Este documento describe la formación y expansión de la Monarquía Hispánica entre 1474 y 1700. Resume los logros de los Reyes Católicos Isabel y Fernando en unificar España políticamente y religiosamente, y las conquistas territoriales en Europa y América durante los reinados de Carlos I y Felipe II en el siglo XVI. También explica la crisis y decadencia del Imperio español en el siglo XVII bajo los Austrias Menores, con la pérdida de territorios y la influencia de los validos en el gobierno.
Bloque 4. La formación de la Monarquía Hispánica y su expansión mundial (1474 1700)
1. Bloque 4. La formación de la
Monarquía Hispánica y su
expansión mundial (1474-1700)
2. 1. LOS REYES CATÓLICOS
El 19 de octubre de 1469, Isabel I de Castilla (1451-1504), que era hija de Juan II y hermana de
Enrique IV de Castilla, contrae matrimonio con su primo Fernando II de Aragón (1452-1516),
iniciándose una nueva etapa en la historia de los reinos cristianos peninsulares.
Esta unión personal, se convirtió en una unión política con 3 objetivos comunes para las dos
coronas:
1. La centralización del poder, reduciendo la influencia de la nobleza que había protagonizado
revueltas contra el poder real.
2. La unidad religiosa (expulsión de los judíos en 1492).
3. El control territorial peninsular.
3. 1. Centralización del poder:
Los RR.CC. Implantaron la monarquía autoritaria, imponiéndose ante la influencia de la nobleza y
los municipios.
El clero que había conservado su independencia hasta ahora, fue sometido mediante un acuerdo
con el Papa Inocencio VIII, el patronato regio, por el que el rey presentaba a Roma una lista de
candidatos para los cargos eclesiásticos, controlando así los altos cargos.
En los municipios, la burguesía pasó a ser controlado mediante la figura del corregidor
(representante del rey en el gobierno municipal) que tenía como misión vigilar los intereses reales,
así como el cumplimiento de las leyes.
Los RR.CC. reforzaron el poder real y
controlaron todos los poderes del Estado para
lo que crearon organismos como la Santa
Hermandad, encargada del mantenimiento del
orden público en las zonas rurales, los
Consejos, que asesoraban al monarca sobre
los aspectos más importantes de la
gobernación del reino, las Audiencias, que
eran instituciones judiciales cuya jurisdicción
abarcaba todo el Estado, siendo los reyes los
jueces supremos y un Ejército permanente,
que estaba siempre movilizado, a diferencia
de los medievales que se formaban solo en
caso de guerra.
4. Esta unión personal, no supuso una unión territorial e institucional de las dos coronas, ya que se
mantuvieron sus instituciones políticas, su sistema de recaudación de impuesto, su moneda, sus
lenguas, sus leyes, sus aduanas y sus usos tradicionales, hasta el punto que legalmente, los
súbditos de una corona eran considerados extranjeros en la otra.
2. Unión Religiosa:
La convivencia entre cristianos, musulmanes y judíos durante la Edad Media se rompió
definitivamente, al aplicar los RRCC sus deseos unificadores al ámbito religioso.
La institución encargada de conseguir dicha unidad fue el
Santo Oficio de la Inquisición, establecido por los RRCC
entre 1480 y 1490 en ciudades como Ciudad Real, Toledo
y Cuenca. Trató de conseguir la conversión de los judíos,
quienes formaban una poderosa minoría dedicada al
préstamo y habían conseguido enriquecerse y tener
influencia en las altas esferas. Esta posición social y la
actividad prestamista, había provocado odio en las masas
populares.
La presión social y política hizo que muchos judíos se
convirtieron al cristianismo y recibieran el nombre de judeo-conversos (cristianos nuevos),
aunque algunos siguieron practicando su religión a escondidas.
En 1492 los RRCC les obligaron a convertirse al cristianismo, y en caso de no hacerlo les forzaban
a emigrar, 150.000 judíos abandonaron la península, con consecuencias negativas para el
desarrollo económico.
5. También los musulmanes fueron obligados a convertirse al cristianismo, recibiendo el nombre de
moriscos todos aquellos que lo hicieron. Las tierras de la actual Castilla-La Mancha recibieron la
llegada de moriscos procedentes de Granada, que se asentaron en zonas del Tajo y el Júcar tras
la rebelión de las Alpujarras granadinas (1569).
3. Control Territorial Peninsular:
Tras la unión de Castilla y Aragón, los reyes intentaron completar la unidad política de toda la
Península mediante la incorporación del reino de Granada, del reino de Navarra y del de Portugal.
El Reino de Granada era el último territorio musulmán en la Península Ibérica. La conquista de
este reino empezó en 1483 y acabó en 1492, incorporándose a Castilla, reconociendo a sus
habitantes en un primer momento, el derecho de mantener su lengua, su religión, sus usos y
costumbres.
