El Corazón de Jesús y María nos revelan el amor extremo de Dios por nosotros y nos enseña a amar hasta el extremo de dar la vida por los demás. En 1648, durante una gran misión que Juan Eudes daba en Autun, obtuvo del obispo Claudio Ragny de la Madeleine la autorización para celebrar solem-nemente en la catedral la fiesta del Corazón de María, instituida por él en 1643. Para la ocasión hizo imprimir en Autun los textos, compuestos por él, de la Misa y del Oficio del Corazón de María y añadió la Misa y el Oficio de su Santo Nombre, así como dos salutacio-nes: el AVE COR SANCTISSIMUM y el AVE MA-RÍA, FILIA DEI PATRIS, precedidos cada uno de una introducción y seguidos de las aprobaciones requeridas.