Este documento describe una sesión educativa en la que los niños elaboran un mural personal para reforzar el conocimiento de su identidad. 1) Los niños leen un cuento llamado "Amalia y Memo" y discuten las características de los personajes. 2) Cada niño crea un mural sobre sí mismo, dibujando sus intereses y experiencias familiares. 3) Los murales se comparten y exhiben para que los niños se valoren a sí mismos.

1. Elaboramos un mural personal
Lápiz, hojas y borrador.
Papelotes, plumones y cinta adhesiva.
Cartulinas blancas, hojas de colores, goma y tijeras.
Cuento “Amalia y Memo”.
Papelotes e imágenes de Amalia y Memo.
Lee el cuento “Amalia y Memo” (Anexo 1) y ensaya la entonación
adecuada.
En dos papelotes, anota las características de Amalia y Memo, así
como lo que pueden y saben hacer.
Fotocopia las imágenes de Amalia y Memo (Anexo 2). Si deseas,
puedes utilizar otras.
Antes de la sesión
Materiales o recursos a utilizar
En esta sesión, los niños y las niñas
elaborarán un mural personal a fin de
reforzar el conocimiento de quiénes son y
compartir experiencias con sus compañeros
y compañeras.
¿Para qué los niños y niñas elaboran un
mural?
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2. En grupo clase
10minutos
INICIO
Momentos de la sesión
Competencia(s), capacidad(es) e indicador(es)
a trabajar en la sesión
COMPETENCIAS CAPACIDADES INDICADORES
Afirma su identidad. Se valora a sí mismo. Expresa conocimiento sobre sí
mismo: sus características físicas,
emociones y potencialidades, que
le permiten actuar con seguridad y
confianza en diversas situaciones
de relación con su familia, escuela y
comunidad.
Recuerda con los estudiantes el trabajo desarrollado en la sesión
anterior, donde escribieron mensajes con palabras y frases de
afecto.
Hazunbreverecuentodelasactividadesrealizadashastaelmomento
en la unidad. Menciona que en ellas aprendieron a identificar sus
características físicas, cualidades y fortalezas, descubrir las cosas
que pueden hacer solos y las que aprenden en familia, así como
formas de cuidarse y reconocer sus emociones.
Formula estas preguntas: ¿les gustó participar en juegos, dinámicas
y trabajos sobre ustedes mismos?, ¿las sesiones los han ayudado a
sentirse mejor?
Comunica el propósito de la sesión: hoy realizarán un mural
personal donde dibujarán algo relacionado con ustedes y luego lo
decorarán para exhibirlo.
Pide que seleccionen algunas normas de convivencia a fin de
ponerlas en práctica durante esta sesión. Verifica que sean idóneas
para las actividades.
Área curricular de Personal Social
1.
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3. 70minutos
DESARROLLO2.
Invita a los niños y a las niñas a sentarse formando una media luna,
de manera que todos puedan verse y escucharse.
Reitera que en esta sesión van a realizar un mural, pero señala que
antes trabajarán en grupo sobre los personajes de un cuento.
Coloca dos papelotes en la pizarra. En uno pega la imagen de Amalia
y en otro la imagen de Memo. Pregúntales si conocen el cuento
“Amalia y Memo” y a sus personajes.
Solicita que observen las imágenes y mencionen las características
físicas de ambos. Anota en la pizarra las más importantes. Luego,
plantea las siguientes interrogantes: ¿podemos saber algo más de
ellos con solo verlos?, ¿cómo podemos conocerlos un poco más?
Espera a que los estudiantes digan que para conocerlos más habría
que leer el cuento.
Indica que leerás el cuento y pide que se mantengan en silencio
y estén atentos a lo que se va a decir tanto de Amalia como de
Memo.
Lee el cuento a los niños y a las niñas.
En grupo en clase
Problematización
Análisis de la información
Cuento Amelia y Memo
La maestra Lupelinda dejó a sus alumnos una tarea: debían hacer una
manualidad con objetos reciclables. Alonso hizo un títere con palitos de
helado, Alejandra unas alas de hada con papel de periódico, Memo una
cocina con cajas de cartón y Amalia un maletín de mecánico con botellas
de plástico.
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4. Detente en ciertos tramos de la lectura para conversar con ellos
sobre el cuento. Por ejemplo, antes de decir que la maestra
Lupelinda organizará un paseo, formula las siguientes preguntas
relacionadas con el problema de género que se presenta en el
cuento, para saber lo que ellos piensan al respecto:
• ¿Les parece bien que Memo haya construido una cocina y
Amalia un maletín de mecánico?, ¿por qué?
• ¿Por qué se burlaron los demás niños de Amalia y Memo?,
¿qué hicieron o dijeron ellos para defenderse?, ¿cómo
reaccionó Memo?, ¿y Amalia?
También puedes aprovechar este momento para preguntar por las
emociones que están sintiendo los estudiantes al oír la historia.
Luego de realizar esta pausa y comentar sus ideas, prosigue con el
cuento hasta el final y realiza estas preguntas:
• ¿Qué cosas aprendieron Memo y Amalia de sus familiares?
• ¿En la historia se aprecia que los niños ya pueden hacer cosas
solos?
Pega en la pizarra los papelotes con las características de Amalia y
Memo, y lo que pueden y saben hacer; luego, agrega algunas ideas
que mencionen los estudiantes.
"Lo que me gusta hacer"
En grupo clase
Pregunta a todos: ¿les gustó el cuento?, ¿qué hemos aprendido de
él?, ¿creen que hemos conocido aspectos interesantes de la vida de
Amalia y de Memo?
Invítalos a ver nuevamente los papelotes de Amalia y Memo, y haz
estas consultas: si alguien los lee, ¿sabrá cómo son y qué hacen?
