El documento resume las causas y características de la expansión colonial europea a finales del siglo XIX, incluyendo el reparto de África en la Conferencia de Berlín de 1884-1885 y el establecimiento de los imperios coloniales europeos en África y Asia. Las principales potencias coloniales - Gran Bretaña, Francia, Alemania, Bélgica, Portugal, Italia y los Países Bajos - se apoderaron de vastos territorios en África y Asia en busca de materias primas, mercados y prestigio político y