Este documento describe las diferentes modificaciones patológicas de la intensidad, el tono, el timbre y el ritmo del murmullo vesicular, así como los diferentes tipos de soplos pulmonares como el tubario, cavitario y anfórico. También describe los ruidos adventicios como los roces pleurales, estertores como los roncos, sibilantes y crepitantes, así como sus características y causas fisiopatológicas.
2. Modificaciones patológicas de la
intensidad.
– Modificaciones patológicas del
tono.
– Modificaciones patológicas del
timbre.
– Modificaciones patológicas del
ritmo
3. La intensidad del murmullo vesicular puede ser
de tres tipos:
1. Respiración fuerte (exagerada, pueril o
suplementaria).
2. Respiración débil.
3. Respiración nula.
4. Respiración fuerte. En ella hay un aumento de
la intensidad sin modificación del tono y el
timbre. Refleja la sobreactividad funcional del
pulmón cercano a la zona enferma o bien la
suplencia funcional de un pulmón cuando el
otro está afectado.
Se escucha en:
Condensaciones: en neumonía, tuberculosis,
tumores
Derrames pleurales
5. Respiración débil. En este caso hay una
disminución de la intensidad y su mayor
importancia la adquiere cuando es
unilateral. Si es bilateral, para poder darle
valor como signo de una lesión
pleuropulmonar hay que descartar los
casos de movilidad deficiente del tórax o
de gran grosor de la pared.
6. Aparece en forma:
Bilateral: obstrucción de las vías aéreas
superiores y enfisema pulmonar.
Localizada a un hemitórax: obstrucción
extrínseca o intrínseca del bronquio principal
de ese lado por tumores, mediastinitis y
aneurismas de la aorta. Inmovilización
antálgica de un hemitórax.
Circunscrita:neumonía, tuberculosis
pulmonar, tumores pleuropulmonares y
derrames pleurales.
8. Respiración baja o grave (muy rara).
Respiración alta o aguda. Condensación de
cualquier tipo no suficientemente grande
como para trasmitir el ruido laringotraqueal
(soplo tubario).
1. Adenopatías traqueobronquiales.
2. Tumores mediastinales.
3. En estos últimos casos la respiración se
hace soplante por trasmisión parcial de las
vibraciones glóticas.
9. En condiciones patológicas el timbre suave del
murmullo vesicular se transforma en áspero,
granuloso, seco.
Respiración ruda. No es más que una mezcla de
murmullo vesicular y soplo glótico, Aparece en:
1. Condensación pulmonar incipiente.
2. Bronquitis, en este caso es pasajera y movible
10. Los soplos pulmonares no son más que el
soplo glótico trasmitido por un proceso
patológico más allá del territorio torácico
donde normalmente debe oírse y que
sufre, por lo tanto, las modificaciones de
la lesión que lo causa. Se originan por el
pasaje del aire a través de un conducto o
apertura.
11. El soplo glótico se altera en la forma siguiente:
– Si sufre pequeñas modificaciones,
constituye el soplo tubario.
– Si adquiere timbre hueco en el interior de
una cavidad que actúa como cámara de
resonancia, se denomina soplo cavitario.
– Si adquiere timbre musical o metálico en el
interior de una gran cavidad aereada o de un
neumotórax, recibe el nombre de soplo
anfórico.
12. Semiogénesis o fisiopatología. Condensaciones
pulmonares que sustituyen el parénquima
pulmonar normal (mal conductor) por tejido
denso y uniforme (buen conductor).
Condiciones necesarias:
l. Condensación superficial o próxima a la
superficie.
2. Profundidad de la lesión que llegue a los
bronquios de 3 mm.
3. Volumen suficiente de la lesión.
4. Buena ampliación torácica.
5. Permeabilidad bronquial.
13. Soplo tubario, esquema de
dos condensaciones
pulmonares:
a, condensación superficial
que no alcanza los
bronquios de 3 mm de
diámetro; no hay por lo
tanto trasmisión del soplo
bronquial;
b, condensación profunda que
sí origina soplo tubario
14. Semiografía. Se caracteriza por:
1. Intensidad: variable, generalmente
grande, “se mete por el oído”.
2. Tono: agudo, más que el glótico por ser
trasmitido el soplo glótico por bronquios más
finos.
3. Timbre: rudo (semejante a soplar por un
tubo hueco), pero menos áspero que el soplo
glótico
16. Es una variante del soplo tubario que aparece
cuando existe una condensación atelectásica del
pulmón por un derrame pleural.
Semiografía. Suave, velado, lejano, espiratorio,
agudo como al pronunciar las letras E, I.
Semiodiagnóstico. Aparece en:
1. Límite superior de derrames medianos.
2. Toda la extensión de los derrames en láminas.
No se observa en pequeños ni en grandes derrames.
