El documento describe la filosofía del pliegue según Deleuze, influenciada por el pensador barroco Leibniz. Distingue entre los pliegues de la materia, representados en la naturaleza y el arte barroco, y los pliegues del alma, que aluden a la complejidad de la interioridad humana. También explora cómo el concepto de pliegue se manifiesta en la música, arquitectura e iglesias barrocas a través de elementos como el bajo continuo, el estilo concertante y la relación entre f
2. “El Barroco curva y recurva los pliegues, los lleva hasta el
infinito, pliegue sobre pliegue, pliegue según pliegue. El
rasgo del Barroco es el pliegue que va hasta el infinito.”
“La división del continuo no debe ser considerada como la
de la arena en granos, sino como una hoja de papel o la de
una túnica en pliegues, de tal manera que puede haber en
ella una infinidad de pliegues, unos más pequeños que
otros, sin que el cuerpo se disocie nunca en puntos o
mínimos. Siempre hay un pliegue en el pliegue.”
El pliegue Gilles Deleuze
3. El éxtasis de Santa Teresa (1645 -1652) – Gian Lorenzo Bernini
4.
5. Leibniz es el pensador (filósofo y matemático) del Barroco en el cual
se basa el ensayo de Deleuze. Este pensamiento distingue dos
dimensiones del pliegue: los pliegues de la materia y los pliegues del
alma.
Los pliegues de la materia están corporizados en la Naturaleza, en las
formas de la materia orgánica, en los laberintos del caracol, en las
vetas del mármol, en la tela ondulante de una prenda o en las crines
enmarañadas de la escultura de un caballo.
Los pliegues del alma aluden a una interioridad monádica y compleja.
El alma barroca es intrincada, constituida por una maraña pliegues y
repligues, sus características son la curvatura, la inflexión y el
movimiento.
El las iglesias y catedrales barrocas existe una gran diferencia entre
interioridad y fachada. El interior constituye la representación de la
mónada, es decir del alma.
8. En la música el pliegue está representado por las
bordaduras, trinos y progresiones melódicas.
Se puede establecer una analogía entre el concepto de
continuidad e inflexión con la invención del soporte
armónico del Barroco: el bajo continuo.
El concerto barroco o estilo concertante consiste en la
alternancia entre la orquesta y el instrumento solista (violín,
flauta, oboe, etc.). Esta idea de contraste entre un “dos” es
asimilable a la doble dimensión de las iglesias (fachada -
interior), al tratamiento de la luz en la pintura (claroscuro) y
en definitiva a la relación materia – alma leibniziana.
Audición de un fragmento del 1er movimiento del Concierto en Mi menor para
violín “Il favorito” de Antonio Vivaldi
9. Tratado de armonía – Jean-Philippe Rameau
El Barroco consolida una estructura funcional en las
relaciones de las notas y los acordes llamada Armonía tonal
13. Fachada e interior de la iglesia de Santa Agnesa – Piazza
Navona – Roma 1653 -Francesco Borromini
14. Claudio Monteverdi – El Orfeo
El mundo es tratado como un teatro de base, sueño o ilusión, vestido de
Arlequín; pero lo propio del Barroco es realizar algo en la ilusión misma.
Gilles Deleuze. El pliegue
15. Puesta en escena actual del Orfeo de Monteverdi
Monteverdi's L'Orfeo at the Staatsoper: Stéphane Degout as Orfeo with the
chorus of nymphs and shepherds