Este documento discute el don de la profecía. Define a los profetas como mensajeros de Dios que reciben mensajes a través de una íntima comunión con Él. Examina a varios profetas bíblicos como Noé, Abraham, Moisés y David, y explica que su función era representar la palabra de Dios ante el pueblo. También destaca que los profetas deben predicar para edificar a la asamblea y no para resaltar su propia persona. Concluye preguntando si hoy en día podrían existir personas como los
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1. AIN - 03 - 19 - PREGUNTA - QUE OPINAN USTEDES DEL DON DE PROFECÍAS?
Respetada amiga Clemencia del Campo. Con respecto a su pregunta nos permitimos
comentarle lo siguiente:
Comenzamos con estos versos:
< 1Co 14:1 … procurad los dones espirituales, pero sobre todo EL DE PROFECÍA.>
< 1Co 14:3 …el que profetiza habla a los hombres para edificación, exhortación y
consolación.>
< 1Co 14:4 … el que profetiza, edifica a la asamblea.>
Consideremos los primeros profetas de la historia bíblica:
< Lucas 11 47 “¡Pobres de ustedes ( los fariseos)! Porque edifican los sepulcros de los
profetas, ¡después que los padres de ustedes los mataron. 48 Con eso, son testigos y dan su
consentimiento a las obras de sus padres; porque a la verdad ellos los mataron, pero ustedes
edifican sus sepulcros. 49 Por esto, la sabiduría de Elohim también dijo: ‘Les enviaré profetas
y Enviados; y de ellos, a unos los matarán y a otros los perseguirán;’ 50 para que a esta
generación se le demande la sangre de todos los profetas que se ha derramado desde la
fundación del mundo;>
Aquí vemos la respuesta de Yahoshua a un intérprete de la ley que se sintió ofendido por la
manera en la que Mesias había censurado a los fariseos. En los versículos 49 al 51
Yahoshua dice: “la sangre de todos los profetas que se ha derramado desde la fundación del
mundo, desde la sangre de Abel”, reconociéndolo así como profeta.
< Gen 5: 24 Janokh caminó con ha'Elohim; entonces dejó de ser, porque Elohim se lo llevó.>
Enoc:No sabemos mucho sobre Enoc, pero la Sagrada Escritura. Su nombre aparece en la
galería de los héroes de la fe (Hebreos 11:5)
< Judas 1: 14 Acerca de estos también profetizó Janokh, séptimo después de Adam,
diciendo: “Miren, Yahweh vino con diez millares de sus santos>
< Gen 6: 8 Pero Nóaj alcanzó el favor de Yahweh. 9 Esta es la descendencia de Nóaj. Nóaj
fue un hombre recto; fue intachable en su época; Nóaj caminó con ha'Elohim.>
Generalmente, no pensamos en Noé como profeta, pero las Escrituras revelan que él recibió
un desafiante encargo divino. Y él realmente hizo mucho más que construir un barco para
salvar a su familia, Veamos:
< 2 Pedro 2:5: 5 y si tampoco dejó sin castigo al mundo antiguo, pero preservó a Nóaj,
pregonero de justicia, junto con otras siete personas, cuando trajo el diluvio sobre el mundo
de los impíos;>
2. Se lo llama “pregonero (heraldo, de acuerdo con el original griego kerux) de justicia”.
Abraham:El primero en ser mencionado en la Sagrada Escritura como profeta.
< Génesis 20:7 7 Por lo tanto, devuélvele la esposa al hombre; ya que él es profeta,
intercederá por ti para salvar tu vida. Si no se la devuelves, sabe que morirás, tú y todos los
tuyos”>.
Curiosamente, fue el Todopoderoso quien le dijo a Abimelec que Abraham era profeta y que
intercedería por él.
< Deuteronomio 18:15 15 Yahveh tu Elohim te levantará de entre tu propio pueblo a un
profeta como yo; a él deberán hacerle caso.>
Moisés: Fue el primer hijo de la nación de Israel en ser llamado profeta. Su fascinante
historia fue concluida por Josué. Veamos:
< Deuteronomio 34:10 “Y nunca más se levantó profeta en Israel como Moisés" >.
Realmente no hubo profeta como Moisés hasta el tiempo del Mesías.
A lo largo de toda la historia de Israel, aproximadamente 120 profetas tuvieron la osadía de
reprender, en nombre del Todopoderoso, a 40 reyes. Ellos fueron importantes para recordar a
los monarcas que su soberanía no era ilimitada y que el gobierno y los juicios divinos
estaban por encima de las acciones humanas.
Comparando el oficio de los sacerdotes y profetas, podemos afirmar que los sacerdotes
representaban al pueblo ante el Todopoderoso, mientras que los profetas representaban al
Todopoderoso ante el pueblo. Los sacerdotes recibían el sacerdocio por heredad, pero los
profetas eran llamados específicamente para ejercer su ministerio. Esa independencia les
garantiza la libertad de entregar su mensaje y hablar con toda claridad, señalando los
pecados del pueblo y de sus líderes y llamándolos al arrepentimiento.