17. Sinonimia. Soplo cavitario.
Semiogénesis o fisiopatología. Soplo tubario
que modifica su timbre y tono en presencia
de una cavidad superficial de paredes lisas
de 4 cm de diámetro y con bronquio
permeable. Las condensaciones
pericavitarias favorecen la aparición del
soplo.
19. Semiogénesis o fisiopatología. Es un soplo tubario
modificado por una cavidad pulmonar superficial de
más de 6 cm de diámetro, de paredes lisas y tensas,
vacías y con bronquio permeable. O bien, modificado
por la cavidad de un neumotórax a tensión cuando
este se comunica con un bronquio.
Semiografía. Tiene las características siguientes:
1. Intensidad: débil, aunque más fuerte en
inspiración.
2. Tono: grave.
3. Timbre: metálico.
Se imita soplando por el cuello de un garrafón o
ánfora; a veces se oye haciendo toser al enfermo.
20. Suele aparecer en:
1. Grandes cavernas, sobre
todo tuberculosas.
2. Neumotórax: parcial o
total, donde aparece al
aumentar la presión
pleural o cuando existe
fístula pleuropulmonar.
3. Hidroneumotórax.
21. Concepto y semiogénesis
No son más que ruidos agregados que se
presentan en una o en las dos fases de la
respiración. En general, los ruidos
adventicios se dividen en extrapulmonares e
intrapulmonares.
22. Los ruidos extrapulmonares corresponden
generalmente a la trasmisión de ruidos
provocados por el deslizamiento de la pleura
visceral sobre la parietal cuando ambas, o
una de ellas, se encuentran afectadas por un
proceso patológico; pueden ser:
1. Frotes o roces pleurales.
2. Frotes o roces pleuropericardiacos (raros).
3. Crujidos musculares.
23. Los ruidos intrapulmonares se producen
generalmente por el paso del aire sobre las
secreciones del árbol bronquial; pueden ser:
1. Estertores húmedos: crepitantes o
subcrepitantes.
2. Estertores secos: roncos y sibilantes.
24.
25. Son ruidos intensos que semejan:
a) Frote de correa nueva.
b) Ruido del pergamino u hoja de papel de seda que
se estruja entre los dedos.
c) Ruido del hielo picado que se comprime con las
manos.
2. Aparecen en diversas regiones del tórax, pero
preferentemente en los laterales; son fijos y
audibles en el mismo lugar; desaparecen cuando se
produce el derrame.
3. Se oyen en los dos tiempos de la respiración.
4. Suministran una vibración especial llamada roce
pleural palpable o frémito pleural.
5. Aumentan con la presión; no se modifican con la
tos,la respiración o la expectoración
26. 1. Pleuritis seca. Casi siempre de etiología
tuberculosa. En ella a veces los roces son
muy discretos y llevan el nombre de
rugosidades pleurales.
2. Pleuresías con derrame
27. Estertores :Ruido que produce el paso del aire
durante la respiración, al atravesar líquidos que se
hallen en el interior de la luz de los bronquios, o bien
cuando este aire pasa por un conducto estrechado,
será un estertor.
Existen dos tipos de estertores:
II. Estertores secos, vibrantes o sonoros:
a) Roncos (ronquidos).
b) Sibilantes.
II. Estertores húmedos, mucosos o burbujosos:
a) Crepitantes.
b) Subcrepitantes.
c) Cavernosos.
28. A. Estertores roncos
(ronquidos).
Primera variedad de los
estertores secos; están
constituidos por ruidos
adventicios de tono
grave de gran
intensidad, que se
perciben por el propio
paciente y a distancia.
29. Semiogénesis o fisiopatología
Los estertores roncos son provocados por el
paso del aire a través de los estrechamientos
de la luz de los bronquios de mediano y
grueso calibres por:
a) Tumefacción inflamatoria de la mucosa.
b) Secreciones viscosas y adherentes.
c) Compresiones bronquiales extrínsecas.
d) Obstrucción bronquial intrínseca.
30. Semejan:
a) El ronquido de un hombre que duerme.
b) La nota de un contrabajo.
2. Se les oye en todas las regiones del tórax; por
tanto, son movibles y cambiantes.
3. Aparecen en los dos tiempos de la
respiración, especialmente en la espiración.
4. Dan lugar a una vibración palpable
característica llamada frémito bronquial.
5. No son afectados por la presión, pero se
modifican o desaparecen por la respiración, la
tos y la expectoración.
31. 1. Se observan con frecuencia en el período
inicial de las bronquitis agudas acompañando
a los estertores sibilantes y después son
reemplazados por estertores húmedos.
2. También se presentan en las formas secas
de las bronquitis crónicas.
3. Por último, en las compresiones u
obstrucciones bronquiales de distintas
naturaleza y localización.
32. B. Estertores sibilantes
Semiogénesis o fisiopatología
Son provocados por el estrechamiento de la
luz bronquial en los bronquios finos, a causa
de secreciones viscosas o adherentes.
