2. Un arrecife donde el coral forma un
corazón
En 1975 un avión de sobrevolaba por los
arrecifes en torno a las islas Whitsunday,
cuando uno de los pilotos descubre una
formación natural con forma de corazón
que hoy es símbolo de la región, e
incluso de la Gran Barrera de coral de
Australia.
Se llama Heart Reef, un caso de
pareidolia en una maravilla natural que
sólo se puede disfrutar sobrevolando en
helicóptero o en hidroavión, ya que es un
área protegida en la que no se puede
navegar. Heart Reef es todo un ícono
australiano, una perfecta composición de
coral que (con forma de corazón o sin
ella) deslumbra de todos modos.
3. Un cráter blanco en Indonesia
Indonesia no es sólo playas y como prueba de ello te traemos este cráter “blanco”. Se
llama Kawah Putih, es un lago en un cráter y sus características tan singulares explican
claramente por qué se trata de un lugar al que los turistas no se pueden resistir.
Se descubrió a fines de 1800 y recién a partir del año 1987 el Kawah Putih se abrió a
los visitantes para que estos pudieran recorrer este espejo ubicado a 2.430 metros
sobre el nivel del mar. Si llegas a visitarlo, procura llevar abrigo porque el clima es algo
frío (promedio 10 grados), muy distinto a la humedad a la que se acostumbra en
Jakarta.
Las aguas del lago son realmente ácidas y este factor el que hace variar el color de los
celestes a los verdes, o incluso marrones, al cambiar las concentraciones de sulfuro y la
oxidación que generen las temperaturas. Lo mismo ocurre con la arena y las rocas que
rodean Kawah Putih que tienden a un tono blancuzco por interactuar con estos ácidos.
4. Una playa original en Turquía
Una playa original en Turquía que es
tan bella a nivel del suelo como en
sus vistas aéreas. Se llama Ödëliz y
es una villa turística en Fethiye, al
sudoeste del país. Las aguas
sumamente cristalinas del Mar Egeo
tienen la particularidad de
permanecer calmas como si fuera un
estanque, aún cuando azotan las más
fuertes tormentas.
Es algo pedregosa y toda la magia de
su laguna ha sido preservada
nombrándola Reserva Natural
Nacional. Toda su amabilidad
geográfica le ha merecido la bandera
azul. Tantas cualidades hacen que,
con mucha frecuencia, los viajeros y
revistas especializadas la lleven al
top 5 de las mejores del mundo.
5. Una de las cascadas más bonitas del
mundo, en Perú
La catarata Gocta , en el noroeste de Perú. Imponente y
soberbia, difícil no asombrarse frente a esta belleza
natural también conocida como La Chorrera.
Para conocer este salto de agua hay hacer una larga caminata desde
los caseríos de Cocachimba y San Pablo, en el departamento de
Amazonas. Su existencia se hizo de público conocimiento hace muy
pocos años, en 2006, y pasó a ser la cuarta más alta del mundo por
sus 771 metros.
6. Un mundo subterráneo que
se ve de otro planeta
(Lechuguilla, Estados Unidos)
La cueva Lechuguilla brinda paisajes
subterráneos inusuales, o extraordinarias.
Me refiero a la que es la quinta cueva
(conocida) más larga del mundo, con
unos 166 kilómetros de extensión
estimados, y en gran parte aún sin
explorar, llamada Lechuguilla, en honor a
una planta que se encuentra en su
entrada.
El ingreso se encuentra restringido a
investigadores académicos autorizados.
En su interior se han podido estudiar en
detalle por primera vez formaciones
geológicas de tamaños nunca antes
vistas, además de encontrar raras
bacterias que se alimentan del sulfuro,
hierro y minerales y que han contribuido
a modelar espeleotemas completamente
inusuales.
7. Un manantial en cascada sobre un Cañón (en Estados Unidos)
La Catarata Mossbrae corre hacia el río Sacramento y, en su camino vertiginoso, abre un área donde se encuentra
la Cascada Shasta en Dunsmuir, Estados Unidos. Todo es un gran sitio de remanso donde contemplar, en el frescor
del verde y el agua danzando por los aires, lo que la naturaleza nos presenta ante nuestros ojos.
El efecto que logra este fenómeno natural es el de que ver como si hubieran muchas cascadas distintas cayendo
hacia el río. Cual cortinas de agua fluyendo delicadamente por esa pared del cañón, en medio de vegetación
tupida y formando una agradable melodía al caer al unísono sobre el lecho de piedras, el paisaje es de lo más
bonito de toda la zona.
8. Un lago de color azul, en Nueva Zelanda.
En la Isla Sur de Nueva Zelanda se ordenan tres lagos en sentido norte-sur. Se encolumnan tan
pararelelos entre sí como la naturaleza lo permite. Del trío, uno sobresale sobre el resto: el Lago
Pukaki.
Junto con los otros espejos de agua llamados Tekapo y Ohau, conforman la Cuenca Mackenzie. Su
origen se debe a que los glaciares avanzaron sobre el valles formando lagos embalsados. Sin dudas, lo
más llamativo en este paisaje no son los picos nevados sino el color azul tan distintivo y tan vivo que
cautiva la mirada. Esta tonalidad se debe al fluor glacial, partículas extremadamente finas que yacen
en las rocas del fondo del Pukaki. Gran obra de la naturaleza que cubre con sus aguas azules un área
de 178.7 km².
Toda la fuerza generada por estas aguas azules es utilizada para generar energía hidroeléctrica y, en
conjunto con el Tekapo, proveen la mitad de la electricidad de este tipo de todo Nueva Zelanda.
9. Una caverna de 200
metros de altura en Italia.
A nivel del mar ya hemos ido
descubriendo muchas de las joyas que
Italia tiene para sorprendernos.
Pueblos colgados junto al mar, una
ciudad hiper planificada, uno de
los pueblos más originales que hayas
visto y tantos lugares increíbles más.
Esta vez, es el turno de ir a las
entrañas de la tierra italiana y conocer
una caverna de 200 metros de altura.
Se trata de las cuevas de Frasassi (que
en italiano son las Grotte di Frasassi),
una cadena de cavernas de origen
kárstico que se extienden por 13
kilómetros y que, seguramente, te
dejarán realmente maravillado. Están
dentro del Parque Natural Gola della
Rossa y de Frasas, en la provincia de
Ancona.
10. Un bosque que parece del Jurásico,
en Chile
La Cordillera de Nahuelbuta (que
significa “tigre grande”) es, en verdad, un
sector de la Cordillera de la Costa,
en Chile. Queda ubicada entre el famoso
río Bío y el Imperial y hace de división
natural entre la Región del Bío Bío y la de
la Araucanía. Ahora que sabes dónde
estamos parados geográficamente, viene
el plato fuerte: el Parque Natural
Nahuelbuta, que queda en la zona más
elevada de la cordillera.
¿Por qué es especial? Por su parecido
con un bosque del Jurásico,
característica que le debe a estar
poblado de araucarias, árboles típicos de
esta zona –y que lamentablemente han
ido perdiendo protagonismo frente a
especies exóticas-
11. Una playa de arenas verdes en Hawai
Tres nombres para un solo
lugar: Playa Papakōlea o Playa
de las arenas verdes
o Mahana. Un solo hecho que
la vuelve única: efectivamente
sus arenas son color verde.
Hay sólo otra con la misma
característica y está ubicada en
las Islas Galápagos. ¿Dónde se
encuentra esta en particular?
En South Point, en la isla
de Hawai. Si te estás
preguntando el porqué de esta
tonalidad hay que culpar a un
mineral del cono de ceniza.