El Reino de Navarra estaba situado entre Francia y Castilla y Aragón, el rey Fernando,
aprovechando la división interna de los
navarros entre partidarios de Francia y Castilla,
y ocupó Pamplona.
En 1512 se anexionó Navarra a Castilla,
manteniendo sus propias leyes (fueros), sus
instituciones y su autonomía.
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7. Los RRCC planificaron la expansión exterior mediante 2 estrategias, por un lado la política
matrimonial de sus hijas con monarcas o herederos de cortes europeas y por otro, las
intervenciones militares de conquista del Mediterráneo y del norte de África.
Isabel y Fernando casaron a sus hijas pensando en una política de alianzas o uniones dinásticas,
eligiendo para ello a los herederos de Portugal, de Flandes y de Inglaterra.
El matrimonio más importante fue el de su hija Juana I de Castilla (Juana “La Loca”) con Felipe I
“El Hermoso”, archiduque de Austria y heredero de Borgoña y de Flandes. Su hijo, Carlos,
heredera los reinos de Aragón y Castilla, más las posesiones paternas.
8. Otro eje de expansión territorial fue el control del norte
de África y la ocupación definitiva de Canarias
(1402-1496). Castilla se incorpora Melilla, Orán, Trípoli,
la costa de Argel, sumándose a las posesiones de
Ceuta y otras plazas norteafricanas.
El descubrimiento de América en 1492 por Cristóbal
Colón, fue uno de los hechos más importantes de la
historia europea.
Desde comienzos del s XV, portugueses y castellanos
habían intentado llegar a las Indias (especies), buscando
un camino alternativo a las rutas terrestres tras la
toma de Constantinopla por los turcos en 1453.
Cristóbal Colón planteó a los RRCC un proyecto para llegar a las Indias siguiendo una ruta hacia el
oeste en lugar de bordear el continente africano. En 1492 los RRCC y Colón firman las
Capitulaciones de Santa Fe, donde se establecían las condiciones en que se llevaría a cabo la
expedición hacia las Indias. El proyecto de Colón partía
de la esfericidad de la tierra así, el 3 de agosto de 1492,
partía desde Palos de Moguer (Huelva) la expedición de
3 navíos (la nao Santa María, y las carabelas, Pinta y
Niña) llegaría al “Nuevo Mundo” el 12 de octubre de
1492.
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10. 2. EL AUGE DEL IMPERIO EN EL SIGLO XVI
En 1504 moría la reina Isabel I de Castilla, convirtiéndose su hija Juana en reina, mientras que su
padre Fernando seguía siendo rey de Aragón. La precaria salud mental de Juana (conocida
popularmente como Juana la Loca), hizo que quien actuara
como verdadero rey de castilla fuera su esposo Felipe I el
Hermoso, pero la prematura muerte de este en 1506, llevará a
Fernando el Católico a hacerse cargo del gobierno de Castilla.
En 1516 moría el rey Fernando II de Aragón, siendo
proclamado, rey de Castilla y Aragón su nieto Carlos, tras una
breve regencia del Cardenal Cisneros, arzobispo de Toledo.
Carlos I recibió una inmensa herencia fruto de la política
matrimonial de los Reyes Católicos.
Heredó de sus abuelos maternos, la corona de
Aragón que incluía el reino de Nápoles y
Sicilia, y la corona de Castilla, integrada por Navarra, las
Vascongadas y las Indias (América).
Heredó por parte de sus abuelos paternos
(Maximiliano I de Austria y María de Borgoña), el
legado borgoñón (Flandes y el Franco Condado) y
en 1519 el título de emperador del Imperio
Romano-Germánico como Carlos V y las tierras de
la familia de Habsburgo en Alemania y Austria.
11. La enorme extensión territorial de sus posesiones crearon en Carlos la idea imperial, la idea de
reunir a toda la cristiandad bajo la bandera del emperador contra los enemigos del cristianismo, los
turcos y la herejía protestante.
La política exterior de los Austrias Mayores (Carlos I y Felipe II), abarcó el s XVI y se caracterizó
por una orientación europea y por la lucha por mantener y ampliar sus territorios. La monarquía
hispánica pasó a ser el centro del Imperio y en ella recayó el costoso mantenimiento,
especialmente en Castilla.
El incremento de los impuestos para este mantenimiento del Imperio provocó el levantamiento de
las comunidades de Castilla (Germanías en Valencia). Toledo, a las ordenes de Juan de Padilla
se sublevó en 1520, sumándose también localidades como Cuenca. La guerra entre las tropas
reales y los comuneros, terminó con la derrota de estos en la batalla de Villalar (Valladolid) en
1521. En Toledo, María Pacheco, viuda de Padilla, resistió varios meses el asedio de las tropas
reales hasta que huyó a Portugal en 1522.