También, por espasmo de los múscular y
edema en los bronquios finos como sucede
en el asma al comienzo de la crisis.
33. Semiografía
1. Ruido continuo de tonalidad aguda que recuerda:
a) El silbido del aire al pasar violentamente por la
hendidura de una puerta.
b) El canto de algunos pájaros.
2. Se oyen en toda la superficie del tórax y su intensidad
permite a veces oírlos a distancia, por el propio enfermo y
quienes lo rodean.
3. Son movibles y cambiantes, aunque menos que los
roncos.
4. Aparecen en los dos tiempos de la respiración, sobre
todo en la espiración.
5. A veces se pueden palpar frémitos bronquiales.
6. No se modifican por la presión, pero sí por la tos, la
respiración y a veces desaparecen con la expectoración.
34. Estos estertores aparecen comúnmente en:
1. El asma. Por espasmo de los músculos de
Reisseisen al que acompañan el edema de la
mucosa y las secreciones viscosas y
adherentes.
2. Las bronquitis agudas. En el período de
crudeza cuando alcanzan a los bronquios
finos.
3. Las formas secas de bronquitis crónicas.
4. Las compresiones u obstrucciones de
bronquios finos.
35. Estertores crepitantes.
Mecanismo de producción. El estertor
crepitante es el estertor alveolar por
excelencia. Tres causas pueden determinarlo:
1. El desprendimiento de las paredes alveolares de
los moldes fibrinoleucocitarios que los
llenan, como ocurreen la neumonía.
2. La movilización con la inspiración de
trasudados alveolares fluidos como ocurre en la
insuficiencia cardiaca y con mayor intensidad en
el edema agudo pulmonar.
3. El desplazamiento de las paredes alveolares
colapsadas como ocurre en la atelectasia
36. Semejan:
1. Son ruidos breves, pequeños y finos, iguales
entre sí en intensidad y
duración, regularmente espaciados. Se
comparan con el ruido de la sal que crepita a
un calor suave en una vasija de hierro, Se
imitan frotando cabellos cerca del oído.
Parecen proyectarse en el oído como
estallidos de pequeños cohetes.
37. 2. Se perciben en el sitio en que aparece la lesión
y aunque desaparezcan por algún tiempo
siempre reaparecen en el mismo lugar, lo que le
da valor diagnóstico.
3. Es importante el momento de la respiración
en que aparecen. Se oyen solo en la inspiración,
a veces únicamente en la segunda mitad o
último tercio de esta.
4. No dan sensaciones palpatorias.
5. No sufren modificaciones por la presión, la
respiración, la tos y la expectoración;
desaparecen por breves momentos; reaparecen
en el mismo punto.
39. B. Estertores subcrepitantes
Semiogénesis o fisiopatología
Son ocasionados por el estallido de burbujas de
aire en las secreciones de la luz bronquial o bien
por el choque de estas secreciones y las
corrientes de aire del árbol respiratorio.
Aparecen siempre que existen secreciones
fluidas en los bronquios, las cuales pueden
provenir de los propios bronquios, de otros
procesos patológicos del tórax o del abdomen
que se han fraguado camino hacia la luz
bronquial
40. Son llamados estertores mucosos; dan la
sensación de gran humedad. Se oyen
irregularmente espaciados, más gruesos y
desiguales que los crepitantes. Se dividen
según el grosor de las burbujas en
finos, medianos y gruesos:
a)Gruesos. Semejan el ruido producido al soplar por un
absorbente dentro de un recipiente lleno de agua.
b) Finos. Se confunden a veces con los crepitantes.
c) Medianos. Son intermedios entre los dos anteriores.
41. 2. El sitio en que aparecen es muy variable; por
tanto, son muy movibles y cambiantes.
3. Aparecen en ambos tiempos de la
respiración, sobre todo en la espiración.
4. Solo en condiciones excepcionales dan
sensaciones palpatorias.
5. No sufren variaciones por la presión, pero la
tos y la expectoración los hacen aparecer o
desaparecer.
42. Las afecciones en que suelen aparecer son:
1. Hemoptisis.
2. Evacuación de abscesos pleuropulmonares,
mediastínicos o abdominales por vómica, o bien
drenaje de una supuración propia de los
bronquios, los pulmones o la pleura.
3. Bronquitis aguda en período de cocción. Si en
estos casos escuchamos subcrepitantes finos,
debemos presumir la inminencia de una
alveolitis, o sea, una bronconeumonía.
4. Neumonía en vías de resolución.
5. Bronconeumonía. 6. Tuberculosis pulmonar
43. C. Estertores cavernosos
Semiogénesis o fisiopatología
Es igual que el subcrepitante fino, pero las
gruesas burbujas le imprimen dentro de una
cavidad el timbre cavernoso que acompaña
al soplo cavitario. La cavidad puede ser
también un bronquio grueso con secreciones
de origen variado como sucede en el
síndrome pseudocavitario, sobre todo en el
espacio interescapulovertebral.