Esa independencia de los profetas escriturales hizo posible que Natán tuviese la valentía de
señalar los pecados de adulterio y asesinato cometidos por el rey David (2 Samuel 12:1-13).
Posteriormente, después de coincidir con David en cuanto a su deseo de construir una casa
para el Todopoderoso, Natán tuvo suficiente valentía para volver ante la presencia del rey a
transmitirle que él no construiría el templo, pero sí su sucesor (2 Samuel 7:1-3 y 12-17). Y
también fue por la intervención del mismo profeta que la sucesión del trono de David fue
garantizada a Salomón (1 Reyes 1:11-14). Pero veamos:
< Hechos 2:29-30 “Varones hermanos, permítanme hablarles con franqueza: El Patriarca
Dawid murió y lo sepultaron, y su sepulcro está en medio de nosotros hasta el día de hoy. 30
3. Pero él era profeta y sabía que con un juramento Yahweh le había jurado que de su
posteridad en cuanto a la carne levantaría a uno para que se sentara en su trono.>
Es interesante notar que Pedro, en su sermón durante Shavuot, se refiere al rey David como
siendo también un profeta.
Cuando Acab y Jezabel profundizaron la idolatría en el Reino del Norte, Elías y otros profetas
lucharon contra la terrible apostasía y algunos profetas del Elohim murieron por causa de
esta oposición (1 Reyes 18:4). En la triste historia de la muerte de Nabot por causa de los
caprichos de la pareja real, Elías apareció proclamando que en el mismo lugar en donde los
perros habían lamido la sangre del inocente, los perros lamerían la sangre de Acab (1 Reyes
21:19). En 1 Reyes 22:37-38 está la descripción del cumplimiento de esa profecía.
El liderazgo de la adoración en Israel estaba a cargo de los sacerdotes. Una diferencia
importante con sus vecinos es que Israel no tenía sacerdotisas pero si profetizas. Cinco
mujeres fueron llamadas profetizas en el Tanak (A.T.) : María, Débora, Hulda, la esposa de
Isaías y Noadías.
Pero tenemos un personaje interesante también, para meditar:
Balaam (en hebreo: םְָעלִּב
) es el nombre de un profeta del territorio de Moab, en la actual
Jordania. La Escritura lo referencia como hijo de Beor. La historia la encontramos en
Números 22 y 23. Bilaam era un hombre que vivía cerca del camino por el cual Israel se
acercaba lentamente a la tierra prometida. Aunque él no era israelita, era un sacerdote o
profeta del Adon. El rey de Moab reconoció el poder del Todopoderoso en las palabras de
Balaam cuando dijo, “yo sé que a quien tú bendices es bendecido, y a quien tú maldices es
maldecido”. El rey de Moab tuvo miedo de la fuerza del pueblo de Israel y envió sus
emisarios a pedirle a Balaam que viniera a Moab y maldijera a los israelitas para acabar con
la amenaza que ellos representaban (Nm 22:1-6). Un profeta que recibió instrucciones del
Todopoderoso, pero su motivación era personal e interesada. Tuvo un mal final.
Un profeta siempre será un instrumento del Todopoderoso para Edificar, o exhortar, consolar,
animar, corregir, enseñar. De tal manera que aunque lo haga un hombre o mujer, finalmente
será como si lo estuviera haciendo personalmente el Todopoderoso. Este proceso no tiene
que ser una iluminación nueva cada vez, sino que puede ser una exposición ordenada y fiel
de las Sagradas Escrituras, pero con una fuerte base de encargo y portador MENSAJERO
del Todopoderoso.
Al hablar a los hombres las Palabras del Todopoderoso no tienen que ser siempre
espectaculares revelaciones sobrenaturales. Porque el fin no es resaltar a la persona. Leer
un libro y resumir su contenido no siempre es una profecía, sino una noticia humana del
Todopoderoso. Incluso leer algún bosquejo aprendido de algún mensaje escritural, sin
comunión con el Todopoderoso, no será siempre una profecía, sino una charla social, una
clase rutinaria. Y esa Palabra ilustra, pero no edifica, no trae vida.
4. Un profeta puede recibir un mensaje por el don mediante su comunión con el Todopoderoso.
Pero no siempre será algo nuevo, porque el Todopoderoso ya habló, y está escrito, y desea
recordarlo, reforzarlo, afirmarlo. Entonces el enseñar la Palabra del Todopoderoso, o el
proclamar la Palabra del Mesìas es también un auténtico don y servicio de profecía.