12. Carlos I se enfrentó con Francia (4 guerras- Batalla de Pavía
=Francisco I prisionero) por la hegemonía de Europa, a los
turcos por el dominio del Mediterráneo (Barbarroja/defensa
de Viena) y a los protestantes por motivos religiosos y
políticos (Victoria de Mülberg frente a la “Liga Esmalcalda”)
que zanjó con la Paz de Augsburgo en 1555, en donde se
reconocía la división religiosa de los alemanes.
Cansado por tantas guerra y conflictos y viendo que su vida
llegaba a su conclusión, abdicó (abdicaciones de Bruselas
1555-1556), dejando el gobierno imperial en manos de su
hermano Fernando y el de España y las Indias a su hijo
Felipe, muriendo en el Monasterio de Yuste el 21 de
septiembre de 1558.
Felipe II continuó con la política internacional de su padre, la
defensa del catolicismo y mantener la hegemonía del imperio
hispánico en Europa, por lo que se mantuvieron casi los
mismos frentes que con su padre: lucha al turco, el problema de Flandes y el nuevo
enfrentamiento con Inglaterra.
En 1571 se organizó la última cruzada de la cristiandad
contra los turcos, formándose una armada formada por
España, Roma y Venecia, la cual venció a los turcos en la
batalla de Lepanto en 1571, poniendo fin a la expansión
turca en el Mediterráneo.
13. Desde 1566, el problema principal de Felipe II, fue la sublevación de Flandes (Guerra de los
Ochenta Años), en donde se mezcla cuestiones religiosas (expansión del protestantismo) y
políticas (el deseo de la nobleza flamenca de gozar de autonomía política).
Felipe II se negó a hacer concesiones y aplicó una política de mano dura (Duque de Alba) con los
rebeldes dirigidos por Guillermo de Orange, los cuales recibieron ayuda de príncipes protestantes
alemanes, de los protestantes franceses (hugonotes) y de Inglaterra.
Felipe II al no poder someter a los rebeldes flamencos, cedió estos territorios a su hija Isabel Clara
Eugenia en 1598, de los cuales, las provincias del norte, mayoritariamente protestantes
consiguieron finalmente formar un estado independiente.
Felipe II contrajo matrimonio con María Tudor (Bloody Mary), última reina católica de Inglaterra,
pero tras la muerte de esta y la llegada al trono de su hermanastra Isabel I (Ana Bolena), la
situación cambió por el apoyo de la “Reina Virgen” a los rebeldes flamencos y a la piratería que
amenazaba la navegación entre España y las Indias.
14. La guerra contra Inglaterra comenzó en 1585, y a las causas religiosas se añadía el deseo de
Inglaterra de participar en el comercio con América que monopolizaba España. Felipe II pensaba
que derrotándoles vencería también a la rebelión en Flandes, por lo que preparó una gran armada,
la Armada Invencible (al mando del Duque de Medinaceli), que escoltaría a una flotilla que
trasportaba a las tropas que invadirían Inglaterra, terminando toda la operación en un tremendo
fracaso en 1588.
En 1580, murió el rey de Portugal Don Sebastián y Felipe II heredó la corona del país vecino,
logrando la unión peninsular. Pese a ello, Portugal continuó manteniendo la independencia.
El 13 de septiembre de 1598 fallecía en el Monasterio del Escorial, el monarca en cuyos dominios
no se ponía el sol.
15. 3.CRISIS Y DECADENCIA DEL IMPERIO EN EL SIGLO XVII
Durante todo el s XVII, la monarquía hispánica vivió un proceso de decadencia. Los problemas
del reinado de Felipe II (Francia, Inglaterra y Flandes) se agravaron con los Austrias (menores) del
s XVII, Felipe III, Felipe IV y Carlos II.
El reino de Castilla sufrió una profunda crisis económica. Se tuvo que hacer frente a los ataques
de los turcos en el Mediterráneo, de los holandeses y franceses en Europa y de Inglaterra en los
mares.
Además se tuvo que hacer frente a las rebeliones de Cataluña y Andalucía, mientras que los
Países Bajos y Portugal, lograban su independencia (1640).
A diferencia del gobierno de Carlos I y Felipe II, el gobierno de los Austrias Menores se caracterizó
por la figura del valido, persona de confianza del rey en quien delegaba la acción de gobierno. Si
en épocas anteriores la toma de decisiones la ejercía el monarca después de escuchar a los
Consejos, ahora la ejercía directamente el valido sin necesidad de escuchar a estos.
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17. Felipe III (1598-1621). En 1598, Felipe III heredó un imperio en bancarrota y 2 largas guerras, una
contra Inglaterra iniciada en 1585 y otra contra los rebeldes holandeses.
