4. Reflexión personal
Me ha gustado realizar esta actividad porque la he considerado
una autoevaluación. Ejercicio que defiendo y que siempre he practicado a
lo largo de mi carrera docente. Haber trabajado en EEUU me ayudó
muchísimo en este sentido y me ofreció herramientas y estrategias para
realizar evaluaciones periódicas de las actuaciones educativas. Debo decir
que aquí en España adolecemos todavía de una verdadera cultura de la
evaluación. Otra mejora que deberíamos proponernos entre todos.
Reflexionando sobre el resultado de mi diana en habilidades
personales y técnicas, considero que la capacidad de comunicación y el
trabajo en equipo son mis puntos más fuertes. A partir de estas dos
capacidades creo que algunas de las otras dependen o son consecuencia
de ellas en cierto modo. Por ejemplo, en mi opinión, una persona que
comunica bien y que se interesa por comunicarse con los demás es una
persona empática, con capacidad para la escucha activa y para la gestión
de conflictos. El trabajo en equipo te hace igualmente ser colaborador
nato, con una buena capacidad para el reparto de tareas, de la gestión del
tiempo, para la coordinación y la negociación. Creo tanto en esta práctica
profesional que no concibo otra manera de hacer las cosas.
5. He ocupado puestos de responsabilidad a lo largo de mi vida
profesional y he compartido con muchos equipos directivos. También
conozco la realidad de los centros educativos de Ceuta. Los que han logrado
la mejora siempre han tenido en común tres factores: un líder con fuerte
carga pedagógica y buen comunicador, un trabajo colaborativo potente y
gestionar siempre poniendo en el foco al alumnado y no al profesorado o la
administración. Aunque, parafraseando a Sócrates, el único conocimiento
verdadero es saber que no sabemos nada. Ese es siempre un buen
pensamiento para iniciarnos, también en la gestión educativa.
¡GRACIAS!