2. En la adolescencia se
producen numerosos
cambios físicos y psíquicos,
y una nutrición adecuada es
clave para hacer frente a las
necesidades especiales de
esta etapa de la vida.
Las necesidades
nutricionales de los
adolescentes vienen
marcadas por los procesos
de maduración sexual,
aumento de talla y peso.
4. La dieta ideal para el adolescente Macronutrientes necesarios en la
adolescencia
Proteínas: han de suponer entre un
10% y un 15% de las calorías de la
dieta.
Lípidos o grasas: la contribución de
energía procedente de grasas
deberá ser del 30-35% del total de
calorías aportadas en la dieta.
Hidratos de carbono: debe
representar entre el 55%-60% del
aporte calórico total. Esencialmente
deberán ser carbono complejos
Fibra: es un macronutriente esencial
que no debe faltar en cualquier
dieta.
Agua: nuestro organismo necesita
aproximadamente tres litros diarios.
Vitaminas: Tiamina, riboflavina,
niacina, acido fólico, vitamina D
Minerales: Hierro, calcio, cinc.
5. El habito del desayuno es importante en todas las etapas de la vida, pero especialmente
durante la niñez y la adolescencia.
Su estado nutricional
Mejora el rendimiento escolar: un buen desayuno influye positivamente en el rendimiento
físico e intelectual. Cuando no se desayuna bien, el adolescente puede presentar falta de
energía y atención.
Control de peso: los adolescentes que desayunan tienden a controlar mejor su peso
corporal que aquellos que no lo hacen.
IMPORTANCIA DEL DESAYUNO
6. El almuerzo
El almuerzo debe ser una parte habitual de la alimentación del
adolescente, para evitar que transcurran muchas horas desde el
desayuno hasta la hora de la comida. Igualmente conviene que no sea
muy consistente para no quitar el apetito a la hora de la comida. Se
recomienda seguir las siguientes indicaciones: asegurarse de que sea
equilibrado (debe incluir fruta o zumo, algún lácteo o bocadillos
tradicionales con jamón, fiambres de pollo o pavo, quesos suaves u
otros embutidos no más de tres veces por semana) y se debe evitar el
consumo, al menos cada día, de repostería o pastelería comercial u
otros alimentos con mucha grasa y azúcar.
Postres: lo mejor es incluir una fruta y alternar con productos lácteos
sencillos.
7. Factores psicológicos que influyen en la
alimentación del adolescente Hay que prestar especial atención a la importancia que le dan los jóvenes a la imagen corporal
porque esto les conduce en muchas ocasiones a llevar a cabo dietas bastantes restrictivas que les
privan de nutrientes necesarios, con el objetivo de acercarse al cuerpo que consideran el ideal de
belleza, lo que puede desembocar en la aparición de trastornos
alimentarios como anorexia, bulimia o vigorexia.
Es vital conocer aquellas situaciones que pueden afectar a los jóvenes y en las que se debe llevar
a cabo alguna modificación de la dieta, como:
La realización de ejercicio físico extra.
Tener hábitos alimenticios erróneos.
Padecer enfermedades agudas o crónicas.
La etapa de la adolescencia es compleja por todo lo que implica, como:
La transición entre dejar de ser niño y empezar la edad adulta.
Se va afianzando la personalidad, y desean ser más independientes.
Los amigos, junto con el ambiente en que se muevan, influyen bastante en su forma de ver la
vida.
Las dudas y temores que pueden tener a veces les llevan a adoptar conductas erróneas.
8. Algunos de los problemas derivados de una
mala dieta
Caries Dental: una dieta rica en azucares simples iniciada la infancia y mantenida en la época adolescente
contribuye muy directamente al problema junto con una inadecuada higiene dental y falta de control
odontológico.
Anemia ferropénica: el déficit de hierro en los adolescente están por debajo de los recomendados.
Enfermedades cardiovasculares.
Obesidad: es un trastorno nutricional importante en la infancia y en la adolescencia
Hipertensión.
Trastornos del comportamiento alimentario: anorexia y bulimia.
9. Objetivos nutricionales
Lograr un crecimiento correcto, evitando carencias de nutrientes esenciales o exceso de
calorías. Afianzar hábitos alimentarios sanos, pudiendo así prevenir enfermedades como:
Hipercolesterolemia.
Hipertensión arterial.
Obesidad.
Osteoporosis.
10. Recomendaciones nutricionales en la
adolescencia
Las recomendaciones nutricionales para el adolecente deben ir orientadas fundamentalmente a conseguir tener
una dieta ordenada y equilibrada, en consonancia con las necesidades nutricionales, generando así los hábitos
adecuados.
Es básico reforzar el desayuno, evitando comer entre horas.
Comer ordenadamente; comenzar por el primer plato, después el segundo y por último el postre.
Comer despacio, masticando bien, en ambiente relajado, tranquilo, evitando distracciones (TV, radio, etc.)
Variar al máximo la alimentación, incluso dentro de cada grupo de alimentos (distintos tipos de verduras, frutas,
legumbres, carnes, pescados, etc.)
Moderar el consumo de carnes, fomentando el consumo de cereales y legumbres frente a la carne.