Siempre y cuando surja de la íntima comunión con el Todopoderoso, y ese mensaje será un
encargo del Todopoderoso para alguien, o para la Asamblea.
El profeta edifica a la asamblea. Es un instrumento del Todopoderoso para bendecir. En
cierta forma se podría decir que un profeta es un colaborador del Todopoderoso actuando
como si el Todopoderoso mismo actuara. Esto puede ser humanamente riesgoso porque
muchos pensarán que son ellos y para ellos. (La gloria es siempre del Todopoderoso YHVH )
El Espíritu del Todopoderoso no tiene boca, pero habla, y la boca del Todopoderoso viene a
ser como la boca del profeta. El Espíritu de Santidad no tiene cuerpo, pero es real y
presente, pero trabaja mediante instrumentos humanos que tienen cuerpo, y mediante ellos
actúa en el mundo material.
De esta forma fue escrita la Sagrada Escritura. Que es un libro escrito por hombres del
Todopoderoso, inspirados por el Todopoderoso, que resulta ser LA PALABRA del
Todopoderoso, pero que realmente fue escrito por hombres fieles a Él. Por eso las palabras
literales de Mesías en su papel de profeta, son Palabra del Todopoderoso. Veamos:
< Juan 14: 10 ……… Las palabras que yo les hablo, no las hablo por mi propia cuenta; sino
que el Padre que mora en mí hace sus obras.>
< Jer 23:18 Pero ¿quién estuvo en el secreto de YHVH, y vio y oyó su palabra? ¿Quién
estuvo atento a su palabra y la oyó? Jer 23:21 "No envié yo aquellos profetas, pero ellos
corrían; yo no les hablé, mas ellos profetizaban. Jer 23:22 Si ellos hubieran estado en mi
secreto, habrían hecho oír mis palabras a mi pueblo, y lo habrían hecho volver de su mal
camino y de la maldad de sus obras.>
Preguntas:
1. ¿De quién son las Palabras que da el profeta? del Todopoderoso.
2. ¿Cómo recibe las Palabras del Todopoderoso el profeta? Al estar en comunión íntima
con el Todopoderoso en su lugar secreto. (en privado).
3. El propósito de dar una profecía es corregir el mal camino de este pueblo de los
tiempos de Jeremías (pero no siempre, depende del receptor y las circunstancias)
4. ¿Entonces qué es un PROFETA: ES UN MENSAJERO del Todopoderoso .
UN PROFETA ES UN SIERVO, MENSAJERO, PORTADOR, PORTAPLIEGOS, MEDIADOR,
CARTERO, COMUNICADOR, ENCARGADO DE UN MENSAJE.
Puede ser también un verificador de su cumplimiento, pero no necesariamente. No es
responsable de lo que haga el receptor con el mensaje. Su misión termina cuando ha
entregado fielmente el mensaje. El dará cuenta a quien lo envìa: el Todopoderoso. El fin es
que el Todopoderoso trate con su receptor, el creyente, y así el profeta es un puente
5. provisional, como una manguera de agua, que ni origina el agua ni la retiene, sino que la
transporta y la vierte. Luego se puede guardar. Es como el cable o alambre eléctrico que
conecta la electricidad con el artefacto, pero no es el generador, ni el fin.
Los profetas tenían una íntima relación con el Todopoderoso. Los profetas y las profecías
eran conocidas en el Antiguo Oriente Medio, y hay registros de su actividad fuera de la
Sagrada Escritura desde tiempos muy remotos. El vocablo para profeta en el Tanak (A.T.) ,
nabí, y se refiere a una persona a quien el Todopoderoso llamó para comunicar sus
mensajes. Esa palabra está relacionada a un antiguo verbo babilónico, nabu, que significa
“llamar”. En Babilonia, ellos se dirigieron repetidamente al rey como siendo un nabu, es decir,
alguien llamado por los dioses de ellos.
Pero queremos enfocarnos en las páginas de la Sagrada Escritura que nos hablan de las
personas a quienes el Todopoderoso otorgó el don de profecía: hombres y mujeres que
anduvieron en sus caminos y que, a pesar de sus debilidades y fallas, fueron obedientes y
fieles al Todopoderoso.
El profeta escritural era alguien que había sido llamado por el Todopoderoso y
desempeñaba un papel independiente. Era normalmente una persona que no recibía su
oficio ni lo transmitía por herencia ni mucho menos por nombramiento político.
Preguntamos:
Hemos visto un listado de profetas y profetisas. ¿Cómo eran estas personas? ¿Habrá en
nuestros días personas como Noè, Moisès, Abraham,o el Mesìas?
¿Puede una persona que niega al Mesìas, o niega la vigencia de la Torah estar en comuniòn
con el Mesìas? ¿Puede ser una persona asì usada como profeta?
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Respetada amiga Clemencia. Para servirle.
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ASAMBLEA ISRAELITA NAZARENA
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