2. Dios no pide elocuencia‚ perfección ni dramatismo. Lo que quiere es fe. Una fe que sabe que habrá un cambio, progresos y milagros gracias a la oración.
3. La fe es el fuego, el calor, el poder que sustenta tus oraciones. Si ruegas con fe, tus oraciones romperán las barreras mediante el poder de Su Espíritu y cumplirán Su voluntad concediéndote las peticiones de tu corazón.
4. La oración abre tus ilimitados recursos a las infinitas posibilidades de Dios.
5. pero al final vuelven con un cargamento y riquezas mayores, por lo que el alma que ora sale ganando por esperar la respuesta. Algunas oraciones tienen que realizar una travesía más larga que otras,
6. La oración es la llave que abre los depósitos de la gracia y el poder infinitos de Dios. Toda la naturaleza y atributos de Él están al alcance mediante la oración.
7. Nada queda fuera del alcance de la oración sino lo que no se ajusta a la voluntad de Dios.
8. Considera una bendición que Dios demore la respuesta a tus oraciones para aumentar tu capacidad de recibir.
9. Los hombres de Dios de la antigüedad no eran muy numerosos que digamos. Sin embargo, las oraciones de esos pocos, unidas a su fe, lograron revertir las circunstancias, derrotaron a las ciudades y personas más poderosas, y se sobrepusieron a los más terribles reveses.
10. Fue la oración lo que hizo que esos gigantes de la fe dejaran huella. Y será la oración lo que les permita a ustedes dejar huella en este mundo y obtener uno de los títulos más importantes: el de hombre o mujer de fe.
11. Empieza hoy una nueva campaña y nunca vuelvas a hacer una oración si no lo haces de todo corazón. No vale la pena si no respaldas la oración con un ferviente deseo de ver que se haga realidad. www.tommyswindow.com Para más presentaciones, visita: PARA COMPARTIR