El gobierno estuvo en manos de validos, el Duque de Lerma y luego en las de su hijo el Duque de
Uceda.
El cansancio y la grave crisis económica hicieron que el reinado de Felipe III fuera pacífico,
consiguiendo una paz con Inglaterra en 1604 y la tregua de los doce años (tregua de Amberes) con
los Países Bajos en 1609. solo al final del reinado se vio involucrado en un conflicto bélico, la
Guerra de los Treinta Años (1618-1648).
18. Felipe IV (1621-1665). Felipe IV accedió al trono iniciando un cambio en la
política exterior de la monarquía con la aparición de un nuevo valido, el
Conde-Duque de Olivares.
Este valido tenía como objetivo la restauración de la posición internacional
de la monarquía con la movilización de todos sus recursos (no solo los de
Castilla), lo que se conoció como la Unión de Armas. Así, España
combatió en toda Europa con el fin del mantenimiento de su imperio, pero
esto era complicado ante las nuevas potencias que habían surgido,
Francia, Inglaterra y Holanda, así como del enorme sacrificio económico y
humano de los territorios hispánicos.
Durante todo el s XVII, Castilla-La Mancha sufrió una crisis generalizada,
la población disminuyó, tanto en el campo como en las ciudades y si a
finales del s XVI Toledo era una ciudad próspera, en la que vivían 55.000
personas, a mediados del s XVII solo contaba con 25.000, mientras que
otras ciudades como Ciudad Real y Guadalajara bajaron
de los 10.000 a los 3.500, mientras que Cuenca y
Albacete apenas alcanzaban los 2000 habitantes.
Las causas de este descenso serán la crisis económica, la
peste que asoló España entre 1596 y 1602, así como el
reclutamiento para la participación en las guerras en
Europa, junto a la emigración.
19. Los problemas internos de la monarquía se hicieron
presentes de 1640 a 1649, con revueltas y sublevaciones
como consecuencia de las guerras que hacían necesario
recabar todos los recursos posibles para defender el
imperio.
El primer enfrentamiento apareció en Cataluña cuando
en 1640 se produjo en Barcelona con el conocido como
Corpus de Sangre, un motín en donde fue asesinado el
virrey y perseguidos los funcionarios reales,
convirtiéndose Cataluña en una república bajo la
protección de Francia hasta su rendición en 1652.
El otro enfrentamiento fue cuando Portugal, aprovechando la rebelión catalana,
proclamo al duque de Braganza rey del país, siendo apoyado por Francia e
Inglaterra, independencia que quedó ratificada con el Tratado de Lisboa en 1668.
Los problemas externos se dieron cuando España participó en la guerra de los
Treinta Años, siendo derrotada por Francia en la batalla de Rocroi en 1643, siendo una
de las causas del agotamiento de los recursos
económicos y humanos a los que se sumaron las
rebeliones internas.
La Paz de Westfalia de 1648 ponía fin a la guerra
de Treinta Años, reflejando el fracaso de los
Habsburgo españoles y austriacos y la confirmación
de la hegemonía francesa.
20. Los Países Bajos alcanzaron su independencia y la guerra continuó
con Francia hasta la Paz de los Pirineos de 1659, consiguiendo
Francia los territorios catalanes de el Rosellón y la Cerdaña,
concesiones mercantiles con América y estableciendo el enlace
matrimonial del rey de Francia Luis XIV con la hija de Felipe IV,
María teresa.
Carlos II (1665-1700). Tras la muerte de Felipe IV, hereda el trono
con cuatro años, siendo proclamado mayor de edad a los catorce
años en 1675. Continuó manteniendo en sistema de validos, como
Fernando de Valenzuela o Juan José de Austria.
Luis XIV de Francia, aprovechó la debilidad española para expandirse y entre 1667 y 1697
entabló cuatro guerras con España, que supusieron el paso a manos franceses de Flandes, el
Franco Condado y otros territorios europeos.
La falta de descendencia del rey, sumado a su delicada salud física y mental, convirtieron la
corte en un escenario de continuas intrigas y a la formación de dos bandos alrededor de el nieto
del rey francés, Felipe de Anjou y el hijo del emperador de Austria,
el archiduque Carlos.
21. Los castellanos apoyaron al candidato francés Felipe de Anjou, por considerar que así se evitaría
la desmembración de la monarquía, mientras que en la corona de Aragón se apoyaba al
candidato austriaco, el archiduque Carlos, pues veían peligrar sus fueros si se implantaba en
España el modelo de centralismo francés.
Carlos II nombró como heredero a su muerte en 1700 a Felipe de Anjou, con la condición de que
no heredara también el trono de Francia, pero cuando Luis XIV mantuvo el derecho a sucederle, se
formó una alianza antifrancesa y se inició la guerra de Sucesión española, que acabaría con la
victoria del bando borbónico.