El oso panda habita en las remotas montañas de China central y el Tíbet. Es un mamífero omnívoro caracterizado por su coloración blanco y negro que le sirve para camuflarse. Se alimenta casi exclusivamente de bambú y está en peligro de extinción debido a la pérdida de hábitat y la caza, con solo alrededor de 1,600 individuos que quedan en la naturaleza.