del mal no
comeremos, para que no muramos”, entonces
sucede algo asombroso, la serpiente toma con
sus patas un fruto del árbol, y comienza a co-
mer de el, y le dice a Eva: “Dios es un men-
tiroso, no moriréis”, Eva al ver asombrada el
suceso, se olvida de las palabras de Dios, qui-
ta sus ojos de Dios y comienza a ver el fruto,
lo toma con sus manos un poco temblorosas y
le da un mordisco.
Adán también come del fruto.
Por otro lado, Adán regresa del trabajo, hoy
puso nombre a varios animales, y también se
puso a trabajar en el huerto, pero al regresar
a casa ve que no había su esposa, entonces
muy preocupado, comienza a buscarla. ¡Eva!,
¡Eva! Grita por todas partes, y la ve venir,
tenía una mirada diferente, ella toma de sus
brazos a Adán y le dirige hacia el árbol, le
cuenta lo sucedido y le da del fruto que tenia
en su mano. Y él también la come.
La alegría de Satanás y la vergüenza de
Adán y Eva.
La serpiente había logrado su propósito:
que Adán y Eva pecaran contra Dios.
Luego paso algo, fueron abiertos los
ojos de Adán y Eva, como si una tela
que cubría sus ojos fue quitada, y vieron
que estaban desnudos. Muy avergonzados
ambos fueron corriendo a busca unas hojas
para poder cubrirse. Escondidos detrás de un
árbol y un montón de hojas estaban Adán y
Eva, entonces Adán le dice a su mujer: seguro
que Dios nos va a matar, le hemos fallado, su
ira y todo su odio caerá sobre nosotros, mejor
es que no nos vea, tal ves no se de cuenta de
lo sucedido.
El amor de un padre
¡Adán! , ¡Eva! A lo lejos se escuchaba el lla-
mado de un Padre, un Padre que ya lo sabia
todo, Él es todo poderoso y Él lo conoce todo,
nada lo podemos esconder de sus ojos, pero
su llamado era un llamado lleno de gracia,
era para poder escuchar de los labios de sus
hijos la confesión de su pecado y desobedien-
cia, que él estaba listo para perdonarlos y así
ayudarles a salir a delante...que hermoso sa-
ber que nuestro Dios es un Dios perdonador,
tantas veces le fallamos, tantas mentiras a
nuestros padres, tantas veces que hemos sido
irresponsables, tantas veces que hemos pre-
ferido ver televisión que ir a la iglesia, tantas
veces que hemos desobedecido las palabras
de nuestros padres, y aun así Dios quiere
perdonarnos y cambiarnos…. antes de seguir
con la lectura de la lección no te gustaría dar-
le gracias a Dios en oración por ser un Dios
perdonador.
¡La culpa la tuvo ella!, ¡no la culpa la tuvo
él!
Dios les esperaba con los brazos abiertos,
esperaba su confesión ¿pero saben que paso?
Adán y Eva no confesaron su pecado, en ves
de eso echaron la culpa a Dios y al otro. Adán
decía: “Dios tu tienes la culpa, por darme a
Eva”, Eva decía: “la serpiente tiene la culpa,
ella me engaño”…se imaginan, en ves de
confesar su pecado, llorar por su desobe-
diencia y ponerse de rodillas delante
de Dios, ellos buscaron excusas y no
se arrepintieron…..no te parece si-
milar esta historia a lo que pasa con
nosotros, en ves de pedir perdón,
muchas veces buscamos echarle la
culpa a otro. A veces se ve cuando un
niño pelea con su hermana o hermano, y
luego viene su mamá para ver lo que paso,
siempre sucede que ambos se echan la culpa,
o a veces cuando hay que presentar la tarea
al profesor, y no lo presentamos, en ves de
reconocer que somos muy flojos y desordena-
dos, le echamos la culpa a otros o buscamos
varias excusas.
Las consecuencias del pecado
Se imaginan Dios estaba listo para perdo-
narlos, pero ellos no confesaron su pecado,
y Dios les castigo tanto a Eva como a Adán,
fueron expulsados del hermoso huerto, aho-
ra Adán tenia que trabajar mucho mas duro
y Eva daría a luz con muchos dolores en el
parto. La desobediencia siempre trae conse-
cuencias.