Comenta que ahora cada uno realizará su mural personal. Proponles
algunos temas para que puedan elegir, por ejemplo: “Las cosas que
he aprendido en mi familia”, “Lo que me gusta hacer”, etc.
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5. En grupo clase
Individualmente
Para esta parte de la actividad, deberán salir al patio o buscar un
espacio más grande para trabajar.
Entrega a cada niño y niña una cartulina blanca, lápiz y colores. Pide
que escriban su nombre con letras grandes.
Indica que en el centro de la cartulina dibujarán lo que más les gusta
hacer, lo que aprendieron de su familia, o algo relacionado con el
tema que hayan elegido.
Mientras los estudiantes dibujan, supervisa que todos realicen la
actividad. Cuando terminen, verifica que su nombre esté escrito lo
más claro posible.
Proporciónales hojas de colores, goma y tijeras para que decoren
sus murales.
Esta sesión pretende que los niños
y las niñas continúen valorando
sus características y experiencias
personales, pues forman parte de su
identidad.
Pide que todos se sienten formando un círculo con su trabajo en
mano y que quienes deseen comenten y compartan lo que han
dibujado.
Busca un espacio adecuado para ubicar los trabajos. Si deseas,
puedes invitar con anticipación a los padres de familia o a
compañeros de otros salones, a fin de realizar una breve exposición.
Al concluir, pide un aplauso y un abrazo colectivo, como
reconocimiento a ellos mismos por ser únicos e importantes.
Toma de decisiones - Reflexión
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6. De regreso en el aula, realiza las siguientes preguntas: ¿cómo se
sintieron en la sesión?, ¿les gustó?, ¿por qué?; ¿de qué temas
hablamos?
Finaliza formulando otras interrogantes: ¿qué aprendimos hoy?,
¿por qué es importante conocernos y valorarnos?; ¿nuestra familia
es importante en nuestras vidas?, ¿por qué?
10minutos
CIERRE (valoración del aprendizaje)3.
En grupo clase
Pide a los niños y a las niñas que compartan con sus padres u otros
familiares lo aprendido en clase y peguen su mural en un lugar especial
de la casa.
Tarea a trabajar en casa
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Primer Grado - Unidad 2 - Sesión 21

7. Anexo 1
Primer Grado
UNIDAD 2
SESIÓN 21
Amelia y Memo (Cuento)
La maestra Lupelinda dejó a sus alumnos una tarea: hacer un trabajo
manual con objetos reciclables. Alonso hizo un títere con palitos de helado,
Alejandra unas alas de hada con papel de periódico, Memo una cocina con
cajas de cartón y Amalia un maletín de mecánico con botellas de plástico.
Los niños, al ver a Memo con su cocina, empezaron a burlarse de él,
diciéndole: «La cocina es para niñas». Y también se burlaron de Amalia,
diciéndole: «Las herramientas de mecánico son para niños».
—¡La cocina no es solo para niñas! Mi papá es cocinero —dijo Memo, y se
puso a llorar.
Pero cuando Memo lloró, los niños se burlaron aún más de él, gritándole
que solamente las niñas lloraban.
—¡No tiene nada de malo que un niño llore! —gritó Amalia, que quiso
defender a Memo.
Cuando las niñas vieron a Amalia tan agresiva, se asustaron y le dijeron que
así no se comportaban las damas. La maestra puso orden en la clase.
Los días transcurrieron y Memo estaba siempre triste porque sus
compañeros no hacían más que burlarse de él a la hora del recreo y de la
salida. Mientras tanto, la pobre Amalia sufría porque a ella no le gustaba
jugar con muñecas, y las niñas no querían jugar con ella a las carreras, ni a
los súper héroes, y para colmo, los niños tampoco la incluían en los partidos
de fútbol.
Amalia y Memo sentían que algo no estaba bien. ¿Por qué no los querían?
Un día, la maestra Lupelinda, muy preocupada por integrar a todos sus
alumnos, organizó un paseo al campo. Viajaron en bus.
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8. Los niños estuvieron felices, corrieron, jugaron y cantaron, menos Amalia
y Memo, que se quedaron a un lado, jugando entre los dos. A la hora del
regreso al colegio, el bus se malogró. No arrancaba. Las horas pasaban y los
niños empezaron a sentir mucha hambre. ¿Quién los ayudaría?
Memo sacó de su lonchera unas ricas galletas que tenía guardadas. Las
compartió con sus compañeros, quienes las comieron muy agradecidos.
Un niño quiso más galletas y le preguntó a Memo dónde las había comprado.
—Yo mismo las hice, con ayuda de mi papá —dijo Memo. Todos los niños
admiraron a Memo por su habilidad al preparar las galletas, ¡estaban
deliciosas!
Mientras tanto, Amalia, que sabía mucho de mecánica, con entusiasmo y
alegría ayudó al chofer a arreglar el motor del bus. Al poco rato, el chofer
anunció a todos que ya podían seguir con el viaje de regreso y pidió un
aplauso para Amalia, que había sido una excelente ayudante.
Luego de ese día, los compañeros de Memo fueron a visitarlo a su casa, para
ver cómo trabajaba su papá y aprender a preparar esas galletas tan ricas que
habían probado.
Amalia, por su parte, les enseñó a las niñas a construir mesas y sillas con la
caja de herramientas que sus papás le regalaron.
Al día siguiente, los niños y las niñas se reunieron a conversar. Juntos, se
sentaron cómodamente alrededor de la mesa para disfrutar de las galletas
con una rica limonada. Desde aquel día, todos fueron amigos para siempre.
Amalia y Memo se sienten muy orgullosos de ser quienes son.
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9. Anexo 2
Primer Grado
UNIDAD 2
SESIÓN 21
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